La OTAN es un brazo transnacional que EE.UU. utiliza para expandir su hegemonía, una estrategia en la que Ucrania es un factor fundamental, afirma el analista internacional Hugo Moldiz.
"Para EE.UU. Ucrania es la puerta de entrada o un obstáculo para la expansión de la hegemonía estadounidense", dijo Moldiz a RT.
La OTAN como brazo transnacionalizado de EE.UU. evidentemente tiene por objetivo convertir al planeta en su teatro de operaciones
Este experto subraya que no solo Washington requiere Ucrania, sino también toda la OTAN. "La OTAN como brazo transnacionalizado de EE.UU. evidentemente tiene por objetivo convertir al planeta en su teatro de operaciones y dentro de su teatro de operaciones Ucrania es un factor fundamental para evitar la recomposición política y geopolítica de Rusia, de China y de otros actores que ellos llaman 'actores geoestratégicos de primer nivel' o actores geopolíticos pivotes", afirma Moldiz.
Putin analiza crisis ucraniana con miembros de Consejo de Seguridad
Escrito por Odalys Buscarón Ochoa
08 de mayo de 2014, 03:41Moscú, 8 mayo (PL) El presidente ruso, Vladimir Putin, analizó con miembros del Consejo de Seguridad el desarrollo de los acontecimientos en el este de Ucrania y la situación interna en ese país, en general, comentó hoy una fuente del Kremlin.
La reunión operativa del Consejo de Seguridad estuvo consagrada a Ucrania y a temas de la actualidad internacional, indicó este jueves el portavoz presidencial Dmitri Peskov.
El encuentro, al que asistieron los miembros permanentes del Consejo, representantes de todas las estructuras de fuerza, el canciller Serguei Lavrov, y líderes de ambas cámaras del Parlamento, se centró en los resultados de las pláticas celebradas la víspera entre Putin y el titular de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y presidente de Suiza, Didier Burkhalter.
Durante un intercambio en torno a la crisis ucraniana con el mandatario suizo y presidente de turno de la OSCE, Putin afirmó que el cese de la operación de castigo por parte de las autoridades de Kiev contra las regiones del este ucraniano constituye una premisa clave en la solución del conflicto interno.
Aclaró que un argumento contrario dirigido a culpar a Rusia por la situación en Ucrania es una trampa de Occidente.
En la crisis ucraniana los socios occidentales responsabilizan a Rusia después de que llevaron (ellos) la situación hacia un callejón sin salida, aseveró el mandatario en su intercambio con Burkhalter.
Reiteró que el origen del deterioro de la crisis ucraniana hay que buscarlo en quienes organizaron "la revolución" en Kiev (la ola de protestas y disturbios conocido como Maidán para los ucranianos), que derivó en golpe de Estado contra el presidente legítimo Víktor Yanukóvich, en febrero pasado.
Los responsables, acentuó Putin, son los organizadores de la toma armada del poder, que no desarman a los grupos fascistas y de extrema derecha.
Al mismo tiempo, el jefe del Kremlin, instó a los activistas del este ucraniano, partidarios de una federalización, a aplazar la realización del referendo, previsto para el 11 de este mes, con la idea de propiciar un amplio diálogo nacional a fin de zanjar el conflicto, expuso el gobernante ruso.
Consideró Putin necesario crear las condiciones para un diálogo entre el Gobierno y los representantes de todas las regiones, pero insistió en el cese inmediato de la operación militar represiva y de castigo.
Opinó asimismo que las elecciones presidenciales fijadas por las nuevas autoridades de Kiev para el 25 de mayo son un paso correcto siempre y cuando los ciudadanos del este ucraniano sean escuchados y respetados sus derechos.
Aclaró, de otro lado, que Rusia retiró sus tropas de las zonas próximas a la frontera con Ucrania y están emplazadas en los polígonos donde tienen lugar las maniobras regulares de las Fuerzas Armadas, y recomendó que ello puede verificarse por medio de los recursos de reconocimiento desde el espacio, inclusive.
Burkhalter, por su parte, comunicó a la prensa en Moscú que la OSCE en breve plazo presentará una hoja de ruta a todas las partes que rubricaron los acuerdos de Ginebra del 17 de abril, incluido un representante por Ucrania, en procura de una solución de la crisis.
Estamos dispuestos a asumir la coordinación y el intercambio en torno a la cuestión ucraniana, afirmó el presidente suizo y titular de la OSCE.
Rusia exigió hoy “el cese inmediato de las acciones militares” que llevan a cabo tropas ucranianas contra los rebeldes prorrusos en el sureste del país y denunció un nuevo intento de asalto a la ciudad de Slaviansk, bastión de los insurgentes en la región de Donetsk.
“La situación en torno a Slaviansk se ha agravado en la madrugada del 17 de mayo. Las tropas ucranianas intentaron de nuevo asaltar la ciudad con apoyo de la aviación. El fuego contra infraestructuras civiles ya se hace con artillería pesada. Existe un riesgo real para la vida de los ciudadanos pacíficos”, denuncia un comunicado de la cancillería rusa.
El autoproclamado alcalde popular de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, denunció que las fuerzas ucranianas dispararon la pasada madrugada fuego masivo de morteros y obuses contra Semionovka y destruyeron con ayuda de artillería un puente ferroviario en Andréyevka, ambas localidades en las afueras del bastión prorruso.
“Las acciones punitivas contra ciudadanos propios demuestran la hipocresía de las autoridades de Kiev, que mienten al esgrimir su presunta disposición a cumplir las cláusulas de la Declaración de Ginebra de 17 de abril y la hoja de ruta de la OSCE”, subraya la cancillería rusa.
Moscú manifestó su sorpresa ante el recrudecimiento de los combates en el norte de la región de Donetsk “precisamente hoy, cuando en Járkov se celebra la segunda mesa redonda para buscar una salida pacífica a la crisis en Ucrania”.
“Da la impresión de que las autoproclamadas autoridades ucranianas hacen uso de ese foro para camuflar sus acciones agresivas”, concluye la nota de la cancillería rusa.
Según testimonios de los vecinos de Slaviansk, citados por varios medios proucranianos, en las afueras de la ciudad se oyeron durante la madrugada potentes explosiones, los más fuertes desde el inicio de la operación antiterrorista, mientras varios cazas sobrevolaban la zona.
A su vez, el Ministerio de Defensa ucraniano informó hoy de que sus efectivos controlan la situación en torno a la localidad rebelde, rodeada completamente por las tropas de Kiev desde finales del pasado mes de abril.
“Los guerrilleros continúan empleando tácticas de grupos terroristas”, denunció la cartera ucraniana, que se quejó de que los insurgentes disparan contra los soldados desde las viviendas residenciales para provocar la respuesta de los militares y con ello, víctimas entre la población civil.
El petróleo y el gas se encuentran cada vez con más frecuencia en países que no están dispuestos a ponerse de rodillas ante los mandatos de la Casa Blanca.
Millonario estadounidense reconoce que contribuyó a derrocar a Yanukóvich
George Soros ha financiado grupos sediciosos desde la década de los 80(Foto:Archivo)
George Soros reconoció este miércoles su responsabilidad en la conformación de una fundación en Ucrania, con fines de contribuir al derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich y a la toma del poder por una junta con el aval del Departamento de Estado.
El multimillonario estadounidense George Soros reconoció este miércoles su responsabilidad en la conformación de una fundación en Ucrania, con fines de contribuir al derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich y a la toma del poder por una junta con el aval del Departamento de Estado norteamericano.
"Creé una fundación en Ucrania antes de que se independizara de Rusia. Y la fundación ha estado funcionando desde entonces y ha jugado un papel importante en los acontecimientos actuales", respondió Soros durante una entrevista.
Soros, apoyó y financió en el año 1989 actividades de disidentes y grupos de la llamada sociedad civil en el este de Europa, Polonia y la República Checa
El portal digital InfoWars.com afirma que la mayoría de los medios comerciales norteamericanos no informan que Soros trabajó estrechamente con instituciones como la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (Usaid), y otras organizaciones con el fin de incitar "revoluciones de colores" en Europa Oriental y Asia Central tras la disolución de la Unión Soviética, en 1991.
Muchos de los participantes en las manifestaciones en Kiev eran miembros de organizaciones no gubernamentales preparados en numerosos talleres y conferencias patrocinados por la International Renaissance Foundation (IRF, por su sigla en inglés ), publicó por su parte el portal The New American.
La IRF, fundada y financiada por el multimillonario norteamericano, afirma que ha hecho "más que cualquier otra organización para la transformación democrática de Ucrania".
Además, indica InfoWars, la operación militar de Kiev con su carácter violento, incluyendo el incendio en la Casa de los Sindicatos en Odesa con saldo de decenas de muertes, también se puede atribuir directamente al activismo de George Soros y de diversas organizaciones no gubernamentales.
Una ola de violencia se mantiene activa en Ucrania desde el pasado 21 de noviembre de 2013, luego que cientos manifestantes tomaran las calles para protestar contra la decisión del presidente de este país, Victor Yanukóvich, quien prefirió declinar a la posibilidad de establecer acercamientos con la Unión Europea (UE) mediante el proyecto de Asociación Oriental que lleva a cabo el mencionado organismo internacional.
Luego, la destitución de Yanukóvich el 22 de febrero pasado por parte del Parlamento crearon un ambiente de inestabilidad política en la nación europea, así como procesos políticos que constituyeron reveses para Washington, como el referendo de Crimea y su adhesión a Rusia y la declaración de independencia de las regiones de Donetsk y Lugansk.
Diversos académicos y analistas coinciden en que Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) utilizan a Ucrania para crear un conflicto contra Rusia y volver a la confrontación que caracterizó la época de la Guerra Fría y la entonces política de contención contra el Pacto de Varsovia del bloque comunista del Este de Europa
CNN muestra los daños en Slaviansk tras los ataques de Kiev
La cadena estadounidense CNN reconoció en un reciente reportaje que las fuerzas gubernamentales de Ucrania están causando daños materiales graves en la ciudad de Slaviansk.
EE.UU. todavía no ha encontrado la manera de abandonar el uso de motores de cohetes rusos para el lanzamiento de sus satélites militares, pero está buscando opciones, dijo el jefe del programa del Pentágono para la compra de armas, Frank Kendall.
"Estamos motivados para eliminar la dependencia que tenemos, si somos capaces de hacerlo. Nos gustaría hacerlo. Pero todavía no hemos descubierto exactamente cómo lograrlo", indicó Kendall, citado por la agencia Reuters.
Varios comités del Congreso de EE.UU. ya han añadido fondos adicionales para el presupuesto militar del año fiscal 2015 para empezar a trabajar en un nuevo motor de cohete de producción nacional.
De este modo, los estadounidenses buscan eliminar la actual dependencia de los motores RD-180 de fabricación rusa utilizados para el lanzamiento de satélites militares de United Launch Alliance, empresa conjunta de Boeing y Lockheed Martin.
Algunos expertos estiman que la construcción de un nuevo motor de cohete de fabricación estadounidense le costaría al Pentágono alrededor de 1.000 millones de dólares y podría tardar unos cinco años en completarse.
Rusia, que hizo todo lo posible por impedir que Ucrania firmara el tratado de Asociación con la Unión Europea, acogió con críticas y advertencias, pero también con pragmatismo, el simbólico gesto por el que el presidente Petro Poroshenko asumió la responsabilidad por una política de integración a Occidente que el Kremlin ve como incompatible con su propio proyecto de integración euroasiática.
“El golpe de Estado anticonstitucional en Kiev y los intentos de imponer al pueblo ucranio un dilema artificial entre Europa y Rusia empujaron a la sociedad al cisma y a la dolorosa confrontación interna”, dijo ayer el presidente Vladímir Putin durante la presentación de credenciales de 14 nuevos embajadores, entre ellos el de Alemania.
“Ucrania nos preocupa de forma especial y estamos por el cese total del derramamiento de sangre en todo el territorio del conflicto y especialmente a lo largo de nuestra frontera”, señaló el dirigente ruso.
Kiev prolonga la tregua con los prorrusos otras 72 horas
AGENCIAS, Kiev
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha extendido otras 72 horas la tregua alcanzada con los separatistas prorrusos y que cumplía su plazo este viernes. A su vuelta de la cumbre de la Unión Europea en Bruselas y tras consultar con responsables de Defensa, Poroshenko ha decidido que el cese de las hostilidades llegará hasta las diez de la noche del próximo 30 de junio.
Representantes del Gobierno de Kiev, de las regiones autoproclamadas independientes de Donetsk, Lugansk y enviados de Rusia alcanzaron el primer acuerdo en una reunión sin precedentes celebrada el pasado lunes en Donetsk bajo los auspicios de la Organización de Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE).
Aunque el pacto se ha visto sacudido por nuevas refriegas en el campo de batalla, ambas partes han expresado su objetivo de alcanzar una solución pacífica al conflicto en el este de Ucrania.
El Kremlin no se había pronunciado anoche sobre las escuetas y precisas reivindicaciones del Consejo Europeo, que ha dado hasta el lunes para llegar a un acuerdo sobre un “mecanismo de verificación controlado por la OSCE para el alto el fuego y el control eficaz de la frontera”. “Lo más importante”, dijo Putin en la ceremonia con los nuevos embajadores, es “asegurar un régimen de alto el fuego a largo plazo como condición necesaria para que se mantengan conversaciones sustanciales entre las autoridades de Kiev y los representantes de las regiones del sureste. Intentaremos sinceramente ayudar en ese proceso pacífico”.
En Donetsk, el grupo trilateral formado por representantes de las autoridades ucranias y de Rusia mantuvieron la segunda ronda de consultas con los separatistas prorrusos bajo la égida de la OSCE. En ese marco, el primer ministro de la autoproclamada República Popular de Donetsk, Aleksandr Borodai, invitó a los observadores de la OSCE a visitar todos los puntos de confrontación armada en el sureste de Ucrania, según informó la agencia rusa Itar-Tass. Borodai dijo no estar de acuerdo con que los ucranios volvieran a los puestos fronterizos mencionados por los europeos, pero manifestó que invitaban a la misión de la OSCE a que ejerciera como observadora en esos puestos y en todos “los puntos de conflicto armado que puedan abarcar”. “Esperamos a los observadores de la OSCE y estamos dispuestos a ayudar a que su misión sea lo más segura posible”, dijo. Las partes acordaron prolongar hasta el próximo lunes la tregua que expiraba ayer.
Coincidiendo con la firma de los tratados de asociación de Ucrania, Georgia y Moldavia, el Ministerio de Exteriores difundió una “edición renovada” de un libro blanco en el que se acusa a las autoridades ucranias de “violaciones sistemáticas” y “transgresiones” de los principios de derechos humanos en las zonas conflictivas del sureste de Ucrania. El libro blanco, de 93 páginas, recoge el periodo de abril a mayo. En su primera versión tenía 81 y recogía el periodo de noviembre a marzo.
Con sentido pragmático, el Ministerio de Exteriores ruso emitió un comentario en el que se afirma que Moscú espera que los socios europeos tengan un “enfoque responsable y constructivo” que ayude a eliminar “la preocupación real y no inventada” de Rusia por la firma del tratado de asociación. Rusia se prepara para un encuentro trilateral con Ucrania y la UE a mediados de julio. Según Itar-Tass, el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, espera que el nuevo borrador de Constitución ucrania no sea “otro ultimátum” al sudeste del país.
Por su parte, Vladímir Chizhov, el representante de Rusia en la UE, manifestó que la asociación con la UE no compensa a Ucrania de las pérdidas que se derivarán de las reformas económicas. Los problemas que esperan a Ucrania, Moldavia y Georgia, los tres países firmantes, “solo pueden empeorar la situación”, dijo el funcionario.
La firma de los acuerdos de Ucrania, Georgia y Moldavia con la UE supone “un fuerte golpe en el terreno social y económico de estos países” y les “priva de su soberanía nacional”, según el vicejefe de la Duma Estatal, Serguéi Zhelesniak. En el caso de Ucrania el acuerdo “profundizará el abismo entre los partidarios y detractores de la eurointegración, incluida la industria del sureste”. “Rusia se verá obligada a defender su economía y revisar las condiciones de la colaboración económica y comercial con Ucrania, a consecuencia de lo cual la economía ucrania puede perder hasta 40.000 millones de dólares en un año”, dijo el parlamentario.