QUE EN TU HOGAR REINE SU PAZ
"Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada" Genesis 2:23
En nuestro corazón deseamos hoy una bendición especial sobre todos los matrimonios.
Leyendo las Sagradas Escrituras, vemos que el matrimonio fue pura y exclusivamente idea de Dios. El hombre no vino a Dios a decirle: "Me siento solo, dame una compañera". El Señor vio esa necesidad y dijo: "No es bueno que el hombre esté solo". En Su amor soberano Dios decidió sacar algo del hombre para hacer a la mujer.
Él podría haberla hecho del polvo, pero decidió que la mujer no fuera independiente sino que fuera ayudante y compañera del hombre. Y aún más, que fuese para el hombre la realización de sí mismo, encontrando en ella lo que le hacía falta para sentirse completo.
Vemos, a través de esto, que la unión física entre el hombre y la mujer en el santo estado del matrimonio, viene a ser un sacramento que abre la puerta a una unidad que sólo Dios puede comprender y que, en Su amor, ha concedido que Sus hijos puedan disfrutar.
Una de las primeras bendiciones de Dios fue sobre la unión del matrimonio (Génesis 1:28), la cual debía tener prioridad sobre la unión y la lealtad a los padres.
Según Efesios 5:31, el matrimonio fue ordenado y bendecido por Dios desde el principio y Él desea bendecir el suyo ahora mismo. Ponga todas sus cargas y ansiedades en las manos del Señor creyendo que Él está de su lado y quiere ayudarle. Él desea que Su paz reine en su hogar. Sean bendecidos.
Graciela
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