¿Amor o dependencia emocional?
“No puedo vivir sin ti.” ¿Te suena esa frase?
¿Alguna vez haz sentido que estás complaciendo los deseos y necesidades de tu pareja sin haber alcanzado los tuyos?
Eso no es saludable, y si no estás segura de si lo tuyo es amor o dependencia emocional, es muy fácil distinguirlo y detectarlo.
Un síntoma claro de dependencia emocional es tener una relación de pareja y tratar de satisfacer al 100% las necesidades de la otra persona, mientras que nuestras necesidades o sentimientos no importan.
Si estás viviendo una relación así, lo primero que tienes que hacer es aceptar que esa relación es dañina y preguntarte si realmente lo mereces. No podrás superar el problema dejando de amar. Para superarlo, una tiene que decidir dejar la relación aunque sigan existiendo sentimientos, ya que el sentimiento de amor más importante es el que debes tener hacia ti misma.
¡Mereces estar tranquila! Es cierto que no saber cómo será tu vida da mucho miedo e incertidumbre, pero lo que ahora sí sabes es que lo que tienes te está destrozando, que cada día estás perdiendo más autoestima e ilusión. Toma las fuerzas que te quedan y confía en ti, aunque al principio no veas la luz. Recuerda que todo pasará, que llegará un día en que te sentirás orgullosa de haber emprendido el camino de tu propia autosuperación.
Algo que te ayudará mucho será identificar la diferencia entre el amor y la dependencia emocional.
El amor es un sentimiento sano donde existe el cariño, el respeto y la admiración. Donde hay armonía al estar juntos pero no revueltos. Donde tienes la opción de crecer, tener independencia, planes, ideas y proyectos. Donde puedes compartir tus logros con esa otra persona.
La dependencia emocional es un amor obsesivo donde perdemos el rumbo de nuestra propia vida por estar tan pendiente del otro. Donde queremos respirar el mismo aire de esa persona, controlar todo lo que hace, dice o piensa…
En cierta ocasión vi una frase que me llamó la atención y quiero compartirla con ustedes:“No hay amor suficiente capaz de llenar el vacío de una persona que no se ama a sí misma.” No seas de las las personas que crees que el amor lo justifica todo y que amar es tu principal fuente de realización. Es hermoso tener una pareja, pero recuerda que también tienes un trabajo, una profesión, metas y sueños. Que tienes amigas con quien ir a tomar un café o una copa. Tienes más familia. Date cuenta de que tu pareja no lo es todo y que tu vida no debe de girar en torno a esa única persona.
Existe un punto donde la línea de lo “no negociable” se desdibuja y perdemos el norte, así que empieza a buscar el punto medio para vivir y disfrutar de tu vida y de tu pareja al máximo. ¡Suerte!