Ayer el mandatario hondureño sostuvo un encuentro en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), donde el ministro de Salud Pública, José R. Balaguer Cabrera; el secretario del Consejo de Estado, José M. Miyar Barrueco, y el rector del centro, Juan D. Carrizo, le brindaron una detallada información en relación con la formación del personal médico.
En esa escuela se forman actualmente 353 estudiantes hondureños y se han graduado como médicos 461 jóvenes de esa nación centroamericana.
Allí se preparan en la actualidad unos 10 000 galenos de 32 países, y se han graduado como tales 4 468 de 30 naciones, incluyendo nueve de Estados Uni-dos, explicó a los visitantes el rector Juan D. Carrizo.
El presidente Ze-laya destacó que "con ese tipo de programa como el de la ELAM se está creando el principio de una nueva sociedad en la que las relaciones entre las naciones y entre los pueblos no están basadas solamente en el intercambio comercial, en ponerle precio a las cosas para intercambiarlas, sino, y fundamentalmente, en la expresión de solidaridad de la que es exponente el pueblo cubano, sin pedir nada a cambio".
El mandatario hondureño agradeció a Fidel, a Raúl y al Gobierno cubano por esa solidaridad expresada también en los centros oftalmológicos que con cooperación cubana se están abriendo en su país.
En un acto con los estudiantes hondureños, en el teatro de la ELAM, el presidente Zelaya dijo ser portador de un saludo muy especial de los familiares de los alumnos y de "todo el pueblo de Honduras que agradece a Cuba por ese gran ejemplo de dignidad, independencia y solidaridad humana".
Ese es el pueblo cubano al que nosotros venimos hoy a abrazar, a unirnos, con el fin de lograr mayores niveles de cooperación y desarrollo para Cen-troamérica y para Cuba, concluyó.
El mandatario de la nación centroamericana cumplió ayer, en su última jornada de trabajo, un intenso programa que incluyó entrevistas por separado con el ministro de Educación, Luis Ignacio Gómez; y con la ministra de la Industria Básica, Yadira García Vera.
También visitó el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología; recorrió la Habana colonial, y depositó una ofrenda floral ante el Monumento a José Martí en la Plaza de la Revolución.