TRABAJO PRÁCTICO SOY REALMENTE HUMILDE
Para empezar, buscamos la definición: Virtud que consiste en el conocimiento de las propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con este conocimiento.
Nos lleva a otra pregunta: ¿realmente nos conocemos? Sabemos nuestros gustos y preferencias y pensamos que nos conocemos, pero en la vida diaria nos ponemos máscaras y a veces ocultamos nuestros pensamientos, muchos se conforman con la opinión que tienen sobre nosotros, pero realmente somos así, o solo ven nuestras máscaras. Ese ideal que proyectamos es realmente nuestro ser, no lo es, ya que es un medio de estancarnos en la comodidad de la opinión ajena, es conformar nuestra conciencia. Para conocernos debemos descubrirnos todo el tiempo, cada día, empezar a reconocer nuestros propios errores, perdonarlos, corregir y avanzar. No dejarse endulzar los oídos, dudar siempre de uno mismos, no conformarse con la opinión ajena porque es ajena a tú ser.
¿Yo soy realmente humilde? Afirmar o negar sería adular mi ego o sentirme superior. Muchas veces sentimos que somos humildes cuando nos humillan o desprecian. Sea como sea todo eso es un error, para sentirnos humildes debemos reconocernos iguales a los demás, amarnos y amarlos tal como son, sin amor incondicional no podemos lograr el objetivo de ascender o transcender nuestro ser. Reconocer que estamos todos conectados y que tenemos los mismos problemas y dudas, si no te amo no me amo y si no me amo no avanzo, enamorarse de uno es difícil porque sabemos muy en el interior como somos en realidad, el espejo en la soledad te lo refleja, ahí no hay mentiras ni máscaras.
Para ser humilde uno debe estar en paz interior, en especial con sus pensamientos, cancelar inmediatamente todo pensamiento negativo de uno mismo o los demás. Es difícil lleva tiempo, ordenar las actividades diarias, no sobre exigirse en tareas, vivir el hoy, hacer tareas recreativas, mirar y sentir la belleza de la naturaleza y no perder el tiempo con habladurías o chismes que arruinan nuestra paz, no enredarse en discusiones, si no aceptan nuestra opinión es mejor retirarse y esperar que todo se tranquilice. Ser pacientes con uno mismo y nuestro entorno en estos casos solo pienso en el Maestro Jesús y su infinita paciencia. Meditar mucho durante el día, escuchar y entender a las personas que nos rodean, estar presente porque estamos, pero no vemos ni escuchamos y también tolerar a los que no están en el presente que ni escuchan ni ven.
Somos la gran obra de un artista, un mago o un proyecto de nuestro Ser Crístico, pensar que el Ser Cristico debe bajar es tener un ego desmedido, debemos elevar nuestro Ser, sacar lo que no sirve, buscar la belleza, la simplicidad, el bienestar en nuestra vida y nuestro entorno, y si observamos que esto no está bien, empezar desde cero si es necesario, una y otra vez, hasta que podamos elevarnos y alcanzar a nuestro SER CRISTICO que nos espera, recién ahí podremos continuar nuestro viaje hacia el YO SOY EL QUE SOY porque al final YO RESULTARE SER LO QUE DIOS EN MI ES Y SERÁ por toda la Eternidad. Con amor Rosara