Las huellas de la vida dibujan la ruta y marcan
la dirección de nuestro destino.
Para ello, reflejara sobre nuestra agonía momentos
de necesidad y nostalgia.
A lo largo del camino, mostraran las debilidades mas
arraigadas que componen nuestra vida.
Es en el alma, donde éstas, marcan a fuego cada instante.
Y dolido, es el mismo alma, desde lo más profundo
quien dirige cada momento.
Pero en cada amanecer despiertan los instintos aquellos que
nos hacen resurgir, nos llenan de fuerza vital, para continuar.
Dadores de energía y constancia de ellos,
el amor, entre la pasión y el deseo como eje central.
Juntos forman el anillo vital que nos dirige.
Dentro de él, todo es armonía y dulzura.
En ti radica el poder de mí día a día.
Tú eres mi necesidad más vital.
Mi alma clama desde dentro por tu esencia.
Pide y reclama esa parte de ti que tonifica.
Y es que junto a ti nada es superfluo
Todo admite la magia y la belleza.
No me faltes nunca.
Tú eres mi punto de apoyo donde
descansa cada día mi ruta y mi guía.