Consejo de los Ángeles:
“El demonio también fue un ángel”
Miguel de Unamuno.

¿Cuál es el significado de este refrán? 
¿Por qué las manos inactivas? 

No hacer algo no implica necesariamente ser perezoso o
estar aburrido y dispuesto a pecar.  Por el contrario,
puede indicar que estamos descansando, pensando,
meditando o teniendo una visión.

Los puritanos, siempre vigilantes, piensan que los seres
humanos tenemos que estar continuamente ocupados en
actividades que “rindan algo” y nos liberen de las
preocupaciones; el problema es que también nos
impiden disfrutar de los buenos momentos de la vida.

Desde el punto de vista estricto del dogma religioso,
el demonio representa nuestro lado salvaje, esa parte
curiosa, rebelde y creativa de nuestra naturaleza que
se niega a quedar encuadrada en el breve espacio que las
mentes estrechas y los guardianes de la moral pública
han decretado para mantenernos firmes.

Los ángeles no nos quieres inactivos por aburrimiento,
apatía, depresión o cualquier otra actitud capaz de
socavar nuestra vitalidad, pero tampoco desean que
estemos siempre ocupados, en detrimento de la alegría de
 vivir, de la creatividad o, sencillamente, de la calma y la
reflexión.  En efecto, no les parece normal que estemos
pensando siempre en el demonio, aunque sea para evitarlo.

La próxima vez que no estés haciendo nada, trata de
 imaginar que el demonio se te aparece y te invita
 que lo sigas.

¿A dónde te lleva? 
Haz un dibujo o describe por escrito las imágenes que se
te vienen a la mente.

¿Cómo es ese patio, está lleno de trastos y de signos
de abandono?

 ¿Es un lugar tentador? ¿A qué jugarías allí?
 ¿Quién iría contigo?

Meditación de los Ángeles:
 Disfruto de los beneficios espirituales y creativos de
la inactividad.