LIDERES EN MISIONES ESPECIALES PARTE TERCERA
IV.- ASIGNACIÓN DE RECURSOS MATERIALES.
Comprarás, pues, diligentemente con este dinero becerros, carneros y corderos, con sus ofrendas y sus libaciones, y los ofrecerás sobre el altar de la casa de vuestro Dios, la cual está en Jerusalén. 18 Y lo que a ti y a tus hermanos os parezca hacer de la otra plata y oro, hacedlo conforme a la voluntad de vuestro Dios.
Los utensilios que te son entregados para el servicio de la casa de tu Dios, los restituirás delante de Dios en Jerusalén. 20 Y todo lo que se requiere para la casa de tu Dios, que te sea necesario dar, lo darás de la casa de los tesoros del rey. Esdras 7:17-20
El rey no sólo pensó en finanzas, sino también en recursos materiales. Muebles y utensilios. Me gusta leer las palabras:
Y comprarás diligentemente y lo que a ti, a tus hermanos os parezca hacer con la plata hacedlo conforme a la voluntad de Dios.
Dos frenos importantes en las manos de Esdras fueron la Diligencia y La Voluntad de Dios. En las misiones especiales que ya están llegando hasta nosotros, Dios quiere que mantengamos los mismos dos frenos en la inversión de recursos para la adquisición de recursos materiales. DILIGENCIA Y CONFORME A LA VOLUNTAD DE DIOS.
Recursos materiales son necesarios en la realización de las misiones encomendadas. En nuestro corazón necesitarán estar estos dos frenos.
V.- ASIGNACIÓN DE ÓRDENES ESPECIALES.
Y por mí, Artajerjes rey, es dada orden a todos los tesoreros que están al otro lado del río, que todo lo que os pida el sacerdote Esdras, escriba de la ley del Dios del cielo, se le conceda prontamente, hasta cien talentos de plata, cien coros de trigo, cien batos de vino, y cien batos de aceite; y sal sin medida. Todo lo que es mandado por el Dios del cielo, sea hecho prontamente para la casa del Dios del cielo; pues, ¿por qué habría de ser su ira contra el reino del rey y de sus hijos? Y a vosotros os hacemos saber que a todos los sacerdotes y levitas, cantores, porteros, sirvientes del templo y ministros de la casa de Dios, ninguno podrá imponerles tributo, contribución, ni renta. Esdras 7:21-24.
Cuando Dios encuentra un corazón humilde, no contaminado, puro y apartado en el servicio genuino para El, emite órdenes especiales. Son órdenes que impresionan. Ahora, es importante notar que esas órdenes no llegan en un vacío.
Están sustentadas en un fundamento muy sólido. Es el fundamento de la confianza. Por ello, es importante el Renuevo de Plenitud Ministerial de la Confianza. Si miramos ciertas palabras en el pasaje anterior, notaremos que ésas órdenes están sustentadas en la roza de la confianza. La orden para los tesoreros es que todo lo que pida Esdras sea dado prontamente. Dicho en otras palabras, que no haya tanta burocracia. Ahora, a quién se le despeja el camino de la burocracia? Al que inspira confianza.
Sin embargo, hay límite. No nos equivoquemos. Dios sabe que como humanos necesitamos un límite, porque el corazón humano sin límite es como potro desbocado rumbo a un despeñadero. Sin embargo, el límite no es estrecho. Miremos:
Hasta cien talentos de plata: Cada talento en Babilonia era de unos 60 Kilos. Quiere decir el límite de talentos que serían entregados a Esdras era el equivalente de 6000 kilos de plata.
Cien coros de trigo. Un equivalente a 22.000 litros.
Cien batos de Vino. 2.200 litros de vino.
Cien batos de aceite. 2.200 litros de aceite.
Curiosamente, hay en la lista algo que no tiene límite según el Rey. Dijo: Sal sin medida.
Sabemos la importancia de la sal. Una de las propiedades de la sal es que impide que algo se corrompa. Por ello el Señor dijo:
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.”
Como líderes del nuevo milenio, necesitamos muchísima sal. Con los recursos que Dios nos pone en las manos, que no falte la sal.
Leonardo Da Vinci pintó el famoso cuadro de la santa cena. Cuando vemos una copia del original podríamos ver que Da Vinci sabía el valor de la sal en los tiempos de Cristo. Judas volteó con su brazo el tarro de sal, y la sal se ve en la pintura derramada en la mesa. Es un símbolo de la pérdida de confianza y lealtad. Amados líderes, que no derramemos la sal con nuestras actitudes y nuestro corazón torcido.
El rey terminó de aclarar que no serían colocados tributos ni rentas a estos hombres con misiones especiales. Reconocemos que al no contar con recursos como los que Dios dio a Esdras, cuántas veces como pastores hemos cargado al pueblo con tributos, ofrendas, contribuciones y cargas que lejos de liberar a la Iglesia la sobrecargan?. Si somos fieles en lo que Dios nos encomienda, liberaremos al pueblo de tributos y rentas. Dios dará los recursos si hay Renuevo de Plenitud Ministerial en tu vida que aumenta la confianza.
VI.- ASIGNACIÓN ESPECIAL DE RECURSOS HUMANOS.
Y tú, Esdras, conforme a la sabiduría que tienes de tu Dios, pon jueces y gobernadores que gobiernen a todo el pueblo que está al otro lado del río, a todos los que conocen las leyes de tu Dios; y al que no las conoce, le enseñarás. Esdras 7:25
La Confianza se extendió mucho más allá de lo material o lo financiero. Llegó hasta lo más importante. Los recursos humanos.
Conforme a la sabiduría que tienes de Dios, dijo el rey. Ya estás usando la sabiduría que Dios te ha dado?.
Las misiones especiales de Dios exigen personas, pero personas adecuadas para los ministerios adecuados.
Nos corresponde a nosotros colocar esas personas. Dios es quien nos los va a dar. Él nos sorprenderá con la gente que necesitamos.
Dios enviará los expertos y los no expertos. A los no expertos los enseñaremos y a los expertos los liberaremos para que puedan ministrar al 100 % los dones y las capacidades dadas por Dios.
Para este nuevo milenio, no hay lugar para aquellos que han limitado el ministerio de otro. Somos los propulsores de ministerios.
Somos el trampolín para que otros puedan saltar bien alto y caer en la piscina de la liberación ministerial con elegancia. ¡ Aleluya!.