FIEBRE:
El alza de la temperatura por arriba de cifras normales (fiebre) siempre es un signo de alarma, es importante reconocer hasta donde las medidas en el hogar son seguras, cual es la normalidad, los peligros, las causas y hasta donde se puede llegar antes de acudir a un médico.
Descripción
TEMPERATURA NORMAL Y FIEBRE
La temperatura normal en promedio de nuestro cuerpo es de 36.7 grados C (medida en la boca, oral), con límites entre 36.1 a 37.4 grados C; hay muchos factores orgánicos y del medio que la afectan durante el transcurso de un día por eso es que tiene variaciones. Como referencia hay que comentar que la temperatura axilar es 0.5 grado C más baja y la rectal es de 0.5 grados C más alta que la temperatura oral, este último dato es muy importante debido a que en este sitio es donde se evalúa la temperatura en los niños. Factores generales que hacen variar la temperatura:
Factores físicos como el calor y el frío.
Embarazo durante el primer trimestre.
Factores hormonales (ciclo circadiano, día-noche).
La fiebre es la elevación anormal de la temperatura corporal como respuesta a una agresión física, química u orgánica en diferentes condiciones o enfermedades. Esta es un nuevo ajuste del organismo ante esa agresión. Así que el público en general debe considerar anormal, toda aquella temperatura corporal que se encuentre desde 37.5 grados C hasta elevaciones alarmantes de 40 grados C o más, en las que pueden ocurrir daños cerebrales irreversibles.
Consideraciones
La fiebre en sí no es una enfermedad sino el signo de algún padecimiento e indica que algo le está pasando al organismo.
Se recomienda siempre tener en casa un termómetro bucal y si hay niños uno rectal. Cuando lo utilice límpielo siempre adecuadamente y observe que la columna de mercurio esté hasta el límite inferior del rango de temperatura.
Siempre se deberá considerar a la fiebre como preocupante, hay que recordar que el grado de fiebre no corresponde siempre al grado de intensidad de una enfermedad.
La respuesta febril en general siempre es mayor en niños que en adultos.
Acuda siempre con su médico sí con medidas generales no se corrige este trastorno, si la temperatura es mayor de 38.5 grados C en adulto; si la fiebre es de 38.0 grados C, o más, en un bebé; si fiebre de 38.0 grados C por más de 3 días que no se retire con medidas en casa y que no tenga causa aparente.
No administre aspirina a niños antes de consultar a un médico.
PARA MEDIR LA TEMPERATURA
Utilice termómetro e mercurio y vidrio, existen también electrónicos pueden ser imprecisos. Aseé el termómetro adecuadamente con agua y jabón y un poco de alcohol Baje la temperatura a su punto inferior o menos de 36 grados C agitándolo vigorosamente y sujetándolo con sus dedos, pulgar e índice Si utiliza termómetro oral coloque el bulbo por debajo de la lengua y dígale al enfermo que cierre suavemente su boca espere tres minutos y efectúe la lectura Si prefiere el tomar la temperatura en la axila haga que el bulbo quede en contacto con la piel pidiendo al enfermo que cierre apriete un poco su brazo contra su cuerpo espere 4 minutos y agregue 1.5 grados al resultado. En niños que están lactando se prefiere utilizar el termómetro rectal este tiene el bulbo más largo que el oral, para esto tenga a la mano vaselina y aplique al bulbo del termómetro, después de que el niño este acostado inserte suavemente el bulbo, mantenga quieto al niño durante 3 minutos cuando obtenga la lectura reste 1.5 grados C para convertir a la cifra de la temperatura oral, no olvide limpiar el termómetro antes y después de utilizarlo.
Causas
Causas importantes de fiebre son:
Infecciones. Virus, bacterias, hongos y/o parásitos. Esto es lo más habitual, infecciones de la garganta y vías urinarias.
Enfermedades inmunológicas.
Artritis reumatoide.
Cáncer.
Enfermedades de la sangre. Leucemia, etc.
Enfermedades del corazón. Infarto, embolia, etc.
Enfermedades gastrointestinales. Hepatitis, etc.
Enfermedades endocrinas. Tiroides (hipotiroidismo), etc.
Reacción hacia agentes químicos o de inmunización. Anestésicos, vacunas etc.
Quemaduras.
Golpe de calor.
Fiebre de origen obscuro.
Signos y Síntomas
Signos y síntomas que pueden acompañar a la fiebre:
Dolor de cabeza
Deshidratación
Escalofríos
Pilo erección (piel de gallina)
Ojos llorosos
Dolor de oído
Agotamiento
Somnolencia
Llamando al Médico
Signos y síntomas que pueden acompañar a la fiebre y que son motivo de consulta médica urgente:
Dolor de cabeza
Garganta hinchada
Molestia a la luz moderada y/o brillante
Rigidez del cuello
Paciente en estado de confusión (no sabe su nombre, la fecha, que le esta pasando etc.)
Vómito, diarrea y dolor de estómago
Dificultad para respirar
Hinchamiento de la cabeza en un bebé, abombamiento de fontanelas (mollera)
Convulsiones
Signos de deshidratación
Aparición de Urticaria inexplicable
Dolor de oídos (los niños frecuentemente lo presentan).
Dolor para orinar
Dolor de las articulaciones
Tratamiento
Medidas en casa:
Líquidos.
Hidratación. Beba agua abundante o administre líquidos orales a los niños.
Medidas físicas:
Reposo.
Use ropa cómoda y ligera.
Si se encuentra acostado, aunque tenga escalofrío evite cubrirse mucho, una sábana o cobertor ligero es suficiente.
Baño de esponja con agua tibia (casi al tiempo), si la temperatura es muy elevada.
Emplee también una toalla húmeda y póngala en la frente del paciente (dolor de cabeza).
Mida la temperatura cada 30 minutos.
Medicamentos (antipiréticos):
Si utiliza algún medicamento para la fiebre elija paracetamol en general. Se recomienda administrar aspirina en adultos no en niños. También puede utilizar en adultos ibuprofeno, naproxeno etc.
Medidas externas:
Consulta médica:
Se requerirá consulta médica si este cuadro de fiebre no cede a las medidas en casa antes descritas, si es acompañada con cualquier signo o síntoma antes descrito, si la fiebre es consecuencia de una infección de cualquier tipo ( garganta, urinaria, etc. ) , de quemaduras, exposiciones al sol graves, aplicación de vacunas, etc.
La mayoría de las veces que existe fiebre es por infecciones y estas son tratadas con medicamentos antimicrobianos (antibióticos) que deben ser prescritos por un médico.
Hospitalización:
Existen cuadros que no se llegan a controlar y es necesaria la hospitalización. Infecciones graves, fiebre de origen obscuro, etc.
Cuidados
Evite cambios bruscos de temperatura.
Mantenga siempre una buena hidratación con seis a ocho vasos de agua al día.
Cúbrase adecuadamente cuando la temperatura es baja.
Evite ponerse en contacto estrecho con personas que presenten enfermedades infecciosas.
No se mantenga por mucho tiempo al rayo del sol. (Quemaduras, insolación).