Las fresas, cóctel antioxidante
La primavera nos trae las fresas que son una de las frutas más ricas en nutrientes antioxidantes a la vez que nos permiten disfrutar de su rico sabor.
La fresas, Fragaria vesca L., pertenecen a la familia de las Rosáceas.
Las fresas y fresones son originarios de América y llegaron a España en el siglo XIX.
Las fresas son un falso fruto pues los verdaderos frutos son los puntitos que hay sobre ella.
Es una planta que necesita un clima calido para desarrollarse.
En España la provincia donde más fresas y fresones se cultivan es Huelva; estas fresas y fresones tienen una gran calidad y una gran demanda.
La mejor época para consumirlas son los meses de marzo, abril y mayo.
Al comprarlas debemos observar que estén en perfectas condiciones y tener en cuenta que es una fruta frágil y delicada. Debemos guardarla en el frigorífico.
Propiedades de las fresas
Las fresas contienen muchos elementos que nos ayudan a mantener un buen estado de salud:
Su aporte de agua y potasio las convierten en un potente diurético siendo, pues, muy adecuadas en caso de hipertensión, retención de líquidos, ácido úrico, etc.
Ayudan a prevenir enfermedades degenerativas gracias a su gran aporte de antioxidantes (vitamina C, flavonoides y antocianinas).
Fortalecen el sistema inmunológico.
Favorecen la eliminación del ácido úrico.
Favorecen la formación de glóbulos rojos y blancos.
Ideales para realizar dietas depurativas.
Previenen enfermedades del corazón.
Disminuyen el nivel de colesterol.
Son ricas en componentes antiinflamatorios.
Ideales para las mujeres embarazadas por su riqueza en ácido fólico.
Previenen el estreñimiento.
Regulan la presión arterial.
Información nutricional (por 100 g.)
Calorías: 35.
Grasa: 0,5 g.
Colesterol: 0 mg.
Potasio: 190 mg.
Sodio: 0 mg.
Fibra: 2,5 g.
Carbohidratos: 6 g.
Proteínas: 0,7 g.
Vit C: 60 mg.
Uso externo de las fresas
Las fresas también las podemos utilizar como una herramienta para cuidar nuestro cuerpo por fuera:
Remedios para la piel: el zumo de fresas ayuda a eliminar las manchas de la piel, los granos y las pequeñas heridas.
Pasta de dientes natural: protegen contra la caries y evitan la formación de sarro. Previenen la gingivitis e inflación de las encías.
Cremas naturales: podemos usar las fresas para preparar cremas faciales y mascarillas.
¿Sabías qué...?
Las personas alérgicas a la aspirina deben tener mucho cuidado al consumir las fresas pues estas son ricas en salicilatos y pueden producirles efectos adversos.
Las fresas pueden producir alergias por lo que los niños menores de dos años no deben tomarlas y, cuando empiecen a hacerlo, lo harán en pequeñas cantidades para asegurarse de que son bien toleradas.
Si padecemos de acidez de estómago no debemos abusar del consumo de fresas.
Existen unas 2.000 especies de la familia de las Rosáceas y unas 1.000 variedades de fresón.
En algunos países de América del Sur se las conoce con el nombre de frutillas