Mi alma yace plácidamente al compás del martillo que golpea mi pecho que retumba en el túnel de mi cuerpo. Ni siquiera me deja pensar, allí postrado, ya no hablo, el tiempo y la vida pasan a mi lado y yo en una urna de cristal sin poder salir, ni opinar y cuando todo se acabe el sueño terminará y por fin reinarán en el mundo cual desvarío y la paranoia algunos más que ahora.
Lo he intentado todo, ya no puedo más, he pasado tanto tiempo deseándolo y al fin casi es un alivio, pero no es posible tenerte tan dentro, pues herirme has conseguido. Aquel que crees conocer a fondo ha resultado ser un desconocido, nunca nada en común, pero tú eres así yo no soy el problema eres tú, ¿quién arruina mi mente?
Paseando por la calle cualquier rincón me recuerda y prefiero morirme, no podría utilizar mis sentimientos y quisiera no pensar más de un segundo en ti.
Colaboración de Neskina88
España