EL INSOMNIO.-
Quienes sufren insomnio comentan lo insoportable que es querer dormir y no poder hacerlo. Ellos necesitan descansar y auto repararse del agotamiento y del estrés pero no lo logran. Apenas duermen lo suficiente para no sucumbir, por lo que durante el día se encuentran en un estado lamentable, irritados y no rinden en sus actividades habituales. Esta situación hace que se esté pendiente en la noche para reposar, pero la misma preocupación de no conseguirlo hace que se agrave el insomnio y se crea un círculo perverso que impide su solución sin ayuda profesional.
El insomnio puede presentarse en tres formas dependiendo del sueño mismo: Problemas para dormirse, dificultad para mantenerlo toda la noche y levantarse excesivamente temprano. Es primario sí es independiente de otro problema de salud o secundario sí es consecuencia de algún trastorno psicológico o alguna enfermedad fisiológica.
Sus causas son diversas y entre otras encontramos la depresión, el estrés, el abuso de alcohol y drogas, la artritis, trastornos de ansiedad, hipertrofia de la próstata, las preocupaciones o problemas ambientales que tengan que ver con el ruido, la exposición a la luz, o comer pesado antes de ir a la cama.
Si padece insomnio lo primero que tiene que hacer es un chequeo para constatar que se encuentra en buen estado. Su médico le puede recetar un fármaco para que duerma la noche completa. Estas píldoras a largo plazo provocan dependencia, pero ayudan a resolver la cuestión de forma temporal. Nosotros preferimos recomendar una infusión de Valeriana por diez días hasta restablecer el hábito de dormir.
En caso de algún trastorno psicológico o depresión, es necesario resolver en su conjunto el padecimiento.
Si no puede dormir a pesar de encontrarse en buen estado de salud pruebe con hacer ejercicios durante el día, abstenerse de comidas abundantes en la cena, evitar tomar café o cualquier bebida que contenga cafeína como la coca cola, te y otros refrescos, seis horas antes de acostarse, deje de fumar, reciba por lo menos una hora de sol al día y cualquier preocupación que tenga a la hora de dormir déjela para la mañana siguiente. Ante problemas de la vida, muy probablemente nos cueste desistir de pensar en ellos cuando estamos acostados sin hacer nada. Entonces concéntrese en algo positivo, en sus seres queridos, visualícelos e imagínese con ellos en alguna actividad placentera. Pruebe en "escribirle" mentalmente una carta a su cónyuge, padres o hijos donde le exprese lo que los quiere. Pronto estará felizmente en los brazos de Morfeo, el Dios de los sueños.
SALUDOS..ADRY