Con todo, se considera que el cine nació oficialmente el 28 de diciembre de 1895.
Aquel día, los hermanos Lumiere mostraron, en sesión pública, sus films
a los espectadores del Salon Indien de París.
En uno de sus primeros films, "La llegada de un tren a la estación de Ciotat",
el efecto de una locomotora que parecía salir de la pantalla fue enorme.
El aparato con el cual lo consiguieron lo llamaron Cinematógrafo.
Había nacido la cinematografía. Pero el éxito inicial se fue apagando
por el cansancio del público.
Las películas que siempre veían eran hechas sobre momentos cotidianos,
sobre la vida laboral o familiar.
Y fue la magia y la imaginación de otro hombre, George Melies, que salvó el cine
de acabar como un invento más entre tantos de aquella época.
Méliès hizo realidad los sueños de las personas, al mostrarlos en las imágenes
que se representan en una pantalla.
Por fin, la fantasía podía volar a través de la luz.
Méliès es el primer inventor de ficciones.
Es más, de la ciencia-ficción. "Viaje a la Luna" (1902) y "Viaje a través de lo imposible" (1904)
se encuentran entre las mejores muestras del inventor de los trucajes.
Uno de los más habituales era hacer desaparecer cosas o hacerlas aparecer de nuevo.
Otros eran la sobreimpresión de una imagen sobre otra, las dobles exposiciones o
el uso de maquetas.
A principios del siglo XX, el cine ya es una industria
Ha pasado de ser un invento para divertir a ser una máquina de hacer dinero.
El cine se extiende por el mundo.