El diablo le dijo a Eva medias verdades y medias mentiras. Puso en duda lo que Dios le había dicho, pero al mismo tiempo utilizó algo de verdad. Hoy en día, él continúa utilizando las mismas tácticas que empleó en el Jardín del Edén, y como mujeres somos susceptibles a caer en el engaño y el error de estos constantes ataques del enemigo. El engañador solo tiene que poner un pensamiento en nuestra mente —que por cierto es el terreno donde comienza la batalla en contra nuestra— y en el mismo momento en que escuchamos esa idea y la tomamos en cuenta, la rumiamos, la filtramos a través de las emociones y los sentimientos, y le damos cabida en el corazón, no tardamos en convencernos de que por primera vez en la vida el diablo tiene razón, así que comenzamos a obrar basándonos en una sugerencia que es totalmente contraria a lo que Dios dice.
El maligno se aprovechará de nuestras debilidades y nuestros momentos de flaqueza; utilizará cualquier puerta que podamos haber dejado abierta, y sin misericordia nos presentará una tentación deliciosa hasta que dobleguemos la rodilla ante tan suculento platillo… aunque después de haberlo probado terminemos heridas y apaleadas, afectando de paso a nuestros seres queridos por la mala decisión que hicimos.
Sin embargo, Dios siempre da una salida, y tenemos que tomar esos pensamientos desde el mismo momento en que llegan a nuestra mente y hacer lo que hizo Jesús cuando se vio tentado mientras ayunaba en el desierto: combatir al diablo con la misma Palabra de Dios. El Señor sabía que en efecto podía convertir las piedras en pan, sin embargo, contrarrestó a Satanás con las mismas palabras que Dios había declarado. Tenemos que saber que nuestro enemigo no descansa y nos atacará con todo, en especial cuando nos sentimos vulnerables y cansados de situaciones en las que estamos a punto de rendirnos.
No obstante, el que persevera hasta el fin, el que se mantiene firme en la fe, el que cree y cumple sus mandamientos, recibirá la corona de vida, en pocas palabras, le irá muy bien.
GLORIA VAZQUEZ
Tomado de la Biblia “Verdadera Identidad – La Biblia para la mujer de hoy”