El principio de Vibración dice:
"Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra".
El Kybalión
Este principio dice que todo está en movimiento, lo cual es confirmado por la ciencia moderna aún habiendo sido enunciado por los Maestros del antiguo Egipto hace miles de años.
Explica las diferencias entre las diversas manifestaciones de la materia y del espíritu: desde el plano más elevado hasta la más densa materia, todo está en vibración;cuanto mayor sea ésta, más alta es la posición en la escala.
La comprensión de este principio nos habilita a controlar nuestras propias vibraciones.
Por ejemplo, podríamos decir que un pensamiento negativo (en una escala del 1 al 10) vibra a 1 a 5 movimientos por segundo; en cambio un pensamiento positivo estaría vibrando entre los 6 a 10 movimientos por segundo.
De la misma manera sucede con nuestras acciones y por consiguiente nuestra vida. Nuestra vida estará acorde a nuestros pensamientos. El que vibren alto o bajo dependerá de cuánto hayamos trabajado con nuestra personalidad.
Para subir la frecuencia vibratoria a nuestros patrones mentales, un método eficaz son las afirmaciones. Por ejemplo, si tuviéramos un patron mental de inseguridad (que estaría vibrando a 1 movimiento por segundo) podríamos llevarlo a vibrar cada vez más alto si repitiéramos "Yo Soy Seguridad".
En este ejemplo, estaríamos elevando la vibración a este patrón mental, que nos hace ser inseguros en algunas áreas de nuestra vida. Esta acción, (el de las afirmaciones) traducida a hechos de nuestra vida cotidiana, se vería reflejada de manera tal, en donde cada vez menos la inseguridad existiría en nosotros. No sería raro, darnos cuenta que ahora nos sentimos seguros en áreas en donde antes no lo eramos.
(Recomendamos ver el espacio dedicado a afirmaciones para ver de qué manera conviene hacerlas).