Repartiendo y compartiendo riberas
olvidando noches de naufragios,
inquieta y despistada
entre libros y hojas:
le conocí...
Con ese talante de imagen tierna
tan distinto y reservado
tan alegre y tan vibrante
apareces tu.
Amigo...
te descubro en cada mirada
día tras día y fuimos cómplices en fantasías
hasta llegar a la risa, a tu risa:
mi mejor imagen.
Repartiendo y compartiendo riberas
estallan emociones en la orilla
de mi cuerpo...
Nos separaremos y yo,
me iré y te irás,
pero no...
viajarán los trovadores hasta ti
para llevarte una sonrisa de mis labios,
por ese lazo indestructible, que nos une,
quiero quedarme en tu recuerdo
allí, junto a tus conocimientos,
-indescifrable-
déjame tu ternura intacta,
virgen como el agua y
al no verte te veré. Amigo...
el adiós es breve y no duele
cuando se desea lo mejor y
recuerda siempre esto:
la distancia lo abarca todo...
menos la separación
y yo te tendré
por debajo de la inexistencia.
SUGERENCIA.
Al resurgir la esperanza en la marea
al arco iris se le ve incomparable
libre...