“ Bocanadas y besos “ es el primer libro de poemas del escritor argentino
Lucas Hugo Guerra, el cual recoge
unas selección de los mejores escritos publicados por el autor en Internet desde
2013 bajo el seudónimo de
" Mind of Brando ". lanza su primer libro de
recolección de escritos.
Sii forte in modo tale che nessuno ti
distrugga ... Sii nobile in modo tale che nessuno ti umili ... Sii umile
in modo tale che nessuno ti offenda ... Sii te stesso in modo tale che
nessuno ti dimentichi !
Cit
que seas fuerte de modo tal que nadie te destruya
... que seas noble de modo tal que
nadie te humille ... que seas humilde de modo tal que nadie
te ofenda ... ¡ Sé tú mismo de
modo tal que nadie se olvide de ti !
cit
Il cielo
era stellato, tanto che, dopo averlo contemplato, ci si chiedeva se sotto un
cielo così potessero vivere uomini senza pace.
Fëdor
Dostoevskij
El
cielo estaba estrellado, tanto que, después de haberlo contemplado,
nos
preguntámamos si bajo un cielo así pudieran vivir hombres sin
paz.
Brando
il bacio
pablo neruda
Ti manderò un bacio con il
vento e so che lo sentirai, ti volterai senza vedermi ma io sarò
li Siamo fatti della stessa materia di cui sono fatti i sogni Vorrei
essere una nuvola bianca in un cielo infinito per seguirti ovunque e
amarti ogni istante Se sei un sogno non svegliarmi Vorrei vivere nel tuo
respiro Mentre ti guardo muoio per te Il tuo sogno sarà di sognare
me Ti amo perché ti vedo riflessa in tutto quello che c'è di
bello Dimmi dove sei stanotte ancora nei miei sogni? Ho sentito una
carezza sul viso arrivare fino al cuore Vorrei arrivare fino al cielo e
con i raggi del sole scriverti ti amo Vorrei che il vento soffiasse ogni
giorno tra i tuoi capelli, per poter sentire anche da lontano il tuo
profumo ! Vorrei fare con te quello che la primavera fa con i
ciliegi.
el beso
Te mandaré un beso con el
viento
y sé que lo sentirás,
te darás vuelta sin verme, pero yo
estaré allí.
Estamos hechos de la misma
materia
de la que están hechos los
sueños.
Quisiera ser una nube blanca
en un cielo
infinito
para seguirte y amarte cada
instante.
Si eres un sueño, no quiero
despertarme.
Quisiera vivir en tu
respiro.
Mientras te miro muero por
ti.
Tu sueño será soñarme.
Te amo porque te veo
reflejado
en todo aquello que es
bello.
Dime en donde estás esta
noche
¿ quizás en mis sueños
?
He sentido una caricia en mi
rostro
llegar hasta mi corazón.
Quisiera llegar hasta el
Cielo
y con rayos de sol escribirte
" te amo ".
Quisiera que el viento soplase
cada día
entre tus
cabellos,
¡ para poder sentir también desde
lejos
tu perfume !
Quisiera hacer
contigo
lo que la primavera hace con los
cerezos.
Pablo Neruda
Cartas Al
Tiempo
Estábamos tan cerca que nuestras
almas casi se podían tocar. Y quizás ese momento lo habíamos soñado tantas
veces, que resultaba imposible que todavía no hubiera ocurrido. Porque algo
imaginado tan intensamente, poco a poco se empieza a
convertir en memoria y se va encarnando en los recuerdos. Y el cuerpo se empieza
a confundir y se engaña, y piensa que hasta lo ha vivido y recuerda los olores
dulces, los colores vivos, las salivas tibias, el
tacto de las manos húmedas agitando el cuerpo del otro.
Estábamos tan cerca… pero sin
darnos cuenta, cuanto más nos acercábamos, más nos
alejábamos; atrapados en una vorágine de necedad innecesaria, mezclada con una
pasión rabiosa que nos arrancaba las sonrisas y nos devolvía oscuridad y lágrimas.
Entonces en esa tristeza, uno
piensa que el amor debería morir de repente, como en un accidente violento,
carente de toda agonía. La gente en un susurro diría: “Bueno, por lo menos no
sufrió”, y con eso se confortarían y conformarían, contemplando el trágico espectáculo del amor y su muerte.
Es que no hay destino más cruel
para el amor que ser asesinado por el tiempo. Que el paso de los días lo
ahogue imperceptiblemente hasta dejarlo sin aire, sin
alas y sin sueños.
Si yo fuera el amor, me tiraría
sin paracaídas del sueño más alto que encontrara;
aunque de alguna manera, eso es amar: un suicidio de dos almas abrazadas,
sonriendo porque ni siquiera la gravedad del tiempo
las pudo matar.
Brando.
La lluvia a veces es piedra, y viene
con la tarde a revolcarse en mis sábanas de arena; y el agua es un abrazo y me
susurra pequeñas mentiras empañadas. Y entonces es difícil abrazarse a uno
mismo, cuando nos sentimos tan chiquitos ante el
miedo que nos apedrea las horas. Y de repente la lluvia nos perdona y se va como
vino, ni tan roja ni tan añeja, pero muy remolino, dejando un poco de nosotros
desiertos por los charcos.
Lucas Hugo Guerra
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