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LA ORACION DEL PUEBLO DE DIOS: ¿Cómo dialogar con los hermanos separados?
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De: Atlantida (Mensaje original) |
Enviado: 12/08/2021 16:59 |
FE Y EVANGELIO
CÓMO DIALOGAR CON LOS HERMANOS SEPARADOS
"Pues no me avergüenzo del Evangelio, que es fuerza de Dios para la salvación de todo el que cree." (Romanos 1:16)
YA NO ES TIEMPO PARA VIVIR AVERGONZADOS DEL EVANGELIO
1. Nueva Evangelización
Hoy ya no funciona el truco de poner un letrero en la puerta diciendo:
"Este es un hogar católico no se acepta propaganda protestante", porque
los protestantes, los evangélicos y las sectas ya están adentro del
hogar a través de la televisión, de la radio y de la propaganda persona a
persona en la fábrica.
2. "La fe se fortalece dándola..." dice el Santo
Padre...y no escondiéndonos detrás de la puerta. Y pide aún más: "No
tengáis miedo de salir a la calle y a las plazas, como los primeros
apóstoles que predicaron a Cristo y las buenas noticias de salvación en
las plazas, pueblos y ciudades. Ya no es tiempo para vivir avergonzados
del Evangelio" Romanos 1,16 (Denver, 1993).
3. Atento a los lobos.
Recuerda: A los pastores respeto, a las ovejas cariño y a los lobos
palos. El no tener miedo no significa ser imprudentes. Jesús aconseja
que antes de emprender una batalla midamos nuestras fuerzas. Es
necesario armarte bien y prepárate para la batalla: Ora, subraya tu
Biblia, estudia tu fe, consulta a tu párroco.
4. No exageres compadre.
Pero tampoco te dejes intimidar. Los hermanos separados sueltan muchas
citas de memoria. Esto apantalla a muchos, pero eso no significa que las
han entendido. Tu trata primero de entender, después memoriza algunas
pocas citas, basta recordar el libro de la Biblia y el capítulo, y sal
acompañado a evangelizar.
LOS DIEZ PASOS DEL DIÁLOGO
1. Estudia.
Para dar razón de tu fe es necesario conocer y haber entendido. Júntate
con tus amigos, en tu casa o en tu parroquia a reflexionar sobre la fe
con una Biblia con comentarios, el Catecismo de la Iglesia Católica y
los audiocassettes de Hombre Nuevo.
2. Prepárate.
Para la batalla de la fe es necesario estar armados, Gedeón venció a los
enemigos con cuernos, cántaros y antorchas. (Lee Jueces 7,16). El
cuerno es el Catecismo, el cántaro de agua viva es la Biblia y la
antorcha es la fe Católica
3. Aprende lo básico.
La respuesta a sus diez más frecuentes preguntas: ¿María tuvo más
hijos?, ¿Es idolatría venerar las imágenes?, ¿Debemos bautizar a los
niños?, ¿Tienen poder los hombre para perdonar los pecados?, ¿La
Eucaristía es un símbolo o una realidad?, ¿Fundó Cristo muchas Iglesia o
una sola?, ¿Es el Papa el Anticristo?, etc. (Solicita la serie completa
de folletos FE Y EVANGELIO).
4. Conoce su doctrina.
La doctrina de los evangélicos y otros grupos protestantes es como el queso gruyere sabe bien, pero está llena de agujeros.
Afirmar que basta la sola Biblia para conocer la
verdad, pero la Biblia dice que debemos creer no sólo en lo escrito sino
también lo enseñado de viva voz. (Lee 2 Tesalonicenses 2,15)
Dicen que no debemos obedecer a los sacerdotes, ni a los obispos, ni al
Papa. ¿Por qué entonces ellos le hacen caso a su pastor? Ellos exigen
que tú les pruebes todo con la Biblia, pero si tú les pides que te
prueben que su interpretación es la única verdadera, no lo pueden hacer.
Y cuando le pruebas, con la Biblia en la mano, lo que
la Iglesia enseña: que debemos alabar a María (Lucas 1,48); que los
hombre reciben el poder de perdonar los pecados (Juan 20,23); que
debemos comer la carne y la sangre de Cristo para tener vida eterna
(Juan 6,54); que Cristo fundó una sola Iglesia (Mateo 16,18); que sí
podemos llamar "padre" a los hombres (1 Corintios 4,15), etc. ellos no
lo aceptan. ¿Por qué? Porque ellos no creen en la Biblia, sino stienda.
Es decir, creen sólo en sí mismos.
5. Comienza siempre orando.
Reza cualquier oración o petición que te inspira el Espíritu Santo pero
termina siempre con el Padre Nuestro, el Ave María usando la Biblia
(Lucas 1,28 y 1,42). Si el objeta contra cualquiera de estas oraciones
hazle ver como estas oraciones son bíblicas e inspiradas por el Espíritu
Santo.
6. Toma la iniciativa.
Primero. Exige que no hable mal de tu Iglesia ni de los
sacerdotes. El hablar mal y el criticar no es cristiano. La primera
enseñanza de la Biblia es el amor y el respeto a los demás.
Segundo. Pídele que te platique un poco de su Iglesia,
de su fundador, de cuales son su creencias y que fue lo que le motivo a
entrar a dicha iglesia.
Tercero. Habla tú de lo que a ti te convence y atrae de la Iglesia Católica.
7. Bájalo del Ring.
Los Evangélicos son leones para debatir sobre le tema que ya se saben de
memoria, pero si lo sacas de ahí, se vuelven corderitos. Ponlo en el
campo que a ti te interesa y conoces: "A mí me gustaría hablar de la
Iglesia".
Ten preparadas tus preguntas: ¿Quién es tu fundador?, ¿La Iglesia que
Cristo fundó no funciona y la de tu fundador sí?, ¿Acaso el hombre puede
ser más sabio que el mismo Cristo?, ¿Cuándo se fundo tu iglesia?, ¿Cómo
puede ser la Iglesia de Cristo una Iglesia fundada 1500 años después de
Cristo?
8. Deja Actuar a Dios.
Tu trabajo es aclarar dudas, quitar prejuicios y establecer el puente de
confianza. Dios es el único que puede tocar su corazón. Ponte en manos
de Dios y recuerda también que si tú no eres un convencido y no
practicas tu fe nunca podrás convencer a nadie.
9. Ama la Verdad.
Si no sabes, di "No sé," y añade, "La próxima ocasión que nos veamos te tendré la respuesta".
Si señala errores de la Iglesia, reconócelos, pero aclara que no por eso
deja de ser la Iglesia de Cristo. Cristo no prometió que no habría mal,
sino que este no prevalecería contra ella. (Lee Matthew 16:1)
Preséntale la otra cara de la verdad: el heroísmo de sus mártires, el
celo de sus misioneros, la caridad de tantas mujeres consagradas al
servicio de los pobres, la grandeza de sus santos, etc.
10. Invítalo a tu parroquia.
Recuerda que el Buen Samaritano llevó al herido a la posada. Llévalo a
tu parroquia, invítalo a tu grupo, o simplemente preséntaselo a Jesús en
la Eucaristía y háblale de Él.
¡NO TENGAIS MIEDO!
No tengáis miedo de salir a la calle y a las plazas, como los primeros
apóstoles que predicaron a Cristo y las buenas noticias de salvación en
las plazas, pueblos y ciudades. Ya no es tiempo para vivir avergonzados
del Evangelio Romanos 1,16. Es tiempo de predicarlo desde los techos.
Mateo 10:27 e invitar a cada uno que encuentres al banquete que Dios ha
preparado para los suyos. El evangelio no puede quedar escondido por
miedo o por indiferencia... Su objetivo no era tenerlo guardado en el
cajón, sino para ponerlo sobre un estante para que vean su luz y
glorifiquen al Padre. Mateo 5,15.
Jesús salió en busca del hombre y de la mujer de su tiempo. El se
ensartó en un diálogo abierto y confiado con ellos, sin tener en cuenta
su condición como el Buen Samaritano de la familia humana, el se acerco a
su gente para curarlos de sus pecados y de las heridas que deja la
vida, y llevarlos a la casa del Padre.
Queridos jóvenes la Iglesia les manda ir con la fuerza del Espíritu, a
los que están cerca y a los que están lejos. Y compartir con ellos la
libertad que encontraste en Cristo. (Juan Pablo II Denver, USA. 15
Agosto/1993)
LAS TÁCTICAS DEL DIÁLOGO
Para ganar una batalla no basta estar armado ni tener valor es necesaria una estrategia.
1. No te pongas enfrente, ponte de su lado. ¿El Papa es
muy rico?, ¿Sabes? yo antes pensaba como tú, pero me puse a estudiar y
encontré que nada en el Vaticano pertenece al Papa con excepción de sus
libros y que bajo las órdenes del Papa existen más de cien
organizaciones que se dedican a hacer el bien a los pobres y necesitados
sin distinción de raza o religión. ¿Sabías tú eso?
2. No discutas ideas, baja a la práctica. Da la
impresión de que a usted le preocupan mucho los pobres. ¿Me puede decir
cuánto y cuándo fue la última vez que dio limosna a un pobre? Ud, no da
ni el diez por ciento a los pobres ¡¿y que el Papa vende el Vaticano?!
3. Busca afirmar más que contradecir. ¿María tuvo más
hijos? ¡Pro supuesto! y los sigue teniendo! Yo también soy hijo suyo, y
tú también, aunque no lo reconozcas. Por que si Cristo es tu hermano, su
Madre es también madre suya.
4. Antes de jalar el anzuelo deja que muerda la carnada.
-Cumplió Jesús los mandamientos, ¿sí o no? El dirá que sí.
-Cumplió Cristo el cuarto mandamiento, ¿sí o no? La respuesta será afirmativa.
-¿Me puedes decir cuál es el cuarto mandamiento?
-Honrarás a tu Padre y a tu Madre.
-¿Quién es el Padre de Jesús?
-Dios
-¿Quién es la madre de Jesús?
-María.
-Si Cristo honró a su Madre, ¿no debemos hacer nosotros lo mismo?
5. No busques vencer, sino convencer. Jesús es una
persona, la Biblia un libro. Si eres cristiano, obedeces a Cristo. [El
no quiere divisiones, sino la unidad: "Que todos sean uno como Tú,
Padre, estás en mí y yo en Ti" (Juan 1,21-23). El no quiere que estemos
divididos en multitud de iglesias. Jesucristo quiere darte vida eterna.
Por eso dijo, "Quien come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna"
(Juan 6,54). Jesucristo quiere que obedezcamos a sus representantes:
"Quien a vosotros oye a mi me oye" (Lucas 10,16).
Recuerda que la fuerza de las sectas está en el silencio pasividad de
los católicos. Solicita la serie de audiocassettes "Con la Biblia en la
Mano". En ella encontrarás la respuesta a tus preguntas de fe.
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