Dice el Señor: “Vayan y
hagan que todas las naciones sean mis discípulos, bautizándolas y
enseñándoles a cumplir todo lo que yo les he mandado”.
Se dice Gloria a
Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios, que por tu inexpresable
misericordia te dignaste elegir a san Mateo para convertirlo de recaudador
de impuestos en un apóstol; concede que, sostenidos por su intercesión y
ejemplo, te sigamos y permanezcamos firmemente unidos a ti.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
LECTURA Ef 4, 1-7. 11-13
Lectura de la
carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Éfeso.
Hermanos: Yo, que estoy preso por
el Señor, los exhorto a comportarse de una manera digna de la vocación que
han recibido. Con mucha humildad, mansedumbre y paciencia, sopórtense
mutuamente por amor. Traten de conservar la unidad del Espíritu, mediante
el vínculo de la paz. Hay un solo Cuerpo y un solo Espíritu, así como hay
una misma esperanza, a la que ustedes han sido llamados, de acuerdo con la
vocación recibida. Hay un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo. Hay un
solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, lo penetra todo y está en
todos. Sin embargo, cada uno de nosotros ha recibido su propio don, en la
medida en que Cristo los ha distribuido. Él comunicó a unos el don de ser
apóstoles, a otros profetas, a otros predicadores del evangelio, a otros
pastores o maestros. Así organizó a los santos para la obra del ministerio,
en orden a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, al
estado de hombre perfecto y a la madurez que corresponde a la plenitud de
Cristo.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
En este breve relato el apóstol Pablo presenta la Iglesia como un
cuerpo constituido por la pluralidad carismática, en el cual cada miembro
debe trabajar en la construcción de ese único cuerpo de acuerdo a la
vocación recibida, y el referente de unidad que usa es que “el Señor,
nuestro Dios, es solamente uno”.
SALMO Sal 18, 2-5
R. Resuena su
eco por toda la tierra.
El cielo proclama la gloria de
Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos: un día transmite al otro
este mensaje y las noches se van dando la noticia.
R. Resuena su eco por toda la
tierra.
Sin hablar, sin pronunciar
palabras, sin que se escuche su voz, resuena su eco por toda la tierra, y
su lenguaje, hasta los confines del mundo.
R. Resuena su eco por toda la
tierra.
ALELUYA
Aleluya. A
ti, Dios, te alabamos y cantamos; a ti, Señor, te alaba el coro celestial
de los apóstoles. Aleluya.
EVANGELIO Mt 9, 9-13
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
Jesús, al pasar, vio a un hombre
llamado Mateo, que estaba sentado a la mesa de recaudación de impuestos, y
le dijo: “Sígueme”. Él se levantó y lo siguió. Mientras Jesús
estaba comiendo en la casa, acudieron muchos publicanos y pecadores, y se
sentaron a comer con él y sus discípulos. Al ver esto, los fariseos dijeron
a los discípulos: “¿Por qué su Maestro come con publicanos y
pecadores?”. Jesús, que había oído, respondió: “No son los
sanos los que tienen necesidad del médico, sino los enfermos. Vayan y
aprendan qué significa: “Prefiero la misericordia al sacrificio”.
Porque yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
El llamado que Jesús hace a Mateo es muy significativo, por ser
éste un recaudador de impuestos, o publicano que está al servicio de Roma,
demostrando así que la vocación es también una forma de sanación. Para
Mateo seguir a Jesús es darle un sentido nuevo a su vida, y al saberse
perdonado acoge a todos en su casa, para que sus hermanos experimenten la
misma acogida del Padre que él ha recibido del Hijo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, en esta fiesta de san
Mateo, te presentamos nuestras oraciones y ofrendas, y te pedimos
humildemente que mires con bondad a tu Iglesia, cuya fe alimentaste con la
predicación de los apóstoles. Por Jesucristo nuestro Señor.
PREFACIO DE LOS APÓSTOLES
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 9, 13
Dice el Señor: “No he
venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, partícipes del gozo
salvífico que experimentó san Mateo cuando recibió en su casa como comensal
al Salvador, te pedimos que nos restaures siempre con el alimento de aquél
que no vino a salvar a los justos, sino a los pecadores. Que vive y reina
por los siglos de los siglos.
Dice el Señor: “Vayan y hagan que todas las naciones sean mis discípulos, bautizándolas y enseñándoles a cumplir todo lo que yo les he mandado”.
Se dice Gloria a Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios, que por tu inexpresable misericordia te dignaste elegir a san Mateo para convertirlo de recaudador de impuestos en un apóstol; concede que, sostenidos por su intercesión y ejemplo, te sigamos y permanezcamos firmemente unidos a ti.
Por nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Ef 4, 1-7. 11-13
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Éfeso.
Hermanos: Yo, que estoy preso por el Señor, los exhorto a comportarse de una manera digna de la vocación que han recibido. Con mucha humildad, mansedumbre y paciencia, sopórtense mutuamente por amor. Traten de conservar la unidad del Espíritu, mediante el vínculo de la paz. Hay un solo Cuerpo y un solo Espíritu, así como hay una misma esperanza, a la que ustedes han sido llamados, de acuerdo con la vocación recibida. Hay un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo. Hay un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, lo penetra todo y está en todos. Sin embargo, cada uno de nosotros ha recibido su propio don, en la medida en que Cristo los ha distribuido. Él comunicó a unos el don de ser apóstoles, a otros profetas, a otros predicadores del evangelio, a otros pastores o maestros. Así organizó a los santos para la obra del ministerio, en orden a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto y a la madurez que corresponde a la plenitud de Cristo.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
En este breve relato el apóstol Pablo presenta la Iglesia como un cuerpo constituido por la pluralidad carismática, en el cual cada miembro debe trabajar en la construcción de ese único cuerpo de acuerdo a la vocación recibida, y el referente de unidad que usa es que “el Señor, nuestro Dios, es solamente uno”.
SALMO Sal 18, 2-5
R. Resuena su eco por toda la tierra.
El cielo proclama la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos: un día transmite al otro este mensaje y las noches se van dando la noticia.
R. Resuena su eco por toda la tierra.
Sin hablar, sin pronunciar palabras, sin que se escuche su voz, resuena su eco por toda la tierra, y su lenguaje, hasta los confines del mundo.
R. Resuena su eco por toda la tierra.
ALELUYA
Aleluya. A ti, Dios, te alabamos y cantamos; a ti, Señor, te alaba el coro celestial de los apóstoles. Aleluya.
EVANGELIO Mt 9, 9-13
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
Jesús, al pasar, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado a la mesa de recaudación de impuestos, y le dijo: “Sígueme”. Él se levantó y lo siguió. Mientras Jesús estaba comiendo en la casa, acudieron muchos publicanos y pecadores, y se sentaron a comer con él y sus discípulos. Al ver esto, los fariseos dijeron a los discípulos: “¿Por qué su Maestro come con publicanos y pecadores?”. Jesús, que había oído, respondió: “No son los sanos los que tienen necesidad del médico, sino los enfermos. Vayan y aprendan qué significa: “Prefiero la misericordia al sacrificio”. Porque yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.
Palabra del Señor.
COMENTARIO
El llamado que Jesús hace a Mateo es muy significativo, por ser éste un recaudador de impuestos, o publicano que está al servicio de Roma, demostrando así que la vocación es también una forma de sanación. Para Mateo seguir a Jesús es darle un sentido nuevo a su vida, y al saberse perdonado acoge a todos en su casa, para que sus hermanos experimenten la misma acogida del Padre que él ha recibido del Hijo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, en esta fiesta de san Mateo, te presentamos nuestras oraciones y ofrendas, y te pedimos humildemente que mires con bondad a tu Iglesia, cuya fe alimentaste con la predicación de los apóstoles. Por Jesucristo nuestro Señor.
PREFACIO DE LOS APÓSTOLES
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 9, 13
Dice el Señor: “No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, partícipes del gozo salvífico que experimentó san Mateo cuando recibió en su casa como comensal al Salvador, te pedimos que nos restaures siempre con el alimento de aquél que no vino a salvar a los justos, sino a los pecadores. Que vive y reina por los siglos de los siglos.
Dice el Señor: Yo soy el Salvador
de mi pueblo. Lo escucharé cuando me invoque en su angustia y seré su Señor
para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que resumiste todos los
mandamientos de la sagrada ley en el amor a ti y al prójimo, concédenos que
observando tus preceptos podamos alcanzar la Vida eterna.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
LECTURA Esd 6, 7-8. 12. 14-20
Lectura del
libro de Esdras.
Darío, rey de los persas,
escribió a los gobernadores de la región que está al otro lado del río
Eufrates: «Dejen trabajar en esa Casa de Dios al comisionado de Judea y a
los ancianos de los judíos. Que se reconstruya esa Casa de Dios en el mismo
sitio. Estas son mis órdenes acerca de la conducta que ustedes deben
observar frente a los ancianos de los judíos, para la reconstrucción de esa
Casa de Dios: los gastos que ellos hagan serán pagados totalmente y sin
interrupción de los fondos reales, utilizando los impuestos percibidos en
la región del otro lado del Eufrates. Yo, Darío, he promulgado este
decreto. Que sea cumplido estrictamente». Los ancianos de los judíos
llevaron adelante la obra, bajo el impulso del profeta Ageo y de Zacarías,
hijo de Idó. Así terminaron la construcción, conforme a la orden del Dios
de Israel y a los decretos de Ciro y Darío. La Casa fue concluida el día
veintitrés del mes de Adar, en el sexto año del reinado de Darío. Todos los
israelitas —los sacerdotes, los levitas, y el resto de los
repatriados— celebraron alegremente la Dedicación de esta Casa de
Dios. Para su Dedicación, ofrecieron cien novillos, doscientos carneros y
cuatrocientos corderos. Además, ofrecieron doce chivos, según el número de
tribus de Israel, como sacrificio por el pecado de todo el pueblo. Después
establecieron a los sacerdotes según sus categorías y a los levitas según
sus clases, para el servicio de Dios en Jerusalén, como está escrito en el
libro de Moisés. Los repatriados celebraron la Pascua el día catorce del
primer mes. Como todos los levitas se habían purificado, estaban puros e
inmolaron la víctima pascual para todos los que habían vuelto del
destierro, para sus hermanos los sacerdotes y para ellos mismos.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Después que el templo y la ciudad de Jerusalén fueron destruidos,
los judíos pasaron cincuenta años desterrados en Babilonia. Las lecturas
del libro de Esdras y de la profecía de Ageo que iremos leyendo esta
semana, nos ubican en el regreso de ese exilio vivido en Babilonia. Se
encuentran nuevamente en su tierra, bajo el dominio de los reyes persas
Ciro y Darío. En este tiempo de reconstrucción en su propia tierra se fijan
como una tarea fundamental volver a levantar en Jerusalén el templo para el
Señor. Sin embargo, el Señor quiere habitar en cada hombre y en cada mujer
como en un templo vivo.
SALMO Sal 121, 1-5
R. ¡Vamos con
alegría a la Casa del Señor!
¡Qué alegría cuando me dijeron:
“Vamos a la Casa del Señor”! Nuestros pies ya están pisando tus
umbrales, Jerusalén. R.
Jerusalén, que fuiste construida
como ciudad bien compacta y armoniosa. Allí suben las tribus, las tribus
del Señor. R.
Según es norma en Israel para
celebrar el Nombre del Señor. Porque allí está el trono de la justicia, el
trono de la casa de David. R.
ALELUYA Lc 11, 28
Aleluya. Felices los que escuchan
la Palabra de Dios y la practican. Aleluya.
EVANGELIO Lc 8, 19-21
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
La madre y los hermanos de Jesús
fueron a verlo, pero no pudieron acercar- se a causa de la multitud.
Entonces le anunciaron a Jesús: “Tu madre y tus hermanos están ahí
afuera y quieren verte”. Pero él les respondió: “Mi madre y mis
hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican”.
Palabra del Señor.
COMENTARIO
María y algunos parientes cercanos de Jesús no pueden llegar hasta
él porque no logran romper la barrera que lo rodea. Desearían verlo,
hablarle, estar con él, pero no pueden. Alguien hace llegar al Maestro el
deseo de sus familiares y recibe una respuesta inesperada y tajante:
“Mi madre y mis hermanos son todos los que escuchan la palabra de
Dios y la practican”. El ser hermanos de Jesús no nos asegura ningún
puesto cerca de él, sino que nos compromete a vivir cumpliendo la palabra
de Dios Padre.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con bondad los
dones de tu pueblo y concédele alcanzar en el sacramento eucarístico lo que
proclama en la piedad de su fe. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 118, 4-5
Tú promulgaste, Señor, tus
mandamientos, para que se cumplieran íntegramente. ¡Ojalá mis pasos se
mantengan firmes en la observancia de tus preceptos!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, concede benigno tu ayuda a
quienes alimentas con tus sacramentos, para que por la celebración de estos
misterios y por la práctica de la vida cristiana alcancemos el fruto de la
salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Que tus sacerdotes, Señor, se
revistan de justicia y tus fieles griten de alegría.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, te rogamos
humildemente que gracias a la intercesión de san Pío de Pietrelcina,
acrecientes tu gracia en nosotros y concedas al mundo el don de la paz. Por
nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Esd 9, 5-9
Lectura del
libro de Esdras.
Yo, Esdras, a la hora de la
ofrenda de la tarde, me levanté, y con la túnica y el manto desgarrados,
caí de rodillas, extendí las manos hacia el Señor, mi Dios, y dije: Dios
mío, estoy tan avergonzado y confundido que no me atrevo a levantar mi
rostro hacia ti. Porque nuestras iniquidades se han multiplicado hasta
cubrirnos por completo, y nuestra culpa ha subido hasta el cielo. Desde los
días de nuestros padres hasta hoy, nos hemos hecho muy culpables, y a causa
de nuestras iniquidades, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes,
fuimos entregados a los reyes extranjeros, a la espada, al cautiverio, al
saqueo y a la vergüenza, como nos sucede en el día de hoy. Pero ahora, hace
muy poco tiempo, el Señor, nuestro Dios, nos ha concedido la gracia de
dejarnos un resto de sobre vivientes y de darnos un refugio en su Lugar
santo. Así nuestro Dios ha iluminado nuestros ojos y nos hadado un respiro
en medio de nuestra esclavitud. Porque nosotros estamos sometidos; pero
nuestro Dios no nos ha abandonado en medio de la servidumbre. El nos obtuvo
el favor de los reyes de Persia, para animarnos a levantar la Casa de
nuestro Dios y restaurar sus ruinas, y para darnos una muralla en Judá y en
Jerusalén”.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
A partir de la consciencia de ser el pueblo elegido, el profeta
sufre ante lo que considera una abominación que los hijos de Israel se
mezclen con los pueblos vecinos y caigan en la falta de identidad al igual
que ellos.
SALMO Tob 13,2-4. 5. 8
R. ¡Bendito sea
Dios, que vive eternamente!
Él castiga y tiene compasión,
hace bajar hasta el Abismo y hace subir de la gran perdición, sin que nadie
escape de su mano. R.
¡ Celébrenlo ustedes, israelitas,
delante de todas las naciones! Porque él los ha dispersado en medio de
ellas, pero allí les ha mostrado su grandeza. R.
Exáltenlo ante todos los
vivientes porque él es nuestro Señor, nuestro Dios y nuestro Padre, él es
Dios por todos los siglos. R.
Él los castiga por sus
iniquidades, pero tendrá compasión de todos ustedes, y los congregará de
entre todas las naciones por donde han sido dispersados. R. ¡ Conviértanse,
pecadores, y practiquen la justicia en su presencia! ¡Quién sabe si él no
les será favorable y tendrá misericordia de ustedes! R.
ALELUYA Mc 1, 15
Aleluya.
El Reino de Dios está cerca. Conviértanse y crean en la Buena Noticia. Aleluya.
EVANGELIO Lc 9, 1-6
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Jesús convocó a los Doce y les
dio poder y autoridad para expulsar a toda clase de demonios y para sanar
las enfermedades. Y los envió a proclamar el Reino de Dios y a sanar a los
enfermos, diciéndoles: “No lleven nada para el camino, ni bastón, ni
provisiones, ni pan, ni dinero, ni tampoco dos túnicas cada uno.
Permanezcan en la casa donde se alojen, hasta el momento de partir. Si no
los reciben, al salir de esa ciudad sacudan hasta el polvo de sus pies, en
testimonio contra ellos”. Fueron entonces de pueblo en pueblo,
anunciando la Buena Noticia y sanando enfermos en todas partes.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
La Buena Noticia es que el Reino ya ha llegado. Los Doce son
enviados a proclamar este anuncio y a dar signos del Reino, esto es, a
erradicar el mal en todas sus formas. El único poder en que hay que confiar
para que esto sea posible, es en el mismo poder del Reino. Por eso, la
actuación de los Doce no se hará por la riqueza de dinero o de provisiones,
sino por la fuerza del Reino.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, acepta la ofrenda que
presentamos ante tu altar en la conmemoración de san Pío de Pietrelcina, y
así como a él lo glorificaste por estos misterios, concédenos a nosotros tu
bondadoso perdón. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Lc 12, 42
El administrador fiel y previsor,
a quien el Señor ha puesto al frente de su personal para distribuirle la
ración de trigo en el momento oportuno.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso, fortalece con
tu divino poder a cuantos hemos participado de esta mesa celestial, en la
fiesta de san Pío de Pietrelcina, para que podamos conservar intacta la fe
recibida y seguir el camino de la salvación que él nos señaló con su
ejemplo.
Dice el Señor: Yo soy el Salvador
de mi pueblo. Lo escucharé cuando me invoque en su angustia y seré su Señor
para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que resumiste todos los
mandamientos de la sagrada ley en el amor a ti y al prójimo, concédenos que
observando tus preceptos podamos alcanzar la Vida eterna.
Por nuestro Señor
Jesucristo.
LECTURA Ag 1, 15b—2, 9
Lectura de la
profecía de Ageo.
El segundo año de Darío, rey de
Persia, el día veintiuno del séptimo mes, la palabra del Señor llegó, por
medio del profeta Ageo, en estos términos: “Di a Zorobabel, hijo de
Sealtiel, gobernador de Judá, a Josué, hijo de lehosadac, el Sumo
Sacerdote, y al resto del pueblo: ¿Queda alguien entre ustedes que haya
visto esta Casa en su antiguo esplendor? ¿Y qué es lo que ven ahora? ¿No es
como nada ante sus ojos? ¡Animo, Zorobabel! —oráculo del
Señor—. ¡Animo, Josué, hijo de lehosadac, Sumo Sacerdote! ¡Animo,
todo el pueblo del país! —oráculo del Señor—. ¡Manos a la obra!
Porque yo estoy con ustedes —oráculo del Señor de los
ejércitos— según el compromiso que contraje con ustedes cuando salieron
de Egipto, y mi espíritu permanece en medio de ustedes. ¡No teman! Porque
así habla el Señor de los ejércitos: Dentro de poco tiempo, yo haré
estremecer el cielo y la tierra, el mar y el suelo firme. Haré estremecer a
todas las naciones: entonces afluirán los tesoros de todas las naciones y
llenaré de gloria esta Casa, dice el Señor de los ejércitos. ¡Son míos el
oro y la plata! —oráculo del Señor de los ejércitos—. La gloria
última de esta Casa será más grande que la primera —dice el Señor de
los ejércitos—, y en este lugar yo daré la paz”.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Los que habían conocido el templo antes de su destrucción estaban
desanimados, porque este segundo templo que estaban construyendo no tenía
la misma riqueza y esplendor del primero. Sin embargo, el Señor anuncia que
toda su gloria se manifestará alIí El Señor trabaja, pero no quiere
trabajar solo. El Señor busca siempre buenos socios o colaboradores para su
empresa. El actúa como el perfecto empresario que trabaja y da trabajo: así
pues, la obra de salvación será de todos.
SALMO Sal 42,1-4
R. Espero en el
Señor y le daré gracias.
Júzgame, Señor, y defiende mi
causa contra la gente sin piedad; líbrame del hombre falso y perverso. R.
Si tú eres mi Dios y mi
fortaleza, ¿por qué me rechazas? ¿Porqué tendré que estar triste, oprimido
por mi enemigo? R.
Envíame tu luz y tu verdad: que
ellas me encaminen y me guíen a tu santa Montaña, hasta el lugar donde
habitas. R.
Y llegaré al altar de Dios, el
Dios que es la alegría de mi vida; y te daré gracias con la cítara, Señor,
Dios mío. R.
ALELUYA Mc 10, 45
Aleluya. El
Hijo del hombre vino para servir y dar su vida en rescate por una multitud. Aleluya.
EVANGELIO Lc 9, 18-22
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Un día en que Jesús oraba a solas
y sus discípulos estaban con él, les preguntó: “¿Quién dice la gente
que soy yo?”. Ellos le respondieron: “Unos dicen que eres Juan
el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los antiguos profetas que ha
resucitado”. “Pero ustedes, les preguntó, ¿quién dicen que soy
yo?”. Pedro, tomando la palabra, respondió: “Tú eres el Mesías
de Dios”. Y él les ordenó terminantemente que no lo anunciaran a
nadie, diciéndoles: “El Hijo del hombre debe sufrir mucho, ser
rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser
condenado a muerte y resucitar al tercer día”.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
Jesús formuló una pregunta, interesándose por la opinión de la
gente sobre su persona: “¿Quien dicen que soy yo?”. En la
opinión más universal de hoy Jesús tiene un lugar de privilegio. Pero
interesa más conocer si los cristianos saben comportarse ante su Señor y
Maestro. Sobre Jesús hay opiniones populares y opiniones científicas,
respuestas de la fe y respuestas de la ciencia o la sicología. Pero ni la ciencia
ni la sicología ni las más geniales intuiciones humanas pueden descubrir
por sí solas el misterio de Cristo y el sentido de la cruz. Comprender esto
es una gracia del Padre que ofrece a todos, pero de manera más abundante a
los humildes y sencillos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con bondad los
dones de tu pueblo y concédele alcanzar en el sacramento eucarístico lo que
proclama en la piedad de su fe.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 118, 4-5
Tú promulgaste, Señor, tus
mandamientos, para que se cumplieran íntegramente. ¡Ojalá mis pasos se
mantengan firmes en la observancia de tus preceptos!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, concede benigno tu ayuda a
quienes alimentas con tus sacramentos, para que por la celebración de estos
misterios y por la práctica de la vida cristiana alcancemos el fruto de la
salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Dice el Señor: Yo soy el
Salvador de mi pueblo. Lo escucharé cuando me invoque en su angustia y seré
su Señor para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que resumiste todos los
mandamientos de la sagrada ley en el amor a ti y al prójimo, concédenos que
observando tus preceptos podamos alcanzar la Vida eterna.
Por nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Ag 1,
15b—2, 9
Lectura de la profecía de Ageo.
El segundo año de Darío, rey de
Persia, el día veintiuno del séptimo mes, la palabra del Señor llegó, por
medio del profeta Ageo, en estos términos: “Di a
Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judá,
a Josué, hijo de lehosadac, el Sumo Sacerdote, y
al resto del pueblo: ¿Queda alguien entre ustedes que haya visto esta Casa
en su antiguo esplendor? ¿Y qué es lo que ven ahora? ¿No es como nada ante
sus ojos? ¡Animo, Zorobabel! —oráculo del Señor—.
¡Animo, Josué, hijo de lehosadac, Sumo Sacerdote!
¡Animo, todo el pueblo del país! —oráculo del
Señor—. ¡Manos a la obra! Porque yo estoy con ustedes —oráculo del Señor de
los ejércitos— según el compromiso que contraje con ustedes cuando salieron
de Egipto, y mi espíritu permanece en medio de ustedes. ¡No teman! Porque
así habla el Señor de los ejércitos: Dentro de poco tiempo, yo haré
estremecer el cielo y la tierra, el mar y el suelo firme. Haré estremecer a
todas las naciones: entonces afluirán los tesoros de todas las naciones y
llenaré de gloria esta Casa, dice el Señor de los ejércitos. ¡Son míos el
oro y la plata! —oráculo del Señor de los
ejércitos—. La gloria última de esta Casa será más grande que la primera
—dice el Señor de los ejércitos—, y en este lugar yo daré la paz”.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Los
que habían conocido el templo antes de su destrucción estaban desanimados,
porque este segundo templo que estaban construyendo no tenía la misma
riqueza y esplendor del primero. Sin embargo, el Señor anuncia que toda su
gloria se manifestará alIí El Señor trabaja, pero
no quiere trabajar solo. El Señor busca siempre buenos socios o
colaboradores para su empresa. El actúa como el perfecto empresario que
trabaja y da trabajo: así pues, la obra de salvación será de todos.
SALMO Sal 42,1-4
R. Espero en el Señor y le daré gracias.
Júzgame, Señor, y defiende mi
causa contra la gente sin piedad; líbrame del hombre falso y perverso. R.
Si tú eres mi Dios y mi
fortaleza, ¿por qué me rechazas? ¿Porqué tendré que estar triste, oprimido
por mi enemigo? R.
Envíame tu luz y tu verdad: que
ellas me encaminen y me guíen a tu santa Montaña, hasta el lugar donde
habitas. R.
Y llegaré al altar de Dios, el
Dios que es la alegría de mi vida; y te daré gracias con la cítara, Señor,
Dios mío. R.
ALELUYA Mc 10, 45
Aleluya. El Hijo del hombre vino para servir y dar su vida en
rescate por una multitud. Aleluya.
EVANGELIO Lc 9,
18-22
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Un día en que Jesús oraba a
solas y sus discípulos estaban con él, les preguntó: “¿Quién dice la gente
que soy yo?”. Ellos le respondieron: “Unos dicen que eres Juan el Bautista;
otros, Elías; y otros, alguno de los antiguos profetas que ha resucitado”.
“Pero ustedes, les preguntó, ¿quién dicen que soy yo?”. Pedro, tomando la
palabra, respondió: “Tú eres el Mesías de Dios”. Y él les ordenó
terminantemente que no lo anunciaran a nadie, diciéndoles: “El Hijo del
hombre debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes
y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día”.
Palabra del Señor.
COMENTARIO
Jesús
formuló una pregunta, interesándose por la opinión de la gente sobre su
persona: “¿Quien dicen que soy yo?”. En la opinión más universal de hoy Jesús
tiene un lugar de privilegio. Pero interesa más conocer si los cristianos
saben comportarse ante su Señor y Maestro. Sobre Jesús hay opiniones
populares y opiniones científicas, respuestas de la fe y respuestas de la
ciencia o la sicología. Pero ni la ciencia ni la sicología ni las más
geniales intuiciones humanas pueden descubrir por sí solas el misterio de
Cristo y el sentido de la cruz. Comprender esto es una gracia del Padre que
ofrece a todos, pero de manera más abundante a los humildes y sencillos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con bondad los
dones de tu pueblo y concédele alcanzar en el sacramento eucarístico lo que
proclama en la piedad de su fe.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 118, 4-5
Tú promulgaste, Señor, tus
mandamientos, para que se cumplieran íntegramente. ¡Ojalá
mis pasos se mantengan firmes en la observancia de tus preceptos!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, concede benigno tu ayuda
a quienes alimentas con tus sacramentos, para que por la celebración de
estos misterios y por la práctica de la vida cristiana alcancemos el fruto
de la salvación. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Dice el Señor: Yo soy el
Salvador de mi pueblo. Lo escucharé cuando me invoque en su angustia y seré
su Señor para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que resumiste todos los
mandamientos de la sagrada ley en el amor a ti y al prójimo, concédenos que
observando tus preceptos podamos alcanzar la Vida eterna.
Por nuestro Señor Jesucristo.
O bien: de la memoria
Señor, al conmemorar a las
santos Cosme y Damián, acepta nuestra alabanza, ya que por tu inexpresable
providencia les diste a ellos la gloria eterna y a nosotros tu ayuda.
Por nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Zac 2, 5-9.
14-15
Lectura de la profecía de Zacarías.
Yo levanté los ojos, y tuve una
visión: Había un hombre que tenía en la mano una cuerda de medir. Entonces
le pregunté: “A dónde vas?”. El me respondió: “Voy
a medir Jerusalén, para ver cuánto tiene de ancho y cuánto de largo”.
Mientras el ángel que hablaba con migo estaba allí, otro ángel le salió a
su encuentro y le dijo: “Corre, habla a ese joven y dile: Jerusalén será
una ciudad abierta por la gran cantidad de hombres y animales que habrá en
ella. Yo seré para ella —oráculo del Señor— una muralla de fuego a su
alrededor, y seré su Gloria en medio de ella. Grita de júbilo y alégrate,
hija de Sión: porque Yo vengo a habitar en medio de ti —oráculo del Señor—.
Aquel día, muchas naciones se unirán al Señor: ellas serán un pueblo para
él y habitarán en medio de ti”.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Lo
que verdaderamente anuncia Zacarías es la Jerusalén del futuro, la nueva
Jerusalén, abierta indiscriminadamente a todos los pueblos y razas. Es la
ciudad donde el Señor dejó sentir su presencia, accesible a justos y
pecadores. Nehemías no entendió el alcance de la visión del profeta, como
tampoco los discípulos entendieron al Maestro.
SALMO Jer 31, 10-12b-13
R. ¡El Señor nos cuidará como un pastor!
¡Escuchen, naciones, la palabra
del Señor, anúncienla en las costas más lejanas! Digan: “El que dispersó a
Israel lo reunirá, y lo cuidará como un pastor a su rebaño”. R.
Porque el Señor ha rescatado a
Jacob, lo redimió de una mano más fuerte que él. Llegarán gritando de
alegría a la altura de Sión, afluirán hacia los bienes del Señor. R.
Entonces la joven danzará
alegremente, los jóvenes y los viejos se regocijarán; Yo cambiaré su duelo
en alegría, los alegraré y los consolaré de su aflicción. R.
ALELUYA Cfr. 2Tim
1, 10b
Aleluya. Nuestro Salvador Jesucristo destruyó la muerte e hizo
brillar lavida, mediante la Buena Noticia. Aleluya.
EVANGELIO Lc 9,
43b-45
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Mientras todos se admiraban por
las cosas que hacía, Jesús dijo a sus discípulos: “Escuchen bien esto que
les digo: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres”.
Pero ellos no entendían estas palabras: su sentido les resultaba oscuro, de
manera que no podían comprenderlas, y temían interrogar a Jesús acerca de
esto.
Palabra del Señor.
COMENTARIO
El
Maestro comunica a sus discípulos sobre su pasión y muerte en la cruz. Es
el momento de la segunda llamada o segunda conversión. Es preciso ser muy
sinceros y respetuosos con el Evangelio para no adulterarlo. El papa Pablo
VI nos previene al decir: “No endulcen tanto el mensaje del Evangelio que
lo despojen de su carácter divino”. Así pues, el seguimiento del Maestro es
tenderse sobre la cruz real, aunque haga daño.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con bondad los
dones de tu pueblo y concédele alcanzar en el sacramento eucarístico lo que
proclama en la piedad de su fe. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 118, 4-5
Tú promulgaste, Señor, tus
mandamientos, para que se cumplieran íntegramente. ¡Ojalá
mis pasos se mantengan firmes en la observancia de tus preceptos!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, concede benigno tu ayuda
a quienes alimentas con tus sacramentos, para que por la celebración de
estos misterios y por la práctica de la vida cristiana alcancemos el fruto
de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Todo lo que hiciste con
nosotros, Señor, es verdaderamente justo, porque pecamos contra ti y no
obedecimos tu Ley; pero glorifica tu nombre, tratándonos según tu gran
misericordia.
ACTO PENITENCIAL
·Tú eres el Salvador de todos. Por nuestros
celos y envidias. Señor, ten piedad.
·Tú nos hiciste hermano de todos. Por
nuestros duros juicios hacia otros. Cristo, ten piedad.
·Tú nos buscas a todos. Por nuestros rechazos
y exclusiones. Señor, ten piedad.
SE DICE GLORIA A DIOS
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra
paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te
bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey
celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo. Señor
Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra
suplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de
nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo,
Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre. Amén.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que manifiestas tu omnipotencia
sobre todo en la misericordia y en el perdón, derrama incesantemente tu
gracia sobre nosotros, para que anhelando ardorosamente tus promesas, nos
hagas partícipes de los bienes del cielo.
Por nuestro Señor Jesucristo.
II. LITURGIA DE LA PALABRA
La tradición de designar setenta ancianos que compartan la guía y
dirección del pueblo, es propuesta por Dios a Moisés. La expresión
“apartaré una parte del espíritu que posees y se lo pasaré a ellos” indica
que cada uno tendría frente al pueblo la misma responsabilidad que Moisés:
guiar, instruir, interceder.
PRIMERA LECTURA Núm
11, 16-17. 24-29
Lectura del libro de los Números.
El Señor dijo a Moisés: “Reúneme
a setenta de los ancianos de Israel —deberás estar seguro de que son
realmente ancianos y escribas del pueblo— Ilévalos
a la Carpa del Encuentro, y que permanezcan allí junto contigo. Yo bajaré
hasta allí, te hablaré, y tomaré algo del espíritu que tú posees, para
comunicárselo a ellos». Moisés salió a comunicar al pueblo las palabras del
Señor. Luego reunió a setenta hombres entre los ancianos del pueblo, y los
hizo poner de pie alrededor de la Carpa. Entonces el Señor descendió en la
nube y le habló a Moisés. Después tomó algo del espíritu que estaba sobre
él y lo infundió a los setenta ancianos. Y apenas el espíritu se posó sobre
ellos, comenzaron a hablar en éxtasis; pero después no volvieron a hacerlo.
Dos hombres —uno llamado Eldad y el otro Medad—
se habían quedado en el campamento; y como figuraban entre los inscritos,
el espíritu se posó sobre ellos, a pesar de que no habían ido a la Carpa. Y
también ellos se pusieron a hablar en éxtasis. Un muchacho vino corriendo y
comunicó la noticia a Moisés, con estas palabras: “Eldad
y Medad están profetizando en el campamento». Josué, hijo de Nun, que desde
su juventud era ayudante de Moisés, intervino diciendo: “Moisés, señor mío,
no se lo permitas». Pero Moisés le respondió: « ¿Acaso estás celoso a causa
de mí? ¡Ojalá todos fueran profetas en el pueblo
del Señor, porque él les infunde su Espíritu!”
Palabra de Dios.
SALMO
El Salmo 18 nos manifiesta
un contenido precioso para meditar sobre la lectura anterior: “los mandatos
delSeñor alegran el corazón; la ley
del Señor es perfecta y es descanso del alma;el precepto del Señor es fiel e instruye
al ignorante, la voluntad del Señor es pura y eternamente estable”... Pero
podemos presumir de ello. Por eso pedimos al Señor que preserve de la
arrogancia y que no nos domine; así quedaremos libres e inocentes del gran
pecado.
Sal 18, 8.10. 12-14
R. Los preceptos del Señor alegran el corazón.
La ley del Señor es perfecta,
reconforta el alma; el testimonio del Señor es verdadero, da sabiduría al
simple. R.
La palabra del Señor es pura,
permanece para siempre; los juicios del Señor son la verdad, enteramente
justos. R.
También a mí me instruyen:
observarlos es muy provechoso. Pero ¿quién advierte sus propios errores?
Purifícame de las faltas ocultas. R.
Presérvame, además, del
orgullo, para que no me domine: entonces seré irreprochable y me veré libre
de ese gran pecado. R.
SEGUNDA LECTURA Sant 5, 1-6
Este lamento profético y apocalíptico, presenta el juicio divino
contra quienes adquieren sus riquezas injustamente a través de la extorsión
y la explotación de los trabajadores. Este juicio asienta sus bases en
aspectos propios del Antiguo Testamento como, el grito que elevan a Dios
los esclavos hebreos en Egipto, así como la sangre de Abel que clamó al
cielo.
Lectura de la carta de Santiago.
Ustedes, los ricos, lloren y
giman por las desgracias que les van a sobrevenir. Porque sus riquezas se
han echado a perder y sus vestidos están roídos por la polilla. Su oro y su
plata se han herrumbrado, y esa herrumbre dará testimonio contra ustedes y
devorará sus cuerpos como un fuego. ¡Ustedes han amontonado riquezas, ahora
que es el tiempo final! Sepan que el salario que han robado a los que
trabajaron en sus campos está clamando, y el clamor de los cosechadores ha
llegado a los oídos del Señor del universo. Ustedes llevaron en este mundo
una vida de lujo y de placer, y se han cebado a sí mismos para el día de la
matanza. Han condenado y han matado al Justo, sin que él les opusiera
resistencia.
Palabra de Dios.
ALELUYA CfrJn 17, 17
Aleluya. Tu palabra, Señor, es verdad; conságranos en la
verdad. Aleluya.
EVANGELIO Mc
9,38-43. 45.47-48
El relato presenta a los discípulos aún con dificultad para
comprender las enseñanzas de Jesús. De allí que los celos misioneros de
Juan son descalificados por Jesús: “quien no está contra nosotros, está a
nuestro favor”. Una cosa es que los discípulos constituyan el grupo más
cercano a Jesús y otra, que se consideren los depositarios exclusivos del
anuncio del reino.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos.
Juan dijo a Jesús: “Maestro,
hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu Nombre, y tratamos de
impedírselo porque no es de los nuestros”. Pero Jesús les dijo: “No se lo
impidan, porque nadie puede hacer un milagro en mi Nombre y luego hablar
mal de mí. Y el que no está contra nosotros, está con nosotros. Les aseguro
que no quedará sin recompensa el que les dé de beber un vaso de agua por el
hecho de que ustedes pertenecen a Cristo. Si alguien llegara a escandalizar
a uno de estos pequeños que tienen fe, sería preferible para él que le
ataran al cuello una piedra de moler y lo arrojaran al mar. Si tu mano es
para ti ocasión de pecado, córtala, porque más te vale entrar en la Vida
manco, que ir con tus dos manos al infierno, al fuego inextinguible. Y si
tu pie es para ti ocasión de pecado, córtalo, porque más te vale entrar
lisiado en la Vida, que ser arrojado con tus dos pies al infierno. Y si tu
ojo es para ti ocasión de pecado, arráncalo, porque más te vale entrar con
un solo ojo en el Reino de Dios, que ser arrojado con tus dos ojos al
infierno, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga”.
Palabra del Señor.
SE DICE EL CREDO
Creo en Dios Padre todopoderoso. Creador
del cielo y de la tierra. Y en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor;
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa
María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado,
muerto y sepultado; descendió a los infiernos; al tercer día resucitó de
entre los muertos; subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios
Padre todopoderoso; desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los
muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la Santa
Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la
resurrección de la carne, y la vida eterna. Amén.
ORACIÓN DE LOS FIELES
A cada intención, pedimos: Ayúdanos, Señor, a respetar a los demás.
·Para que se intensifique el diálogo entre
las Iglesias cristianas y con las otras religiones. Oremos.
·Para que los gobernantes de todas las
naciones fomenten la respetuosa convivencia de todos los ciudadanos.
Oremos.
·Para que los que no piensan y actúan como
nosotros, los cristianos, sientan nuestro respeto y comprensión. Oremos.
·Para que en nuestra comunidad parroquial se
superen los celos, las envidias y toda mentalidad sectaria. Oremos.
III. LITURGIA EUCARISTICA
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios misericordioso, que
nuestra ofrenda sea de tu agrado, y concédenos que gracias a ella se abra
para nosotros la fuente de toda bendición. Por Jesucristo nuestro Señor.
Dios ha hecho fértil la tierra y la ha colmado de riquezas. Por
eso, junto al pan y el vino, presentemos al Señor toda la actividad de los
hombres de buena voluntad y nuestro propósito de superar celos, envidias y
divisiones
PREFACIO DOMINICAL DURANTE EL AÑO
El Señor, nuestro Dios da al hombre su Espíritu para que sea
artífice de justicia y paz. Por eso, junto a los “santos y a los ángeles”
alabemos a Dios, creador y salvador.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 118, 49-50
Acuérdate, Señor, de la palabra
que diste a tu servidor, con la que alentaste mi esperanza, lo que me
consuela en la aflicción.
O bien: 1 Jn3,16
En esto hemos conocido el amor
de Dios, en que él entregó su vida por nosotros. Por eso, también nosotros
debemos dar la vida por nuestros hermanos.
La eucaristía es el pan partido para todos. Con fervor, vayamos a
comulgar abriendo nuestro corazón a todos los hombres de buena voluntad.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que este sacramento
celestial restaure nuestra alma y nuestro cuerpo, y ya que participamos de
los sufrimientos de Cristo anunciando su muerte, seamos también sus coherederos
en la gloria.
Bendigan al Señor, todos sus
ángeles fuertes guerreros que cumplen sus órdenes, apenas oyen la voz de su
palabra.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que ordenas
admirablemente los oficios de los ángeles y de los hombres; concédenos en
tu bondad, que nuestra vida esté protegida en la tierra, por aquellos que te
sirven siempre en el cielo.
Por nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Dn 7, 9-10. 13-14
De la profecía de Daniel.
Yo estuve mirando hasta que
fueron colocados unos tronos y un Anciano se sentó. Su vestidura era blanca
como la nieve y los cabellos de su cabeza como la lana pura; su trono,
llamas de fuego, con ruedas de fuego ardiente. Un río de fuego brotaba y
corría delante de él. Miles de millares lo servían, y centenares de miles
estaban de pie en su presencia. El tribunal se sentó y fueron abiertos unos
libros. Yo estaba mirando en las visiones nocturnas, y vi
que venía sobre las nubes del cielo como un Hijo de hombre; él avanzó hacia
el anciano y lo hicieron acercar hasta él. Y le fue dado el dominio, la gloria
y el reino, y lo sirvieron todos los pueblos, naciones y lenguas. Su
dominio es un dominio eterno que no pasará, y su reino no será destruido.
Palabra de Dios.
O bien:
Apoc 12, 7-12a
Lectura del libro del Apocalipsis.
Se libró una batalla en el
cielo: Miguel y sus ángeles combatieron contra el dragón, y éste contraatacó
con sus ángeles, pero fueron vencidos y expulsados del cielo. Y así fue
precipitado el enorme dragón, la antigua serpiente, llamada diablo o
Satanás, y el seductor del mundo entero fue arrojado sobre la tierra con
todos sus ángeles. Y escuché una voz potente que resonó en el cielo: “Ya
llegó la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios y la soberanía de
su Mesías, porque ha sido precipitado el acusador de nuestros hermanos, el
que día y noche los acusaba delante de nuestro Dios. Ellos mismos lo han
vencido, gracias a la sangre del cordero y al testimonio que dieron de él,
porque despreciaron su vida hasta la muerte. ¡Que se alegren entonces el
cielo y sus habitantes!”.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
El
profeta Daniel describe, con un lenguaje preñado de simbolismo, su visión
del trono de Dios. En esa visión, se destaca el Hijo del hombre: él es el
único que reinará eternamente por encima de todos los poderes de este
mundo. Los ángeles se ponen al servicio de Dios en este combate. Siempre
que nosotros nos decidimos a combatir el mal, los ángeles están de nuestro
lado.
SALMO
Sal 137, 1-5
R. Te cantaré en presencia de
los ángeles, Señor.
Te doy gracias, Señor, de todo
corazón, porque has oído las palabras de mi boca. Te cantaré en presencia
de los ángeles y me postraré ante tu santo templo. R.
Daré gracias a tu nombre por tu
amor y tu fidelidad, porque tu promesa ha su pera- do tu renombre. Me
respondiste cada vez que te invoqué y aumentaste la fuerza de mi alma. R.
Que los reyes de la tierra te
bendigan al oír la palabra de tu boca, y que celebren los designios del
Señor, porque la gloria del Señor es grande. R.
ALELUYA Sal 102,21
Aleluya. ¡Bendigan al Señor, todo sus ejércitos, sus servidores, los que cumplen su
voluntad! Aleluya.
EVANGELIO Jn
1,47-51
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan.
Al ver llegar a Natanael, Jesús dijo: “Este es un verdadero israelita,
un hombre sin doblez”. “,De dónde me conoces?», le
preguntó Natanael. Jesús le respondió: “Yo te vi antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo
de la higuera”. Natanael respondió: « Maestro, tú
eres el Hijo de Dios, tú eres el rey de Israel». Jesús continuó: “Porque te
dije: “Te vi debajo de la higuera”, crees. Verás
cosas más grandes todavía”. Y agregó: “Les aseguro que verán el cielo
abierto, y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre”.
Palabra del Señor.
COMENTARIO
Jesucristo
se manifestará con toda su gloria y poder. Todo quedará sometido a él,
porque sólo a él se dará el dominio y el señorío. También los ángeles le
rendirán gloria y honor. Cuando alabamos y cantamos a Jesucristo
victorioso, también los coros angélicos cantan con nosotros. Y nosotros en
cada Eucaristía que celebramos unimos nuestras voces a las de los ángeles
para cantar al Dios tres veces santo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, te ofrecemos este
sacrificio de alabanza y te suplicamos humilde mente que sea llevado a tu
presencia por el ministerio de tus ángeles, lo aceptes con bondad y nos
obtenga la eterna salvación.
Por Jesucristo nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 137, 1
Te doy gracias, Señor, de todo
corazón, te cantaré en presencia de los ángeles.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, restaurados con el pan
celestial, te rogamos humildemente que, fortalecidos por su eficacia, avancemos
animosamente por el camino de la salvación, bajo la fiel custodia de tus
ángeles.
Que el libro de esta Ley nunca
se aparte de ti: medítalo día y noche para obrar fielmente en todo conforme
a lo que está escrito en él. Así podrás prosperar y tus empresas tendrán
éxito.
ORACIÓN COLECTA
Dios, que otorgaste al
presbítero san Jerónimo un amor vivo y tierno por la Sagrada Escritura;
concede que tu pueblo se alimente con mayor abundancia de tu palabra y que
encuentre en ella la fuente de la vida.
Por nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Neh 2,
1-8
Lectura del libro de Nehemías.
En el mes de Nisán, el vigésimo
año del reinado de Artajerjes, siendo yo el encargado del vino, lo tomé y
se lo ofrecí al rey. Como nunca había estado triste en su presencia, el rey
me preguntó: «,Por qué tienes esa cara tan triste?
Tú no estás enfermo. Seguramente hay algo que te aflige». Yo experimenté
una gran turbación, y dije al rey: «Viva el rey para siempre! ¿Cómo no voy a estar con la cara triste, si la ciudad
donde están las tumbas de mis padres se encuentra en ruinas y sus puertas
han sido consumidas por el fuego?» El rey me dijo: «,Qué
es lo que quieres?».Yo me encomendé al Dios del cielo, y le respondí: «Si
es del agrado del rey y tú estás contento con tu servidor, envíame a Judá,
a la ciudad donde están las tumbas de mis padres, para que yo la reconstruya».
El rey, que tenía a la reina sentada a su lado, me dijo: «,Cuánto tiempo durará tu viaje y cuándo estarás de
regreso?». Al rey le pareció bien autorizar mi partida, y yo le fijé un
plazo. Luego dije al rey: «Si el rey lo considera conveniente, se me
podrían dar cartas para los gobernadores del otrolado del Éufrates,
a fin de que me faciliten el viaje a Judá. También podrían darme una carta
para Asaf, el supervisor de los parques del rey, a fin de que me provea de
madera para armar las puertas de la ciudadela del Templo, para las murallas
de la ciudad y para la casa donde voy a vivir». El rey me concedió todo
eso, porque la mano bondadosa de mi Dios estaba sobre mí.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Nehemías
sabe ganarse la confianza del rey y situarse en puestos de privilegio. Pero
no es feliz mientras no vea reconstruido el templo que levantaron sus
antepasados. Nehemías es un hombre fiel a Dios y a la tradición de su
pueblo. Por eso, acepta la responsabilidad de renunciara todo y regresar a
Jerusalén para hacerse cargo de las obras de la reconstrucción del templo.
En su decisión está Dios con amor preferencial. Ese amor hace comprensible
y fácil la renuncia a todos los privilegios sociales.
SALMO Sal 136, 1-6
R. ¡Que no me olvide de ti, Ciudad de Dios!
Junto a los ríos de Babilonia,
nos sentábamos a llorar, acordándonos de Sión. En los sauces de las orillas
teníamos colgadas nuestras cítaras. R.
Allí nuestros carceleros nos
pedían cantos, y nuestros opresores, alegría: «¡Canten
para nosotros un canto de Sión!».R.
¿Cómo podíamos cantar un canto
del Señor en tierra extranjera? Si me olvidara de ti, Jerusalén, que se
paralice mi mano derecha. R.
Que la lengua se me pegue al
paladar si no me acordara de ti, si no pusiera a Jerusalén por encima de
todas mis alegrías. R.
ALELUYA Flp 3,
8-9
Aleluya. Considero todas las
cosas como desperdicio, con tal de ganar a Cristo y estar unido a él.
Aleluya.
EVANGELIO Lc 9,
57-62
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Mientras iban caminando,
alguien le dijo a Jesús: «jTe seguiré adonde
vayas!». Jesús le respondió: «Los zorros tienen
sus cuevas y las aves del cielo sus nidos, pero el Hijo del hombre no tiene
dónde reclinar la cabeza». Y dijo a otro: «Sígueme». El respondió: «Señor,
permíteme que vaya primero a enterrar ami padre». Pero Jesús le respondió:
«Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú ve a anunciar el Reino de
Dios». Otro le dijo: «Te seguiré, Señor, pero permíteme antes despedirme de
los míos». Jesús le respondió: «El que ha puesto la mano en el arado y mira
hacia atrás no sirve para el reino de Dios».
Palabra del Señor.
COMENTARIO
A
los tres interesados por ir detrás del Maestro, éste no les ofrece un
camino fácil y sin dificultades. Contrasta el entusiasmo inicial del
primero, que es hombre seguro de sí mismo, sin reparos ni complejos, con
decisión firme: «iTe seguiré!»
El segundo candidato es interpelado: «Sígueme!» A
éste no se le concede tiempo porque al Maestro le queda muy poco. El
tercero, duda. No está decidido a una entrega total, su corazón está
dividido; quiere valorar lo que deja y lo que asume; tiene miedo a
desprenderse de vínculos pasados.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, te pedimos que,
meditando en tu palabra a ejemplo de san Jerónimo, nos acerquemos con mayor
fervor a ofrecerte el sacrificio de la salvación.
Por Jesucristo nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Jer
15, 16
Cuando se presentaban tus
palabras, yo las devoraba; ellas eran mi gozo y la alegría de mi corazón,
pues tu nombre ha sido invocado sobre mí, Señor, Dios de los ejércitos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, te pedimos que el
sacramento recibido con alegría en la conmemoración de san Jerónimo,
estimule los corazones de tus fieles, para que, atentos a las enseñanzas
divinas, conozcamos el camino a seguir, y siguiéndolo, alcancemos la Vida
eterna.