REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 5 DE JULIO DE 2019.

“Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos”.Isaías 3:10.

¿Se ha encontrado con personas que solo utilizan la lengua para herir, para echar sátiras, para destruir o para desanimar? Por otro lado, hay quienes son felices inventando cuentos y patrañas y se deleitan despotricando del prójimo. Qué bueno sería cambiar nuestra forma de hablar y, en vez de estar profiriendo cosas tristes, en vez de que nuestras palabras estén saturadas de dudas, de resentimiento, de desgano y temor, aprendamos a expresar contantemente cosas buenas que edifiquen nuestras vidas y las vidas de los que nos escuchen.

Cuantas personas encontramos a nuestro paso que ponen su fe en las cosas negativas. Hablan mal de su trabajo, de su cónyuge de sus hijos, de su salud, de sus finanzas y, entonces: ¿Qué esperan recibir? Si maldigo, el primer afectado soy yo. Si bendigo, el primer beneficiado seré yo y los que me rodean. Porque no lo piensa un instante y comienza a bendecir a tu cónyuge, a tus hijos, tu vida física y espiritual, tu trabajo, y que mejor que hacerlo como dice la palabra de Dios. “Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos”. Isaías 3:10.

Dios espera que trabajemos, pero también quiere que disfrutemos de algunas de sus recompensas. “Por el fruto de su boca cada cual se saciará de bien, y las obras de las manos del hombre volverán a él.” Proverbios 12:14. Ya sea que el SEÑOR te haya bendecido con grandes riquezas ó solo con lo suficiente para cubrir tus necesidades y pagar tus cuentas, tómate el tiempo para disfrutar del fruto de tu labor y ante todo, no dejes nunca de alabar y bendecir el nombre de nuestro Dios, porque Él nos permite gozar del bien de todo nuestro trabajo.

ORACIÓN

“Soberano Dios y Padre Celestial: Tú pagas al hombre conforme a su trabajo y retribuyes a cada cual, conforme a su conducta. Tu palabra dice que de la abundancia del corazón habla la boca y, por eso, te suplico que llenes el mío de tu buen tesoro y que tu amor, tu gozo y tu paz abunden en él. Permíteme sacar de mi corazón en todo tiempo, en todo lugar, independientemente de mis circunstancias, cosas buenas y edificantes. Confirma mi corazón en toda buena palabra y obra, en el nombre de nuestro SEÑOR JESUCRISTO”. Amén y Amén.

-FELIZ FIN DE SEMANA-

 ARBEY SERNA ORTIZ