Hoy día pareciera que está de moda tener miedo a ser humano. No se quiere cometer errores y si se cometen, se quiere ocultarlos o hacerlos pasar como faltas leves.
Lo más lindo del ser humano es equivocarse, darse cuenta, hacer algo al respecto, restituir el daño si se puede, y volver a empezar sabiendo que no debe volver a tropezar por allí.
No somos máquinas. Somos cajas biológicas de sorpresas. Sólo los humanos podemos apreciar nuestras propias monadas, reirnos, llorar, asustarnos, indignarnos, perdonar.
¡Qué lindo es ser un ser humano! Sobre todo imperfecto
|