Reto Abierto - Saint Seiya Victories

Hay que mejorar y hace tiempo que no roleo por falta de tiempo. Alguien se anima.

Va que va Kardia. Me late más la idea de que seamos compañeros en batalla jaja, pero pues veamos que tal.

Esperamos las instrucciones de un juez.

Saludos, espero no entrometerme pero me parece que es hora que comiencen su batalla, la seguiré de cerca y si es necesaria la intervención de un Juez se buscara el que esta se haga y de igual forma con el veredicto, esto con la finalidad de darle ya continuidad a las actividades de la comunidad.

Lugar: Casa de Escorpión

Condiciones: Tarde cerca ya de caer la noche.
Contexto: A crear.
Inicia: Mu de Aries.

...:::ROLL ON:::...

**El astro rey comienza a ocultarse y las sombras de la noche empiezan a cubrir las extremidades del Santuario de Atena, la diosa de la guerra. Protegida en su recinto donde nadie puede alcanzarla sin antes pasar a través de sus doce más poderosos guerreros. Los caballeros dorados.

Entre ellos Mu, el santo defensor de la primera casa de Aries. Conocido por su capacidad de usar la telequinesis más poderosa entre los 12 caballeros dorados, ahora se encuentra traspasando las diferentes casas del santuario. Cubierto por su resplandeciente armadura dorada, con sus largos cabellos lila revoloteando a su espalda junto con su capa blanca como la nieve, sube a gran velocidad la escalerilla para encontrar ante sus ojos la próxima casa en su camino, la casa del escorpión dorado.

"Tengo que llegar con Atena cuanto antes" piensa cuando se detiene por un momento a contemplar la fantástica estructura de la casa frente a él y entonces renovar su carrera hacia el interior de la misma. Al ingresar disminuye su velocidad hasta detenerse por completo. -Kardia- dice con su voz serena solo ligeramente agitada por la carrera, esperando la respuesta del defensor de este recinto**

**Ya las sombras naturales de la noche comienzan a hacer su aparición en la tierra griega, hogar de la orden de caballeria al servicio de la diosa Athena, hasta ahora se ha logrado mantener la paz, sin embargo aun quedan amenazas latentes en el mundo y hay que estar atento a ellas. En la cúspide del recinto, se alzan las doce casas, custodiados por los mas poderosos caballeros, al servicio de la humanidad. En la octava casa, la de Escorpión, algo ha perturbado la tranquilidad reinante: un hombre ha entrado al recinto y ha susurrado el nombre del guardián, el cual sale al encuentro del recien llegado. --¿¿Quien osa perturbarme??-- exclama en joven guardian con un tono de voz de enfado. Cubierto por una alba capa que cae hasta los tobillos, se deja ver la armadura que le da nombre y rango, destilando algunos brillos leves, reflejando apenas el fuego de algunas antorchas que iluminan la casa y le dan un aspecto sepulcral. Despues de varios segundo el griego se planta frente al recién llegado y plenamente lo identifica: --Vaya vaya, pero si es Mu de Aries, ¿que te trae por aqui muchacho?-- termina de exclamar el protector ante el nuevo visitante. --Dime que quieres, sabes bien que nadie puede pasar mas alla de donde estas parado, yo me encargo de eso, así que dime, que buscas-- finaliza el dorado mientraspermanece atento esperando la respuesta del visitante**

**Ante el fuego leve de las antorchas que iluminan casi cada rincón del recinto en conjunto con la poca luz solar del exterior que va apagándose poco a poco, Mu mira atentamente a Kardia, quien ahora se planta frente a él. -Debo hablar con Atena- dice Mu mirando directamente a los ojos de su camarada, esperando que su carácter no interfiera con su propósito y al igual que el resto de los guardianes lo deje llegar a su destino. "A veces puede ser un inconveniente ser el defensor de la primera casa..." piensa el lemunario para sus adentros con su mirada serena aún en los ojos del escorpión -Es un asunto urgente y solo puedo hablarlo con ella… en persona, por lo que pido tu permiso para pasar a través de esta casa- comenta finalmente cerrando sus ojos y agachado levemente su cabeza. Mu sabe la poca paciencia que es característica de su compañero, y aunque su intención no es luchar con él, está preparado para hacer lo necesario para llegar hasta la diosa Atena**

**--¿Que tan urgente ha de ser lo que tienes que tratar con Athena que estas tan urgido de pasar?-- pregunta el escorpión legendario dirigiéndose en tono rispido al dorado recien llegado, --sea como sea, mi deber es proteger este templo de cualquiera, amigo o enemigo, que desee pasar-- continua hablando Kardia al tiempo que abre su compás de piernas y levanta ambos brazos formando una especie de cruz, y un aura dorada empieza a cubrir su cuerpo. La intención es clara: no permitir el paso a nadie, ni siquiera a su camarada de armas. --Mu, lamento decirte esto, pero no te dejare pasar, Athena esta muy ocupada como para perder el tiempo en tus tonterias asi que te adiverto, date media vuelta y sal de aquí-- exclama el santo mientras continua acumulando su cosmoenergia preparandose para la batalla. --Por ultima vez Mu, si no quieres conocer el verdadero significado del dolor sal por donde entraste-- continua exclamando el dorado con un tono de voz que refleja la impaciencia y el enojo imperantes en el griego. A manera de advertencia, el santo guardián del octavo templo extiende la mano derecha señalando con el dedo indice la posición del visitante y de su dedo salen lanzadas dos pequeñas esferas de energia directamente a la cabeza de Mu; la intención no es matarlo sino solamente avisalrle a lo que se atiene si continua. Justo antes de impactar al ariano la esferas cambian de dirección impactandose a los costados de la cabeza de Mu perforando la pared y levantando varios fragmentos de piedra y polvo. --Ultima advertencia, retírate o lo siguiente que perforare será tu cuerpo-- termina el santo esperando la rendición del ariano.**