En el calendario del nuevo tiempo cuatro semanas de 28 días es una luna, y hay trece y no doce lunas por año. No hay proporciones irregulares torcidas en la medición divina del tiempo y la naturaleza. Tampoco hay usura, impuestos, préstamos, ni siquiera dinero, como actualmente se usa y se entiende en el tiempo del nuevo calendario. De acuerdo a la biosfera, el nuevo calendario afirma nuestros derechos biosféricos: una vida libre donde todo está garantizado a través del vivir correcto y del comportamiento responsable en relación con la biosfera. Esta es la vida guiada por el plan divino que, en este momento de evolución, se manifiesta a través del calendario de 13 lunas de 28 días. "Todo gobierno pertenece a Dios"- Sagrado Corán Sura 3:154
El plan divino revelado a través de los signos y de las proporciones de la naturaleza, conduce a vivir el orden divino. El orden divino está de acuerdo al plan original de la naturaleza. En el plan original como es aún revelado a través de las leyes y principios de la biosfera, la economía es la ley natural.
El orden económico del nuevo tiempo es una cultura económica del jardín de mercado doméstico. Debido a que cada una de las 4 semanas de 7 días es un ciclo perfecto, toda la economía está basada en el principio de presupuesto cero.
Es decir, las necesidades se definen al inicio de la luna; se identifican los medios para obtener las necesidades; y el objetivo para satisfacer las necesidades se establece para el final de la luna. Todos los excedentes se reúnen para el desembolso equitativo durante la Luna Cósmica (la decimotercera luna). Siguiendo el día 365 del año (día libre), el día del perdón y la reconciliación universal, el nuevo año comienza una vez más con presupuesto cero.
El mercado doméstico significa que no es necesario un gobierno para regular y distorsionar el proceso económico natural. El gobierno, como llegaremos a entender, es simplemente una función del falso tiempo 12:60, donde quienes tienen el poder luchan por quitarle poder a las masas, estableciendo el gobierno como un intermediario entre las necesidades inmediatas personales y su logro. El comportamiento autónomo y el respeto mutuo reemplazan al gobierno, y la economía vuelve a su significado y función original: usar de la mejor manera lo mínimo para lograr lo máximo con un mínimo de pérdida. Este significado fundamental de la economía sólo puede darse donde no exista más un sistema de intermediarios: gobiernos, bancos, especialistas en marketing, fábricas, sistemas de transporte, mayoristas y minoristas.
Toda la economía viene del hogar y termina en el hogar.
Cuando cada hogar o pequeña comunidad de hogares funcione con su propio jardín cooperativo, entonces las necesidades fundamentales habrán sido cubiertas. Esta es la base de la cultura económica del jardín de mercado doméstico.
Todas las necesidades extras a esto pueden cubrirse a través de medios creativos: trueque, intercambio de servicios, etc. Esta es la verdadera economía. Si se reestablece la humanidad en el plan divino con la medida correcta del tiempo en armonía con la biosfera, la cultura económica del jardín de mercado doméstico se hará realidad más pronto de lo esperado
Pero para lograr el objetivo de la economía de mercado doméstico este complicado sistema económico 12:60 debe ser transformado rápidamente.
El Plan Maestro de la Cultura Galáctica es el programa de la Primera Paz Mundial para sentenciar y administrar la transformación de la economía neo-liberal de libre mercado de los banqueros 12:60 basada en la codicia absoluta y en la competitividad que paraliza el espíritu, hacia una cultura económica de jardín 13:20, basada en una consciencia centrada en Dios y en la igualdad absoluta.
El Plan Maestro de la Cultura Galáctica es una estrategia integral. A través de análisis y medios objetivos, esta estrategia se dirige a desmantelar imparcialmente el aparato que mantiene la mente dominada por la ilusión del dinero. Al mismo tiempo, esta estrategia convierte ese aparato en un sistema auto transformador que gasta su excedente de acuerdo a medios objetivos equitativos para establecer la autonomía, igualdad y auto-respeto entre cada uno de los miembros de la raza humana. El simple proceso de hacer la conversión del industrialismo bancario del viejo orden a la cultura de jardín de mercado doméstico, del nuevo orden, es en sí mismo un acto de cultura galáctica. Aquí la cultura galáctica está definida como el comportamiento de acuerdo a las normas del tiempo de la cuarta dimensión, que gobierna toda la vida y el orden del universo.
El aparato que mantiene la mente dominada por la ilusión del dinero es el sistema bancario apoyado por el gobierno. A través de un reordenamiento absoluto de los valores de acuerdo con los estándares biosféricos, el antiguo aparato fortalecerá al nuevo en la medida en que su poder sea convertido en una forma de sistema de bono kin donde las necesidades comunes estén identificadas y los medios para satisfacerlas rápidamente son desembolsados a través del aparato del viejo orden.
Las estrategias y los medios generales para lograr estos objetivos han sido destacados en las Resoluciones del Primer Congreso Planetario de los Derechos Biosféricos. El Plan Maestro de la Cultura Galáctica debe estar acompañado por resoluciones de propósito vigilante y diligente para desindustrializar simultáneamente mientras se establece la escuela en el hogar de la cultura de jardín doméstico del nuevo tiempo.
Capítulo 2: Valores del Mercado Doméstico, Antes y Después de la Historia
Ya que el universo en que vivimos y experimentamos es teocéntrico, centrado en Dios, el verdadero significado viene de estar en el aquí y en el ahora, donde no hay intermediarios entre uno mismo y la unidad divina.
Dentro de la biosfera todo lo que pertenece a la vida está interconectado, un ser, un proceso biogénico. Ningún individuo nace sin una familia, una extensión de las conexiones sanguíneas, relaciones de matrimonios, amigos y colaboradores, y finalmente el todo de la vida: "Mitakuye Oyasin", "Todas Mis Relaciones".
Ninguna familia puede prosperar sin un hogar.
Lo que el individuo experimenta como la unicidad divina del aquí y del ahora, la unidad social humana lo experimenta como el hogar. El hogar es el aquí de la familia. La familia es el ahora del hogar. Dentro del hogar de la familia se aprenden los valores: la autonomía, la igualdad, la lealtad y el respeto. Estos son los valores que crean la familia.
El hogar es la cuna de la cultura.
Todo el verdadero aprendizaje se experimenta en el hogar a través de las interacciones de la familia. El hogar es la fuente creativa. En el dominio del tiempo, el hogar genuino es el centro de todos los procesos económicos de producción, consumo, reproducción y esfuerzo creativo: es una sala cuna, una cocina, una escuela, un horno para cocer cerámica, un taller de tejido. Todo esto es parte de un hogar.
El hogar es donde uno nace, donde uno vive, y donde uno muere. Esta es la verdadera economía. En el dominio del tiempo, el hogar de la familia y el jardín están generalmente dentro del esquema de una comunidad llamado Bioma: un grupo de hogares orgánico y autosuficiente.
Lo que sostiene a un bioma es la experiencia y creencia compartida, un campo coordinado telepáticamente que entrelaza las vidas y las muertes del bioma en un gran tapiz común conocido como vida universal.
Esta descripción de los valores de la vida está de acuerdo con la ley del tiempo. Lo que se vive de acuerdo con la ley del tiempo constituye el dominio del tiempo: el orden auto gobernado de la biosfera.
Dentro del dominio del tiempo, la producción industrial está en un mínimo porque destruye los valores del hogar y de la familia. Las tendencias exageradas de la frecuencia artificial de tiempo 12:60 distorsiona estos valores e invierte la vida.
El trabajo enajenado es la consecuencia de la esclavitud salarial, el sistema a través del cual el "salario" se gana para pagar lo que era un regalo en la comunidad y hogar original.
El propósito de la esclavitud salarial es la producción masiva y el consumo de bienes ya no más cultivados o hechos en el hogar, para el beneficio de una elite oligárquica de banqueros e industriales.
El trabajo industrializado enajena los valores de la familia al enviar fuera del hogar al padre, y ahora a la madre también, para ganar sus "sueldos", mientras que los niños son enviados a instituciones de educación sistematizadas y rutinarias llamadas escuelas públicas (educación obligatoria).
La consecuencia de este proceso 12:60 de tiempo artificial y de trabajo enajenado es el caos y la anarquía de la vida moderna donde la familia es dañada, atendida por una hueste de intermediarios egoístas llamados profesores, terapeutas, asistentes sociales, doctores, abogados y policías.
Con la única posibilidad de ser alimentados por una gama de productos envasados industrializados, los sentidos de la familia están empapados de una dieta de televisión electrónica y de cultura radial que está disponible en el lugar de trabajo, en el automóvil y en la casa.
Condicionados a creer que ésta es la única forma de vida, slogans religiosos, políticos, comerciales y deportivos, controlan la mente engrandeciendo el ego: "Vota por el Cambio"; "Estados Unidos es lo mejor"; "Jesús es el único camino". A menudo, estos valores aprendidos funcionan tácitamente a expensas de otro. Esta es la sicología de hacer que el esclavo del salario se sienta superior al resto, sin embargo es abstracto y remoto encontrar que alguien lo sea en la experiencia real de vida de cada día. Todas estas descripciones de la vida 12:60 constituyen una definición del "Hechizo del Trabajo": el trance hipnótico de las masas mediante el cual la maquinaria del materialismo de la oligarquía se permite consumir y destruir los recursos de la biosfera, sin parar.