Su imponente porte es solo el inicio de una larga lista de impresionantes cualidades. Las águilas harpías, endémicas de los bosques lluviosos de América Latina, tienen un cuerpo robusto que les permite cargar presas de hasta tres veces su peso. Las garras de las hembras pueden crecer tanto como las de un oso pardo y pueden vivir hasta 40 años.