Bueno Tatalia, tienes un asentó centro Americano. ¿ O me equivoco? ¿Te puedo preguntar si eres del Salvador o de Guatemala?
Bueno mira sobre la Teología de la Liberación es algo muy complicado para mi de tratar con la misma pasión que un creyente, porque como te he dicho, me he “convertido” en materialista. Pero te recalco que le tengo una gran respeto y mucho cariño a los creyentes progresistas.
Acá te mando un articulo que escribí para una página de Cristianos. Disculpa los errores que hallan en él pues no me queda mucho tiempo para corregir.
Acá te lo mando:
Ever
La teología de la liberación y la política.
La teología de la liberación. ¿Qué es la teología de la liberación? Bueno la teología de la liberación ha sido vista e interpretada desde el punto de vista religioso; y sólo exclusivamente religioso. Por consiguiente, en está intervención no quiero hacer una interpretación de la teología de la liberación, sino un análisis de la misma, pero desde un punto de vista no religioso, sino estrictamente social. Pero antes de entrar a dicho análisis quiero hacer la siguiente observación. (Hay dos formas de interpretar la teología de la liberación: la forma Europea, qué es mediocre y ambivalente, y la interpretación Americana, definida y concreta)
Análisis: Sí, analizamos la teología de la liberación en realidad no es una teología nueva dentro de la Iglesia, sino por el contrario es una teoría propiamente original. Es decir, es el propio remanente de la inspiración Cristiana.
Empero, para comprender mejor esto, debemos de analizar por separados los términos compuestos, términos que dicho sea de paso, la dan al enunciado un doble fondo, es decir (titulo y acción, o sea sustantivo y verbo) Por lo cual, separemos el sustantivo del verbo; y tenemos de, Teología de la liberación; Teología por un lado, como sustantivo, y liberación como acción. Si a teología de la liberación la quitamos DE Liberación nos quedamos sólo con el sustantivo Teología. Entonces, para aun profundo análisis filosófico, debemos de analizar el sustantivo Teología.
La teología: La teología en su parte que trata de Dios es su razón de ser, pero es considerada como ciencia social por su parte cultual. La parte cultural de la teología es la que mueve e influye como patrón de conducta social en los pueblos. Por ejemplo, en el mundo occidental dominada mayoritariamente por la fe Cristiana, la navidad, la semana santa son una tradición y parte de la cultura de los países. Aunque las tradiciones sean particulares en cada país, en cada región, pero el origen es el mismo. Son tradiciones, como por ejemplo, la visita de Santa Claus, con juguetes para los menores en navidad, que se convierte en una forma social de vivir y la fiesta misma en una conducta social. Lo mismo podemos decir de la semana santa. Con todas las tradiciones, costumbres, comida especiales en algunos pueblos, etc., hacen de la semana santa , más que una actividad religiosa un gran evento social.
Lo mimo podemos decir de la gran influencia de la teología en el hecho de humanizar socializar, y porque no decirlo, ¡sensibilizar!, el hecho de la muerte. Un entierro tiene una gran cantidades de ritos y reglas sociales, que forman también parte de la cultura de los pueblo. Se puede decir cultura porque cada pueblo, y cada país según a la religión que pertenezca así celebra sus funerales. Lo mismo podemos decir, aunque es todo lo contrario, la gran influencia social de un matrimonio. El matrimonia aunque tenga generalmente en los países cristianos dos ritos, es decir, el enlace civil y el eclesiástico, pero no podemos perder de vista que el enlace eclesiástico es el que provoca una gran pasión social. Son en fin, muchas las cosas, costumbres y tradiciones sociales que son, se puede decir, de origen teológico. Y por esto, es que la teología es considerada por la comunidad científica como una ciencia social.
Hoy veamos la acción liberación del sustantivo Teología. ¿Liberación de qué? Está seria la pregunta más correcta que todo católico critico, con la teología de la liberación, se debería de hacer. La liberación que proponen los teólogos americanos, es la liberación social, es decir, la liberación de los pueblo de la pobreza, de la esclavitud social provocada por la miseria. En este sentido, los teólogos no pretenden “modernizar” la iglesia sino humanizarla. Pero esto, no es nada nuevo para los Cristianos puesto que el mayor mandamiento es “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Por consiguiente, no estamos ante una liberación de orden religioso, ni de una “revolución” religiosa, sino ante una liberación social de los pueblo; es pues la acción dirigida hacia el exterior y no hacia el interior de la Iglesia. ¡Me temo, que quizás los sacerdotes más fieles a la Iglesia misma y a su fe son los de la teología de la liberación!
El tabú y la ambivalencia europea. En muchos fieles católicos europeos se puede ver una hipocresía a la hora de tratar el tema de la teología de la liberación. Lo que más les asusta es su “vinculo con la política”. Les da miedo pensar que la teología de la liberación esta mezclada con la política. Pero cabe preguntarse ¿a que le tienen miedo? ¿Al hecho que la teología de la liberación, se asemeja a los postulados comunistas, o el simple hecho político? ¿Pero si es al simple hecho político, porque no dicen nada estos puritanos cuando los curas se meten en la política derechista a coquetearle a los opresores?
La política. ¿Qué es la política? Es un pecado, como dicen egoístamente los evangélicos? No, la política puede ser un pecado para una persona inculta, y poco racional. La política al igual que la teología es una ciencia social. Y el objetivo social de la política es organizar a la sociedad. Se puede decir en este sentido que todo acto o mecanismo organizativo siempre cuenta con “partículas” de las ciencia política o simplemente de la política como ciencia aplicada. Queriendo decir esto que la política es tan natural, como las matemáticas mismas, porque lo cual es simple y sencillamente ignorante, creer que puede ser un pecado, hacer política.
¿Qué es hacer política? Hacer política es organizar. Toda persona que este organizando una actividad social, como puede ser un acto religioso, o simplemente social, está aplicando la política porque esta aplicando el principio de organización. Ahora bien, si unimos el fenómeno de la capacidad de “convocatoria” que tiene la teología con el objetivo científico de la política que es el de organizar, vemos que ambas se unen indirectamente, o sea, la teología y la política se unen.
Por otra parte, la misma inspiración divina está llena de acciones política, como la liberación de Israel de Egipto por Moisés, la reconquista de Canaán por Josué, la Liberación del asedio bajo el cual tenían los Filisteos a Israel, por David, etc. Sin embargo, el mero hecho de liberar a los pobres de la pobreza, o sacarlos de la pobreza, es una acción social más que político teológica. Teológica porque la misma teología es una ciencia social, y como tal también se ve afectada con la descomposición social de un pueblo. Un vivo ejemplo de esto: En una zona de la bella ciudad de Santa Ana mi ciudad natal, en su campiña había una tradición dominical en la ermita de la zona. Una bellas ermita rodeada de cafetales. La tradición consistía en celebrar una misa, y después sacaban una virgen, para finalizar comiendo en el gran patio muy bien cuidado de la Iglesia. Dicha tradición desapareció en parte por el crecimiento de la pobreza y en parte por el auge de las sectas. La pobreza pues, no sólo es un mal social a combatir por la misma dignidad humana, sino también porque está produce deterioro cultural en los pueblo.
Pues en este caso, que la teología de la liberación use la política para liberar a los pueblo no es un desagravio a la teología sino una acción natural, tan natural como el dependiente debe de usar las matemáticas para devolver correctos los “vueltos”. Evidentemente no se trata del uso de la política como el arte de mentir para beneficio propio, sino para servir al pueblo. Porque la política es una ciencia creada por el hombre para servir a sus semejantes, la política real pues es la que está el servicio del pueblo. La teología de la liberación en este sentido se pone no en contra de sus principios teológicos al usar la política, sino por el contrario al servicio de su prójimo, y en consecuencia practica su verdadera naturaleza social.
En este punto estamos ya propiamente en la separación del sustantivo a la acción. La liberación de un pueblo de la pobreza, es la acción de sacarlo de la pobreza. Pero en está acción científicamente hablando ya la teología no tiene competencia, porque se trata de organizar a al gente de modo que tengan una vida más justa y más digna. Y para esto es necesario pensar en acciones de sentido político económico. Y es he aquí, donde los teólogos de la liberación miran hacia las teorías económicas socialistas o comunistas, porque dentro de las ciencia económicas, son las únicas que estudian la forma de repartir justamente las riquezas; curiosamente al igual cómo lo pretendieron hacer los apóstoles o primeros cristianos y es lo que Rutilo Grande predicaba y por lo cual la derecha lo mando a matar. Y es que sacar a la gente de la pobreza significa darle trabajo, darle vivienda digna, y para esto el nivel de organización debe de ser político, porque se trata de un nuevo concepto de repartiendo de las riquezas, o bienes como decían los primeros cristiano o apóstoles. Se trata pues de organizar a la gente no para que vallan a misa, ni a una boda, sino para la creación de las riquezas sociales. Para que la gente valla a la misa o al culto con su barriga llena, y su “corazón”contento.
Si a la teología le quitamos la acción liberación, nos quedamos con un sustantivo mudo e hito. Hito en su fondo histórico y vació hasta del mismo sentido bíblico, como mudo en la acción social. Porque sin acción hasta las mas viejas tracciones tienden a desaparecer. Por ejemplo, una tradición según muchos, de más 500 años de existencia, estaba a punto de desaparecer de la ciudad de Chalchuapa una ciudad salvadoreña situada a unos 20 kilómetros de Santa Ana. Se trata de sacar a la virgen de los milagros por las calles principales de la ciudad. Tradición que se retomo con la llegada del FMLN a la alcaldía municipal. Y como se comprenderá no es de extrañar que los teólogos de la liberación simpaticen con el FMLN, un partido que también apuesta por la liberación social y cultural del pueblo salvadoreño. En consecuencia la teología de la liberación apuesto por el rescate de todo las valores humanos, sin limitarse hipócritamente como hacen otros teólogos pasivos a los asuntos religiosos.
Es necesario pues, poner las cosa en su sitio.
ELSANTANECO .