Esta es una historia de amor como pocas. Una historia fabulosa acerca del poder que ejerce el amor sobre algunos seres que hacen lo que para otros resulta imposible como resultado de ese maravilloso sentimiento. Esta es la historia de un amor imposible al menos para los protagonistas y de cómo la fuerza extraordinaria del amor hizo que los obstáculos en apariencia insalvables fueran superados. Mi nombre es Kalimuddin pero todos me conocen como “kali” y soy cuidador de elefantes en circo localizado en las afueras de Nueva Delhi, India. Fui testigo de los increíbles acontecimientos que allí acontecieron. De todos los elefantes que están bajo mi cuidado, mi favorito o debo decir mi favorita porque es una elefanta que responde al nombre de Savitry que significa “diosa de las flores”.Savitry es mi favorita por que es una hembra monumental y a pesar de su grandeza, Savitry es la mas tierna, dulce, y dócil de las criaturas. Savitry siempre me saluda afectuosa, levantando su trompa en la mañana cuando le llevo su comida y hasta parece que me sonríe cada vez que la baño, porque le encanta el agua. Últimamente yo estaba notando un comportamiento un tanto inusual en el comportamiento de Savitry, su estado de ánimo en las últimas semanas se había tornado un tanto sombrío. Ella que por lo general estaba alegre y campechana se había tornado triste y mustia de un tiempo a esta parte. Al principio yo no sabia lo que estaba pasando, pero luego descubrí el motivo de su congoja. Resulta ser que cerca del campamento se había estado paseando en el último tiempo una pequeña manada de elefantes salvajes. Estos estaban siendo atraídos por las aguas refrescantes de un lago adyacente al campamento. Era la primera vez que Savitry podía observar a otros miembros de su propia especie en su estado natural de libertad. Ella los veía a lo lejos revoloteando en el agua del lago y jugando disfrutando de la vida y de la naturaleza a su alrededor. Ella, se pregunto por primera vez en su vida que podrían estar sintiendo esos otros elefantes, libres de hacer lo que les plazca, jugar todo el día si quisieran, disfrutar con sus semejantes a la intemperie y fuera del cautiverio. Pero sin que Savitry lo supiera el destino estaba fraguando una sorpresa monumental, no solo a la misma elefanta sino a mí y a todos los demás miembros del circo. Savitry nunca había pensado que liberarse de sus cadenas era una posibilidad. Ella, había nacido en cautiverio y ésta era la única vida que conocía. ¿Saben ustedes amigos, como los domadores de elefantes entrenan a estos colosales seres y se las ingenian para que estos permanezcan en los predios del circo? ¿Se han preguntado alguna vez como un animal que puede llegar a pesar mas de 5 toneladas (lo que lo convierte en el animal mas grande sobre la superficie), pueda ser completamente dominado por un ser humano que apenas mide unos 5’ 8” de estatura y pesa menos de 200 #? Es muy sencillo. Ustedes saben la fama que tienen los elefantes de tener una memoria prodigiosa, es precisamente esa cualidad la que hace posible dominar a esta exuberante bestia. Resulta que los primeros años de vida de un elefante en cautiverio se le mantiene atado constantemente a una estaca de enorme tamaño, clavada muy profundamente al suelo. A dicha estaca se amarra una cadena también gigantesca, que a su vez es adherida a unas de las patas del aun pequeño animal. El diminuto elefante a tenor con sus instintos más primitivos lucha desesperadamente por zafarse, tirando repetida aunque infructuosamente de la cadena, pero por mas esfuerzo que haga le resulta imposible. Poco a poco la voluntad del pequeño elefantito se quiebra por completo hasta que resignado desiste una vez y por todas de seguir intentando escapar. Es entonces que en ese momento el elefante esta debidamente amaestrado, domado, domesticado, doblegado, completamente dominado. Ahí es que comienza la segunda fase del proceso, que básicamente consiste en ir reduciendo el tamaño de la estaca y de la cadena a medida que el elefante va creciendo. El tamaño de las cadenas va decreciendo inversamente proporcional al del elefante, hasta que cuando el animal llega a su edad adulta es solo una pequeñísima estaca y una endeble soga lo que hace que éste permanezca atado a un mismo lugar sin darse cuenta que la libertad esta solo a un paso. Así estaba Savitry, encadenada sicológicamente a una pequeña estaca de madera envidiando la buena fortuna de aquellos elefantes libres. Pero como dije antes, el universo a veces funciona de forma misteriosa y resulta ser que Savitry había captado la atención de un joven macho adulto, que formaba parte de esa manada, y que había quedado prendado de la belleza y majestuosidad de la exótica Savitry. Genesh (que era el nombre del joven macho) no podía entender como una hembra tan impresionante fuera presa de semejante oprobio. Así que ni tonto ni perezoso nuestro valiente y gallardo héroe fue a su encuentro solo para encontrarse con la negativa de Savitry a liberarse convencida de la imposibilidad de aquel intento. Ella, en idioma de elefante le indicó a Genesh que en muchas oportunidades en el pasado había querido liberarse sin éxito. Genesh por su parte le recordó a su amada que la sociedad de los elefantes es matriarcal y entre los elefantes es la hembra el sexo fuerte y dicho esto pateo la débil verja que los separaba y convida Savitry a dar ese paso liberador a lo que ella finalmente accedió quedando libre completamente. La reseña periodística dice que la última vez que fueron avistados “estaban jugueteando frente al lago” y los intentos por capturarlos fueron en vano. Estoy sorprendido porque como le dije a los periodistas esta es la única vez que mi Savitry me ha desobedecido pero en el fondo estoy feliz por ella. Les deseo que sean felices para siempre.