Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
¡ Feliz Cumpleaños silentxtasy !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: Fotos de James Petras
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1  (Mensaje original) Enviado: 18/03/2006 03:39
fotos de James Petras, antes y después del revelado:
      Un comentario libertario a sus declaraciones sobre Cuba

* En referencia a lo que ahora expresa alguien que hasta hace poco se presentaba como defensor incondicional del régimen cubano, el Movimiento Libertario Cubano (MLC) manifiesta algunas consideraciones pertinentes.
                                                         
Se sabe desde mucho tiempo antes que James Petras es uno de los más firmes e incondicionales corifeos del gobierno cubano. Incluso, en aquel raro momento en que para cierta izquierda acostumbrada a mirar para el costado se abrieron enérgicamente las saludables compuertas de la reflexión crítica a fondo -en marzo y abril de 2003; penas de muerte y encarcelamientos masivos mediante-, Petras espetó a todos aquellos entusiastas de siempre que osaron mostrarse más vacilantes y dubitativos que de costumbre un artículo que se transformó en voz de mando: «La responsabilidad de los intelectuales: Cuba, los Estados Unidos y los derechos humanos»  (
www.rebelion.org; 6 de mayo del año mencionado). Allí, entre otras impresentables ocurrencias, calificaba a la moralidad como "falta de honradez". Además, la emprendía sin tasa ni medida contra aquellos que, cuando de Cuba se tratara, «se lanzan a una serie de acusaciones infundadas y de falsificaciones desprovistas de cualquier contexto especial que hubiera podido servir para clarificar las cuestiones y proporcionar una base razonada a... "los imperativos morales"». Según Petras, los tenues críticos de aquel entonces eran víctimas de un repentino ataque de irresponsabilidad: «La total falta de seriedad de Chomsky, Zinn, Sontag y los dictados morales de Wallerstein se deben a que no logran reconocer la amenaza inminente de una guerra estadounidense con armas de destrucción masiva, anunciada por adelantado». Y, habiendo ya perdido los estribos y todo sentido de la ponderación, pronunciaba una sentencia poco menos que definitiva: «Lo que resulta francamente vergonzoso es que hagan caso omiso de los enormes logros de la revolución cubana en el empleo, la educación, la salud y la igualdad, de su heroica oposición, basada en los principios, a las guerras imperiales -Cuba es el único país que lo dice claramente- y de su capacidad de resistir casi cincuenta años de invasiones» (sic). En aquel entonces, pese a las groseras violaciones de los "derechos humanos", las políticas del gobierno cubano gozaban de entera inmunidad y todo aquel que se atreviera a transgredir mínimamente el inviolable precepto vería recaer sobre sus inermes espaldas los implacables anatemas de James Petras; el mismo insigne pensador que sistemáticamente adopta posiciones radicales y socializantes en cualquier lugar del mundo menos en Cuba y rivaliza así sin pudor alguno por erigirse en el mejor de los guardianes del templo.

Andando el tiempo, mientras las amenazas de los Estados Unidos continúan en cataléptico estado de rutina y reiteración y las invasiones siguen sin producirse, Petras parece haberse serenado, dejando momentáneamente a un lado su espada justiciera y sus flamígeras condenas. Por lo pronto, el lunes 20 de febrero del año en curso, en reportaje realizado por CX 36 Radio Centenario de Montevideo (Uruguay) y reproducido un día después en La Haine (
http://www.lahaine.org/index.php?blog=3&p=12739&more=1&c=1), se permite él mismo asomarse críticamente a la situación cubana; haciéndolo ¡vaya sorpresa! ya no sobre las más evidentes exacciones del poder político centralizado y excluyente sino incluso sobre las supuestamente inexpugnables realizaciones sociales de la "revolución". Conviene tener presentes sus afirmaciones en tal sentido y, para evitar cualquier equívoco, conviene también reproducirlas textualmente:

«- Hay otras cosas que creo que son parte de un proceso de desarrollo, que son las contradicciones que Cuba ha tenido frente a los desafíos, y el gobierno empieza a tomar algunas medidas postergadas, que creo eran necesarias, como el problema de vivienda, que tienen un déficit aproximado de un millón de casas. El plan de gobierno es construir 100 mil casas por año, porque la situación habitacional esta muy deteriorada y es una gran necesidad.
- La gente exige que este plan empiece a funcionar también, porque la política internacionalista de Cuba en relación con la ayuda médica es muy positiva, pero creo que las condiciones de los hospitales y clínicas en Cuba se han deteriorado, en mi opinión personal. Creo que deben concentrar más en el desarrollo y restauración, el mejoramiento de las condiciones y planta física de medicina en Cuba que están -digo yo- bastante deterioradas, a pesar que algunos esfuerzos de restauración están en proceso. Hay un contraste, incluso yo creo que algunas clínicas en África y en Venezuela son mejores que lo que tiene el pueblo cubano en Cuba. Este internacionalismo es muy positivo, pero creo que la gente está exigiendo que se concentre más en el desarrollo interno, que es una cosa a tratar de equilibrar.
- El gobierno ha empezado un programa de exploración en la salud y educación y vamos a ver si tienen éxito en este proyecto de desarrollo interno, que es necesario especialmente cuando ya tienen más recursos, y las decisiones políticas sobre como van a utilizar este excedente es muy importante. El excedente en parte viene de un plan de ahorro de electricidad que según dice Castro podría llegar hasta mil millones de dólares.
- También tiene un gran problema de despilfarro, incluso robo de recursos estatales, particularmente la gasolina; y eso lo han reconocido y lanzado a las nuevas generaciones para rectificar el programa y reemplazar los gasolineros que están cometiendo estos delitos. Pero te voy a decir (...) que a mí lo que me preocupa, más que el robo de cada funcionario, empleado, es el problema de los Ministros que toleraron el robo de cientos de millones. ¿Qué estaban haciendo?, preguntaba yo, estaban durmiendo o estaban implicados en este robo y no despidieron a nadie. Yo preguntaba por qué, si ocurría en cualquier empresa privada o pública, si no asumen las responsabilidades. Es una cosa muy grave. Tienen que darles una patada en el culo lo mínimo, si no llevarlos a juicio.
- Hay un lanzamiento de un proceso de rectificación, movilizando gente y poniendo en orden algunas cosas urgentes. Creo que el equipo que está es políticamente responsable, que empiezan a reconocer estos problemas, y también el problema de equilibrar la participación negra en la sociedad. Uno nota en muchos lugares que hay una desproporción de blancos y creo que hay cosas para hacer.
- Creo que estos puntos que estoy anotando son existentes, lástima que la gente tiene que esperar que Fidel lance eso para que empiece a tomar forma. Yo creo que los intelectuales y los políticos deben tomar iniciativas y no siempre esperar que Fidel pronuncie el discurso para que el problema de repente surja como un problema.»

Así, Petras nos obsequia con una serie de 6 fotografías de la sociedad cubana que, aunque no lo diga con el necesario dramatismo y la imprescindible contundencia, rozan facetas esenciales de la construcción "socialista". Son fotografías todavía en negativo, borrosas, de contornos indiscernibles, sin articulaciones de inmediata visibilidad; pero, incluso en ese estado de difícil distinción, alcanzan y sobran para emprender una lectura ejemplarizante. Y lo más curioso de todo este asunto es que, si esas fotografías las hubiera tomado un militante del Movimiento Libertario Cubano, nada habría que esperar para oír la habitual retahíla de acusaciones: "cretinos útiles del imperialismo", "gusanos al servicio de una potencia extranjera", "divisionistas incorregibles", "liberales sin remedio", cuando no directamente "agentes de la CIA". Pero, guste o no, las fotografías no nos pertenecen a nosotros sino a James Petras; quien, como ya lo insinuamos, es un leal e insobornable "amigo del proceso de construcción socialista"; es decir, en buen romance, del gobierno cubano propiamente dicho; definitiva, irrevocable y "revolucionariamente" constituido como tal.

  º Revelando inconsistencias

Coloquemos, entonces, las primeras gotas de la emulsión fotográfica y empecemos a descifrar con algo más de luz, una por una y en el orden correspondiente, las despojadas constataciones de Petras. ¿Qué es lo que éstas nos dicen, pues?

1) El "socialismo" cubano padece una fenomenal crisis habitacional puesto que no sólo nos encontramos frente a un déficit de grandes proporciones asumido como tal sino que al mismo habría que sumarle la decrepitud de las viviendas existentes y también ciertas situaciones de innegable hacinamiento. En el horizonte inmediato ya se dibuja un espacio de luchas sociales por el acceso a los espacios urbanos y hasta un incipiente movimiento de squatters al que buena parte de la izquierda revolucionaria todavía no le ha concedido esa noble condición;
2) La organización de la salud en Cuba, uno de los buques insignia del "proceso de construcción socialista", no es ni siquiera parecida a lo que nos dice la propaganda oficial. Es oportuno reconocerlo y ello no deja de ser un mérito de Petras, pero bien podría haber reparado éste también en la muy poco socialista distancia existente entre los tratamientos de Maradona o los "milagros" oftalmológicos y la atención médica que recibe el pueblo llano; según él, ubicada en algunos casos en niveles sub-africanos;
3) "El plan de ahorro de electricidad" más que una política proactiva del Estado debe ser interpretado como una catástrofe energética -incluso en el contexto del generoso subsidio petrolero venezolano- que el pueblo cubano padece fundamentalmente bajo la forma de persistentes e insoportables apagones. Pero también de las sombras emerge la luz y la gente ya ha comenzado a aprovechar las oscuridades nocturnales para realizar pintadas y volanteadas contra el gobierno;
4) El "socialismo" cubano, en su actual estado de desarrollo, también le ha hecho un lugar a la corrupción; y, según las muy fundadas y razonables sospechas de Petras, ya no sería sólo la de anónimos funcionarios ubicados en la base de la pirámide sino que la misma habría encontrado su morada en el propio Consejo de Ministros; es decir, nada menos que en el Estado Mayor de la "revolución", presidido pública y notoriamente por el "comandante en jefe" de cuerpo presente;
5) Luego de 47 años, 1 mes y 20 días transcurridos entre el 1º de enero de 1959 y la fecha en que Petras emitió sus opiniones, se acaba por reconocer que la "revolución" no ha resuelto nada menos que el problema de la discriminación racial, a modo de enésima confirmación de que los discursos estatales en la materia no tienen la facultad de modificar la dinámica social real. Es evidente, a todo esto, que la población negra cubana se percató mucho antes del asunto y también allí comienza a dibujarse un soterrado estremecimiento opositor;
6) La pregonada cultura crítica existente en Cuba es un mito o bien un cuidadoso ejercicio clandestino. Es francamente increíble que Petras se sorprenda y se lamente de que los "luminosos" descubrimientos y las iniciativas partan siempre y en todo lugar de Fidel Castro; máxime cuando él mismo debería tener plena conciencia que la crítica en profundidad que históricamente se le ha anticipado no tuvo muchas más opciones que pagar el peaje correspondiente en la defenestración, en la cárcel o en el exilio.
 
Pero, en definitiva, estas observaciones no son más que un avance y ahora nos queda encarar el revelado propiamente dicho, dejando asentado desde ya, tal como lo hemos subrayado, ese croquis todavía impreciso pero bien real de una movilización popular embrionaria de rechazo a la acción del gobierno. Ahora bien; quiéralo o no James Petras, la conclusión que se impone a sus ingenuamente sinceras pero módicas y parciales impresiones fotográficas es una sola: el fracaso total y punto por punto de un modelo estatal, militar y caudillista de construcción del socialismo. ¿Cómo no pensarlo, luego de comprobar problemas en el área de la vivienda, de la salud, de la educación y del abastecimiento eléctrico; sobre todo cuando los mismos sólo afectan a los sectores populares pero jamás acarician siquiera a la élite dirigente? ¿Cómo no pensarlo cuando las situaciones sociales de desigualdad van incluso más allá de las posiciones de clase propiamente dichas y afectan a la vastísima población negra del país? ¿Cómo no pensarlo toda vez que se comprueba que la corrupción ofrece a los sectores dominantes un plus de ingresos a las cuotas institucionalmente consagradas de privilegios? ¿Cómo no pensarlo cuando todas las tradiciones, costumbres, hábitos, reflejos y usos estatales han dejado establecido per saecula saeculorum que sólo Fidel Castro -único, inigualable e insustituíble pastor del pueblo cubano- puede referirse a los temas más urticantes sin que sobre su figura pesen las horcas caudinas de la represión o de una inapelable condena "moral" y "revolucionaria"? ¿Cómo no pensarlo si en ello no parece que tengan nada que ver ni el bloqueo ni las amenazas de invasión ni las insolencias de Condoleeza Rice ni las 90 millas que separan a Cuba de la Florida? ¿Cómo no pensarlo, James?

La limitación analítica de James Petras, entonces, consiste en que su cámara fotográfica sólo es capaz de registrar las manifestaciones más evidentes de la situación pero no el núcleo explicativo de la misma. En otras palabras: el problema del que Petras padece consuetudinariamente es que él cree a pies juntillas en los mal llamados "procesos de rectificación de errores", pero no llega a visualizar que casi todo podría reducirse a un conjunto de errores-horrores primigenios, básicos y fundamentales que muy pocos parecen estar dispuestos a discutir con seriedad y hondura en las esferas del poder y en su claque de amanuenses. Porque de lo que se trata no es de encarar una vez más esa sucesión anodina de marchas y contramarchas ya conocidas y discutir si se admitirá o no la tenencia de dólares en manos de la gente; si los campesinos podrán ofrecer o no sus productos en la ciudad; si los "paladares" formarán o no un estrato de "nuevos ricos"; si habrá que cambiar o no, en un nuevo giro de austeridad, los bombillos de 60 watts por unos de 15; si habrá que sustituir o no a los empleados de las gasolineras por trabajadores sociales o si la construcción "socialista" depende de la fórmula de los helados Coppelia. No: el tema es mucho más vasto, exige dejar a un lado las sempiternas y erráticas "genialidades" de Fidel Castro y merece ser tratado de una vez por todas con la debida profundidad.

  º La imagen oculta
¿Y cuál sería, por tanto, la discusión de fondo que la élite dominante cubana no está dispuesta a tolerar en modo alguno? En Cuba, hoy al igual que siempre, el único dilema que vale la pena considerar es el que opone el protagonismo autonómico de la gente a la tutela interminable e insoportable del Partido "Comunista" y de su sumo pontífice; una tutela auto-conferida y con visos de eternidad a la que ya no le queda más nada que rectificar que su propia existencia. Si James Petras no es capaz de entender las razones por las cuales "los intelectuales y los políticos" no toman iniciativas, ello se debe precisamente a que su percepción superficial del asunto no le ha permitido revelar las fotografías que él mismo y por su entera voluntad ha tomado de la realidad cubana. Porque en esa realidad, los problemas adquieren legítima y oficialmente esa condición sólo cuando el infalible timonel ha resuelto producir algún giro más o menos "ingenioso" que "rectifique" sus propias decisiones previas. ¿O acaso alguien puede pensar que nada menos que el "comandante en jefe" es el factotum de todas las "maravillas" pero siempre consigue mantenerse detrás de una impoluta tiniebla y completamente al margen de cuanto desaguisado ha ocurrido, ocurre y ocurrirá en el "proceso de construcción socialista"? La respuesta a esta pregunta cae por su propio peso y hace ya rato largo que es hora de que James Petras y tantos otros como él se atrevan a dar el imprescindible "mal paso". Sobre esto, corresponde ahora ofrecer algunos detalles adicionales.

El fracaso del "socialismo" cubano es el fracaso de la planificación centralizada de estirpe leninista en su versión impura y caribeña. Es el fracaso de una estrategia de construcción "socialista" basada en la hegemonía "científica" de una élite tecno-burocrática supuestamente "ilustrada" cuyas opiniones y saberes de "vanguardia" se ubican permanentemente por encima de las prácticas autogestionarias. Es el fracaso, por lo tanto, de una concepción que jerarquiza las decisiones del Estado -no importa que se trate de una planificación presupuestaria al estilo guevarista o de una que dé lugar a la ley del valor según la vieja preceptiva soviética; tal como se han alternado en Cuba- antes que las decisiones de la gente autónomamente articulada en organizaciones populares de base. Pero, además, es el fracaso de un estilo al que se le ha sobre-impreso una impronta militar y caudillista que desbarata incluso los más mínimos atisbos de "racionalidad" que pudiera ostentar el original soviético; y no precisamente porque éste nos parezca digno de admiración sino porque la copia cubana se ubica directamente en el terreno de los esperpentos. ¿De qué otro modo considerar, si no, la planificación centralizada de un país pequeño y periférico que ofrece un lugar de tanto destaque a un aparato militar-policial costosísimo y baladí cuyas únicas utilidades fehacientemente demostrables radican en el control de la población propia y en su operativa cotidiana ad majorem Castro gloriam; es decir, en su traducción no bíblica y secular, para mayor gloria de Fidel? ¿De qué otro modo considerar la inscripción en la planificación central de las ocurrencias, desplantes y caprichos del "caudillo" que van -en tanto su expresión más sublime y tomando las realizaciones productivas del "socialismo" como si se tratara de una competencia olímpica- desde aquella fallida zafra de los diez millones de toneladas de azúcar hasta la construcción de autopistas que no guardaban ninguna relación con el parque automotor realmente existente; pasando, naturalmente, por ideas tan "brillantes" como la cría de cocodrilos, la transformación de todo metro cuadrado de tierra en un cafetal o la exportación de palillos de dientes? ¿No será cierto, James, que esto puede tener algo que ver con la sistemática falta de iniciativas por parte de "los intelectuales y los políticos"?

La clave de todos los problemas cubanos, entonces, hace mucho tiempo que ha dejado de ser un enigma a descifrar y no radica en otra parte que en ubicar la construcción del único socialismo realmente posible en la conciencia y en la voluntad de la gente. Hoy, los ecos monocordes se atreven a reconocer que el "socialismo" cubano puede ser reversible como consecuencia de los errores propios y ya no de las agresiones ajenas: el propio Fidel Castro, en su discurso del 17 de noviembre pasado, se encargó de extenderle a su grey los "permisos" correspondientes para opinar de tal modo. Sin embargo, la constatación más oportuna es bien distinta. El "socialismo" que supuestamente construyeron el Partido "Comunista" y su caudillo no es reversible por la sencilla razón de que nunca existió y la única oportunidad a la vista no consiste en otra cosa que en el desarrollo de un vasto proyecto autogestionario que le restituya al pueblo cubano todo aquello que el Estado y su "vanguardia" se encargaron de arrebatarle perseverantemente. Y ello es largamente inseparable de un amplio, perdurable e irrestricto régimen de libertades: libertad para pensar y opinar, libertad para organizarse, libertad para movilizarse y libertad, en fin, para que la gente se haga cargo de su propia vida sin ningún tipo de mediatizaciones y curatelas. Porque, en definitiva, el socialismo será libertario o no será: una confirmación histórica que el tímido, vacilante y tardío paso al frente de James Petras no termina de reconocer.

                     Movimiento Libertario Cubano
               
movimientolibertariocubano@yahoo.com.mx
                  
www.movimientolibertariocubano.org


"...la libertad sin el socialismo es el privilegio, la injusticia;
y que el socialismo sin la libertad es la esclavitud y la brutalidad."
M. Bakunin, 1867
Movimiento Libertario Cubano (MLC)
http://www.movimientolibertariocubano.org


Primer  Anterior  2 a 16 de 16  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 18/03/2006 10:56
Este es el artgículo citado.
No aparece el 6 de mayo, ni es el título exacto.
Pero es lo mas aproximado en fecha y tema entre todo lo publicado por Petras en rebelión.

No aparece esta referencia:
"«La responsabilidad de los intelectuales: Cuba, los Estados Unidos y los derechos humanos»  (www.rebelion.org; 6 de mayo del año mencionado). Allí, entre otras impresentables ocurrencias, calificaba a la moralidad como "falta de honradez". Además, la emprendía sin tasa ni medida contra aquellos que, cuando de Cuba se tratara, «se lanzan a una serie de acusaciones infundadas y de falsificaciones desprovistas de cualquier contexto especial que hubiera podido servir para clarificar las cuestiones y proporcionar una base razonada a... "los imperativos morales"».

Se entiende que las frases entrecomilladas son citas textuales.
Pues bien no aparecen en el texto.





Conferencia de James Petras en La Casona, Buenos Aires, 12/05/03
Los intelectuales, Cuba y los Derechos Humanos
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=2422
James Petras
Rebelión

Muy buenas noches amigas, amigos, compañeros, compañeras y participantes aquí, quiero agradecer a La Casona por esta oportunidad para abrir una discusión e intercambio de ideas sobre un tema caliente que ha provocado un debate en Europa, Estados Unidos, Canadá, América Latina, en todos los países.

Estaba en Pontevedra, en Galicia, hace 3 ó 4 semanas en un gran coloquio sobre el tema de la responsabilidad de los intelectuales y los problemas actuales, donde estuvieron algunos notables como Eduardo Galeano, Alfonso Sastre, Adolfo Sánchez Vázquez y otros personajes, incluyendo a este profesor con su mala espalda. Allá estábamos discutiendo y la noche que intervino Galeano, al final, dijo que estaba contra los fusilamientos, el encarcelamiento de los disidentes en Cuba y que él siempre está por la libertad y más, que él siempre estuvo contra el partido único y otras cosas. Más de la mitad de la audiencia quedó un poco en estado de shock porque terminó de hablar, tomó sus papeles y se fue. Un sindicalista gallego un poco enojado gritó desde atrás: 'Galeano, ¿quieres conseguir el Premio Nobel?'. Bueno, la gente miraba un poco preocupada y esa noche Alfonso Sastre, yo y otras personas decidimos que debíamos hacer algo por la forma en que se planteó el tema y entonces firmamos lo que llamamos la Declaración de Pontevedra y conseguimos el apoyo del alcalde del Bloque Nacional Gallego, de sindicalistas, profesores, firmaron el documento más de 200 personas en un día.

Después fui a Madrid y en los días anteriores El País, un diario que odia a Cuba visceralmente y no son simples desinteresados porque la empresa Polanco que dirige El País comparte acciones con la Federación cubana-americana de Miami, entonces tienen un interés particular en publicar cualquier ensayo de cualquier persona, individuo, izquierdista, ex izquierdista contra Cuba, y los días anteriores publicaron a Ernesto Sábato, un progresista que siempre toma posiciones de la derecha. Conocemos a estos personajes, a Sábato y otros vacas sagradas, Carlos Fuentes, Vargas Llosa y demás.

Ese sábado cuando estábamos caminando por el centro de Madrid pasamos por la Puerta del Sol, donde los burócratas sindicales, El País y otros, convocaron a una protesta anti-Cuba, pasamos, escuchamos algún grito pero igual entramos en la plaza y vimos que eran 700 u 800 personas. La mitad eran cubanos de toda Europa. En la plaza había más turistas que manifestantes. Al final, subió a hablar un representante del Partido Socialista y los fanáticos empezaron a tildarlo de filo comunista gritándole: '¡Qué haces aquí, vete a Cuba!'. Justo le tiraron un tomate podrido y tuvo que bajar de la plataforma. Entre las 800 personas creo que la mitad eran cubanos de Europa que se juntaron allá, es decir, con toda la propaganda, con toda la presión de El País y los medios, el pueblo español no responde, ni las bases del PSOE, ni las bases sindicales y, mucho menos, de Izquierda Unida, a pesar que el Secretario General del Partido Comunista de España, muy vergonzosamente, dijo luego que no había participado -aunque tenía las mismas críticas- porque no lo habían invitado. Podría recibir otro tomate podrido de los derechistas que dominaron la reunión.

Primero, creo que debemos empezar discutiendo cuál debe ser el papel de los intelectuales en general en relación con los grandes acontecimientos que están pasando en el mundo. La primera responsabilidad es clarificar cuáles son los grandes acontecimientos de nuestra era: guerras, conquistas, colonización, militarismo, dominación, resistencia popular, resistencia que viene de movimientos seculares, religiosos, lo que sea, la afirmación de las indentidades de los pueblos frente al gran enemigo de la humanidad y el gran número de víctimas que están muriendo por las bombas, destruyendo una civilización de más de 5000 años, entre otros ejemplos.

Segundo, debemos desmitificar el poder y la manipulación del poder. Tenemos ejemplos muy presentes. Cuando el señor Colin Powell, según Página 12 el hombre blando, presentó las pruebas de que Irak importaba uranio, no mostró ninguna evidencia en ninguna parte de su fabricación. Un mentiroso frente a la Asamblea Nacional. Desmitificar a la clase gobernante imperialista, incluso al buen muchacho negro que habla por el poder. Podríamos hablar de muchos casos de cómo el intelectual tiene que criticar el poder y desmitificar las ideologías que lo justifican, las distorsiones que utiliza como pretexto, las armas biológicas que supuestamente justificaban la guerra contra Irak. Ahora los inspectores norteamericanos en la televisión están bromeando: 'no hay nada aquí, no hay nada en ningún lado, ya volvimos treinta veces al mismo lugar y no encontramos nada'. ¿Y qué significa eso? Una guerra de conquista, de dominación, de pillaje de los museos, queman libros en las biliotecas, mientras ellos están poniendo el ojo en otro lado.

En el caso que discutimos de Cuba hay una gran diferencia entre los intelectuales como Saramago y los derechistas de siempre como Carlos Fuentes, Vargas Llosa y cualquier otro que uno puede citar que siempre están listos para hacer el coro del imperialismo, pero del otro lado tenemos personajes que tienen una reputación, incluso han hecho críticas en diferentes momentos, en diferentes formas contra la política exterior de EE.UU., en defensa de los derechos humanos, etc., etc. Entre ellos personajes como Chomsky, como Saramago, como Galeano, como Eduard Said, el palestino que vive en EE.UU. y otros. Una larga lista de franceses que siempre se prestan a este tipo de juego. Recuerdo en los '70 el caso Padilla que pasó por una comisaría por 48 horas y rompieron con Cuba Jean Paul Sartre y los demás, provocando la reacción de nuestro querido gran escritor Julio Córtazar. Del otro lado tenemos muchos intelectuales que están defendiendo a Cuba como Benedetti y muchos más, podría hacer una larga lista.

Ahora, ¿cómo entender el fusilamiento de 3 personas y el encarcelamiento de otras 80 llamadas disidentes? Hay que entender 2 cosas: los hechos concretos y el contexto de las actividades para tener una perspectiva sobre la conducta de Cuba.

Tratemos primero sobre los mal llamados disidentes porque criticar a un gobierno, escribir un artículo, no es un gran crimen en sí mismo, no, yo por lo menos no creo que sea un crimen que merezca sentencia, pero en este caso hay que ver de cerca quiénes son estas personas y para hacer eso, primero, tenemos que entender cómo funcionaban. Yo por casualidad estaba en la computadora con el único dedo que utilizo para bajar las cosas, me cuesta mucho porque soy un poco miope y tengo que ver de frente para poder leer con cuidado el sitio web de la Agencia Internacional para el Desarrollo (AID), el brazo de ayuda externa de EE.UU. que tiene una sección que se llama reporte de Cuba (Cuba report) y dentro de ese sector tiene un sumario de sus actividades en Cuba. Esta es información pública, por lo menos lo era y tienen una descripción del nuevo proyecto para derrocar al gobierno de Cuba, crear condiciones para lo que llaman una transición y desde 1997 hasta marzo del 2003 financiaran 8.5 millones de dólares para proyectos de publicaciones, reclutamiento y funcionamiento de los grupos llamados de Derechos Humanos, periodistas, economistas, etc. Entonces, estos personajes son funcionarios del gobierno norteamericano. En el documento describen el criterio para entregar el dinero ¿por qué lo están regalando? Porque este proyecto empieza en 1997 y es derivado de la Helms-Burton Act que pone condiciones restrictivas sobre todas las relaciones con Cuba, un proyecto para derrocar al gobierno.

Helms y Burton son los 2 senadores más reaccionarios en todo el Senado derechista. Para que tengan una idea Menen parece un progresista frente a Helms y Burton, éste era un gran apoyo de D'Abussoin, el asesino del obispo Romero en El Salvador, quería darle una medalla por servicios al mérito. A partir de Helms y Burton viene el proyecto Cuba de AID. Ese documento dice que la función de este proyecto es financiar otros que coincidan con los intereses políticos, económicos y diplomáticos del gobierno norteamericano. Está claro que ellos reciben el dinero una vez evaluados en términos de cómo sus intereses, sus ideas y actividades coinciden con los de EE.UU. ¿En qué? En el proyecto de EE.UU. de derrocar al gobierno de Cuba.

James Cason el representante de EE.UU. en Cuba, un cuasi embajador, desde que llegó al país en septiembre del año pasado hasta marzo del actual, actúa como un político contrarevolucionario. Estiman que hizo viajes de 6.000 kms por toda la isla pasando por todos los lugares donde funcionaban los disidentes-funcionarios de la embajada, dándoles instrucciones, pasando propaganda para circular, abriendo canales para que se puedan difundir sus materiales en el exterior, orientándolos en cómo reclutar y hacer campañas. Es el capataz de los mal llamados disidentes, hasta los invitaba a su casa para darles arengas contra Cuba, animarlos a utilizar su casa como un lugar de trabajo, algo poco diplomático por decir lo menos. Entonces esta actividad de ser funcionarios pagados por un poder extranjero para hacer una transformación de Cuba es una actitud que va más allá de ser un disidente escritor, bibliotecario, lo que sea, es una persona que se debe registrar como agente de un poder extranjero. Hay una ley en EE.UU. que está en el código norteamericano título 18 sección 951: "cualquier persona que opera dentro de EE.UU. sujeto a la dirección o control de un gobierno extranjero o no oficial puede ser sometida a persecución criminal y 10 años de cárcel". Bajo la ley norteamericana si alguien funcionara como estos funcionarios de la embajada de EE.UU., sin registrarse como agente extranjero, lo llevarían a juicio y podría recibir hasta 10 años de cárcel y una multa de más de u$s 100.000. Ahora esta gente no registrada siguen funcionando y presentándose como disidentes. En el momento que EE.UU. pone a Cuba en la primer lista corta de los países enemigos que pueden atacar, más aún cuando le preguntaron a Powell dijo: 'no atacaremos a Cuba aún, pero tal vez mañana, o pasado mañana …'. Es como la amenaza durante la Segunda Guerra Mundial cuando EE.UU. estaba haciendo la guerra contra Alemania, agarraron a todos los japoneses independientemente de lo que hicieran, muchos incluso tenían sus hijos en el ejército como conscriptos pero eso no los ayudó. Pasaron 5 años en campos de concentración y sólo 40 años después recibieron una pequeña compensación y disculpas. En Inglaterra, la cuna de la democracia, a los alemanes también los tenían encerrados. Volviendo a Cuba ¿que país va a permitir funcionarios de otro que amenaza destruirlos, caminar, planificar y funcionar libremente por el país agredido? En EE.UU. por una simple expresión de simpatía, no por actuar, no por complotar con funcionarios, no, por una simple expresión de simpatía por Al Qaeda, por las FARC o cualquier otro grupo, puedes ser encarcelado y quedar incomunicado y el hábeas corpus suspendido, no con un juicio de una semana o dos como critican a Cuba.

Los intelectuales como Chomsky y Zinn, conocidos personajes que firman muchos documentos, fueron reclutados para firmar un documento por una persona que yo conocí hace 40 años que era una trosquista que empezó criticando al stanilismo y después descubrió que hay otras causas también. Joanne Landy dejó el trosquismo y empezó a llamarse socialista democrática, con tanto éxito que recibió una beca de u$s 300.000 por la Mc Arthur Foundation, por méritos, sin que haya publicado nada significativo en su vida. No sé si tiene 1 ó 2 libros en su vida, pero ya ganó esto y después subió al Consejo de Relaciones Extranjeras, el Council on Foreign Relations (CFR) que es el principal centro de asesoría del Departamento de Estado y las políticas del imperialismo y, sin embargo, sigue llamándose socialista democrática. Esta mujer apoyó el bombardeo de Yugoeslavia, de Afganistán, apoyó al ELK en Albania, las mafias que destruyeron y expulsaron 250.000 serbios y gitanos. Este personaje que les cuento preparó el documento que firmó Chomsky y no hace una sola referencia de la situación de guerra de EE.UU. contra Cuba. Dice que están por la autoderteminación de Cuba, contra la agresión general de EE.UU. contra Cuba, lo demás es una denuncia que va más allá. Chomsky firmó un documento de apoyo a la transición en Cuba, es decir, por cambiar el régimen, la línea de Bush, no menciona ni una palabra de los grandes alcances de Cuba en educación, empleo, salud gratuita, los voluntarios cubanos que trabajan en docenas de países en Africa, no mencionan que Cuba en el único país que vota a favor de una Comisión de Derechos Humanos que investigue las violaciones de EE.UU. e Inglaterra en Irak, el único país que defendió una comisión para ir a investigar en Irak mientras todos los demás países de Europa y América Latina no se atreven. Todo eso queda afuera. La dictadura, los fusilamientos, los pobres disidentes indefensos, eso lo firmaron y dicen que no sabían quién era la autora y sus antecedentes, pero son intelectuales críticos, estudiosos, analiticos, ¿cómo que no van a saber? ¿Cómo explicamos la actitud de Chomsky y los demás? ¿Cómo entendemos eso? Yo creo que hay varias explicaciones. Una es que Chomsky fue siempre antimarxista, nunca apoyó ninguna revolución a excepción de la sandinista porque permitía que la oposición contrarevolucionaria funcionara en el país, lo que llamaba el pluralismo. También estas personas están contra la intervención norteamericana, son fuertes críticos de la política imperialista pero nunca apoyaron a los pueblos en lucha, nunca apoyaron la revolución china, nunca apoyaron al pueblo vietnamita, nunca apoyaron la revolución de Fidel Castro, por eso ahora en EE.UU., los millones que protestaban contra la guerra, esa gran ola desaparece, porque este movimiento nunca firmó su apoyo por la lucha de los iraquíes, como nunca apoyaron la lucha revolucionaria de cualquier otro país. Siempre apoyan a los perdedores, a los allendistas, les gusta abrazar todas las figuras trágicas pero no a los protagonistas exitosos, siempre encuentran alguna excusa, alguna burocracia, algún vínculo con los soviéticos, algunos stalinófobos simpre descubren la mano de Stalin después de 50 años de estar muerto, resucitan a Stalin en cualquier momento, pero ¿por qué este problema de resistencia a solidarizarse con Irak? Bueno, son musulmanes son chiítas o sunnitas, son no sé qué. Lo único que apoya Chomsky son las comunas anarquistas de hace 70 años atrás, ese es su ejemplo, las comunas anarquistas en Cataluña y peor aún, siempre utilizan los equivalentes morales: contra Bush, contra Saddam Hussein, contra Milosevic. Uno defiende su país por más tirano y corrupto que sea, está allá en una forma mala, pero está allá, luchando. El problema del tirano es para los pueblos decidir cuando los quita, el problema de los equivalentes morales es para ser críticos responsables pero también para dar la justificación para la agresión porque las mismas críticas que hacen estos intelectuales con sus equivalentes son las que hace el imperialismo. A pesar de que son dictadores, como decía Trotsky cuando hablaba en los años 30 sobre China o Etiopía frente a la invasión del imperialismo italiano, la izquierda tiene la responsabilidad de apoyar la resistencia cualquiera que sea el liderazgo para que en el proceso de resistencia se desarrolle en perspectiva no sólo antiimperialista sino antidictador o antiemperador.

Esto escapa a nuestros críticos moralistas y el peligro cuando hacen estas declaraciones que estamos por la libertad en cualquier lugar y en cualquier momento, como si la policía secreta en Argentina entrara en una habitación buscando la esposa escondida bajo la cama y el esposo grita: 'compañera dejaste de lavar los platos, no estás cumpliendo con tus deberes'. Bueno la sacan debajo de la cama y se la llevan. Tiene razón de la falta de igualdad de sexos pero no es por la igualdad que no está cumpliendo la persona bajo la cama. No es cierta la violación de la igualdad como tampoco lo es en Cuba cuando alguien grita libertad. Cuando alguien te pone la pistola en la boca ¿por qué no hay libertad? Porque esos están actuando de la misma manera que los tiranos imperialistas, por el hecho de que un país está conquistando y destruyendo al otro con sus defectos, sus líderes autoritarios que están defendiendo la soberanía política y social y más aún cuando uno piensa en las consecuencias de lo que pasó en la URSS, lo que pasó en los países de Asia, lo que pasó en Rumania y los demás países, la catástrofe en Rusia, en Polonia, donde ahora hay millones de personas sin ningún acceso a la salud, donde el desempleo es tan alto que la primera exportación de Moldavia son esclavas sexuales que llenan los burdeles. Ninguno de estos intelectuales, por ejemplo, Robert Brenner, un economista de gran prestigio, historiador económico, estuve con él y le decía: 'Mire usted a Lech Walesa, ya los trabajadores ni tienen astilleros, allá donde podrían hacer huelgas ya no existe más el empleo, ahora están vendiendo diarios en las calles, entendemos que la CIA y el Papa financiaran Solidaridad cuando el cuadro de Pilzudsky, un facho nacionalista, estaba sobre el escritorio de Walesa. ¿ No crees que era mejor seguir reformando el comunismo para hacerlo más democrático, en vez de derrocarlo y reemplazarlo con las mafias que dirigen el país ahora?. 'No', me decía Robert Brenner, 'cualquier cosa es mejor que el stalinismo'. Otro intelectual de primera línea que también firmó el documento. Es una situación dramática porque primero no hay una reflexión crítica sobre las consecuencias de sus decretos moralistas, nadie quiere decir que diez millones de rusos murieron antes de su tiempo, desde 1988 hasta el 2000. Ahora la vida en Rusia está por debajo de la edad de Bangladesh, 58 años. Habría cosas como para que estos intelectuales prominentes e ilustres hacieran alguna reflexión, bueno, tal vez hicimos un mal cálculo, que lo que cae y lo que lo reemplaza no es necesariamente mejor, debemos repensar como hacer política para que no caiga todo el plan nacional de salud, el pleno empleo, no era exactamente un estado stalinista, era un estado de bienestar social y cuando cae ese estado de bienestar en Europa Oriental fue la señal para bajarlo en Europa Occidental. Una simple pregunta: los alemanes del este ¿dónde tenían más protección social? ¿durante el comunismo o ahora en la fila de pago del subsidio por desempleo?

Pasando al otro tema, el de los fusilamientos, la pena de muerte, algo muy común en EE.UU. donde estos intelectuales nunca firmaron un documento de difusión mundial. Están en contra, no hay duda, criticaron a Bush, pero no con esta fuerza, con esta difusión. Hay 10 veces más muertos en Texas que en Cuba en los ultimos 10 años pero no veo ningún intelectual montando una campaña internacional y atacando a los EE.UU., mucho menos a Joanne Landy, autora de este documento, asesora del imperialismo que junto a nuestros intelectuales prominentes no se pregunta ¿qué pasó en Cuba las 3 semanas anteriores a los fusilamientos? Secuestraron 3 aviones con fusiles, facas y lo demás y los llevaron a EE.UU. Los secuestradores están libres. Ahora mismo caminan por las calles de Miami y si dicen de llevarlos a un juicio, fíjate cómo los va a tratar un juez de Miami con todo el gobierno controlado de arriba a abajo, hasta los barrenderos están controlados por la mafia cubana. Libres los secuestradores terroristas, entonces uno dice, bueno, hay una coincidencia aquí, porque sabemos que desde el 11/9 la Fuerza Aérea de EE.UU. tiene orden aparente de derribar cualquier avión que no responda a los códigos de vuelos del país y por qué permitieron a estos aviones entrar a EE.UU. sin ningún acompañamiento militar y mucho menos lo tocaron al bienvenido avión. Alguna coordinación es una buena hipótesis y ¿por qué quieren provocar? Porque quieren hacer daño al turismo. Decir, Cuba no puede controlar los viajes, para que los once millones de cubanos mueran de hambre, sabiendo que los ingresos de turismo suman el 40% de las divisas de todo el país y más.

Para dar un poco de contexto, hay un acuerdo de emigración entre Cuba y EE.UU. y Cuba quiere que se vayan los que no les gusta Cuba, que se vayan, que se vayan todos los que no quieren vivir en Cuba; es EE.UU. quien impone las restricciones fijando las visas de salida en 27.000 por año legal. Este año Washington sólo permite 500 visas ¿qué significa? Todos los que quieren salir no pueden conseguir visas, los inmigrantes, entonces otro incentivo para los que actúan ilegalmente.

¿Cuál era la actividad de los raptores? Todos tenían antecedentes criminales, casi todos, entre los 8 creo que sólo a 2 les faltaban antecedentes, unos lúmpenes, para decirlo claro, no eran cualquier cubano buscando la libertad.

Segundo, amenazaron a las personas con facas, pusieron un cuchillo en la garganta de una pasajera. Gente que quiere salir o matar, o matar y salir, entonces los capturaron a los 8, los juzgaron y fusilaron 3 a pesar que el gobierno dice textualmente: es una decisión dura. No analicemos bajo condiciones separadas el pirateo y la manera de poner miedo a los terroristas que anunciaron que existían otros complots, otros acontecimientos planificados y con eso los cubanos creen que van a aumentar el costo de cualquiera que trate de secuestrar. Bueno, uno puede aceptar o criticar, yo personalmente creo que mejor es cortar caña durante 40 años, como cuando pasé la gran zafra en el 69 cortando caña 2 meses; un trabajo brutal, particularmente en julio, agosto, yo preferiría el castigo en el aire fresco, cortando caña, perdiendo peso y haciendo un trabajo honesto en vez de un trabajo terrorista por el Imperio, pero no, los cubanos dicidieron como una excepción a la regla hacer lo que hicieron. Bueno, no es un gran acontecimiento, en este sentido hay miles de personas muriendo por el SAR en China por el descuido del gobierno. En EE.UU. hay cosas tan comunes que tenemos 2.000 personas esperando la pena de muerte, 90% negros e hispanos, tiramos bombas sobre Irak, fusilamos manifestantes civiles.

¡No hay peor forma prepotente que como actúa Saramago sólo con Cuba! ¿Por qué Saramago? Cuba resiste la invasión norteamericana de Irak, Cuba defiende a los palestinos, Cuba hace una politica a la que El País, donde publica Saramago, se opone; apoyaba los bombardeos de Yugoeslavia, apoyaba a Javier "Javi" Solana, apoyaba al PSOE que mataba genta a partir de los Gals, fuerzas paramilitares y, señor Saramago, para ser coherentes, ¿Por qué no rompes con El País? ¡No te das cuenta! Apoyaban al imperialismo norteramericano antes de Aznar y van a seguir apoyándolo después de Aznar, ¿Por qué no dices voy a romper con todos los que no aceptan el 100% de mis principios? ¿Por qué no?

Saramago ahora es Premio Nobel, escribe en El País, es prestigioso, recibe honores. La gente intectual que empieza a sentir con sus títulos y certificados honoris causa se creen que tienen ahora una obligación de balancear sus críticas en un lado con las críticas en el otro lado, lo que el Departamento de Estado llama: izquierdistas responsables. Ellos siempre buscan un izquierdista responsable para defender sus causas con las cláusulas de escape de siempre. Hay que decir Cuba es una dictadura pero también apoyarla y oponerse a la intervención o decir Cuba es una tiranía pero creo que EE.UU. no debe meterse, entonces esta forma de pensar de hacer agresiones con todo lo que significa el moralismo desorienta a muchas personas porque tienen la imagen de estos intelectuales consecuentes en todo lo que hacen en vez de ver los intelectuales como clase, sometidos a presiones tanto populares como del imperialismo y no ver que vacilan, que van de un lado a otro, como cambian de ropas interiores todos los días.

También creo que el factor de presión después de la victoria y conquista de EE.UU., que tiene el poder mundial, la concentración de armas amenazando a todos adentro y afuera del país, inconcientemente o concientemente empiezan a hacer concesiones para no ser tachados de extremistas, de antiamericanismo. Yo conversaba hace un año con Chomsky hablando del mismo tema y me dijo: "me molesta mucho que me llamen antiamericano", yo le decía: 'es normal, ¿que te importa? te pueden llamar cualquier cosa', pero indicaba que le molestaba.

Finalmente, creo que debemos entender que es trágico cuando hay divergencias y cuando los intelectuales aplican un microcospio a la revolución cubana y un telescopio al enemigo principal en el mundo, cuando no son capaces de poner las críticas en un contexto. Yo estuve en Cuba discutiendo con todos sobre problemas de la economía, sobre el énfasis en el turismo, el peligro de los ciclos de turismo, la autosuficiencia, la falta de arroz, por ejemplo, no hay razón que esto suceda, muchas cosas discutimos, críticamente, la posibilidad de ampliar la participacion en las asambleas, etc., dado el buen contexto de un país que ha resistido 50 años de boicot imperialista, un país que es un ejemplo para todo el Tercer Mundo en la política social, etc. Yo creo que debemos tener esta perspectiva, no siempre aplaudir a Cuba pero sí reconocer sus grandes méritos y tomar en cuenta este punto que decíamos al comienzo: poner las cosas en proporciones.

No se puede romper con Cuba, cuando Cuba defiende la autodeterminación sin el consenso del Consejo de Seguridad de la ONU, cuando Cuba se atreve a criticar la violación de los derechos humanos frente a EE.UU. que está masacrando civiles en Irak ocupado, cuando Cuba apoya a América Latina siendo el país que más ha dado voluntarios para la salud, más que cualquier otro, que nunca han llevado a las empresas privatizadas para explotar la región, todo eso hay que ponerlo en perspectiva y dentro de eso uno puede hacer sus comentarios sobre los problemas y puede decir: a pesar de ser funcionarios, a pesar de recibir dinero, a pesar de trabajar con el embajador Cason, a pesar de tratar de derrocar el gobierno, no deben darle 20 años de cárcel, tal vez 5 ó 10 años, pero poner eso como un principio como hace Saramago y decir: 'Hasta aquí llegué y me voy' ¿Dónde vas Saramago? Yo creo que hay que ver la dinámica porque como sabemos todos empiezan con una migraña y terminan con gangrena. Muchas gracias.



Respuesta  Mensaje 3 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 19/03/2006 05:59
El artículo al que contestó el MLC fué este
 
 
 
 
 
Comentarios de James Petras. Lunes 20 de febrero de 2006. (CX3 6 Radio Centenario)
Angeles: Ya tenemos a James Petras que volvió a los Estados Unidos después de haber estado en Cuba.
Petras: Bueno, hay muchas cosas para contar. Primero fue muy exitosa la Feria del Libro de La Habana, donde presenté un libro que se llama "Imperio con imperialismo", después participamos con el Ministro de Cultura, Abel Prieto, en una conferencia sobre los intelectuales y su responsabilidad social. Y más cosas.
Se presentó un trabajo sobre inversión extranjera, costos sociales, riesgos políticos y las alternativas, que tiene que ver con un tema bastante caliente en toda América Latina, tanto Uruguay, Bolivia y Brasil; lo que provocó bastante debate, particularmente de un funcionario chileno que estaba en la conferencia.
Después, tuvimos conversaciones con Felipe Pérez Roque, que es el Ministro de Relaciones Exteriores, y con Ricardo Alarcón, que es el Presidente de la Asamblea Popular (Parlamento) sobre temas del día. Además, fuimos a visitar varios hospitales para ver las condiciones y los proyectos; mantuve conversaciones con el Ministro de Economía, Rodríguez.
También anduvimos caminando por las calles y conversando con personas sobre lo que está pasando, las condiciones y lo demás. También tuve oportunidad de conversar con varios profesores y otros observadores, incluso muchos visitantes extranjeros que estaban allá.
La impresión es que Cuba ya ha recuperado gran parte de lo que perdió en el período especial después del ’90, que está en una situación mucho mejor con sus vínculos y comercio con Venezuela, está asegurado el petróleo y energía, y han abierto unas mejores relaciones con América Latina.
Hay otras cosas que creo que son parte de un proceso de desarrollo, que son las contradicciones que Cuba ha tenido frente a los desafíos, y el gobierno empieza a tomar algunas medidas postergadas, que creo eran necesarias, como el problema de vivienda, que tienen un déficit aproximo de un millón de casas.
El plan de gobierno es construir 100 mil casas por año, porque la situación habitacional esta muy deteriorada y es una gran necesidad. La gente exige que este plan empiece a funcionar también, porque la política internacionalista de Cuba en relación con la ayuda médica es muy positiva, pero creo que las condiciones de los hospitales y clínicas en Cuba se han deteriorado, en mi opinión personal.
Creo que deben concentrar más en el desarrollo y restauración, el mejoramiento de las condiciones y planta física de medicina en Cuba que están -digo yo- bastante deterioradas, a pesar que algunos esfuerzos de restauración están en proceso. Hay un contraste, incluso yo creo que algunas clínicas en África y en Venezuela son mejores que lo que tiene el pueblo cubano en Cuba. Este internacionalismo es muy positivo, pero creo que la gente está exigiendo que se concentre más en el desarrollo interno, que es una cosa a tratar de equilibrar.
El gobierno ha empezado un programa de exploración en la salud y educación y vamos a ver si tienen éxito en este proyecto de desarrollo interno, que es necesario especialmente cuando ya tienen más recursos, y las decisiones política sobre como van a utilizar este excedente es muy importante.
El excedente en parte viene de un plan de ahorro de electricidad que según dice Castro podría llegar hasta mil millones de dólares.
Angeles: Si, hablan de una revolución energética.
Petras: Sí, eso es lo que están lanzando, vamos a ver, no tengo cifras para evaluarlo en los primeros dos meses del proyecto. También tiene un gran problema de despilfarro, incluso robo de recursos estatales, particularmente la gasolina; y eso lo han reconocido y lanzado a las nuevas generaciones para rectificar el programa y reemplazar los gasolineros que están cometiendo estos delitos.
Pero te voy a decir, María, que a mí lo que me preocupa, más que el robo de cada funcionario, empleado, es el problema de los Ministros que toleraron el robo de cientos de millones. ¿Qué estaban haciendo?, preguntaba yo, estaban durmiendo o estaban implicados en este robo y no despidieron a nadie.
Yo preguntaba por qué, si ocurría en cualquier empresa privada o pública, si no asumen las responsabilidades. Es una cosa muy grave. Tienen que darles una patada en el culo lo mínimo, si no llevarlos a juicio.
Hay un lanzamiento de un proceso de rectificación, movilizando gente y poniendo en orden algunas cosas urgentes. Creo que el equipo que está es políticamente responsable, que empiezan a reconocer estos problemas, y también el problema de equilibrar la participación negra en la sociedad. Uno nota en muchos lugares que hay una desproporción de blancos y creo que hay cosas para hacer. Como Fidel mismo dijo: “necesitamos una Revolución dentro de la Revolución”.
Angeles: Si. Fue muy duro en el discurso que lanzó todo esto, hacia adentro...
Petras: Sí. Creo que estos puntos que estoy anotando son existentes, lástima que la gente tiene que esperar que Fidel lance eso para que empiece a tomar forma. Yo creo que los intelectuales y los políticos deben tomar iniciativas y no siempre esperar que Fidel pronuncie el discurso para que el problema de repente surja como un problema.
Creo que la sucesión en Cuba esta ya en discusión, quién y cómo se va a reemplazar a Fidel Castro. Si quieres mi apuesta...
Angeles: Sí.
Petras: Yo decía que va a ser Felipe Pérez Roque, que es el Ministro de Relaciones Exteriores que tiene mucha calificación, antecedentes, y es la persona más lógica para sustituir a Fidel.
Pero hay otros candidatos, otras personas que se piensa que pueden ser igual candidato, pero por lo menos están empezando a ponerlo sobre la mesa y a prepararlo, independientemente que Fidel todavía tiene mucha fuerza y mucha capacidad de tomar decisiones.
Angeles: Mientras estuviste allí en Cuba hubo un Encuentro de Economistas.
Petras: Sí. Eso es lo que contaba sobre mi trabajo sobre inversión extranjera y esta conferencia siempre es una mezcla de economistas de varios puntos de vistas, marxistas, pasando por -yo creo la mayoría- socialdemócratas cristianos y más allá de eso algunos neoliberales, particularmente de Chile y otros países en este sentido.
Angeles: ¿De Uruguay hubo alguien?.
Petras: No recuerdo ningún uruguayo. Mi circulación en la conferencia estuvo muy limitada y me encontré con muchos argentinos, Claudio Katz, el brillante joven marxista, Atilio Boron que siempre esta allá y Miguel Bonasso, estaba allá. Varias otras personas que uno puede reconocer, colombianos, venezolanos muchos, etc. Pero no recuerdo ningún economista uruguayo, no sé si es por el hecho que el neoliberalismo de Tabaré Vázquez y Astori los han absorbido.
Pero era una conferencia interesante por la alta calidad de las intervenciones, por el espectro del debate. Uno de los invitados especiales era el ex-primer Ministro de Malasia, que es un político asiático del nacionalismo suave, de vez en cuando intervenciones críticas, de diferentes proyectos imperialistas, pero al fin de cuentas no va más allá del nacionalismo burgués. Pero frente a lo que esta pasando en América Latina, parece algo progresista.
Angeles: Mientras estabas allí fue lo de Haití y el desembarco de algunos tropas en República Dominicana, ¿hubo algún comentario allí?.
Petras: La posición oficial era apoyo de la elección de Preval y muy positivo. Los cubanos piensan que van a reintegrar la Escuela de Medicina que tenían allá durante el período de Aristide. Creen que Preval va a ser un paso positivo. Yo creo que la mayoría de la opinión pública que está pensando en estos temas, ve que podrían mejorar las relaciones en el Caribe.
Yo personalmente creo que es una expresión de la voluntad popular la de repudiar los títeres que EEUU impone, pero también tengo mis dudas de que Preval vaya a cambiar muchas cosas. Su ascenso se dio por la intervención de los EEUU y creo que su puesto está muy condicionado por la presencia de las tropas y las condiciones que la oposición esta imponiendo.
Pero por lo menos podría bajar los asesinatos cometidos por los paramilitares pro-norteamericanos y tal vez, introducir alguna medida para mejorar las condiciones de vida. Muchas veces los candidatos con mucho apoyo popular despiertan muchas expectativas, y después de las elecciones tienden a modificar en un grado y en otro, sus programas y dejar mucha gente frustrada.
Creo que hay que ver que es lo que Preval puede hacer. Tiene unas opciones frente a él. Venezuela ofrece petróleo a precios muy bajos, pero al mismo tiempo los EEUU están presionando para que se integre a un bloque contra Venezuela. Y con el ejército brasileño, uruguayo, argentino, chileno junto con la marina norteamericana allí, creo que está en un gran dilema: entre tomar nuevas iniciativas internacionales y por otro lado, someterse a la presencia militar de los cipayos que están allá.
Angeles: Petras, retomaríamos contacto el lunes que viene.
Petras: Si, que pases bien, toma sol pero moderadamente. ¡Ojo! con las aguas contaminadas de las playas que están a punto de ser problemas para los que van a bañarse en Malvín, en los lugares centrales...
Angeles: Si por que el Río Uruguay va a traer todo para el Río de la Plata...
Petras: Si. Esto de la celulosa es un gran escándalo. La política unilateral de Vázquez perjudica a los argentinos y está recibiendo una fuerte respuesta por parte de estos. Yo no sé donde tienen la cabeza cuando dan una patada a su vecino y después gritan porque les devuelven el golpe, me parece infantil.
Si vas a tomar medidas unilaterales hay que esperar que los afectados van a tomar su propia medida en respuesta, y la soberbia de Astori y Vázquez es realmente chocante. Lo que van a ganar con la celulosa, que es mínimo, lo van a perder todos los hoteles y restaurantes y lo demás; perjudicando incluso el turismo argentino. No creo que hicieran el mínimo análisis de costo y beneficios, son idiotas. Incluso Astori, supuesto economista inteligente.
Angeles: Te digo que ahora se han sumado los españoles que han venido de Pontevedra y que tienen una planta de celulosa instalada por Ence desde hace años...
Petras: Si, la conozco. Estuve varias veces, huele como un basurero a kilómetros alrededor, más allá de los efectos que han tenido sobre los mariscos.
Angeles: Y les mató el turismo también. La semana pasada estuvo una activista que se vuelve para España, pero ya llegó otro español más que es el Presidente de la Asociación contra las Plantas de Celulosa en la Ría de Pontevedra y está ya en Buenos Aires. Va a venir por acá también para decir lo que ellos están viviendo desde hace años, no es lo que suponen que va a pasar sino lo que ya están viviendo. No son argentinos y uruguayos, son españoles.
Petras: Ellos han pasado por esto de la celulosa y el perjuicio es enorme, deben de alguna forma capturar el olor y llevarlo a la reunión de Gabinete uruguayo para que huelan un poco las consecuencias.
 

Respuesta  Mensaje 4 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 19/03/2006 11:59
Si, Omar, ese que pones es la entrevista que se le hizo a Petras, pero yo me refería a la entrada, en el primer párrafo, cuando el MLC habla de:

"Petras espetó a todos aquellos entusiastas de siempre que osaron mostrarse más vacilantes y dubitativos que de costumbre un artículo que se transformó en voz de mando: «La responsabilidad de los intelectuales: Cuba, los Estados Unidos y los derechos humanos»  (www.rebelion.org; 6 de mayo del año mencionado). Allí, entre otras impresentables ocurrencias, calificaba a la moralidad como "falta de honradez". Además, la emprendía sin tasa ni medida contra aquellos que, cuando de Cuba se tratara, «se lanzan a una serie de acusaciones infundadas y de falsificaciones desprovistas de cualquier contexto especial que hubiera podido servir para clarificar las cuestiones y proporcionar una base razonada a... "los imperativos morales"». "

Y esta entrada es falsa, Petras escribe mucho en Rebelión, tanto que en esa web, hay un link para ver todos los artículos escritos por Petras por orden cronológico.
Y en esas fechas y sobre Cuba solo hay ese que puse.




En todo caso, y refiriendome a la entrevista, no veo nada "anticastrista" lo que dice Petras, algunas de las cosas que dice ya las dijo el propio Fidel.
Creo que el MLC parte de dos bases erroneas:
-Considerar a Petras "defensor incondicional" del  gobierno cubano.
-Creer que hacer ver los defectos  de la Revolución es hacer  anticstrismo.


Petras es lo suficientemente independiente y lo suficientemente inteligente  y conocido como para dar su apoyo incondicional a algo.
No necesita del apoyo de ningún gobierno ni ideología para estar donde está, en todo caso sería al revés.

Y . vulevo a insistir, en cualquier web cubana referida a la vivienda verás que se trata como un problema, no hace falta que lo señale Petras ni es "contrarrevolucionario" el Ministro de la Construcción por reconocerlo.
Conocer un problema es el primer paso para tratar de resolverlo.

El resto de los problemas los cita , y fíjate bien, añadiendo a continuación que el gobierno estudia su solucion.

El único problema que desconocía era el de la discriminación racial que apunta Petras
Este es un tema de dificil solución porque va en la gente, da igual que pongas o dejes de poner leyes.
Estoy en contra de la "discriminación positiva" o sea el dar ventajes por el hecho de ser negro.( o mujer, o minoría, o emigrante, etc. etc)
En un caso similar, en Europa, se está dando con la mujer, en España se han elaborado leyes que OBLIGATORIAMENTE hacen que haya paridad en los puestos directivos en los distintos escalones de la Administración del estado.
Para mí es una barbariad y un retroceso, hasta ahora a una mujer que llegaba a un alto puesto, se le exigía el doble que a un varón y se estaba pendiente del más minimo fallo para caerle encima.
Y costaba mucho trabajo encontrarle fallos, y creo que se empezaba a valorar a la mujer , claro que llegaban pocas, y solo las más inteligentes y capaces.
Pero estaba destruyendo el mito  machista de la incapacidad femenina.
Pero ahora mucho me temo que alguna incapaz se va a "colar" por el mero hecho de ser mujer y los "machistas" tendrán razón para volver a la carga.
Pues con la discriminación racial puede pasar lo mismo, que se castigue al máximo cualquier indicio de discriminación pero que no se favorezca a nadie por su color.



Respuesta  Mensaje 5 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 19/03/2006 17:59
Cualqiuer pregunta o crítica a un escrtito del MLC pueden dirigirla alforo de nuestra pagina, se pueden registra con el e-mail que quieran o el seudonimo que prefieran.
Omar
 
Buscar la sección foro
 
 
 
 

Respuesta  Mensaje 6 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 19/03/2006 17:59
Ya le remití sus dudas al compa de Uruguay que redactó la respuesta para que sea el quien disipe sus duda, yo estoy en otra tarea y la verda es que no he seguido el tema a fondo.
Omar

Respuesta  Mensaje 7 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 20/03/2006 04:47
    Omar: por lo que llego a entender, estás discutiendo con algún sujeto en alguna lista de correo. Le di una lectura apresurada a ese intercambio y da la impresión que el tipo quiere justificarlo todo y para todo encuentra una explicación. Esas cosas hay que abordarlas con tiempo y con el tacto que cada caso requiera (en algunos casos, el único tacto debería ser el del puño cerrado). Pero lo que sí no podemos permitir es que se nos trate de mentirosos y de adulterar textos y citas según nuestra conveniencia. Por dicho motivo -y como parece que se intenta sostener que el artículo de Petras en Rebelión no existe o no se llamaba así o no se decían las cosas que nosotros mencionamos-, te lo pego inmediatamente debajo para que el sujeto evite cualquier nueva sospecha y, a propósito de eso, se calle de una buena vez. (Las citas hechas en nuestra declaración están marcadas en rojo) Tal vez pueda haber buscado ese artículo el 6 de mayo de 2005, en cuyo caso es un lector algo distraído, pues en nuestra referencia ponemos "6 de mayo del año mencionado" y el único año que se había mencionado hasta ese entonces en la declaración era el 2003.
 
http://www.rebelion.org
L A   P Á G I N A   D E   P E T R A S

6 de mayo de 2003
De cómo algunos intelectuales de Occidente le hacen el juego al imperialismo

 
La responsabilidad de los intelectuales: Cuba, los Estados Unidos y los derechos humanos
James Petras
Traducido para Rebelión por Manuel Talens (http://www.manueltalens.com/)
De nuevo, los intelectuales han decidido intervenir en un debate, esta vez sobre el imperialismo estadounidense y los derechos humanos en Cuba. “¿Qué importancia tiene el papel de los intelectuales?”, me pregunté a mí mismo un soleado sábado por la tarde (el 26 de abril de 2003), mientras paseábamos por la madrileña Puerta del Sol y el eco de los gritos contra Castro de varios centenares de manifestantes resonaba en la plaza casi vacía. A pesar de una docena de artículos y columnas de opinión de conocidos intelectuales en los principales periódicos de Madrid, de las horas de propaganda en radio y televisión y del apoyo de burócratas sindicales y jerifaltes de partidos, sólo acudieron a la convocatoria unos ochocientos manifestantes, la mayor parte de ellos exiliados cubanos. “Está claro”, me respondí, “que los intelectuales contrarios a Cuba tienen poco o ningún poder de convocación, al menos en España”. 
Pero la impotencia política de los escritores contrarios a Castro no significa que los intelectuales en general no representen un papel importante; tampoco la falta de resonancia popular significa que carezcan de recursos, sobre todo si cuentan con el apoyo de la máquina guerrera y propagandística estadounidense, que amplifica y disemina sus palabras en todo el planeta. Para poder adoptar una decisión en el debate que bulle entre intelectuales sobre los derechos humanos en Cuba y el imperialismo estadounidense, vale la pena tomar distancias y considerar el papel de los intelectuales, el contexto y las principales cuestiones que enmarcan el conflicto entre los Estados Unidos y Cuba. 

El papel de los intelectuales
El papel de los intelectuales consiste en clarificar las cuestiones más importantes y definir las amenazas a la paz, a la justicia social, a la independencia nacional y a la libertad en cada período histórico, así como en identificar y apoyar a los defensores de los mismos principios. Los intelectuales tienen la responsabilidad de distinguir entre las medidas defensivas tomadas por países y pueblos sometidos al ataque imperial y los métodos ofensivos del poder imperial en su campaña de conquista. El establecimiento de equivalencias morales entre la violencia y la represión de los países imperiales conquistadores y los del Tercer Mundo sometidos a ataques militares y terroristas es el colmo de la doblez y de la hipocresía. Los intelectuales responsables examinan críticamente el contexto político y analizan las relaciones entre el poder imperial y sus funcionarios locales a sueldo –los denominados “disidentes”–, en vez de otorgar un fíat moral basado en sus pocas luces y en sus imperativos políticos. 
Los intelectuales comprometidos que pretenden hablar con autoridad moral, sobre todo los que presentan como garantía su crítica del imperialismo, tienen la responsabilidad política de desmitificar el poder y el estado y la manipulación de los medios, sobre todo en lo relativo a la retórica imperial de violaciones de derechos humanos por parte de estados independientes del Tercer Mundo. En los últimos tiempos hemos visto cómo demasiados intelectuales “progresistas” occidentales apoyaban o bien guardaban silencio ante la destrucción estadounidense de Yugoslavia y la limpieza étnica de más de 250.000 serbios, gitanos y otra etnias en Kosovo, y se tragaban la propaganda estadounidense de una “guerra humanitaria”. Todos los intelectuales de los Estados Unidos (Chomsky, Zinn, Wallerstein etc...) apoyaron el levantamiento fundamentalista en Afganistán –financiado por el Pentágono contra el gobierno civil prosoviético, con el pretexto de que la Unión Soviética había “invadido” el país y los fanáticos fundamentalistas eran “disidentes” que defendían la “autodeterminación”–, estratagema propagandística confesada y satisfactoriamente ejecutada por el jactancioso antiguo consejero de seguridad nacional Zbig Bryzinski. Tanto entonces como ahora, intelectuales prestigiosos blanden sus cartas credenciales pasadas como “críticos” de la política exterior estadounidense para prestar credibilidad a su denuncia poco informada de las presuntas transgresiones morales cubanas, y comparan la detención en Cuba de funcionarios pagados por el Ministerio de Asuntos Exteriores estadounidense y la ejecución de tres secuestradores terroristas con los crímenes de guerra del imperialismo estadounidense. Los practicantes de equivalencias morales aplican un microscopio a Cuba y un telescopio a Estados Unidos, lo cual les presta una cierta aceptabilidad entre los sectores liberales del imperio.

Imperativos morales y realidad cubana: la moralidad como falta de honradez
Los intelectuales están divididos en lo relativo al conflicto entre los Estados Unidos y Cuba: Benedetti, Sastre, Petras, Sánchez-Vázquez, Pablo González Casanova y muchos otros defienden a Cuba; los intelectuales de la derecha, entre ellos Vargas Llosa, Savater y Carlos Fuentes, como era de esperar, han publicado sus diatribas habituales contra Cuba, y un pequeño ejército de intelectuales asimismo progresistas –Chomsky, Saramago, Galeano, Sontag, Zinn y Wallerstein– se ha unido el coro de condenas, agitando sus posiciones críticas anteriores en un esfuerzo por distinguirse tanto de los opositores de la derecha como de los cubanos a sueldo. Es este último grupo de “progresistas” el que le ha causado mayor daño al floreciente movimiento antiimperialista y estas líneas críticas van dirigidas a ellos. 
La moralidad basada en la propaganda es una mezcla mortal –en particular cuando los juicios morales provienen de prestigiosos intelectuales izquierdistas y la propaganda emana de la administración ultraderechista de Bush. 
Muchos de los críticos “progresistas” de Cuba reconocen, de pasada y en términos generales, que los Estados Unidos han sido un agresor hostil contra la isla, por lo que “generosamente” le conceden a este país el derecho a la autodeterminación, pero luego se lanzan a una serie de acusaciones infundadas y de falsificaciones desprovistas de cualquier contexto especial que hubiera podido servir para clarificar las cuestiones y proporcionar una base razonada a... “los imperativos morales”.
Lo mejor es empezar por los hechos más fundamentales. Los críticos de la izquierda, sobre la base del etiquetado del Ministerio de Asuntos Exteriores estadounidense, denuncian la represión del gobierno cubano de individuos, disidentes, periodistas, dueños de bibliotecas privadas y miembros de partidos políticos implicados en actividades políticas no violentas que intentan ejercer sus derechos democráticos. Lo que los “progresistas” no pueden o no quieren reconocer es que los detenidos eran funcionarios a sueldo del gobierno estadounidense. Según la Agencia de Desarrollo Internacional (AID), que es la principal agencia federal de subvenciones y préstamos para la implementación de la política exterior estadounidense, el Programa USAID destinado a Cuba (resultante de la ley Helms-Burton de 1996) ha canalizado desde 1997 más de 8,5 millones de dólares US a los opositores cubanos del régimen de Castro, destinados a publicaciones, encuentros y propaganda favorable al derrocamiento del gobierno cubano, en coordinación con ONG, universidades, fundaciones y otros grupos (véase Profile of the USAID Cuba Program, en el sitio web de AID). El programa U.S.AID, a diferencia de su estilo habitual, no envía los pagos al gobierno de Cuba, sino a su clientela cubana de “disidentes”. Los criterios para la financiación son meridianos: todo aquel que desee recibir pagos y subvenciones debe haber manifestado un claro compromiso favorable al “cambio de régimen”, propiciado por los Estados Unidos, hacia el “mercado libre” y la “democracia”, sin duda similar a la dictadura colonial estadounidense en Irak. La ley Helms-Burton, el Programa U.S.AID, los funcionarios cubanos a sueldo y el manifiesto progresista de los intelectuales “condenan la falta de libertad, el encarcelamiento de disidentes inocentes, y piden un cambio democrático de régimen en Cuba”. Se trata de extrañas coincidencias que requieren un análisis. Los periodistas cubanos que han recibido 280.000 dólares de Cuba Free Press no son disidentes, sino funcionarios a sueldo. Los grupos de “derechos humanos” cubanos, que recibieron 775.000 dólares de la tapadera de la CIA “Freedom House”, no son disidentes, dado que su misión consiste en promover la “transición” (el derrocamiento) del régimen cubano. La lista de subvenciones y pagos a “disidentes” (funcionarios) cubanos por parte del gobierno estadounidense es larga y detallada y accesible a todos los críticos progresistas morales. Lo que debe contar es que los opositores encarcelados por el gobierno cubano eran funcionarios a sueldo del gobierno estadounidense, pagados para poner en práctica los objetivos de la ley Helms-Burton según los criterios del U.S.AID y bajo la dirección de James Cason, el jefe de la Sección de la US Interest Section en La Habana. Entre el 2 de septiembre de 2002 y marzo de 2003, Cason mantuvo docenas de reuniones con sus “disidentes” cubanos, tanto en su casa como en su oficina, para darles instrucciones y directrices sobre qué escribir y cómo reclutar, mientras que pronunciaba arengas públicas contra el gobierno cubano, de manera muy poco diplomática. USAID proporcionó a los funcionarios cubanos a sueldo de Washington equipos de comunicación electrónica, libros y otros materiales de propaganda, así como dinero para financiar “sindicatos” favorables a los Estados Unidos a través de la tapadera denominada “American Center for International Labor Solidarity”. No se trata de bienintencionados “disidentes” que desconocen quién les paga y cuál es su papel como agentes imperiales, puesto que el informe de USAID (en la sección titulada “The US Institutional Context”) señala que el Programa de Cuba está financiado a través del Fondo de Apoyo Económico, cuyo objetivo consiste en apoyar los intereses económicos y de política exterior de los Estados Unidos mediante ayudas financieras a aliados [sic] y a países en transición hacia la democracia”. 
Ningún país del mundo tolera o etiqueta de “disidentes” a aquellos entre sus ciudadanos que están a sueldo y trabajan para promover los intereses imperiales de un poder extranjero. Esto es sobre todo verdad en los Estados Unidos, donde el apartado 18 de la sección 951 del U.S. Code establece que “cualquiera que dentro de los Estados Unidos acepte trabajar bajo la dirección o el control de un gobierno o funcionario extranjero podrá ser sometido a procesamiento penal y una condena de diez años cárcel”. Salvo que, desde luego, esté inscrito como agente extranjero a sueldo o trabaje para el gobierno israelí. 
Los intelectuales “progresistas” estadounidenses han abdicado de sus responsabilidades como analistas y críticos y aceptan sin poner en entredicho que el Ministerio de Asuntos Exteriores de los Estados Unidos califique a sus funcionarios a sueldo de disidentes que luchan por la “libertad”. 
Algunos defensores de los agentes-disidentes protestan porque estos funcionarios fueron condenados a “sentencias escandalosamente largas”. De nuevo, la miopía empírica da lugar a moralizaciones mendaces. Cuba se halla en pie de guerra. El gobierno de Bush ha declarado que el país está en la lista de objetivos militares susceptibles de invasión y de destrucción masiva. Y, por si acaso nuestros intelectuales moralistas no están al corriente, Bush, Rumsfeld y los halcones sionistas de la Administración cumplen lo que dicen. La total falta de seriedad de Chomsky, Zinn, Sontag y los dictados morales de Wallerstein se deben a que no logran reconocer la amenaza inminente de una guerra estadounidense con armas de destrucción masiva, anunciada por adelantado. Esto resulta particularmente oneroso si consideramos que muchos de los detractores de Cuba viven en los Estados Unidos, leen la prensa estadounidense y son conscientes de hasta qué punto a las declaraciones militaristas suelen seguir acciones genocidas. Pero a nuestros moralistas no les preocupa el contexto ni las amenazas inmediatas o futuras contra Cuba, pues prefieren ignorar todo para demostrarle al Departamento de Estado que no sólo se oponen a la política exterior estadounidense, sino que también condenan a cada país, sistema o líder independiente que se oponga a los Estados Unidos. En otras palabras, señor Ashcroft, cuando castigue usted a los “apólogos” del “terror” cubano, recuerde que nosotros somos diferentes, también condenamos a Cuba y también exigimos un cambio de régimen. 
Los críticos de Cuba no hacen caso de que los Estados Unidos han puesto en marcha una estrategia politicomilitar de dos vertientes, con el objetivo de controlar el país. Washington proporciona asilo a piratas del aire, hace todo lo posible para desestabilizar la economía turística de Cuba y trabaja estrechamente con la terrorista Cuban American Foundation en sus intentos de asesinato de líderes cubanos. Hay nuevas bases estadounidenses en la República Dominicana, Colombia y El Salvador y un campo de concentración cada vez mayor en Guantánamo, y todo ello con el objetivo de facilitar una invasión. El embargo estadounidense es cada vez más intenso, con el apoyo de los regímenes derechistas de Berlusconi en Italia y de Aznar en España. La actividad agresiva y abiertamente política de James Cason, de la Interest Section, similar a la de sus seguidores cubanos entre los funcionarios-disidentes, forma parte de la estrategia interior diseñada para minar la lealtad cubana hacia el régimen y la revolución. Nuestros prestigiosos críticos intelectuales han decidido ignorar la conexión existente entre ambas tácticas y su convergencia estratégica, pues prefieren darse el lujo de emitir prédicas morales sobre la libertad en todas partes y para todos, incluso cuando un Washington psicópata coloca el cuchillo en la garganta de Cuba. No, gracias, señores Chomsky, Sontag y Wallerstein, Cuba actúa con toda la razón cuando les pega a sus atacantes una patada en las pelotas y los envía a que se ganen honradamente la vida cortando caña. 
La pena de muerte para los tres terroristas que secuestraron un bote es un duro tratamiento, pero igual de dura era la amenaza que pesó sobre las vidas de cuarenta pasajeros cubanos que afrontaron la muerte a manos de los secuestradores. De nuevo, nuestros moralistas olvidan hablar de los actos temerarios de piratería aérea y de otros complots descubiertos a tiempo. Los moralistas no logran entender por qué estos terroristas desesperados buscan escapar de Cuba de manera ilegal. La Administración de Bush ha eliminado prácticamente el programa de visados para emigrantes cubanos que deseen marcharse. Los visados han disminuido desde 9000 durante los cuatro primeros meses de 2002 a 700 en 2003. Se trata de una táctica sutil para alentar actos terroristas en Cuba y luego denunciar las duras sentencias, que a su vez hacen cantar el coro de los que dicen en el rincón del amén de la progresía intelectual estadounidense y europea. ¿Es simplemente ignorancia lo que hay tras estas declaraciones morales contra Cuba o es algo más, un chantaje moral destinado a obligar a sus colegas cubanos a rebelarse contra su régimen, su gente, so pena de afrontar el oprobio de intelectuales prestigiosos y de verse todavía más aislados y estigmatizados como “apólogos de Castro”? Por un lado están las amenazas explícitas de Saramago de abandonar a sus amigos cubanos y de abrazar la causa de los funcionarios a sueldo de los Estados Unidos. Por el otro, las amenazas implícitas de no volver a Cuba y de boicotear sus conferencias. ¿Es una cobardía moral el salir en defensa del imperio y meterse con Cuba justo cuando ésta se enfrenta a una amenaza de destrucción masiva por haber encarcelado agentes a sueldo, decisión que cualquier país del mundo hubiera tomado? Lo que resulta francamente vergonzoso es que hagan caso omiso de los enormes logros de la revolución cubana en el empleo, la educación, la salud y la igualdad, de su heroica oposición, basada en los principios, a las guerras imperiales –Cuba es el único país que lo dice claramente– y de su capacidad de resistir casi cincuenta años de invasiones. ¡¡Eso no cuenta nada para los intelectuales estadounidenses, eso es escandaloso!! La actitud de los intelectuales es una desgracia, una marcha atrás en busca de respetabilidad después de haberse “atrevido” a oponerse a la guerra estadounidense junto con otros treinta millones de personas en el mundo. Éste no es el momento de “equilibrar” las cosas condenando Cuba, pidiendo un cambio de régimen o apoyando la causa de los funcionarios-disidentes cubanos “adictos al “mercado”. 
Vale la pena recordar que los mismos intelectuales progresistas apoyaron a “disidentes” financiados por Soros y por el Ministerio de Asuntos Exteriores de los Estados Unidos en la Europa del Este y en la Unión Soviética. Los “disidentes” entregaron el país a la mafia rusa, tras lo cual la esperanza de la vida disminuyó cinco años (más de 10 millones de rusos murieron de forma prematura tras la ruina del sistema sanitario nacional), mientras que en Europa Oriental los “disidentes” cerraron los astilleros de Gdansk, ingresaron en la OTAN y proporcionaron mercenarios para la conquista estadounidense de Irak. Brilla por su ausencia entre estos partidarios actuales de los “disidentes” cubanos cualquier reflexión crítica sobre los resultados catastróficos de sus diatribas anticomunistas y de sus manifiestos a favor de los “disidentes” que hoy son soldados del imperio estadounidense en Oriente Próximo y en la Europa central. Nuestros moralistas estadounidenses no han reflexionado nunca –lo repito, nunca– de manera crítica sobre sus fracasos morales pasados o presentes, ya que, mire usted, están a favor de la “libertad en todas partes”, incluso cuando la gente “equivocada” toma el poder y el “otro” imperio lo asume y millones de seres mueren de enfermedades curables y florecen las redes de esclavitud blanca. Su respuesta es siempre la misma: “Esto no es que queríamos, deseábamos una sociedad libre, justa e independiente, pero cuando exigíamos un cambio de régimen y apoyábamos a los disidentes nunca sospechamos que el imperio se quedaría con todo, se convertiría en la única superpotencia y de dedicaría a colonizar el mundo”. 
Los intelectuales moralistas deben aceptar la responsabilidad política de las consecuencias sin esconderse tras tópicos morales abstractos, ni en el caso de su complicidad pasada con el auge de imperio ni en el de sus escandalosas declaraciones actuales contra Cuba. No pueden alegar que desconocen las repercusiones de lo que dicen y de lo que hacen. No pueden pretender inocencia después de todo lo que han visto, han leído y han escuchado sobre los proyectos estadounidenses de guerra contra Cuba. 
La autora y promotora principal de la declaración anticubana en los Estados Unidos (firmada por Chomsky, Zinn y Wallerstein) es Joanne Landy, que se declara “socialista democrática” y que desde hace cuarenta años aboga por el derrocamiento violento del gobierno cubano. En la actualidad es miembro del Council on Foreign Relations (CFR), una de las principales instituciones que desde hace medio siglo han asesorado al gobierno estadounidense en política imperial. Landy apoyó públicamente la invasión estadounidense de Afganistán y de Yugoslavia, así como a la organización terrorista albanesa KLA, responsable del asesinato de dos mil serbios y de la limpieza étnica de cientos de miles de serbios y otros grupos en Kosovo. No sorprende en absoluto que la declaración escrita por esta camaleónica extremista de derecha no contenga mención alguna a los logros sociales de Cuba y a su oposición frente al imperialismo. Preciso es señalar, además, que a lo largo de su ascensión a posiciones influyentes en el CFR, Landy fue una opositora visceral de la revolución china, de la vietnamita y de otras revoluciones sociales. 
Por mucho que se jacten de su conciencia crítica, los intelectuales “progresistas” han pasado por alto la indeseable política de la autora que promovió la diatriba contra Cuba. 

El papel del intelectual en la actualidad
Muchos críticos de Cuba hablan de “principios” como si fuesen algo único y aplicable a todas las situaciones, con independencia de quién esté implicado y de las consecuencias. La aplicación de “principios” como el de la “libertad” a los responsabilizados de la planificación del derrocamiento del gobierno cubano en complicidad con el Ministerio de Asuntos Exteriores de los Estados Unidos convertiría a Cuba en otro Chile –donde Allende fue derrocado por Pinochet– y conduciría a una inversión de las ventajas populares de la revolución. Hay principios más básicos que la libertad para funcionarios cubanos a sueldo del imperio, y son la seguridad nacional y la soberanía popular. Existe una cierta atracción, sobre todo entre la izquierda progresista estadounidense, por las víctimas del Tercer Mundo, por quienes sufren derrotas, así como una aversión por los revolucionarios que tienen éxito. Al parecer, los intelectuales estadounidenses progresistas siempre encuentran una coartada para evitar comprometerse con la revolución. Si el estado juega un papel importante en la economía o tienen lugar movilizaciones de masas, sacan el viejo estribillo del “estalinismo” y hablan de “dictaduras plebiscitarias”; y si las agencias de seguridad previenen satisfactoriamente la actividad terrorista, hablan de “estado policiaco represor”. El hecho de vivir en la nación menos politizada de la tierra, con uno de los aparatos sindicales más serviles y corruptos de Occidente y sin ninguna influencia política fuera de los campus universitarios, hace que los intelectuales de los Estados Unidos no tengan ningún conocimiento práctico o experiencia de las amenazas cotidianas y de la violencia que pende sobre los gobiernos revolucionarios y sobre los activistas en América Latina. Sus conceptos políticos, los criterios que esgrimen para condenar o aprobar cualquier actividad política, no existen en ninguna parte excepto en sus cabezas, en su agradable y progresista entorno universitario, donde disfrutan de todos los privilegios de la libertad capitalista y no corren ninguno de los riesgos contra los que los revolucionarios del Tercer Mundo deben defenderse. Un poco de modestia, queridos intelectuales prestigiosos, críticos y predicadores de libertad. Hagan introspección y pregúntense si les gustaría caer en manos de una organización terrorista con sede en Miami. Pregúntense si les resultaría agradable estar sentados en el café de uno de los principales hoteles turísticos de La Habana y que de pronto estallara una bomba, un regalito de los terroristas que toman cerveza con Jeb, el hermano del Presidente. Piensen en lo que es la vida en un país que está en el número uno de la lista negra del régimen imperial más violento que ha existido desde la Alemania nazi. Si lo hacen, quizá sus sensibilidades morales atenuarían sus condenas de la política de seguridad cubana y podrían contextualizar sus escrúpulos morales. 
Quiero concluir estas líneas estableciendo mis propios “imperativos morales”, dedicados a los intelectuales críticos. 

  1. El primer deber de los intelectuales de Europa y de América consiste en oponerse a sus propios dirigentes imperiales que pretenden conquistar el mundo.
  2. El segundo deber consiste en clarificar las cuestiones morales implicadas en la lucha entre militaristas imperiales y la resistencia popular/nacional y en rechazar la postura hipócrita que compara el terror de masas del uno con las restricciones justificadas y a veces excesivas de seguridad del otro.
  3. El intelectual crítico debe establecer normas de integridad política y personal con respecto a los hechos y cuestiones antes de emitir juicios morales.
  4. El intelectual crítico debe resistir a la tentación de convertirse en “héroe moral del imperio” por el hecho de negarse a apoyar las luchas victoriosas populares y los regímenes revolucionarios, que no son perfectos y que carecen de todas las libertades puestas a la disposición de los intelectuales impotentes e incapaces de amenazar al poder (que, por eso mismo, gozan del derecho de reunión, de discusión y de crítica).
  5. El intelectual crítico debe negarse a ser el juez, el fiscal y el jurado que condena a los progresistas que tienen el coraje de defender a los revolucionarios. El ejemplo más ridículo de esto ha sido el burdo ataque de Susan Sontag contra el novelista y premio Nobel colombiano Gabriel García Márquez, al que acusó de falta de integridad y de ser un apólogo del terror cubano [sic]. Sontag profirió su acusaciones difamatorias en Bogotá (Colombia). Las brigadas de la muerte colombianas, que trabajan con el régimen y con los militares, han matado a más sindicalistas y periodistas que en cualquier lugar en el mundo, y lo hacen por mucho menos que por ser “un apólogo” del régimen de Castro. Se trata de la misma Sontag que fue partidaria entusiasta de la invasión imperial estadounidense y del bombardeo de Yugoslavia, apóloga del régimen fundamentalista bosnio y testigo silenciosa de la matanza y de las limpiezas étnicas de serbios y otras etnias en Kosovo. ¡Menuda integridad moral! El inestimable sentido de superioridad que poseen los intelectuales de Nueva York hace que Sontag pueda señalar con el dedo a García Márquez y se quede convencida de que ha hecho una gran declaración moral.
  6. Los intelectuales de Europa y de los Estados Unidos no deberían confundir su propia inutilidad política y su posición inconsecuente con las de sus colegas los intelectuales comprometidos latinoamericanos. Hay lugar para el diálogo constructivo y el debate, pero nunca para los ataques personales ofensivos contra individuos que viven amenazados a diario.

A los intelectuales críticos les resulta fácil ser “amigos de Cuba” en los buenos tiempos de celebraciones, cuando los invitan a dar conferencias Es mucho más difícil ser “amigo de Cuba” cuando un imperio totalitario amenaza a la isla heroica y pone sus pesadas manos sobre los defensores. 
Es en tiempos como los actuales –con guerras permanentes, genocidios y agresiones militares–, cuando Cuba necesita la solidaridad de los intelectuales críticos, solidaridad que está recibiendo de todas partes de Europa y, en particular, de América Latina. Ya va siendo hora de que nosotros, en los Estados Unidos, con nuestros ilustres y prestigiosos intelectuales progresistas, de sensibilidades morales majestuosas, reconozcamos que hay una revolución vital, heroica, que lucha para defenderse contra el gigante del norte y, modestamente, dejemos de lado nuestras importantes declaraciones, apoyemos esa revolución y nos unamos al millón de cubanos que acaban de celebrar el 1 de mayo con su líder, Fidel Castro. 

Respuesta  Mensaje 8 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 20/03/2006 09:35
This message has been deleted by the manager or assistant manager.

Respuesta  Mensaje 9 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 20/03/2006 14:23
Bueno, debe de haber dos Rebeliones, mira, el indice de Petras para el 2003 ( pongo lo anterior y posterior)
http://www.rebelion.org/mostrar.php?tipo=0&id=23&inicio=150

9-01-2004

Discurso de Bush sobre el estado del Imperio
James Petras
24-01-2004

Reflexiones sobre 2003: ideólogos y profetas, izquierda y derecha
James Petras
28-12-2003

El significado de la captura de Saddam
James Petras
19-12-2003

Bolivia: entre la colonización y la revolución
James Petras
20-11-2003

Imperialismo y resistencia en Latinoamérica
James Petras
15-11-2003

Los derechos humanos en Brasil bajo el régimen de Lula
James Petras
13-11-2003

Invasión estadounidense de Irak: guerra de pega y resistencia popular
James Petras
06-10-2003

La política comercial de EE.UU. después de Cancún
James Petras
05-10-2003

Brasil y el ALCA
James Petras
03-10-2003

Política antiimperialista: Formación de clase y acción socio-política
James Petras
25-09-2003

La política tras la tragedia de la ONU
James Petras
28-08-2003

Quiénes fabricaron la amenaza de la guerra de Irak: perspectiva de los entresijos
James Petras
13-08-2003

Construcción imperial y dominación: EE.UU. y América Latina
James Petras
06-08-2003

Conferencia de James Petras en La Casona, Buenos Aires, 12/05/03
Los intelectuales, Cuba y los Derechos Humanos
James Petras
21-07-2003

Situación actual en América Latina
James Petras
13-06-2003

Estudio de James Petras editado en Internet por rebelion.org
Latinoamérica. La izquierda devuelve el golpe
19-04-1997

Padres - Hijos: Dos generaciones de trabajadores españoles (pdf)
"El informe Petras"
25-07-1996






A lo mejor resulta que en Rebelión borran de su indice artículos, no lo sé, pero no obstante no me voy a meter con la "intelectualidad" ni la distracción de tu amigo.
No obstante ese artículo ( lo busque por el título), efectivamente existe.

Pero por ningún lado , como da a entender el comienzo del párrafo Petras califica a la "moralidad como falta de honradez", es una frase sacada de contexto, que Petras aplica a los intelectuales que basados en la propaganda yanqui aplican "su" moral al hecho cubano.
Esto si es impresentable, atribuir a un todo lo que Petras dedica a una parte.

Es bastante tendencioso escribir a proposito de este artículo:

"calificaba a la moralidad como "falta de honradez"."

No señor, NO.
Petras critica "la쨌 moralidad" de esos intelectuales ( no a toda la MORALIDAD) debido a su falta de HONRADEZ en el tema.
Y lo explica muy bien.
Pero parece que como no se puede rebatir los argumentos de Petras se recurre a tergiversarlo.


Lo que una vez más, le da la razón a Petras, pretende ser "moralistas" no siendo "honrados"

Respuesta  Mensaje 10 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 20/03/2006 19:11
Me parece que usted carece de nivel intelectual, de integridad y de historial personal de lucha, como para detenrse a debatir con ese compa, lo dejo con sus mentiras.
Omar

Respuesta  Mensaje 11 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 20/03/2006 19:11
Me preguntó el porqué, aunque sea para variar, no se dedica a responder en vez de a insultar.
Si alguien pone un artículo en este foro es para debatirlo, no es un panel de artículos.
Y si no se sabe debatir, no ponga nada, lea y aprenda.

Respuesta  Mensaje 12 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 21/03/2006 05:59
Porque se le responde y ud. sale con otra boberia, divagando, con algo que nada tiene que ver con el discurso certral, cuando se le demuestra de nuevo que se equiboca, entonces salen a relucir las falta de ortografía.
Mire cuando usd aprenda a discutir como los hombres yo con mucho gusto le contestaré, mientras siga haciendolo como las putas obtaré por ignorarlo.
Omar

Respuesta  Mensaje 13 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 21/03/2006 11:59
¿Que faltas de ortografía?
Y ¿ que discurso? El de pegar artículos para luego no responder diciendo "yo estoy en otra tarea y la verda es que no he seguido el tema a fondo.
Omar "

Simplemete con decir donde llama Petras a la "moralidad falta de honradez" ya estaría
Sobre el tema de los deficiencias en Cuba tambien escribí, sin respuesta.
Sobre el tema de Petras "defensor incondicional del regimen" tambien escribí.

Pero no vi ninguna respuesta, con o sin faltas de ortografía.
Si posteamos algo debemos estar dispuest a conocer lo que posteamos y a debatir sobre el tema, este foro no esta hecho para colgar mensajes de asociaciones y/o partidos como si fuera una pared.

Respuesta  Mensaje 14 de 16 en el tema 
De: tango Enviado: 21/03/2006 17:59
Omar,
 
Ese es el trabajo de los apaellados castristas, esquivar y des-informar.
 
tango

Respuesta  Mensaje 15 de 16 en el tema 
De: RudolfRocker1 Enviado: 21/03/2006 17:59
Vamos tango, que le estas dando el valor que no tienen, para eso hace falta huevos e imtelecto él solo tiene complejos y resentimientos.
Para seas labores los segurosos usan getes que si saben lo que estan haciendo, por favor, mira que ahora se ven en un espejo y el celb ro les entra en un climax. 
Omar

Respuesta  Mensaje 16 de 16 en el tema 
De: mfelix28 Enviado: 22/03/2006 22:50
Ya, pero el caso es que nos habeis querido meter la bola de que Petras despreciaba la moralidad, ... y no coló.
No hace falta huevos, ni demasiado intelecto, solo hace falta saber leer y no que nos den la lección aprendida, hay que aprender a pensar y hacer los comentarios a los textos de otros por uno mismo.
Si se puede, claro.
En caso contrario se recurre a lo de siempre, al insulto.
Nunca al debate.


Primer  Anterior  2 a 16 de 16  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados