LAS CARTAS
A LAS SIETE "IGLESIAS"
¿QUE REPRESENTAN?
(Revelación 2:1-3:22)
En las "Biblias" traducidas del latín y del griego, se habla mucho de "la iglesia," "las iglesias," y en Revelación, de "las siete iglesias." La palabra "iglesia" es una mala traducción del original hebreo "kejilah" y del griego "ekklesia"---ambas de las cuales significan simplemente "asamblea de hermanos," o congregación.
(Para un análisis mas profundo del tema de "la iglesia" lea el Mensaje "¿Cuál es la Identidad de la Verdadera Iglesia?")
Las cartas a las Siete asambleas, kejilhot ó "iglesias" apocalípticas antes que nada son una unidad de siete dentro de las muchas otras unidades que existen en la Torah. Otras unidades de siete son los Siete Sellos, las Siete Trompetas y las Siete Copas de la ira de Yahweh.
También hay unas misteriosas y malinterpretadas Siete Cartas, que desde el cielo Yahushua Ja Mashiaj ha dirigido a Sus Siete Asambleas, en el Libro de Revelación. Como bien sabemos---o deberíamos saber, antes de su partida de vuelta al Padre en el cielo, Yahushua describió a la "iglesia" verdadera como si fuera Su Cuerpo Kodesh/Santo, y dijo que El estaba a la cabeza de ese cuerpo. Tras haber partido, sobre ellla derramó Su Espíritu Kodesh en el Dia de Shavuot, tal y como había prometido.
Debido a que el número siete denota la plenitud divina en lo que respecta el bregar de Yahweh con la humanidad, como "un todo" las siete cartas forman UNA UNIDAD que tienen un mensaje a la totalidad de la asamblea o iglesia universal de Yahushua. Algo que ignora o desconoce un gran sector del cristianismo y mesianismo tradicional actualmente, es que dichas cartas son proféticas y cuya vigencia a lo largo del tiempo y de las eras no ha disminuído. El apóstol Juan hace claro que dichos mensajes son para HOY, "los días del fin." Comienza el relato asegurando:
"Bienaventurado el que lee y los que oyen las palabras de esta profecía y guardan las cosas que están escritas en ella, porque el tiempo está cerca. Juan, a las siete "iglesias" que están en Asia: gracia a vosotros y paz..."
Luego Juan continúa su relato, detallando los mensajes que Yahushua le ha dado, para cada una de esas Siete Asambleas "que están en Asia." Ciertamente, cuando Juan escribía este libro, esas siete asambles "estaban" en Asia. Esas Siete "Iglesias" todavía existían. Muchos alegan que ya no existen. Las antiguas y originales Siete Iglesias de Asia menor ciertamente ya no existen desde entonces, pero mas adelante veremos que estas siete nos fueron dadas como representaciones, o como un "antetipo" a nivel terrenal de un mayor "tipo" espiritual cuya residencia es básicamente celestial y eterna, y no terrenal y pasajera.
"Y al volverme, vi siete candeleros de oro; y en medio de los candeleros, vi a uno semejante al Hijo del Hombre ... (...) ... y los siete candeleros SON las siete iglesias."
Otra vez, aparentemente, según hemos visto hasta aquí, el apóstol Juan inicia el Libro de Revelación dirigiéndose a "las siete iglesias" allí mencionadas nadamás. No obstante en el vers 20 Yahushua revela que eas siete iglesias SON LOS SIETE CANDELEROS QUE ESTAN EN EL CIELO. Son antetipo de un tipo celestial.
Paralelamente, Yahushua nos llama su asamblea, iglesia o kejilah. El dice que Su verdadera Iglesia somos nosotros los creyentes. Luego nos dice que nuestra ciudadanía no es de este mundo, sino que nuestra ciudadanía es celestial. Ahora vemos por qué lo dijo! Y es que en el cielo hay una menorah con siete candeleros que nos representan!
Yendo hacia atrás en el tiempo hasta el primer siglo---cuando fueron escritas y dadas a Juan estas siete cartas, vemos sin duda alguna que hay más de siete iglesias en Asia, y ciertamente muchísimas más en el resto del mundo de aquel entonces. Por ejemplo, Colosas, Alejandría, Damasco, Creta, Roma, Tesalónica, Corinto, Jerusalém, tenían todas grandes concentraciones de hermanos, o congregaciones.
En todas esas ciudades había entonces había "iglesias" o kejilhot, es decir, comunidades de seguidores de Yahweh en Yahushua. También en España y en "las islas de a lo lejos" (las Islas Británicas, o "islas de los hijos del pacto"---"Berit-ish") había muchos conversos. Allí y desde muchos siglos antes, se habían asentado gálatas, judíos, efrayimitas, y hebreos pre-Israel de todo tipo. Por ese motivo, los apóstoles Shaul, Juan, Yaacob y otros, llevaron sus predicaciones a esos lugares entonces tan remotos. En algunos de esos lugares se reunían en sinagogas, en otros en casas particulares.
La asamblea de Jerusalém, por ejemplo, era la original y una de las mas importantes, sin embargo esta y tantas otras mas, aparentemente han sido omitidas del recuento hallado en Apocalipsis 1, 2 y 3. En 1:11 al apóstol Juan se le ordena:
"Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea."
En el v. 13 vemos a Yahushua en el cielo morando entre siete candeleros, es decir, entre "las siete iglesias," y a través de dichas cartas averiguamos lo que Él observó mientras caminaba en medio sus las siete iglesias (2:1). Dice Juan:
"Y me volví para ver de quién era la voz que hablaba conmigo. Y al volverme, vi siete candeleros de oro; y en medio de los candeleros, vi a uno semejante al Hijo del Hombre."
¿Por qué razón Yahweh ha omitido las kejilhot de Jerusalém, Tesalónica, Colosos y tantas otras más del recuento hallado en Apocalipsis? ¿Por que razón Yahweh escogió sólo a esas particulares Siete Asambleas habiendo tantas otras?
Amados hermanos, sucede que esas siete antiguas "iglesias" de Asia Menor (Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea) entre todas tenían una peculiar distinción, y todas poseían características individuales muy particulares y diferentes. Notablemente, estas siete cidades estaban ubicadas a lo largo de una larga y siniosa ruta postal del imperio romano.
Diariamente los carteros romanos salían a caballo en su largo recorrido a través de cada una de esas ciudades en la famosa ruta postal. De la primera ciudad, Efeso, pasaban a la segunda ciudad, luego iban la tercera, y de allí a la cuarta, quinta, sexta y finalmente terminaban en la última ciudad, llamada Laodicea. Por cada ciudad que pasaban iban dejando el correo romano destinado a cada una de esas siete ciudades, pero a la misma vez iban recogiendo la correspondencia de cada una de esas localidades, y; tal como hacen los atletas en una carrera de relevos, llevándola consigo y soltándola de ciudad en ciudad hasta dondequiera que fuere su destino.
Estas ciudades no fueron escogidas por Yahweh "al azar," dado que El, en su infinita sabiduría, no ejecuta nada sin un propósito preconcebido y específico. Como ya dijimos, a estas antiguas ciudades las distinguían ciertas características que por cuya descripción quedaban perfectamente adaptadas al maravilloso y abarcador Plan de Yahweh. Mas adelante analizaremos lo que cada uno de esos nombres representan.
Nuestro Amo y Soberano Yahushua es uno que camina en medio de las asambleas/ iglesias y ve sus obras, tanto las buenas como las malas. Las cartas a las siete iglesias o asambleas de Revelación son proféticas, y representan las diferentes imperfecciones que es posible encontrar en asambleas individuales en diferentes localidades del mundo a través de todos los diferentes tiempos y eras. Sin importar el lugar, las eras, ni los tiempos en que existan hermanos fieles, o hayan "iglesias" o "asambleas;" Nuestro Amo y Soberano las considera a todas juntas como si fueran UNA. TODOS somos parte de ese mismo cuerpo espiritual de Yahushua a través de las eras. Yahushua deja claro a Juan que lo que está por decirle a sus kejilhot a través de esas Cartas, se refiere a todos los tiempos, hasta el futuro tiempo previo a su retorno a la Tierra.
"Escribe, pues, las cosas que has visto, y las que son, y las que han de suceder después de éstas."
Las siete cartas a las siete iglesias nos dan un modelo contra el cual podemos medir nuestra propia asamblea o "cuerpo del Mashiaj" a nivel colectivo, o a nivel individual, nuestra propia fe o profesión de la emunaj; a fin de ver sus (y nuestras) propias debilidades y fortalezas de manera anticipada, a nivel individual y colectivo. De esta forma, podemos realizar las respectivas correcciones. Efectivamente, mis amados hermanos y hermanas, las Cartas nos dan también un remedio muy efectivo para nuestras deficiencias.
En esta sección preliminar Yahweh está juzgando a la totalidad de Su iglesia/asamblea a fin de purificarla del pecado que pueda tener adentro o estar tolerando, para que luego de realizar las debidas correcciones pueda soportar la persecución venidera, y también para que no sea condenada junto con el mundo (1 Cor. 11:32). Vean la advertencia dada en Apoc. 18:4 para que la hermandad de creyentes, o asamblea/iglesia, "salga de Babilonia" para no participar de sus pecados y juicios. Si Yahweh se le manda a salir de Babilonia, entonces es que sin duda alguna se encuentra allí metida en los días del fin! Yahweh no está hablando osciosamente. Este juicio de la Gran Babilonia está descrito más tarde en las secciones de las Siete Trompetas, las Siete Copas, el juicio de la mujer prostituta y el día del juicio.
A la asamblea de Pérgamo se le advierte sobre la enseñanza de Balaam referente a la idolatría y la inmoralidad, y a Tiatira se le advierte sobre la antigua hechicera Yezabel que arrastra a la kejilah hacia la idolatría y la inmoralidad.
Por otra parte, la asamblea final, Laodicea, cree que es rica pero es en realidad pobre. No obstante, encontramos que aquellos a quienes el Cordero ama, los reprende y disciplina. Aquí Yahweh advierte a la kejilah porque el mundo y sus inclinaciones han infiltrado y contaminado a Su Kejilah del fin, pero más tarde las siete trompetas sirven de advertencia al mundo para que se arrepienta de su idolatría y de sufrir sus resultados (las maldiciones prescritas). Dado que la mayoría de la humanidad no se arrepiente, la prostituta mujer iglesia-estado llamada "Babilonia," que seduce a la gente del mundo, es destruida ella misma por el fuego---y junto con ella los hermanos de Pérgamo que no "hayan salido de ella."
Esmirna y Filadelfia, notablemente, están ambas afligidas por falsos judíos que las calumnian y persiguen. Más tarde encontramos los 144.000 que son sellados por Yahweh para protegerlos por los finales 42 meses de las venideras siete trompetas. Estos 144.000 reyes y sacerdotes ya no están en el mundo para cuando comienza la Gran Tribulación tres y medio años después de que inicia la Tribulación. Para Yahushua, estos hermanos son los verdaderos judíos, los llamados del Israel de Yahweh a integrarse a la Kejilah de Yahushua, y también los que vemos más adelante como una gran multitud que no se puede contar, que "salió de la Gran Tribulación."
A Esmirna se le advierte que se aproxima un período de prueba satánica y que para ser salvos deben de ser fieles hasta la muerte, y en 12:17 encontramos a Satanás haciendo guerra contra los santos/kodeshim. En el cap. 13 encontramos que la Bestia del mar hace guerra contra los santos y los vence. Encontramos que aquellos que no quisieron adorar a la bestia y a su imagen y no tomar su marca, son puestos a muerte, y sin embargo en 15:2 están aquellos que han sido victoriosos sobre la bestia, pues no tomaron su marca.
Éfeso. por haber sido sana en doctrina, perseveró bajo la adversidad. Ni el mundo ni la persecución eran el problema de los efesios originales, ni de los modernos efesios. Sin embargo, habían perdido su primer amor por Yahushua Ja Mashiaj y entre sí, y por lo tanto se habían convertido casi en sub-creyentes o sub-talmidim.
¿Quiénes son los efesios espirituales hoy? ¿A quién dirige Yahushua esta carta---si la misma es "para el tiempo del fin"?
Amados hermanos, los que hayan perdido su amor por Yahushua hoy en día, esos son los modernos efesios de los que Juan y Yahushua hablan en esta carta! ¿Qué deben hacer? Lo mismo que deben hacer los hermanos de las otras seis kejilhot: prepararse! Deben obedecer a Yahushua, deben RETORNAR, es decir, arrepentirse a tiempo de todo lo que se les haya indicado, para prepararse desde ahora para poder vencer mas adelante!
Juan, como lo pone muy en claro su primera carta, considera al amor como la respuesta esencial al amor de Yahweh: "Nosotros le amamos a El, porque él nos amó primero" (1 Juan 4:19); "El que ama a Yahweh, ame también a su hermano" (1 Juan 4:21). Uno de los rasgos del testimonio de la iglesia era que sus miembros se aman unos a otros (Juan 13:34-35). Nada de esto es una opción; es un mandamiento. La contrapartida de Yahweh al odio del mundo debe ser el amor de los creyentes entre sí. La kejilah o iglesia de Sardis estaba al borde de la muerte y difícilmente estaba en una posición de soportar el ataque del mundo y sus valores. En forma similar la asamblea o iglesia de Laodicea estaba en peligro de recibir los valores del mundo.
En v. 1:19 le ordena a Juan: "Escribe las cosas que has visto, y las que son, y las que han de ser después de estas". Las cartas a las siete iglesias forman UN TODO, una unidad referida a "las que son," y el resto de Apocalipsis trata con "las que han de ser después de estas."
Las Siete Iglesias o Kejilhot son representaciones proféticas, pasadas, presentes y futuras, de una UNICA Kejilah de Yahweh. Pertenecer a una de las siete iglesias por sí solo no garantiza la salvación---salvo en el caso de Filadelfia y Esmira. Ellos ya han depurado. El resto tiene que arrepentirse y depurar pronto de sus imperfecciones, tal y como Yahushua aconseja hacer a cada uno, mediante sus cartas de corrección!
Para mas información, vea el mensaje titulado "El contenido de las cartas a las Siete Iglesias."
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