RECEPCIÓN DEL SEÑOR EN EL AIRE
Pregunta:
¿Qué significa el hecho de que los elegidos serán arrebatados en las nubes para recibir al
Señor en el aire? ¿Se refiere eso a algún ascenso físico?
Respuesta: Este pasaje se cita en Primera Tesalonicenses, 4:17, y en el quinto capitulo de la
misma epístola, versículo 23, se afirma lo siguiente:
"Y el Dios de Paz os santifique en todo; para que vuestro Espíritu y alma y cuerpo sea
guardado entero sin represión para la venida de nuestro Señor Jesucristo".
De esta manera Pablo reconoce que el hombre es un ser compuesto que consiste de tres partes:
el Espíritu, el alma y el cuerpo. Si usted ahora vuelve al capítulo quince, primero, Corintios,
verá que él dice allí: "que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios".
Hablándoles más con relación al mismo misterio dice: "He aquí, os digo un misterio. Todos
ciertamente no dormiremos, más todos seremos transformados, en un momento, en un abrir de
ojos", y en el versículo cuarenta y cuatro, que ha sido mal traducido, dice que hay un cuerpo
espiritual y un cuerpo-alma: soma psuchicon.
Este es un punto muy importante. Esto no lo encontrará sino en la literatura Rosacruz. Todos
los demás han pasado por alto este importante error de traducción, y leen en el texto cuerpo
animar, en lugar de cuerpo "alma". Este cuerpo alma está compuesto de éter y es capaz de
levitación. Sin esta facultad sería imposible que nosotros recibamos al Señor en el aire, o sea
llegar a ser un ciudadano del reino de los cielos predicado por Cristo Jesús y sus Apóstoles.
Que se entienda bien que la humanidad siempre ha viajado desde el centro de la Tierra hacia
afuera en su evolución. Adán, el hombre primitivo, fue hecho de tierra roja (caliente), porque
en aquel tiempo nuestro globo estaba todavía en proceso de enfriamiento, incandescente por
los rojos fuegos de la corteza en formación. Luego se nos dice que una niebla se elevó del
planeta enfriándose y la humanidad de aquel tiempo vivió como "hijos de la niebla" en los
valles de la Tierra.
Después, cuando la niebla se condensó en agua, y al caer llenó las cuencas de la tierra, el
hombre fue a vivir a las montañas, que son su presente morada, por encima de las aguas, y
cuando haya dejado caer el cuerpo denso terrestre, de carne, del cual Pablo dice que no puede
heredar el reino de Dios, ascenderá por el aire en el glorioso soma psuchicon, o cuerpo-alma,
para asumir una nueva fase de evolución. Allí no tendremos que ver con cosas concretas en el
mismo sentido que ahora, sino que aprenderemos a trabajar con la vida en lugar de con cosas
inertes. Así la Biblia dice exactamente lo que significa cuando nos dice qué seremos
arrebatados en el aire en un abrir de ojos para que podamos ser buenos habitantes de la Nueva
Jerusalén, cuando ella "descienda del cielo, o sea, cuando se haga visible. También debe ser
entendido que este reino está siendo preparado ahora, aunque es invisible para la mayoría de
las personas. Está, sin embargo, en proceso de construcción, esperando el tiempo en que
habremos aprendido las lecciones de la existencia concreta y nos hayamos hecho aptos para
las distintas ocupaciones que entonces aprenderemos.
|