“I
bambini s’incontrano sulla spiaggia di mondi sconfinati” - Rabindranath
Tagore
I bambini s’incontrano sulla spiaggia di
mondi sconfinati Lassù il cielo infinito è immobile e l’instancabile acqua
è agitata. I bambini s’incontrano con grida e danze sulla spiaggia di
mondi sconfinati.
Costruiscono castelli di sabbia e
giocano con conchiglie vuote. Con foglie secche intrecciano le loro
barche e sorridendo le fanno galleggiare nell’immenso mare. I bambini
giocano sulla spiaggia dei mondi.
Non sanno nuotare, non sanno gettare le
reti. I pescatori di perle si tuffano per cercare le perle, i mercanti
navigano sulle loro navi, mentre i bambini raccolgono sassolini e li
sparpagliano di nuovo Non cercano tesori nascosti, non sanno gettare le
reti.
Il mare ondeggia ridendo e pallido
riluce il sorriso della spiaggia.
Le onde portatrici di morte cantano ai
bambini delle ballate senza senso, come una madre che dondola la culla del
suo bambino. Il mare gioca con i bambini e pallido riluce il sorriso della
spiaggia.
La tempesta vaga nel
cielo senza sentieri, le barche naufragano nell’acqua senza rotte. La
morte è in giro e i bambini giocano. Sulla spiaggia di mondi
sconfinati c’è il grande incontro dei
bambini.
Los niños se encuentran sobre la playa de mundos
ilimitados
Los niños se
encuentran sobre la playa de mundos
ilimitados Allá
arriba el cielo infinito está inmóvil y la
incansable agua es agitada. Los niños se encuentran con gritos y
danzas sobre la playa de mundos
ilimitados.
Construyen castillos de arena y
juegan con conchas vacías. Con hojas secas entrelazan sus
barcos y
sonriendo las hacen flotar en el inmenso mar. Los
niños juegan sobre la playa de los mundos.
No saben nadar, no saben echar las
redes. Los pescadores de perlas se zambullen
para buscar las perlas, los mercantes navegan sobre sus
barcos, mientras
los niños recogen piedritas y las desparraman de
nuevo.
No buscan tesoros escondidos, no saben echar las
redes.
El mar ondea
riendo y pálida reluce la sonrisa de la
playa.
Las
olas traedoras de muerte les cantan a los niños baladas sin
sentido,
como una madre que mece la cuna de su
niño. El mar juega con los
niños y pálida reluce la sonrisa de la
playa.
La
tempestad vaga en el cielo sin sendas, los
barcos naufragan en el agua sin rutas. La
muerte está por ahí y los niños juegan. Sobre la playa de mundos
ilimitados hay el gran encuentro de los
niños.
“L’uomo e il
mare” Charles
Baudelaire
Sempre il mare, uomo libero, amerai! perché il mare
è il tuo specchio; tu contempli nell’infinito svolgersi dell’onda l’anima
tua, e un abisso è il tuo spirito non meno amaro. Godi nel tuffarti in
seno alla tua immagine; l’abbracci con gli occhi e con le braccia, e a volte
il cuore si distrae dal tuo suono al suon di questo selvaggio ed
indomabile lamento. Discreti e tenebrosi ambedue siete: uomo, nessuno ha
mai sondato il fondo dei tuoi abissi; nessuno ha conosciuto, mare, le tue
più intime ricchezze, tanto gelosi siete d’ogni vostro segreto. Ma da
secoli infiniti senza rimorso né pietà lottate fra voi, talmente grande è
il vostro amore per la strage e la morte, o lottatori eterni, o
implacabili fratelli!
El
hombre y el mar, Charles Baudelaire
¡ Hombre libre, tú siempre has de querer al mar ! El mar es el
espejo donde tu ser se mira En la onda que hacia lo infinito se estira Y
de ese amargo abismo tu alma está a la par.
Te gusta hundirte en esa
imagen atroz, Tus ojos y tus brazos la abarcan. Y el sonido Que hay en tu
corazón a veces es vencido Por el de ese lamento indomable y
feroz.
Ambos son por igual cerrados y discretos: Hombre, ninguno sabe
si hay fondo en tus honduras, Oh mar, nadie conoce tus riquezas oscuras, ¡
Tanto que se empecinan en guardar sus secretos !
Y sin embargo, desde
siglos innumerables Los dos se están peleando sin tregua ni piedad. ¡ Que
manera de amar la muerte y la crueldad, Oh eternos luchadores, oh hermanos
implacables !
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