Ingredientes naturales que podemos encontrar en el plato y que se han incorporado en la cosmética. De una forma u otra sirven especialmente para cuidar tu piel.
Te sugerimos ingredientes que puedes encontrar facilmente, para cuidarte por dentro y por fuera; té verde, uvas, aguacate, zanahoria, germen de trigo.
Uvas. Antiarrugas y antifatiga
Además de utilizarlas para dar la bienvenida al nuevo año, merece la pena absar de ellas en su temporada -finales de verano y principios de otoño- y recuperar la tradición de las uvas pasas de invierno. En estas últimas encontrarás todas las ventajas nutritivas de las uvas, además de ser unas ''píldoras'' maravillosas contra la fatiga.
La cosmética ha centrado su atención en sus polifenoles para limitar los efectos de los radicales libres.
Zanahoria. Protege y ayuda al bronceado
La zanahoria ha sido tradicionalmente un ingrediente esencial de los tratamientos caseros para la piel. La zanahoria contiene mucho betacaroteno o provitamina A, que actúa específicamente potenciando la acción de salvaguarda de la melanina, la que te pone morena. El betacaroteno es antioxidante y al proteger del daño de los ultravioletas, previene el deterioro de la piel y la aparición de las arrugas.
Germen de trigo. Par frenar el envejecimiento
El aceite de germen de trigo tiene la cualidad de controlar el metabolismo celular, de forma que la piel no se reseca, conservándose elástica y tersa a su contacto. Del germen de trigo también es conocido que es muy rico en vitamina E, que actúa como antioxidante. Hoy el germen de trigo forma parte de muchos productos de belleza, desde las cremas para el rostro hasta las de cuidado corporal.
Aguacate. Estimula la producción de colágeno
El aceite de aguacate forma parte de muchos productos cosméticos porque a su riqueza en vitaminas específicas para la piel (A y E) añade otros componentes -entre ellos ácidos grasos insaturados- que estimulan la producción de colágeno, protegen la epidermis y aumentan su elasticidad.
Té Verde. Antioxidante
Principalmente por sus polifenoles, de marcado efecto antioxidante. Al mismo tiempo su infusión, aplicada sobre la piel, tiene efectos relajantes, astringentes y refrescantes. Tomada, ayuda a eliminar líquidos. Una vez frías, aprovecha las bolsitas de té para ponerlas sobre los ojos: te ayudarán a prevenir las patas de gallo.
La cosmética ha centrado su atención en sus polifenoles para limitar los efectos de los radicales libres.
Zanahoria. Protege y ayuda al bronceado
La zanahoria ha sido tradicionalmente un ingrediente esencial de los tratamientos caseros para la piel. La zanahoria contiene mucho betacaroteno o provitamina A, que actúa específicamente potenciando la acción de salvaguarda de la melanina, la que te pone morena. El betacaroteno es antioxidante y al proteger del daño de los ultravioletas, previene el deterioro de la piel y la aparición de las arrugas.
Germen de trigo. Par frenar el envejecimiento
El aceite de germen de trigo tiene la cualidad de controlar el metabolismo celular, de forma que la piel no se reseca, conservándose elástica y tersa a su contacto. Del germen de trigo también es conocido que es muy rico en vitamina E, que actúa como antioxidante. Hoy el germen de trigo forma parte de muchos productos de belleza, desde las cremas para el rostro hasta las de cuidado corporal.
Aguacate. Estimula la producción de colágeno
El aceite de aguacate forma parte de muchos productos cosméticos porque a su riqueza en vitaminas específicas para la piel (A y E) añade otros componentes -entre ellos ácidos grasos insaturados- que estimulan la producción de colágeno, protegen la epidermis y aumentan su elasticidad.
Té Verde. Antioxidante
Principalmente por sus polifenoles, de marcado efecto antioxidante. Al mismo tiempo su infusión, aplicada sobre la piel, tiene efectos relajantes, astringentes y refrescantes. Tomada, ayuda a eliminar líquidos. Una vez frías, aprovecha las bolsitas de té para ponerlas sobre los ojos: te ayudarán a prevenir las patas de gallo.