Señaló el ministro de Energía, Juan José Aranguren, en conferencia de prensa durante el lanzamiento formal del tarifazo: "Hemos decidido que es necesario estar protegiendo a una parte de la población porque no está todavía en condiciones de estar haciendo frente a esta recomposición de las tarifas del sector". Se refiere a los ciudadanos que recibirán la Tarifa Social. Esto es aproximadamente unos 900.000 usuarios residenciales de Edenor y Edesur (sobre un total de 4,6 millones; un 20%). Esto, claro, si no se cumplen los criterios de exclusión que veremos más adelante. A continuación y conforme el nuevo marco regulatorio eléctrico, un análisis de la "Tarifa Social". De su significado e impacto, se advierte un fortísimo menosprecio en el tratamiento de los sectores más vulnerables por parte de la administración macrista. La consecuencia del tarifazo eléctrico: el indicador de "pobreza energética" -hasta ahora desconocido en la Argentina- y cuya principal variable de incidencia directa es la asequibilidad de la energía (a mayor precio de la tarifa, mayor pobreza energética), dice presente con Mauricio Macri. Su bautismo de fuego está en relación directa con la anarquía de mercado que por desgracia ya supera cualquiera de los peores pronósticos.

Migajas a los "pobres"
El diario La Nación vendió la Tarifa Social como un beneficio para 2 millones de "pobres", jubilados y pensionados, titulares de planes sociales o con certificado de discapacidad y trabajadores públicos (que aún conserven su empleo) con ingresos brutos del orden de los 12.120 pesos, entre otros beneficiarios. Estos sectores serán acreedores de 150 kW de energía gratis por mes. Por su parte, el Grupo Clarín a través de TN también vendió la Tarifa Social como un ingente beneficio y para 2 millones de hogares y quienes ganen menos de 12.120 en bruto. Eligieron para acompañar la supuesta excelente noticia un ventilador de techo, un lavarropas automático y una plancha.
Ahora bien, veamos a qué consumo equivale la energía "gratis" que la cámara de empresas al frente del Ministerio de Energía de la Nación.  Según las resoluciones 6 y 7 anteriormente descriptas, la energía gratuita contemplada en la Tarifa Social es de 150 kW/mes. A partir de allí y siempre y cuando el consumo supere al de igual mes del año 2015, el obsequio se termina. ¿En qué consisten los 150 kW mensuales?
Teniendo en cuenta un hogar con 1 habitación, 1 baño, y un comedor y cocina integrados, un consumo de 150kw por mes (30 días) lógico y conforme prioridades básicas implicaría:
a) tener iluminados todos los ambientes (a excepción del baño) un máximo de 30 minutos por día, durante todo el mes.
b) tener iluminado el baño un máximo de 1 hora por día, durante todo el mes.
c) Utilizar la computadora menos de 30 minutos por día, durante todo el mes.
d) Mantener encendido la TV 4 horas por día como máximo, durante todo el mes.
e) Si se dispone de aire acondicionado, no poder encenderlo a lo largo de todo el mes.
f) Si se dispone de estufa de cuarzo, no poder encenderla a lo largo de todo el mes.
g) Si se dispone de ventilador de techo, encenderlo un máximo de 2 horas y 20 minutos por día, durante todo el mes. Es decir y para evitar pasarse, no podría prenderse mientras se duerme.
h) El lavarropas podría utilizarse como máximo 6 minutos por día o un total de 3 horas por mes.
i) El termotanque se utilizaría 1 hora por día, durante todo el mes.
j) La heladera con freezer podría estar enchufada todo el día, siempre y cuando disponga del sistema automático de ahorro del 50% del tiempo.
k) El microondas podría utilizarse como máximo 6 minutos por día o un total de 3 horas por mes.  
l) La plancha podría utilizarse como máximo 6 minutos por día o un total de 3 horas por mes.  
m) Una bomba de presión se utilizaría 1 hora por día, durante todo el mes.

Insólito y callado criterio de exclusión
El "ingente" consumo anteriormente explicado es obsequiado por la Tarifa Social, mas siempre y cuando los agraciados no "derrochen" por encima de lo consumido el mismo mes del año anterior, no dispongan de un auto comprado entre 2002 y enero de 2016, ni sean titulares de dos inmuebles. Pero aquí no terminan los criterios de exclusión, desde que falta el más inconcebible. Según el artículo 9 de la Resolución 6/2016, la aplicación de la Tarifa Social (ídem para el Plan de Estímulo) está atada a la decisión de CAMMESA (1) y dependerá de la situación de las distribuidoras para con ella en cuanto acepte o rechace los planes de cancelación de deudas, así como el tipo y tiempo de duración de futuras moras y cómo proponen liquidarlas. En otras palabras, el otorgamiento de la Tarifa Social está sujeta a la situación financiera de las distribuidoras. Tal condición nos lleva a preguntarnos, lógicamente, cómo será la situación financiera de las distribuidoras en un contexto de incremento exponencial de los precios de las tarifas eléctricas pero acompañado de despidos masivos, caída del consumo y de la actividad económica en general.

Conclusiones: Tarifa anti-social y Pobreza Energética
Finalmente y sobre la "energía gratis", según celebra el diario La Nación, algunas apreciaciones. Primero, el Grupo Clarín y su canal TN debería aclarar toda vez que ilustre el "obsequio" eléctrico con electrodomésticos -volver a ver las imágenes de arriba- el tiempo máximo de utilización de los mismos conforme el techo de gratuidad de la Tarifa Social. Por ejemplo: ventilador de techo / máximo de utilización diaria 2 horas y 20 minutos; lavarropas automático / máximo de utilización 3 horas por mes; y plancha / máximo de utilización 3 horas por mes. Claro que los consumos podrán variar según los electrodomésticos que disponga el hogar y el uso dado a los mismos. Pero desde la lógica de la tabla aquí empleada no estarán muy lejos de los números aquí planteados.
Segundo, es importante destacar que, a pesar de los notables avances entre 2003 y 2015, los sectores más humildes por lo general carecen de gas natural por redes y, en muchos casos, de agua potable. Por esta razón y por el impacto del costo de la energía en sus ingresos, el tarifazo afectará drásticamente a los hogares más carenciados (se calefaccionan y cocinan con electricidad), que además y en el caso del Gran Buenos Aires tienden a ser multifamiliares (2 o 3 familias por hogar), utilizando bombas y termotanques tanto para calefaccionar el agua a ser ingerida como para obtenerla. Y ya hemos visto de la tabla qué proporción de uso diario permite el obsequio energético de Aranguren a tales equipos.
Tercero y último, la Tarifa Social y su gratuidad constituye una perfecta síntesis de la idea que el neoliberalismo y sus punteros de mercado tienen de los sectores más humildes y vulnerables. 150 kW por mes de energía gratis es una tomadura de pelo, una miserable migaja, sobre todo contemplando las extraordinarias ganancias que las distribuidoras tendrán de aquí en adelante. En esta dirección, cabe resaltar que para que los 900.000 hogares "pobres" (La Nación y el Grupo Clarín se había jugado a unos 2 millones) detectados por Aranguren puedan gozar del "subsidio" macrista, su consumo total deberá ser menor al correspondiente al año anterior. Es decir, estamos en presencia de un subsidio que sólo se efectiviza con la reducción del bienestar y la calidad de vida de la población que justamente más precisa aumentarla. ¿Tarifa Social? Nada de eso. Tarifa anti-Social.
En suma, el nuevo marco regulatorio del que surge este tarifazo eléctrico, marco regulatorio elaborado a imagen y semejanza de la cámara de empresas al frente del Ministerio de Energía (imagine el lector yendo a comprar al almacén con un manual escrito por el almacenero) tiene una única y nefasta consecuencia: la pauperización energética de la población -hasta ahora desconocida en la Argentina-. Hablamos del indicador de "Pobreza Energética", indicador cuya principal variable es la asequibilidad de la energía (a mayor precio de la tarifa, mayor pobreza energética). Por desgracia, la anarquía de mercado ya supera cualquiera de los peores pronósticos.  «