Francisco Nieto
Es posible que la crisis económica mundial y de España en particular tenga alguna pequeña relación
con el tema que vamos a tratar, pero no es esa la verdadera causa de que miles de personas
hayan dejado de interesarse por todo lo relacionado con el ocultismo, la astrología y otras mancias.
Casi podríamos asegurar que el interés por muchos de estos temas comenzó cuando nos
inundaron con tantas enseñanzas de oriente (yoga, reencarnación, karma...) para luego
continuar con el Reiky, el Feng-shui, la curación por medio de chacras, aura y mil cosas
más. Sin embargo, pocos han sido los que verdaderamente se han interesado por buscar
la verdad y el aspecto espiritual de estas enseñanzas y menos aún buscar la
Sabiduría Oculta Occidental que es la que nos corresponden.
Hace 15 o 20 años aproximadamente, en Madrid se impartían infinidad de cursos y
conferencias sobre ocultismo, astrología, tarot y mil cosas más, pero pocos (yo entre ellos)
éramos los que enseñábamos lo que es la filosofía oculta occidental como medio de
desarrollo espiritual. Pero ¿qué ha ocurrido? Recuerdo que en esos años hacían
programas de televisión y radio y que había una gran tirada de revistas sobre estos
temas, sin embargo, tampoco hoy se mantienen ¿quién ha fallado?
¿La televisión y radio por buscar lo fenoménico y crear un espectáculo para su propio interés?
¿Las revistas, en la mayoría de los casos por no poner artículos verdaderamente serios
y que, además, llevarán al desarrollo espiritual o al menos a la armonía interna?
¿Las personas que solo buscaban lo fenoménico, el desarrollo de poderes, (clarividencia,
sanación con las manos y otros objetos, el viajes astral, etc.) y algún conocimiento
que les permitiera ir de profesor dando cursos y cobrando dinero, o de “maestros”
representando un papel de lo que no eran?
Si cualquiera de las personas responsables de los dos primeros grupos hubiera tenido
una pequeña idea del verdadero motivo o ideal que persigue, por ejemplo, la filosofía
oculta y la astrología espiritual, otros hubieran sido los resultados y (aunque en menos
número) hoy se tendría una más elevada idea de lo que es la filosofía oculta. Pero
claro, por mucho que los medios de comunicación, revistas especializadas y editoriales
quieran atraer la atención de los curiosos, si éstos no buscan el aspecto espiritual ni
el verdadero significado de esas enseñanzas, tampoco se conseguirá establecer una
verdadera escuela de desarrollo para todo aquel que la necesite.
¿Por qué se han desengañado tantas y tantas personas? Las magias, las invocaciones,
el tarot, la sanación (por piedras, por los chacras, por el aura y otras muchas cosas que dicen
que son medios de curación) no son, en mi opinión, una verdadera filosofía oculta o
esotérica que ayuden sino que más bien sirven para bien poco. De hecho, miles de
personas lo han abandonado después de haberse gastado muco dinero en cursos
y después de haber perdido mucho tiempo, por no decir después de darse cuenta
de que no han conseguido nada de lo que les prometían.
El ser humano ha venido evolucionando desde hace muchos millones de años, y más
concretamente y como humano desde lo que llamamos prehistoria, antes era más animal
que humano puesto que aún no había obtenido la mente ni manifestaba voluntad propia.
A partir de la adquisición de la mente el hombre comienza a “razonar” (crear, inventar...) lo que
le lleva a manifestar la voluntad y, a su vez, a combatir el instinto y aspecto animal. Desde
entonces y hasta ahora hemos desarrollado, inventado o descubierto lo que sería imposible
de imaginar hace solamente cinco mil años y mucho más cuanto más atrás en el tiempo.
Existe una “presión externa” y una “fuerza interna” que hace que el hombre siempre esté
creando y buscando la manera de superarse, esta fuerza está representada por el Alma
que renace (el cuerpo está compuesto de átomos como cualquier otro objeto físico) la que
sabe perfectamente que hay un “Plan de un gran Ser” (comúnmente llamado Dios) que
debe cumplir como nosotros sabemos que, inevitablemente, debemos crecer. Pero para
que ese “Plan” se cumpla debe haber otras fuerzas (Seres) que colaboren y nos faciliten
los medios. Nuestra meta es la perfección espiritual, es decir: “Ser perfectos como nuestro
Padre que está en los Cielos es perfecto” y la ayuda viene dada por los seres que van por
delante de nosotros en la evolución como nosotros lo estamos
y ayudamos a los reinos que nos siguen.
Nos encontramos en el ecuador de ese Plan de Dios, hemos hecho un descenso, como
espíritus, desde el propio mundo de Dios y, después de obtener la autoconciencia y de hacernos
individuos, nos queda transformar los poderes latentes del espíritu en fuerzas dinámicas para
utilizarlas en nuestro propio desarrollo y en colaborar en ese Plan de Dios. Lo mismo que
un niño antes de hacerse hombre debe pasar por la pubertad, así la humanidad, entre la
prehistoria y la toma de conciencia de estos conocimientos y del Plan de Dios, pasa por
una fase de inmersión consciente en la materia donde se hace sumamente egoísta. La
mayoría de la humanidad se encuentra actualmente en esa fase y, por tanto, no admite
lo que dice la filosofía oculta sobre otros cuerpos, otros mundos, y otros seres como los
Ángeles, Arcángeles y otras jerarquías que hay por encima de nosotros. Sin embargo,
algunas personas ya han tomado conciencia de esos mundos espirituales y de la existencia
de esas jerarquías; esas personas están ayudando a diseminar estos conocimientos entre
otras muchas cosas. Así es que, al filosofía oculta debe ser estudiada, comprendida y
practicada por la humanidad en algún momento de su evolución,
y occidente ya está cerca de ese punto.
Por estos motivos es por lo que hace ya poco más de un siglo, renacieron una serie
de Almas con cierto grado de desarrollo con la intención de dar un conocimiento nuevo
que hiciera avanzar a la humanidad que ya está preparada para asimilarlo. Ese conocimiento
siempre ha estado ahí (como lo están las matemáticas para un niño recién nacido) pero
solo la asimilarán quienes han progresado lo suficiente así como el niño comprende
las matemáticas cuando lleva un tiempo en el colegio.
Cristo vino con la misma intención, es decir, de dar un conocimiento nuevo donde
se explican las leyes de Ranacimiento y de Consecuencia (tal y como lo explico en
varios de mis libros) por consiguiente, en España, así como en otros países europeos
y americanos se está intentando predicar esa filosofía religiosa y científica que es la más
razonable y lógica de todo lo que hasta ahora nos han contado sobre las eternas
preguntas de ¿quiénes somos?, ¿de dónde venimos? y ¿a dónde vamos? Y por
esta razón es por lo que desde hace aproximadamente 30 o 40 años se están creando
algunos (pocos) centros derivados de escuelas y otros nuevos que enseñan esta
filosofía, entre ellos y para mi la más importante la Fraternidad Rosacruz Max Heindel.
Pero lo mismo que acuden pocas personas que se sientan atraídas y que sean capaces
de comprende estas enseñanzas, así mismo ocurre con los posibles oradores y
escritores públicos que podrían predicarla, son muy pocos los que las comprender
y menos los que quieren hacerlas públicas.
Desde que comenzó esta oleada de enseñanzas orientales y otras muchas más, solo
han servido, mayormente, para llenar el bolsillo o algunas editoriales y a ciertas
personas que han sabido aprovechar la oportunidad como ha ocurrido con el boom del
ladrillo en España. Claro que éstas solo han aprovechado la oportunidad de una
demanda popular que solo buscaba lo fenoménico y poco más. En mis casi 40 años
de estudios esotéricos he conocido mucha gente que
decía ser clarividente, que recordaba sus vidas pasadas, que sanaba con las manos, que
cada noche hacen el viaje astral o van donde ellos desean, que tienen contactos con
maestros y Hermanos Mayores, y un sin fin de cosas más que no son ciertas. Todos al cabo de un
tiempo se olvidan de este mundillo del ocultismo y vuelven a ser lo que eran y dejan de hacer ese
falso papel. En la televisión hemos podido ver a personas que se han querido hacer famosas por
ir vestidos de una forma extravagante y espectacular a la vez que decían ser clarividentes y cosas
similares; otros lo han conseguido y aún viven del cuento cuando se ha demostrado que lo
que dicen es una simple opinión y no una visión clarividente. Aún hoy hay personas que sin casi
haber estudiado la filosofía oculta se hacen pasar por maestros, iniciados, clarividentes, etc.,
diciendo barbaridades como que: “Si un matrimonio hace un trío con otra persona no es malo
si hay amor” o “todo lo antiguo (religiones, escuelas esotéricas, los escritos de los
verdaderos ocultistas del pasado....) ya no sirve porque hay que actuar libre de esas
ataduras y sin ideas preconcebidas.”
Todo lo dicho en este último párrafo es lo que ha hecho mucho daño a las enseñanzas ocultas o
esotéricas. Las personas que se sentían atraídas o que sienten la llamada en su interior para
buscar unan filosofía de vida superior porque no encuentran lo que buscan en las religiones,
tienen pocas posibilidades de encontrar algo serio donde satisfacer sus deseos de adquirir unos
conocimientos que aceleren y eleven su desarrollo espiritual. De estas pocas escuelas que hay,
casi todas han introducido cursos de yoga, curación y otras prácticas para que ciertas personas
y el centro se ganen un dinero. Algunas personas que vivían esta verdadera y profunda filosofía
de vida (al menos eso pensaba yo de algunos de ellos que conozco) han cambiado y se quedan
boquiabiertos cuando escuchan a esos falsos maestros que solo dicen cosas absurdas,
estupideces y lo primero que les viene a la cabeza. En resumidas cuentas, queda poco
verdaderamente bueno y lo poco que queda se está corrompiendo o trasformando para mal.
Si a esto añadimos que hoy ya no hay casi publicaciones de esta filosofía oculta y de las
que hay solo unos pocos hacen hincapié en destacar el aspecto espiritual pero sí sigue
habiendo falsos videntes y embaucadores, comprenderemos que también la filosofía
oculta está pasando una profunda crisis.