Pude observar varias cosas: !. Que prácticamente todos pasan por mi juicio la mayor parte del tiempo: Es decir, tan sólo de escuchar o ver a alguien ya me estoy formulando un juicio al respecto. Generalmente de desaprobación. 2. Los juicios siempre hacen alusión a mí, de alguna manera: a una cualidad o defecto que admito tener, o a alguna cualidad o defecto que se que tengo pero que me repito constantemente que "yo no soy así". Por ejemplo, hablarle con rudeza a mis hijos, llegar tarde, perder el tiempo.
3. No observé un "yo que juzga", sino diferentes yoes emitiendo juicios en diferentes momentos. De modo que algo que en un momento juzqué con desaprobación, en otro momento es otro "yo" al que escucho y su juicio puede ser menos severo. Así, que mi hija no haga su quehacer es terrible para el "yo" que se está recriminando lo mismo, y al otro día no es tan grave para el "yo" de mamá cool.
4. Muchas de mis observaciones no son objetivas, las acompaño inmediatamente de algún juicio con su respectiva emoción negativa, y la consecuente identificación.
5. Me es muy fácil asociar el concepto del "lado oscuro en nosotros, aquel lado que no admitimos en nuestra conciencia y al mismo tiempo conocemos e ignoramos." a mi propia experiencia, como ver y no ver al mismo tiempo. Y cuando logro aceptar que me estoy engañando, es una sensación curiosa, porque no es una novedad esa actitud o pensamiento que antes no admitía, lo nuevo es aceptar que no es real ese concepto de mí.
6. También observé el efecto de los juicios que emiten sobre mí. Resulta que identifiqué en mi cuerpo una opresión, a la altura de las costillas, acompañada de ira y la idea de que "yo no soy así". Entre más fuerte experimentaba la emoción era que más contradecía a alguna falsa imagen de mí, y más correspondía a la realidad, por ejemplo que me dijeran que no vivo plenamente. ¡Y es así! ¿Cómo vivir plenamente si no hay unidad en mí? pero como generalmente me pienso como una, cuando me dijeron eso, ese juicio que hicieron sobre mí, despertó coraje í, y el impulso de responder, "claro que si vivo plenamente, tu cómo vas a saber del trabajo que yo hago conmigo"...
Durante estas semanas de práctica
de la tarea, me encontré envuelta en varias situaciones en donde la crítica
destructiva venia acompañada con unasensación de que lo que estaba criticando en la mayoría de las ocasiones
estaba presente en mi, que tal persona no se organiza, me exige,pero como me va ha exigir si ella no
sabe. En fin, muchas de las situaciones van de la mano con un desacuerdo de la
otra persona hacia mi forma de pensar o mis acciones. Una emoción negativa me
lleva a otras muchas emociones negativas. Y me di cuenta que una vez que
empiezo no paro, tal vez mi boca lo haga pero mi cabeza sigue con la misma
cantaleta. Incluso pude observar como al criticar trato de minimizar, a la
persona que critico y lo hago ante otras personas. Me sucedió una ocasión, el
deseo de no hablar de una persona estaba presente, pero solo me duro unos
minutos; no tarde en soltar la lengua. Hay criticas mas simples, si esta gorda,
si esta flaca, etc. Pero finalmente critica que me consume considerable energía.
Hay una colega en mi trabajo que me desespera. Es increiblemente dispersa, insegura, usa formas amables para esconder sus carencias, para protejerse, para ganar el cobijo de los demás... Es dulce, pero, arropada en esa dulzura, puede ser agresiva y mordaz ... Y a la vez es luchona, comprometida... Atrás de todos sus mecanismos de sobrevivencia, palpo con claridad su miedo enorme a fracasar, a no ser admitida, a no lograr... Me doy cuenta que su sentirse vulnerable, que su no saber por donde conducirse, que su miedo... me resuenan internamente.
Hay un tipo de crítica destructiva que ejerzo, que no es verbal. Puede ser ante una opinión o algún evento que no comparto, pero al cual le agrego un juicio. Me sorprendió observar que la uso con frecuencia, y que aún sin pronuncia una sola palabra (ni hablada ni mental), puede estar tan cargada de crítica. También noté que con el Trabajo, mucha de mi crítica ha ido desapareciendo, siendo su lugar ocupado por la consideración externa.
La tarea de los alimentos fue maravillosa. La había practicado previamente, desde el seminario, pero la mayoría de veces no lograba recordarla a tiempo, es decir, antes de empezar a comer. Ahora, realizandola en grupo, pasó al revés, la mayoría de veces sí la recordé (¿efecto de la energía diferente que se genera en un grupo?). Hubo ocasiones en q caía como en una cascada de agradecimientos a cada uno (o casi a cada uno) de los ingredientes de la comida que estaba tomando, que se despertaba un sentimiento intenso de agradecimiento y de asombro por todos los eventos que se concatenan para que ocurra ese fenomeno tan cotidiano que es sentarse a la mesa a comer. Además, mmmm..., la comida sabe más sabrosa, el paladar aprecia mejor que el sabor global de la comida es la mezcla de diferentes sabores, todo esto mientras la atención está activa.
Pude observar que critico aquellas personas que creo estan mal y que no concuerdan conmigo en ideas; esto se me da mucho en la escula en la television en la radio en la internent... ¿como puede ser posiblle? ¿que no nota la situacion del pais? ¿no puede ver como el mundo se esta viniendo abajo?...que personas tan tontas... etc etc!. Asi se viene todo un vomito verbal por todos ellos, pero ha sido muy curioso en estas semanas ha sido menos como que he solo soltado el aire para no darle fuerzas a las palabras.
No leí los textos de ayuda, pero con la tarea de la observación de la critica destructiva me doy cuenta de que critico a los demas mas de lo que me imaginaba. Aunque me quedo callado, en me interior critico a los demas hasta por cosas insignificantes. Supuestamente me caen mal las personas que juzgan y critican a los demas, y vio que yo tambien lo hago.
Tengo un yo que está cansado de estar en el Curso de Crecimiento, cansado de estar fijando tanto en mis defectos, cansado de no ver algo de los pocos calidades buenos que supuestamente tengo, cansado porque este yo no ve un crecimiento. Esta yo no quiere ver y aceptar que tan negativo es en realidad. Trato de hacerle caso al yo que entiende que el crecimiento no es instantaneo, y que la practica de la observacion es un herramienta impotante para un posible crecimiento verdadero que tal vez vendra despues.
enrealida con esta tarea se me a salido mas lo criticona y pues puedo ver claramente que lo que mas critico es lo que mas tengo puedo ver mi critica mental asi la gente que quiero y a la gente comun , primero llega ala mente y luego sin poder hacer nada abrir la bocota, y pues mi chamba hasta ahorita es tratando de cacharme ala hora que se sale la otra "yo" la criticona y verdaderamente es dificil!!! saludos a todos
a veces me parece que la tarea de la semana no me queda, es decir, que en ésta semana en particular, no me está saliendo tanto el rasgo que tenemos que observar ... y luego ... zas! me encuentro en medio de una crítica destructiva, ya sea a mi hermana o a mi hijo (los dos con quienes me he sacado de quicio en este periodo). En medio de mi berrinche de enojo "justificado", de repente me acuerdo de la tarea y me pregunto "qué tengo yo de esa cualidad que estoy criticando?" y como arte de magia se derrumba toda la pantalla que estaba mostrando las justificaciones que tenía para estar enojada ... se rompe como un cristal y cae a mi lado, y de repente me encontraba sin enojo pero todavia temblando por el efecto del berrinche en mi cuerpo, apenas vislumbrando donde se encuentra en mi la misma cualidad que criticaba con tanto fervor. Una sensación en mi cuerpo confirmaba que sí, que ahí en el bosque de mi interior, habitan esas cualidades ... eso me tranquilizaba y me centraba mucho, porque el enojo y la rabia que se estaban apoderando de mi unos minutos antes me alejan TANTO de mi sensación, me ponen en la cabeza lógica. Una vez cayéndose el teatro de la lógica, cuando encuentro que puedo respirar de nuevo, me siento mucho mejor. gracias gracias por la oportunidad de hacer esta práctica.
en el agradecimiento de la comida, la verdad es que solo me acordé dos veces. Las demás veces, me acordaba 5 minutos antes de comer, y luego se me olvidaba hasta después de comer ... pero esas dos veces, el tomar el tiempo de pensar en los elementos de mi comida me hacía tranquilizarme y enfocarme en la comida, en lugar de estar pensando en tantas otras cosas mientras comía.
Para la crítica destructiva observé que gran parte de lo que critico son actitudes de las personas que yo no apruebo o que hacen cosas que a mi no me gustan. Critico aquello que no se acomoda a mi mode de pensar de como deberían de ser las cosas.
Observando mi reacción interna vi como se ajustaba lo que criticaba en mi y para mi sorpresa vi que en mi forma de ser también existen los rasgos que critico.
Continuando con la observación pude ver que la gran mayoría de las personas somos iguales en nuestra forma de sentir y que criticamos siempre lo mismo. Criticamos a los de afuera sin saber que internamente somo iguales, no hay diferencias.
La diferencia debería de existir en mi al observar ls criticas y tratar de darle un nuevo camino a mis formas mecánicas de reaccionar.
Soy una persona que hace juicios de todo y por todo, mi falta personalidad en acción. El primer texto de apoyo me encanto y aparte que cada vez que iba a emitir un juicio me acordaba de lo que había leido y la vez detectarme en mí sí yo lo tenía esa acción a criticar en otros. Me doy cuenta que no acepto en otros lo que no me gusta en mi, en algunos casos me cuesta trabajo reconocerlo pero así es. En dos ocasiones no pude parar la critica o juzgar una de ellas fue cuando mi amiga me estaba comentando de un problema persistente que le cuesta trabajo salir de el que ya esta consciente que la enferma etc. pero que no puedo salir de el, al estar con ella yo la entiendo porque he vivido situaciones similares, pero después empieza mi mente a juzgarla y a criticarle como que no se quiere y que no hace nada por salir estas entre otras cosas tambien negativas que por ende yo tambien tengo y la otra ocasión fue con un compañero de trabajo.
si hace unas semanas me hubieran preguntado si criticaba habitualmente, mi respuesta hubiera sido: "no mucho". Hoy puedo decir que soy jueza andante. He observado que mentalmente estoy criticando siempre, cosa que no me satisface en absoluto, mas que nada porque ahora no sé que hacer con ello o como cambiar este proceso ya!!!!
Lo que he podido observar es que gracias a la ayuda de Dídac (mi hijo) he dejado de hacer, aunque no totalmente, esa parte de critica con la idea de ayudar a la otra persona hablando con ella. Ahora me limito a hacerlo mentalmente o hablando con otra compañera que no se que es peor!
Práctica realizada del 15 al 24 de Noviembre del 2010
¿Este defecto o rasgo que crítico, lo tengo yo?
Esta pregunta la he tenido muy presente durante estos diez días de observación.
No puedo ver algo que no esté en mí.
Modificar por medio de la conciencia.
Cada acto de conciencia no sólo modifica el futuro sino también el pasado.
Aceptación, de nuevo ver algo de uno mismo te permite tragar la píldora.
Le dije pesado a un compañero, yo también soy pesada para alguien, como mi amigo lo fue para mí. Y no fui lo suficiente paciente con él o no le dije con claridad que era suficiente.
Hubo otro compañero que me hizo ver que hay veces que ellos son pacientes conmigo. En este momento este tercer amigo fue el que me hizo comprender, me ayudó a ver la tercera fuerza, la conciliadora y a ponerme en la piel del otro.
Tragué la píldora con gradecimiento.
“Solo vemos la mitad de las cosas”, de nuevo el concepto. Poder ver con lo que estoy de acuerdo y a la vez con lo que estoy en desacuerdo de mi misma. Duele verlo pero bienvenido sea.
Una vez que un tope es destruido ya no puede volver a formarse…
Entonces le será mostrado qué es aquello sobre lo cual es preciso trabajar y que debe ser transformado…
Despertar el Centro Emocional. Cuando el Centro Emocional es despertado cambia toda la perspectiva de uno mismo.
Tiempo atrás encontré los Mandamientos de Gurdjieff y en concreto he tenido presentes estos dos para estos diez días de observación:
23. No emitas juicios ni criticas cuando desconozcas la mayor parte de los hechos.
68. Cuando te pregunten tu opinión sobre algo o alguien, di sólo sus cualidades.
Me han servido de inspiración y sobretodo para evitar dejarme arrastrar cuando nos reunimos algunos amigos y hablamos de los problemas de la empresa y de algunas personas que forman parte de ella y que la dirigen.
En esta ocasión se nos ha propuesto que utilicemos la observación de las críticas que realizamos, no solo para eliminarlas de nuestro comportamiento, sino también para descubrir y hacernos conscientes de aquello que no nos gusta de nosotros mismos.
Entre otras cosas he observado que es más fácil dominar la palabra que el pensamiento. Pero ciertamente al darme cuenta de que estoy a punto de iniciar una crítica primero intento no criticar y mentalmente también intento cambiar de actitud procurando no alimentar los pensamientos de la crítica. No quiere decir que uno se vuelva un buda en una semana, pero he evitado algunas ocasiones y también al no participar en la crítica que hacen otras personas, no he contribuido a que los otros continuasen.
Detectar los defectos que critico en mi mismo es más difícil. Requiere más nivel de observación y requiere que me pregunte ¿porqué me molesta o me preocupa eso que critico? Y me he dado cuenta que en muchas críticas proyecto mis temores y complejos, por ejemplo cuando critico a mis hijos para evitar que cometan los mismos errores que yo, o cuando critico a alguien que hace algo que en el fondo yo no me atrevería a hacer.
Aunque queda mucho camino por recorrer, por lo menos estoy empezando a tener herramientas de trabajo, la observación. Lo difícil es acordarse de utilizarla. Para recordarlo, trato de cultivar un firme propósito y por otra parte la existencia de este grupo y la obligación de presentar informes, me recuerdan el trabajo y el rumbo.
La mayoría de mis críticas o juicios hacia los demás están relacionados con la mecanicidad. Observo con mucha facilidad la mecanicidad en el otro pero, evidentemente, me cuesta más verla en mí (ver la paja en el ojo ajeno pero no ver la viga en el propio) En este sentido, considero más correcto cuando observar la mecanicidad tanto en uno mismo como en los demás me lleva a considerarme en situación de igualdad (soy tan mecánico como los demás), pero si conlleva sensación de superioridad (son más mecánicos que yo) es una perspectiva totalmente errónea y contraproducente. Considero que el trabajo correcto está libre de juicios, libre de proyecciones hacia los demás, libre de consideración interna y absolutamente volcado hacia la consideración externa. En este sentido, los juicios o críticas no ayudan a los demás. Otra cosa distinta sería, en el contexto de un grupo de Trabajo, las "fotos", o devoluciones/observaciones objetivas que ayudan al otro a percartarse de sus mecanicidades, eso sí que está más cercano a la consideración externa ( y además existe un acuerdo en el grupo de proporcionar esa "fotos" a los demás para ayudarles, siempre desde una posición neutral y objetiva)
Esta vez ha sido dificil acabar el tema, me ha llevado mas tiempo y ha resultado un descubrimiento personal ver que lo que critico duramente (en elgún caso) es a la vez lo que practico...la pereza, el desorden, el aplazar para mañana, el aletargamiento improductivo...no escuchar...juzgar... yo...que me creia diferente...jajaja. Me he preguntado si ese defecto lo tengo yo cada vez que me observo criticando, aunque sea interiormente a alguien. La mayoria de las veces...sí.
Los textos de apoyo me han parecido muy buenos, necesario releerlos de vez en cuando, para salir del aletargamiento, para observar la otra parte, para llegar al fondo y subir. Mucho trabajo queda por hacer...
La crítica expresada o pensada ha formado parte de mi vida en los diversos aspectos con la intención (desde mi punto de vista “para que las cosas salgan mejor”) y observándome cada día en el momento de la crítica que ese enjuiciamiento era hacia mi, además advertí que involucraba mi falta de tolerancia; creo que coincidimos muchos en….es un camino largo que recorrer.