Para huir de los chismes,
cuando los demás se deleitan en ellos.
Para defender a una persona ausente
a quien se critica abusivamente.
Para ser verdaderamente hombre o mujer
aferrándose a nuestros ideales,
cuando esto nos hace parecer
extraños o singulares.
Para guardar silencio,
en ocasiones que una palabra nos limpiaría
del mal que se dice de nosotros
pero perjudicaría a otra persona.
Para vestirnos según nuestros ingresos
y negarnos lo que no podemos comprar.
Para vivir según nuestras convicciones.
Para ser lo que somos
y no pretender ser lo que no somos.
Para decir rotundamente y dignamente no,
cuando los que nos rodean dicen sí.
Para vivir honradamente dentro
de nuestros recursos y no deshonradamente
a expensas de otros.
Para ver en las ruinas de un desastre
que nos mortifique y humille,
los elementos de un éxito futuro.
Para negarnos a hacer una cosa
que es mala aunque otros lo hagan.
Para pasar las veladas en casa,
tratando de aprender.
Desconozco su autor