Antónimo de la muerte
La vida es tan vagabunda, como la hoja que ha caído de un árbol y el viento la ha desplazado por lugares inconcebibles, ésa hoja no sabe si será expuesta al sol y terminará quemándose, o tal vez si la lluvia terminará pudriéndola. La vida es tan sencillamente complicada, donde lo sencilla se encuentra en la facilidad de perderla y lo complicado en lo difícil que es mantenerla.
La vida es tan diversa como lo es cada día, que aunque empieza con un mismo amanecer y termina con un igual anochecer, posee un lapso, en el que un eclipse de oportunidades cambiantes se interpone. La vida no es más que el resultado de lo que soñaste, lograste y ahora vives. La vida no es una realidad, porqué la realidad es lo que parece ser, más mi vida nunca ha sido nada a comparación de las millones que existen.
La vida no es un suspiro, porque si fuera así yo ya no existiría. La vida hecha raíces en materas, a los que yo denomino personas cercanas, más mi completa vida crece en sentimientos ocultos que se reflejan en un externo. La vida se pretende simbolizar en cuatro letras de mi idioma, sabiendo que mucha gente ha muerto fracasada, en el intento de entenderla.
La vida no es un camino, porqué por lo general un camino tiene una ruta que nunca se desvía, más si puedo considerarla un laberinto, porque en este último hay una salida que para hallarla consta de equivocarnos y de empezar de nuevo. La vida no se acaba en la muerte, se acaba en el momento en que tú dejas de vivir luchando para ella. La vida no es injusta, el injusto eres tú, que quiere dar frutos sin ni siquiera sembrar una semilla.
La vida no es un destino, el destino se anuló en el momento en que el hombre descubrió las oportunidades. La vida no termina siendo más que la reunión de todo lo que estás por hacer y estas viviendo hoy. La vida es tu vida, en una escala igual que la de los demás, pero se diferencian en que nadie en la vida, la recorrerá como tú lo estás haciendo ahora.
La escritura es una pasión que se arraiga a todo lo que creo ser, y en está reflexión se me permite hablar acerca de lo que más nos inquieta como humanos y lo titule como antónimo de la muerte.
Colaboración de Sindyluh