Elma Beatriz Rosado Barbosa, esposa de Filiberto Ojeda Ríos, revolucionario puertorriqueño asesinado por agentes federales norteamericanos en el 23 e septiembre, dice que el estaba vivo cuando ella fue removida de su casa. "Me mantuvieron en el lugar y, cuando finalmente me sacaron, Filberto estaba vivo". Más tarde, la viuda especificó que supo esto porque su Ojeda se mantenía gritando consignas por la independencia de Puerto Rico.
Horas antes, decenas de agentes federales norteamericanos y al menos dos helicópteros participaron en la operación durante la cual fue cercada la vivienda, en la pequeña localidad de Hormigueros de poco más de 16 mil habitantes, en el oeste de la isla, donde se alojaba Ojeda Ríos y su mujer. "Hombres armados penetraron nuestra propiedad y dispararon a la pared frontal de la casa", siguió relatando Elma Beatriz.
La mujer contó que Ojeda gritó a los agentes: "Alguien va a salir". Fue entonces cuando ella salió del hogar sin pronunciar palabra a los agentes. Según ella, su esposo gritó también que él se entregaba al periodista Jesús Dávila pero "los agentes no le hicieron caso. Dijeron que eso no sucedería". Más tarde, los agentes le vendaron los ojos a Rosado Barbosa. "En ese momento sentí en mi corazón, supe que lo iban a asesinar", contó.
Pero, no fue sino hasta el sábado 24 de septiembre que la mujer se enteró de la muerte de su esposo, cuando un grupo de sus abogados la recogió en la cárcel federal de Guaynabo. La viuda hizo un llamado al pueblo de Puerto Rico a manifestar su indignación en los medios de comunicación, en Internet y mediante protestas, piquetes, marchas o vigilias. "El FBI miente como siempre ha mentido. Está pisando en arena movediza y yo pido que nos ayuden a hundirlos. Que se vaya el FBI de nuestra isla. Fuera de nuestro terruño los malditos federales", declaró.
Filiberto Ojeda tenía 72 años y era el líder natural del Ejército Popular Boricua (E.P.B.), también conocido como "Los Macheteros". A fines de los años 70 el E.P.B. realizó varias acciones violentas, entre ellas el robo de 7 millones de dólares de la Wells Fargo, en West Hartford para financiar la lucha independentista, contraria al "status" de "Estado Libre Asociado" con el cual Puerto Rico mantiene su relación y dependencia con Estados Unidos. También se utilizó ese dinero para repartir alimentos y medicinas entre los sectores empobrecidos de Puerto Rico. El E.B.P. tuvo luego otras esporádicas pero espectaculares operaciones que básicamente pretendían un papel propagandístico. Desde hacía años se le otorgaba a este movimiento un papel testimonial y no se le identificaba con acciones violentas.
Después de su muerte, el cuerpo del dirigente independentista Filiberto Ojeda Ríos estuve expuesto en el Ateneo Puertorriqueño en San Juan para que el pueblo puertorriqueño rindara tributo a su héroe nacional. El Gobernador de Puerto Rico, legisladores y líderes de todos lo partidos políticos han condenado públicamente la acción que llevó a cabo el FBI para capturar y asesinar al líder del Ejército Popular Boricua.
El exsenador independentista Rubén Berríos Martínez calificó la acción del FBI como una de "terrorismo de estado" y advirtió que denunciaría la misma en el seno de la Internacional Socialista, orgismo del cual es vicepresidente honorario. Berríos también denunció la complicidad del gobierno de Aníbal Acevedo Vilá al que describió como "asistente y facilitador" de las tropas del FBI.
"Como Gobernador de todos los puertorriqueños, le hago un reclamo enérgico a las autoridades federales de que terminen el silencio que han mantenido desde la tarde de ayer en relación a estos hechos e informen al pueblo de Puerto Rico sobre lo ocurrido", dijo en un comunicado, Acevedo Vilá.
Añadió que el superintendente de la Policía, Pedro Toledo; el secretario de Justicia, Roberto Sánchez Ramos, y el director del Instituto de Ciencias Forenses, Pío Rechany, tienen instrucciones claras y precisas de proceder con la investigación de la escena tan pronto se confirme que hubo una muerte violenta y actuar con todo el rigor que exige la ley en una situación como ésta. "Es imperativo que el FBI informe cuánto antes lo que ocurrió", dijo Acevedo Vilá.
(con Red Betances)