Uff!! y se quedaron corto ! 
 "La promoción del turismo como eje de la recuperación económica fue el uso más rápido, fácil y racional del clima natural de Cuba para compensar la depresión económica, la falta de capital y el CONCLUSION : CONTRADICCIONES Y ALTERNATIVAS Por James Petras y Robin Eastman-Abaya Rebelión Agosto 24, 2007 Infosearch: José F. Sánchez Analista Jefe de Buró Cuba Dept de Investigaciones La Nueva Cuba Septiembre 11, 2007 LOS GENERALES EMPRESARIOS | "Además, las 'empresas mixtas' en el sector del turismo llevaron a la creación de una nueva burguesía burocrática rica y al auge de las desigualdades... Las desigualdades han aumentado a causa de las “bonificaciones” no oficiales a altos funcionarios que trabajan en empresas con participación extranjera, en el comercio exterior y en la economía del dólar/euro... Las desigualdades sociales no son sólo el resultado de fuerzas de mercado, la corrupción y el turismo. También son un producto de la concentración del poder político en la administración y la dirección de la economía y la disposición de los gastos públicos. ...La lucha contra la Nueva Clase requiere que un nuevo sistema de representantes elegidos supervise las asignaciones del presupuesto a los diversos ministerios y tenga poder para convocar a funcionarios responsables a audiencias televisadas..." | CUBA: REVOLUCION PERMANENTE Y CONTRADICCIONES CONTEMPORANEAS Por James Petras y Robin Eastman-Abaya Rebelión Agosto 24, 2007 Infosearch: José F. Sánchez Analista Jefe de Buró Cuba Dept de Investigaciones La Nueva Cuba Septiembre 11, 2007 POR SU IMPORTANCIA LA NUEVA CUBA REPRODUCE POLEMICA EXISTENTE ENTRE TEORICOS DEL MARXISMO QUE PODRIA ARROJAR ALGUNA LUZ SOBRE EL PROCESO DE LUCHA POR EL CONTROL DE LA SUCESION EN CUBA SOBRE EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI: LA INMODERADA SOBERBIA DE HEINZ DIETERICH Antonio Maira Insurgente Septiembre 4, 2007 NUESTRA AMERICA Y EL SOCIALISMO EN EL SIGLO XXI O EL “ANTI DIETERICH Por Carlos Rodríguez Almaguer Kaos en la Red Rebelión Septiembre 5, 2007 LA CIENCIA SOCIAL CUBANA DARIO MACHADO Y EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
Por Heinz Dieterich Rebelión Julio 24, 2007 EN RESPUESTA A HEINZ DIETERICH SOBRE SU CONCEPCION DE "SOCIALISMO DEL SIGLO XXI" Por Darío L. Machado Rodríguez Rebelión Julio 14, 2007 Rebelión EL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA APRUEBA INVESTIGACION SOBRE EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
Por Heinz Dieterich Rebelión Julio 7, 2007 Infosearch: Fidel Nuñez Analista Jefe de Buró Latinoamérica Dept. de Investigaciones La Nueva Cuba Septiembre 9, 2007 | aislamiento político. Además, fue el sector que más interesó a los futuros socios inversionistas extranjeros. El turismo generó divisas fuertes para importar productos primarios esenciales, especialmente petróleo y productos manufacturados, material sanitario y alimentos. Sin embargo, al cabo del tiempo el turismo dio lugar a distorsiones muy importantes en la economía: los salarios de los empleos de poca o ninguna calificación relacionados con el turismo excedieron con mucho a los de científicos de elevada formación, médicos, trabajadores calificados y trabajadores agrícolas entre otros. Además, las “empresas mixtas” en el sector del turismo llevaron a la creación de una nueva burguesía burocrática rica y al auge de las desigualdades. Igual de perjudicial, la entrada masiva de turistas resultó en el crecimiento de un lumpenproletariado, prostitutas, narcotraficantes y otras formas de pícaros no productivos cuyos ingresos ilícitos excedían a los de trabajadores, empleados y profesionales. Este grupo desarrolló redes con hoteles, restaurantes y gerentes de clubs nocturnos, que apoyaron la corrupción y pusieron a prueba los valores revolucionarios. Las carencias continuas, el bajo poder adquisitivo y la falta de bienes de consumo deseables restaron fuerza a las campañas del gobierno para “moralizar” la actividad turística sin alejar a los turistas. Las inversiones a gran escala y a largo plazo en infraestructuras turísticas -hoteles, restaurantes, muebles importados y alimentos- desviaron reservas de la agricultura: la producción agropecuaria, en especial la de productos alimenticios, declinó significativamente y sobre todo su disponibilidad para la población local, lo cual facilitó los mercados negro, gris y “libre”. Cuba se convirtió en un país dependiente de alimentos del exterior. Mientras que el turismo atraía divisas fuertes, se gastaban cientos de millones en importar alimentos de EEUU, Canadá, Argentina, la República Dominicana y otras partes. La dependencia alimentaria de EEUU incrementó la vulnerabilidad de Cuba ante cualquier endurecimiento del embargo a la exportación... El turismo, que sirvió como estrategia inmediata y necesaria en el período especial, por desgracia se ha convertido en un sector de crecimiento intrínseco y estratégico para la economía. Cuba sigue fiel a su tradicional ciclo de dependencia del “monocultivo” tras haber sustituido la exportación de azúcar a EEUU y luego a la URSS y a la Europa del Este por el turismo para canadienses y europeos. El problema con la nueva dependencia (como con la anterior) es que ofrecen soluciones a “corto plazo” mientras que a largo plazo empeoran los problemas estructurales, entre ellos una mala distribución de los recursos humanos (hay arquitectos que trabajan como botones de hotel) y la ausencia de una economía diversificada capaz de enfrentarse a los inevitables ciclos económicos endémicos del mercado capitalista mundial. La cada vez mayor dependencia de alimentos de Cuba se está agudizando, como bien lo refleja el aumento de la importación de arroz, frijoles, carne de ave, cerdo, carne de res y otros elementos esenciales (incluso, a veces, el azúcar) en la dieta cubana. En su discurso del 26 de julio de 2007, Raúl Castro destacó el enorme aumento de los precios de los alimentos importados y puso como ejemplos el aumento hasta el triple del coste de la leche en polvo en los tres años anteriores, el incremento del 10% en el precio del arroz molido entre 2006 y 2007 y la duplicación del precio del pollo. La producción agrícola de Cuba está dirigida en gran medida hacia los mercados turístico y de exportación: el tabaco, los cítricos la fruta tropical, el azúcar (apenas); gran parte de la fruta de calidad, la carne, los productos y la carne de ave se venden en los mercados privados de agricultores, o en las tiendas especiales que comercian en dólares o moneda convertible. Esto hace que haya escasez de productos en las tiendas estatales subsidiadas de los barrios. El desarrollo de “huertos urbanos” ha sido una solución para ciertos vecindarios -pues provee productos orgánicos frescos de calidad- pero no cubren las necesidades de gran parte de la población. La disminución de la producción de alimentos, especialmente el arroz (Cuba importa más del 75% de su arroz) es notable. Un importante economista cubano nos dijo que se debía a una falta de trabajadores agrícolas deseosos de cultivar arroz -una labor que requiere un esfuerzo intensivo-, al menos mientras se les pague el salario actual, muy inferior al de los empleos en sectores no agrícolas. Cuba, con una baja tasa de natalidad y una población muy educada, carece de trabajadores agrícolas. Sin embargo, por razones poco claras, Cuba rechaza la idea de alentar la inmigración desde países con excedente de trabajadores agrícolas experimentados, como Haití, para reforzar su declinante fuerza laboral en las granjas e incrementar las cosechas de productos nacionales básicos de los que depende su seguridad alimentaria. La dependencia agrícola cubana del capital extranjero, en especial de inversionistas israelíes en el sector cítrico, es también incomprensible -dada la abundancia de agrónomos, operadores agrícolas de extensión y oportunidades de aprender mercadotecnia-. El mercado mundial de los cítricos ha sido especialmente lucrativo para el capital brasileño, por lo menos desde los años sesenta... mientras que Cuba ha entrado en él con retraso y en parte a través del capital extranjero, lo cual hace que los beneficios salgan de la Isla. Mientras Cuba canalizaba de forma eficaz grandes inversiones de capital hacia el turismo, la biotecnología y otros sectores productivos, ha descuidado su sector de la vivienda, lo cual ha creado una lista de espera de 10 años para más de un millón de familias. El déficit de viviendas es una de las fuentes más importantes del descontento entre el pueblo cubano, incluso entre sus funcionarios de nivel medio del partido y del gobierno, que se ven obligados a vivir con sus parientes. Además, la vivienda actual está en muy mal estado, sobre todo en Centro Habana, donde con un poco de cemento y una mano de pintura barata se podrían revitalizar los vecindarios obreros, ahora gravemente deteriorados. Aunque el gobierno ha anunciado un programa para construir 100.000 casas y apartamentos por año, dicho programa adolece de mala gestión (demoras burocráticas), robo de materiales de construcción por funcionarios, baja productividad y un suministro inadecuado de materiales. En gran medida, la vivienda no ha gozado de la prioridad que recibió el sector hotelero para turistas durante los pasados años. El énfasis que se puso en la “recuperación económica” durante el período especial ha dado lugar a una falta de énfasis en las necesidades básicas de los consumidores en el sector de vivienda. ... Largas colas en las paradas de las guaguas, falta de puntualidad, guaguas abarrotadas, camiones “convertidos” en transporte público (los arriñonados “camellos”) y combustibles muy contaminantes han dado lugar a un malestar crónico.... El problema del transporte no se debe sólo a una falta de voluntad política. Cuando en noviembre de 2005 Fidel Castro anunció que más del 50% de la gasolina se robaba y se vendía en el mercado negro, quedó claro que la autoridad gubernamental y la vigilancia administrativa no funcionan. Los ministros a cargo de la energía, el transporte y el comercio ni siquiera fueron reprendidos públicamente. Cuba requiere al menos 10.000 nuevos vehículos de transporte, y eso sólo para empezar. Necesita personal de mantenimiento y personal entrenado, así como comités de vigilancia de consumidores y trabajadores, que aseguren que el nuevo transporte, una vez adquirido, funcione. La educación sociopolítica, las exhortaciones morales y las citas de dirigentes históricos ejemplares son necesarias para motivar a los trabajadores, pero obviamente inadecuadas en ausencia de salarios y jornales decentes. ... La brecha entre instalaciones lujosas para turistas y el paupérrimo estado de la vivienda de los trabajadores creció enormemente durante el “período especial”. La continuación de la expansión del turismo extranjero durante la década y media de recuperación erosiona los valores socialistas tanto como la desigualdad resultante del robo de recursos públicos. Las desigualdades han aumentado a causa de las “bonificaciones” no oficiales a altos funcionarios que trabajan en empresas con participación extranjera, en el comercio exterior y en la economía del dólar/euro... La economía de Cuba se caracteriza por un gran desequilibrio entre un sistema educativo muy desarrollado y una economía de “monocultivo” que no provee los puestos de trabajo apropiados a la universalización de la educación superior. ... Cuba produjo durante décadas 5-6 millones de toneladas de azúcar crudo para la exportación; después del fin de la URSS, tuvo que vender a precios de mercado mundial. En comparación, Brasil avanzó en el uso múltiple de la caña de azúcar procesada, especialmente como fuente de energía, mientras Cuba desperdiciaba sus escasas divisas extranjeras importando petróleo y reduciendo así el crecimiento general. Después, Cuba cerró muchos centrales azucareros. Algunos campos de caña se dedicaron a otros productos, pero muchos permanecieron sin cultivar, incluso cuando el precio del etanol subió vertiginosamente y aumentaron las importaciones cubanas de alimentos. Aunque numerosos críticos tienen razón al señalar los efectos negativos del cambio de la producción de alimentos a etanol, no es el caso de Cuba: los campos sin cultivar no producen ni alimentos ni etanol. ... El presidente de facto Raúl Castro ha exigido que los ministros sigan ahora agendas estrictas y presenten informes escritos actualizados relacionados con su campo de trabajo. Una mayor responsabilidad de la dirigencia es necesaria, pero no suficiente. ...Las empresas mixtas y un cierto grado de desigualdades de clase fueron tal vez necesarias para atraer capital durante los años de crisis sistémicas y colapso del comercio y de las redes financieras, el denominado Período Especial. Sin embargo, lo que en su tiempo fue considerado como una retirada o ajuste tácticos en un período particular, se ha enquistado con efectos trascendentales. Las desigualdades sociales han creado eso que Fidel Castro llama una clase de nuevos ricos que abrazan la ideología liberal... Las desigualdades sociales no son sólo el resultado de fuerzas de mercado, la corrupción y el turismo. También son un producto de la concentración del poder político en la administración y la dirección de la economía y la disposición de los gastos públicos. ...La lucha contra la Nueva Clase requiere que un nuevo sistema de representantes elegidos supervise las asignaciones del presupuesto a los diversos ministerios y tenga poder para convocar a funcionarios responsables a audiencias televisadas para que exista una responsabilidad pública estricta, cuando sea necesario. Uno de los motivos de descontento más frecuentes y repetidos entre la población es la gran desproporción entre la ayuda humanitaria en el exterior y la escasez de bienes en el mercado interno. Nadie pide el fin de la solidaridad con los pobres de todo el mundo, pero la masa cubana no apoya el grado en que se gastan actualmente recursos, en vista de la escasez de bienes de consumo dentro del país. Se han presentado varias objeciones relativas a los compromisos de Cuba en el extranjero y a prioridades mal identificadas. Ante todo, se dona mucha ayuda y no tiene un beneficio práctico para Cuba: los programas de salud no obtienen como respuesta reacciones diplomáticas y políticas favorables de los países receptores. ...Sin duda Cuba se gana el favor de los pobres de esos países, pero también provoca el resentimiento de muchos cubanos. Ante la urgente necesidad de acelerar programas internos, Cuba no está en condiciones de mantener costosos programas en el extranjero que carezcan de beneficios monetarios, estatales o comerciales. También se cuestionan los subsidios para estudiantes y pacientes extranjeros y para los numerosos delegados a conferencias. Hay que pensar seriamente y tomar decisiones económicas durísimas para lograr un equilibrio efectivo entre las urgentes necesidades internas de Cuba y sus misiones humanitarias en el extranjero. ... "
Por James Petras y Robin Eastman-Abaya Rebelión Agosto 24, 2007 Infosearch: José F. Sánchez Analista Jefe de Buró Cuba Dept. de Investigaciones La Nueva Cuba Septiembre 11, 2007 |