Song of Storms - .мαяισlleттe eмpιяe.

Necesitaba de esos hilos, tan finos y tan duraderos que vendian en los lugares de Nijuugo-Chiku. Le maravillaba ver tantos hermosos colores en prendas, tanta elegancia y a la vez, sentir como la brisa viajaba con los gratos aromas del mar, de las calles, incluso podia ver la belleza de sus colores cada vez que respiraba. Y aunque intentaba ignorar su preocupacion, le era imposible, pues a fin de cuentas era la gran razon por la que habia viajado hasta aca, para encontrar aquellos hilos, para poder reparar a aquella marioneta.

De todos modos, no era el unico motivo que lo convocaba: dos hilos de su arpa se rompieron repentinamente mientras la tocaba, y las mariposas que suelen rodearlo y acompañarlo en sus viajes se perturbaron, volando a todas partes y desapareciendo por horas. En el fondo le agradaba que solo hubieran 2 cerca suyo, pero la razon de su desaparicion le provocaba gran curiosidad.

Iba a ser dificil encontrarlos, pero lo lograria, asi tuviera que recorrer todo el Imperio para reparar su tan preciada arpa, y tambien encontrar algun libro para explicarse la extraña situacion. Buscaba y buscaba, revisando los hilos como si dudara de una piedra falsa, mirandolos con extremo detenimiento, y en su concentracion, una de sus dos mariposas cayò muerta a su hombro. Cerrò los ojos, inspirò y mirò a todas partes, buscando algun culpable... No sabia o no podia asegurarse que todo esto fuera provocada por alguna marioneta o simples cosas de la naturaleza...

PD. Queria roles, Tammy, QUERIA ROLES, AAAH??!!! Aqui tiene! ♥ asi que deme mis puntitos por el cuarto de libra, a-ho-ra!!
pd2. nooo, yo no estoy nada obsesionada con zelda, oh NO! còmo CREES :DDD??!

Presentándose ante los pasajeros y entonando alguna melodía para empezar el viaje, de repente una de sus cuerdas se rompió, quedando inconclusa la melodía. No solo los pasajeros quedaron sorprendidos.

Lamentablemente su parada tuvo que ser antes de zarpar, y despidiéndose sonriente de los pasajeros se bajó de aquella góndola, dirigiéndose a la tienda a comprar una cuerda nueva.

Levantó la mirada hacia el océano, preocupado. El viento se sentía extraño.

-caminando y escuchnaod la muscia del viento tranquilamente los amronosos sonidos de este lugar me relajaban tanto... viajar canza y mas si no tienes un punto fijo de donde deves estar...- etto... -mire a mi alrededor viendo a todos los indibiduos caminar por ahí- no se que hacer... -vi una banquita y me sente puse una codo en el filo de la banca y la mano ne mi cara...- aff....

Mientras volvia a revisar los hilos para la marioneta y su arpa, mientras la unica mariposa viva revoloteaba a su alrededor, escuchò que alguien màs tambièn entraba a la tienda a comprar hilos y levantò la vista. Era un joven, y traia un bandolin en su mano. Comprò los hilos que necesitaba y aprovechò esa instancia para hacerle una pregunta. 'Tambièn se han roto sus cuerdas?', dijo, una leve sonrisa en sus labios, y aunque empleò un tono casual en la voz, esa frase era una afirmaciòn mas que una pregunta. Mirò afuera de la tienda y viò a una joven sentada en una banquilla, un parche en su ojos. 'Muy tranquila, muy tranquila... La aparente tranquilidad esconde tempestades...', piensa, la ultima mariposa cayendo muerta en la cabeza de Dan. Dario bajò la vista...

Gracias por unirsee :'D! tengamos una hiper mega aventura, yahuuur *3*

-vi a 2 chicos en una tienda enfrente de mi... sentí la mirada de un chico pelirrojo...- lindo... lastima yo no toco ningun instrumento... así que seria tonto que entrase allí... muero por descanzar!!!! -hizze pucheros jummmm >.<-

Se encontraba en el distrito de Nijuugo Chiku. Había escuchado de
boca de otros sirvientes en palacio que era allí donde se encontraban
las mejores cuerdas el imperio. Inicialmente se trataba de una tienda
de alta costura, no dudaba que aún lo fuera, juzgando por las elegantes
vestimentas de las marionetas que paseaban por las tranquilas calles,
deleitandose con los colores y texturas de las telas. Pero los mejores
Si no tuviera que trabajar en palacio, definitivamente su segunda opción
sería trabajar en las góndolas del Cardinal del Agua. El lugar estaba lleno
de música, incluso las olas que resonaban contra las pequeñas embarcaciones
y las orillas tenían un ritmo deleitable.
En el reino imperial se ven muchas tiendas de música, especialmente en el
distrito de Springer, siempre repleto de bellas melodías. Para ser sincero
disfrutaba más el ambiente que se respiraba allá que el del distrito
de Läufer (aunque debía admitir que aquél distrito también era uno
de sus lugares favoritos, siendo un bufoon y todo.) Pero no buscaba hilos

cualquiera. Su instrumento predilecto era el cello; un instrumento con sonido poderoso, que obligaba a callar el momento en que un cellista
comienza a jugar con las cuerdas y crear notas. Y claro, probablemente lo que más amaba de aquel instrumento, sus notas eran en clave de FA.
Y como el mejor Luthier autonombrado que era, su mejor creación hasta ahora, un bello cello en madera tallada, necesitaba el mejor arco.
Hilos finos, suaves, que vuelen sobre las cuerdas del instrumento.
"Famuli tuorum ♪" cantó mientras descendía alegremente de la góndola en la que se había estado transportando. "Solve polluti ♪" , entonó el
himno que había dado nombre a las notas (siempre a su manera, comenzando por Fa) acercándose a una tienda que llamó especialmente
su atención. Iba tan inmerso en su melodía (realmente, enajenado sería una mejor palabra) que no notó la banca que daba cara a la vitrina
de la tienda, chocando inevitablemente con ella y golpeando a la chica que se hallaba sentada en ella.
"Mis disculpas le ofrezco" le decía, al tiempo que se quitaba el sombrero ante la joven, quien le dirigió una mirada cansada y asentía simplemente.
Nadie podía estar cansado, no en este lugar. ¿Cómo puede ser, cuando se está rodeado de tanta acústica? ."Veo que la señorita observa a la
tienda ¿Le apetece entrar? Justo me dirigía hacía allá yo, juntos podríamos pasar." dirigió su mirada a la vitrina de la tienda y pudo observar a dos
chicos denttro de ella. Uno con un arpa, otro con un bandolín. ¡Músicos! excalmó internamente. Ahora aún más deseoso de entrar a la tienda,
arrastró a la pobre chica del brazo hasta la puerta del lugar, por la que irrumpió escandalosamente. Siempre le habían gustado las entradas
très spectaculaire
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asdajhkda justo había creadoo un personajee musical ;w; así que tenía que entrarr ooh sii <3
me emocioné con la introducción o.o