Los taninos, propiedades y fuentes naturales
Los taninos son unas sustancias naturales con muchísimas propiedades pero con una serie de precauciones que a todos nos conviene tener muy en cuenta
El reino vegetal es una gran fábrica de sustancias químicas. Algo parecido a una gran empresa farmacéutica, pero sin ánimo de lucro. Entre su gran oferta de "productos" encontramos los taninos, presentes en gran número de plantas y con una cantidad de usos cada vez mayor.
¿Qué son los taninos?
Provienen del metabolismo de las plantas y son un tipo de flavonoides, polifenólicos. Su presencia es fácilmente reconocible por su gusto áspero, ejemplo de ello es el caqui.
Las plantas los utilizan como defensa contra el herbivorismo, produciendo en los animales rechazo a consumirlas. Por ejemplo, la fruta inmadura tiene alto contenido en taninos.
Tienen la capacidad de precipitar la albúmina y evitar su putrefacción, por eso, desde antaño se utilizaron para curar el cuero.
Propiedades de los taninos
No hay un sólo tipo de tanino. Hay taninos hidrolizables, complejos, proantocianidinas... Cada planta crea su fórmula de taninos que actúa en sinergia junto con el resto de propiedades de la misma aunque por lo general comparten ciertas características o indicaciones:
Astringente. Confiere propiedades anti diarreicas, como la infusión de hojas de zarzamora.
Hemostático local y cicatrizante. Favorece la coagulación y curación de heridas. Infusiones de diversas plantas ricas en taninos como la salicaria se utilizan para el lavado y curado de heridas.
Antiséptico local. Su capacidad de precipitar proteínas les otorgan propiedades antibacterianas, aportando valor en el tratamiento de heridas y llagas de piel y mucosas. Por ejemplo, el uso de ratania en la higiene y cuidado bucofaríngeo.
Antiinflamatorio y favorecedor del retorno venoso. Es muy extendido el uso, oral o tópico, de preparados con plantas ricas en taninos (hammamelis, castaño de indias) en el tratamiento de problemas vasculares, como varices y hemorroides. Algunas proantocianidinas inhiben a mediadores de la inflamación, de ahí su efectividad.
Antioxidante. Tienen capacidad de estabilizar especies reactivas al oxígeno. Esto proporciona un campo de acción terapéutica muy extenso: daño oxidativo, procesos inflamatorios y procesos degenerativos. La granada es una fruta cargada de antioxidantes, que debe parte de su fama terapéutica a los taninos.
Cabe recordar: no son sólo los taninos, es el efecto sinérgico de toda la planta o alimento. Por esto se producen casos contradictorios entre si: preparados ricos en taninos que poseen una acción vasoconstrictora, como los hechos con hammamelis, y otros como el vino tinto, que poseen la capacidad de bloquear la vasoconstricción.
¿Dónde se encuentran los taninos?
Están presentes en multitud de plantas. Algunas de las más utilizadas están arriba nombradas: hammamelis, ratania, granada, zarzamora, etc. Otros alimentos comunes son: uvas y vino tinto, té, café, membrillo, caqui, manzana, grosella, arándano, fresa, espinacas, nueces, etc. También se encuentran en gran número de infusiones. La clave es la aspereza y el sabor amargo.
¿Los taninos, el hierro y otros minerales?
Una propiedad negativa del consumo de alimentos ricos en taninos es la capacidad de reducir significativamente la absorción del hierro y otros minerales como el calcio. Por lo cual, una indicación clara al respecto es separar la ingesta de alimentos ricos en taninos de la ingesta de fuentes de hierro, generalmente las comidas principales:
No tomar café o té hasta 2 horas después de comer.
No tomar frutas ricas en taninos durante las principales comidas: membrillo, granada, manzana, frutos del bosque, nueces...
No mezclar complementos de hierro junto con complementos ricos en taninos.
Mantener especial cuidado en estas indicaciones cuando las necesidades de hierro estén aumentadas (ferropenia, recuperación de sangrados abundantes, desnutrición, embarazo).
Precauciones
Los taninos son astringentes, en caso de estreñimiento limitar su ingesta hasta regular el tránsito intestinal.
En caso de gastritis o úlcera gastroduodenal, pueden provocar aumento de las molestias.
¿Pueden ser tóxicos?
Por general, en grandes cantidades, los taninos se vuelven tóxicos. Prueba de esta toxicidad es el suceso de final de los 80 en Sudáfrica, donde fallecieron cientos de antílopes. Las acacias, base de su dieta, al verse en peligro por el aumento del número de antílopes, multiplicaban la producción de taninos en 250% con el fatal desenlace para estos.
Aunque también hay taninos específicos que, en su correcta medida, cuentan con propiedades beneficiosas para la salud. Como dijo un sabio, la dosis hace el veneno