*El lento andar del enviado de Hades por las escaleras que llevan al templo de tauro produce un metálico repique de sus pasos, lentos, uno a uno le internan en la oscuridad total del aquel sitio y es en ese punto en el cual su figura detiene su andar que sus manos se extienden mostrando un peculiar instrumento. Sostenida por su diestra y firme mano un arpa egipcia se mantiene delante de un guerrero de negros cabellos cuya figura recuerda a los antiguos reyes de Egipto, y es su mano zurda la cual repasa las cuerdas de aquel instrumento con sus dedos recorriendo la escala en total y rompiendo el silencio, único habitante hasta ahora del llamado segundo templo del santuario. –Aries ha caído, ¿Acaso el guardián de Tauro es tan cobarde que no se presentara a proteger a su diosa?- exclama con sentido de provocar el espectro cuyos pasos se escuchan nuevamente dos veces y junto a ellos notas de una escala baja se unen para seguir en una peculiar melodía proveniente de su instrumento con una doble intención, la primera el hacerse notar y la segunda el hacer que dicha tonada se escuche en todo el interior de la casa de Tauro*

*Una sonora carcajada se escucha de los labios del espectro resonando por el interior de la casa de Tauro aun incluso sobre las primeras notas de su melodía. Sus pasos se detienen y la figura del espectro es recorrida por el aura violácea y amenazante de su cosmos que crece al compas de la melodía que comienza hacer vibrar un poco el interior de aquel lugar. -Eres valiente, pero no necesito pedir permiso para avanzar, y tu amenaza solo causa risa en mi, he venido a juzgar tu asqueroso corazón-.Los ojos ámbar del espectro de Esfinge quedan clavados en un punto al interior de aquel lugar al tiempo que sus dedos continúan con el recorrido por las cuerdas buscando no solo que su cosmos se manifieste de forma más notoria si no también que la tonada cause algún malestar en el guardián de aquel sitio y tratando que su tonada llegue al punto de causar algún problema para su movilidad*

*El crujir del suelo alerta al guerrero espectral en el instante que sus ojos observan aquellos objetos rondar su figura, una sola y simple sonrisa se muestra clara en los labios del guerrero de hades cuya altiva mirada se clava en el llamado caballero de Tauro al momento que las notas de su infernal réquiem llenan por completo el lugar. Su parpados se cierran ante la expectación de aquellos objetos que buscan alcanzarle más solo es necesario un paso de su mano por el total de las cuerdas para producir un solo ataque de su cosmos que genera presión a su alrededor reventando aquellos objetos para transformarlos en polvo antes de que le toquen y dando un salto leve entre los escombros sosteniendo firmemente su instrumento al momento que su cuerpo detiene su movimiento. –Palabras, y solo palabras caballero idiota, no se trata de dejarte inmóvil se trata de juzgar tu pútrida alma y entregarle tu corazón junto al del resto de los inútiles caballeros a mi señor Hades-, sus palabras se detienen y su música continua siendo un poco mas ligera buscando conseguir provocar al caballero dorado al tiempo que el lugar es inundado por la tonada tétrica preludio a la batalla que recién comienza*

*La melodía propia del espectro continua sonando con fuerza en aquel lugar al tiempo que sus calmados pasos se escuchan avanzar hasta ser interrumpidos por el crujir del lugar donde se encuentran, sus parpados se abren desviando la mirada a su alrededor y una sonrisa burlona se abre paso en sus labios al momento que nota como aquellos sustentos de la construcción comienzan a caer sobre si, “¿Acaso intenta eso nuevamente?” Medita con tranquilidad. Su tonada se detiene y su figura da un salto atrás evadiendo el derrumbe y quedando perdida entre una enormidad de escombros escuchándose solo su risa a manera de burla y el silencio tras ella. –Ridículo, al menos aquel caballero parecía dar un poco mas de pelea- exclama en el instante que su figura es envuelta por un tono violeta y su cosmos crece amenazadoramente. –Pero ya me canse de juegos, si quieres destruir este templo está bien, pero yo me encargare de que lo único que quede sepultado bajo los escombros seas tú- dice con seriedad al momento que sus manos se afianzan con fuerza de su instrumento y el polvo se disipa a medias dejando ver su figura altiva envuelta por el aura de su cosmos cual si se preparara para una batalla que desea terminar lo más pronto posible*

*Un segundo basta para que los ojos del espectro se abran observando la proximidad de aquella poderosa energía enviada en su contra, ante él la sorpresa se hace notar abriendo sus ojos y deteniendo su movimiento. Mas son los reflejos del hábil espectro los que reaccionan en el instante que colocan su arpa a manera de primera defensa y frente a ellos su mano diestra que protege al instrumento, su cosmos se concentra en ello y s figura es impactada por la estela de energía manteniéndose en pie y recorriendo todo el camino hasta la entrada de la casa de tauro. Una mueca de dolor se muestra clara en el rostro del orgulloso músico cuya mano diestra cae inmóvil a su lado mientras su armadura muestra daños de la batalla cayendo la protección de sus brazos y escuchándose crujir el resto de ella llenándose de grietas, su mano izquierda coloca sobe su hombro derecho el cuerpo del arpa. –Maldito… Balance Of Curse- Anticipa en un agónico tono de voz que se termina en una figura tambaleante cuyos dedos se mueven hábilmente por el instrumento que mantiene apoyado en su hombro, una delgada hilera de sangre cae de su boca y su cosmos se consume lentamente en la última tarea y maldición que busca arrancar el corazón de su oponente para cumplir aquella oferta hecha al ejercito de su señor.*

*El gesto de ira del espectro se transforma, primero en una burlona sonrisa ante la postura  sorpresa del caballero de tauro y posteriormente en un gesto de sorpresa propio ante la fuerza que este demuestra. Su cuerpo hasta hace segundos apenas tambaleante vuelve a una erguida postura sosteniendo con fuerza su arpa y usando su cuerpo como a poyo para sí. –No importa cuánto luches, al final arrancare tu corazón de tu cuerpo- exclama en forma de amenaza al seguir sus dedos recorriendo las cuerdas de su instrumento, formándose a sus espaldas la tableta del juicio de Anubis, señal de que los acordes de aquel infernal serenata buscan llegar a su final y juzgar el alma del segundo guardián del santuario, -no existe manera en la que puedas oponerte a ello y deberías de saberlo ya- exclama con cierta dificultad mas con la misión de conseguir una apropiada venganza en contra del caballero que lo habría dejado en tales condiciones*

*Un estruendo final hace sucumbir la melodía del espectro cuya figura solo muestra un sorprendido rostro de pupilas dilatadas por un sentimiento de miedo, inmóvil es envuelto por un destello dorado y es su cuerpo finalmente lanzado con violencia y fuerza contra uno de los muros de la casa de tauro, su instrumento rueda varios metros por el piso de aquel lugar hasta quedar a los pies de una columna con las cuerdas rotas completamente, -Imposible- alcanza a exclamar en un aliento final un perplejo espectro admirado por la fuerza y voluntad de su rival al instante que el silencio envuelve el entorno y la oscuridad regresa al interior de aquel santuario donde la batalla llega  un desenlace entre ambos contendientes, una mirada final es dirigida a la balanza donde el corazón debiera ser pesado y un suspiro fatales soltado por parte del espectro dejando en misterio el resultado de aquel juicio, pues sin importar el resultado el enjuiciado y el juez mismo han recibido ya una mortal condena*