Realmente es muy importante para nuestro desarrollo espiritual y para la comprensión de esas cosas que nos "parecen injustas", bendecir. Siempre bendecir.
Bendecir por cada día de vida con la que amanecemos, bendecir al Sol por ser dador de vida,
Para profundizar un poco más en este concepto, el propósito de nuestro trabajo espiritual no es crear Luz; es crear canales por los cuales la Luz que existe y quiere ser revelada pueda venir. Imagina si tuvieras una enorme torre llena de agua y una ciudad de miles de personas sedientas pero nadie ha pensado en conectar las tuberías para que el agua pueda fluir desde la torre hasta la ciudad. Así es como existe nuestro mundo en la actualidad. El agua es como nuestra realización, y lo que no existe (o no lo suficiente) son los canales, los senderos para que la Luz fluya a nuestro mundo.
Cuando oramos o hacemos una conexión espiritual, creamos un nuevo sistema de tuberías a través del cual la Luz puede fluir a nuestras vidas y al mundo. a Dios, se refería a que el Creador quiere darnos pero no pude hacerlo. Porque sólo nosotros podemos crear esos senderos.
El Creador desea nuestras oraciones porque la Luz quiere venir y llenar nuestras necesidades o carencias pero no hay camino para que esto ocurra sin las bendiciones. Cuando una persona ora con la conciencia correcta, lo que hace es crear un nuevo camino para que la Luz de lo que sea que necesita tenga un lugar para fluir. Ése es el propósito de la oración. Ése es el propósito de bendecir. Cada vez que una persona realiza una bendición lo que hace es abrir un nuevo sendero.
Es una noción poderosa y significativa sobre nuestro trabajo espiritual: voy a crear un nuevo camino por el cual la Luz del Creador pueda venir a mi vida y a este mundo.
Y lo que esta noción hace por nosotros es aclarar que nuestro trabajo no es tan difícil, no estamos creando Luz, no estamos creando plenitud, ya todo eso existe.
Todo lo que tenemos que hacer es abrir los canales. Crear el agua es mucho más difícil que reunir el agua.
Todo lo que necesitamos hacer es perforar un pequeño agujero en la torre y el agua saldrá.
Con esta conciencia, no existe tal cosa como una acción pequeña. Cada oración, cada conexión, cada acción dadora, cada conexión abre un sistema de tuberías.