**Espera la respuesta del hijonórdicos, aun el danzar de los pétalos que resurgía de la única flor presenteal mismo tiempo unas palabras con tal franqueza. Ahí el cosmos de de aquélpoderoso coloso hacer resurgir contemplando como un pilar majestuoso de pétaloslos elevaba, con cara de sorprendo antes tal espectáculo que no esperaba elateniense entre diente dice.

-impresionante-

De la única flor sale de ellas 8 directamente al coloso con furor y con sed de demostrar el orgullo de sus rosas el vuelo de esas seres hermosos iba a diferentes puntos 3 en las piernas, 3 en los brazos y 2 al cuello, buscando los puntos de donde desprotege su armadura, los tallos van directo a esos lugares deseando que una de sus espinas tan solo un rasguño bastara en dar el inicio de una muerte tranquila. En espera y sabiendo que  era un ser que no será fácil de vencer los haz  de luz que recorría estos aun desprendía brillo a pesar del  esfuerzo de quitar con aquel viento de la ondear la capa continua aun mas de pétalos pero a su vez un brillo mismo que dejaba esas rosas del mismo polen, con su compas abierto el dorado espera y atento a cualquier movimiento ** 

                                                                                   

 **El tiempo ha pasado sutilmente en el lugar de batalla, pero dentro de aquel coliseo parece una eternidad, por lo que aun presente la gran Diana ilumina las rosas que dirigía hacia aquel coloso, el ateniense sin quitar su mirada contempla como un abanico de energía hace resurgir con tal poderío, este mueve su antebrazo su rostro el objetivo era cubrir su rostro, para poder ver lo que sucedía en el campo en mente comenta.

-Veremos qué haces-

Pero al mismo tiempo de la ráfaga estas hace que las rosas se parten en varios, abriendo sus ojos y sutilmente levanta sus cejas de sorpresa en mente dice:

“A pesar de ser un ser enorme los movimientos son rápidos”

Mirando como este sigue con su esencia del asgarian mientras que el ateniense con ondeando su capa la mirada la baja y contempla que el polen, los pétalos y el viento de este ser habría dado en combinación. elevando su vista enfocando a su enemigo comenta:

-Veo que eres bueno-

Tomando su mano izquierda atrás de su cuerpo queda mirando en aquellas armas mismas que había provocado que sus rosas fueran cortadas queda el majestuoso presencia era digna para la única diosa testigo que era la Cazadora iluminando desde lo más alto, mientras que el guerrero mueve sus piernas una llevándola hacia adelante y la izquierda atrás flexionando sutilmente y abriendo su compás queda en espera de cualquier cosa del hijo de Odín**

                                                                                   

**el bailar de sus pétalos y polen recorrían, lo que había visto el dorado era una corriente como si el mismo roció recorriera en el coliseo, ahí en expectativa de lo que hacia el guerrero, cierra sus ojos y pone atención a lo que menciona su oponen, al terminar sus palabras los abre y comenta.

-Desde que pisaste el coliseo la batalla ha comenzado-

Elevando su brazo derecho el cosmos del dorado emerge con sutileza ahí el ondear de su capa y el comienzo de sus pétalos que había dado aquel hermoso espectáculo se comienza a acumular junto con una fragancia de un perfumen de rosas.

-Siempre estas rosas están dispuestas a defenderme-(con voz tranquila)

Mirando como una gran muralla se abalanzaba, el dorado cierra sus ojos con sus sentidos ya agudizados haciendo despertar el orgullo y de lo que más presumen la gran elite de los ateniense, cubriéndose de sus pétalos y el mismo polen, el color carmesí recorría en todo ese extremo de donde se encontraba, mirando como un tren a toda velocidad, la pierna izquierda la flexiona  para que el derecho se empujara hacia atrás y moviéndose atreves de su roció de rosas ocultándolo al caer con su pierna derecha el cuerpo lo balancea para que salga en diagonal, mientras que una silueta negra se apreciaba ahí donde se encontraba deberá recibir el daño en su totalidad, mientras que su roció aun se mantenga que en su inicio de tan solo sus pétalos y la muerte de aquellas rosas al sacar su polen llevaron a formar un hermosa niebla de rosas con una fragancia de la mas pura y toxico veneno de las rosas carmesi, oculto entre ellas  gracias que había formado desde  el inicio del combate, camuflajeado el pisciano aun sosteniendo una rosa con su mano izquierda comienza a moverse con tal libertad en todo el lugar solamente sombras recorrían las escalinatas y pilares que tenía esa arena, deteniendo su andar dejando estela de  sombras en su movimiento, ocultando quedándose en la protección de su neblina, el dorado queda tranquilo para esperar que reacción hará de nuevo el asgariano, de pie cerca de donde las escalinatas que conduce hacia donde se encontraba el Pope donde contempla a los futuros guerrero, ahí Albafika atención a todo lo que hace el hijo de Odín**

                                                                                   

 **La neblina toxica es una de las habilidades de los pisciano en ocultar su presencia, sin tener gasto de energía ahí el dorado se mantiene para analizar con más calma a su oponen, sin su cosmos encendido el caballero desea guardar dentro de ahí, caminando por su rocío Albafika deja caer una de su rosa ahí incrustada en un pilar ahí deseando que este protegida, el ateniense voltea bruscamente mirando como el cosmos de aquel ser hace emerge con gran fuerza haciendo que el eco retumba por los aplausos, haciendo que el roció se disipara con una fuerza como si el mismo Eolo hacia presencia en esa batalla.

-Interesante guerrero-

Revelando su ubicación cerca de un pilar y de esas escalinata el guerrero contempla como emana ese cosmos mirando atento comenta.

-A caso eres resistencia a las toxinas, pero mi pregunta cuánto duraras en estar expulsando así tu cosmos-

Una sonrisa se le dibuja en el rostro, a ver ocultado toda presencia el dorado había tomado una pausa ahí de pie a varios metros del coloso, aura dorada comienza a recorrer  erguido y aun su brazo oculto izquierdo el pisciano espera de ver muestra de síntomas de su veneno y aun mejor de aquel poderío del guerrero** 

                                                                                   

**El coliseo estremecía por ese cosmos, una ráfaga helada hacia presente como esperaba el dorado el guerrero el majestuoso poderío del nórdico, sin moverse sin hacer nada solamente abriendo su compas una pierna derecha atrás y el otro adelante así quedando con su cosmos presente contempla como de nuevo aquella arma con furia se abalanza.

-Veras como caerá tan sencillamente-

Ahí el pisciano de su mano que aun mantenía oculta el ondear de su capa con furor por el viento, el cabellera de el dorado remolineaba, frunciendo las cejas para que su vista se protegiera del viento contempla como un tornado se aproximaba directamente el cosmos que emanaba desaparece llevando a un solo lugar de su brazo donde sujetaba en su extremo con sus dedos un hermoso esplendor dorado con destellos que absorbía con una encanto a la luz, siendo esta obscuro pero una de las más hermosas rosas sale a la vista con tal firmeza el dorado concentrado su cosmos en esa única delicada flor, siendo un poder tremendo a nivel donde se aproximaba el filo a la altura del abdomen y extendiendo ahí el dorado queda en espera del impacto, sabiendo que iba ser un destello de golpe de dos energía, comprendiendo que el guerrero podría igualar al poderío de un dorado el estruendo, rugir y el mismo fulgor de rayos se hizo presente en aquel lugar una luz cegadora se hace presente, como si consumiera esa misma fuerza al dorado, dentro de ella las piernas del pisciano abre aun más el compas, aprieta los dientes siendo una simple arma el poder de esa hacha era aun más de lo que pensaba.

-por algo son dignos ser hijos de Odín, pero-

Una sonrisa en su rostro refleja con tan alegría sintiendo como el guerrero hacía sentir ese latir del corazón del ateniense con fuerza siendo el más orgulloso de todos no se dejara vencer, el furor de aquella cegadora luz comienza desvanecer lentamente comienza a rebelar en pie del dorado, ahí su mirada azulada con una seguridad misma pero esta vez con un orgullo galante reflejaba ante el guerrero.

-Crees que con este juguete bastara guerrero-

Terminando ese último destello refleja como el detener la marcha del arma se hizo ante una simple rosa negra, como si el titán Cronos hacia presente ahí deteniendo y suspendida el arma debería estar, mirando con tal atención comenta.

-Al final es un simple objeto que mi poder de mi rosa podrá destruir.-

Dichas las palabras de ella comienza surgir varias de ellas como si el danzar de simple rosas negras recorría, las espinas las más poderosas mismas que trituraba y consumía todo sin piedad, era su arma más letal para sucumbir ante ellas, dando tal majestuoso espectáculo el dorado comienza a recorrer de su frente líneas de sangre y de las aéreas de donde su armadura no protegía surgía hilos de sangre cayendo al suelo mismo comienza a pintar un mármol blanco en pequeñas gotas de sangre, a pesar que el ataque siendo una fuerza poderosa este llevo a lesionar al dorado. Ahí quedando en su baile hermoso de rosas deseando consumir todo queda con su mirada cubierto de sangre en su rostro queda con una seriedad**

** Albafika con su seriedad mirando como aun seguía explotando su cosmos aquel guerrero mira como su presencia misma hace estremecer el suelo de este recinto, con llevando esquebrajar las baldosas el guerrero cierra sus ojos y sonríe.

-Crees que pudiste vencerme-

A ver estado en reposo de su cosmos, concentrándose en un solo ataque y no haber usado en su totalidad, el ondear de su capa hace surgir hermosos pétalos y flores negras misma que se abalanza pero el objetivo no era en lastimar al guerrero era algo más, si no ocultar la más terrible técnica que tenía un pisciano, ahí el ataque de aquel coloso se abalanza siendo de corta distancia sabiendo que era imposible de desviar y en proteger el dorado atrás de el había dejado caer una de rosa única cuando se encontraba en aquella brisa, su poder era consumir la sangre de su enemigo, el destello blanco que había formado alrededor es estimulada con furor hacia el latir de aquel ser, en su paso las rosas negras se marchitaba y destruía por aquel terrible técnica, siendo incapaces de detener el dorado solamente mueve su cuerpo moviendo un poco jalando en forma diagonal su torso el suspiro rojo e hilo de sangre que al moverse sale al aire como si este deseara manchar su rosa pura de su toxica sangre, por lo que parte de su rosa blanca sale disparada como todo un salmón a velocidad de una estela de luz, es salpicada de puntos rojos de la sangre, directo aquel coloso, las manos del pisciano las lleva directamente de frente deseos de evitar en su totalidad el impacto, este lo lleva a golpear con tal fuerza que fragmento de la armadura dorada se destruye, impactándole en las escalinatas del coliseo, hay un gran impacto como si un meteoro golpeara, dejando sepultado al dorado de escombros, solamente dejando esa rosa llevase a su ataque, espera el resultado de su gran  y maravilloso espectáculo**

                                                                                     

**El silencio reinaba aun sin presencia de nada, la gran Diana cazadora orgullosa debería estar por aquel espectáculo que vio de gala de poderío, en si aun el coloso tratando de mantener su orgullo, pero un pequeño ruido comienza hacer eco, en aquel cráter mismo que había dejado sepultado a Albafika comienza a moverse, con su mano izquierda era la que podía mover con todo el dolor siendo esta que recibió menos daño por solo la postura recibió el daño de aquel guerrero, sus piernas seguía moviéndose, con el orgullo  que el caballero se  comienza incorporar, el daño de su armadura era impresionante sangre y la tierra formaron un lodo, el daño era grave, la respiración de aquel santo era aun mas difícil, un golpe de esa magnitud es hasta mortal, tosiendo sacando grandes bocanada de sangre  saliendo de su labios, sin importar se limpia con su único brazo y  una sonrisa sale de aquel rostro,

- al final mi rosa terminara en teñir lo que hagas tu destino es ahora el inframundo-

Ahí erguido contempla como su rosa con ese brillo hermoso, mira a los cielos y contempla la bóveda celeste y en mente comenta.

“lo siento patriarca no podre ir a realizar esa misión, espero que me entiendas”

Ahí el caballero cae con ambas rodillas regresando imagenes hermosas de aquella hermana que  fue la unica que estar a su lado una hermosa mujer como el teniendo el terrible destino de estar solo, comenta

-Taiki..... Hermana!!!!-

en voz cansado y agotado el caballero se  sosteniéndose como todo digno dorado  en espera que el enemigo caiga para estar tranquilo****