...Buscáis a Jesús nazareno, el crucificado. Ha resucitado... Marcos 16:6
Hace más de 2,000 años, Dios envió a su Hijo unigénito al mundo que se había extraviado. Jesús vino en forma humana con un mandato sencillo pero vitalmente importante: Buscar y salvar a la raza humana (Lucas 19:10).
Esta misión de rescate no fue una idea tardía que Dios concibió. Era su propósito desde la eternidad pasada que Cristo viniera a salvarnos.
a través de los siglos, los corderos pascuales habían señalado a Jesús y a su sacrificio único y para siempre, llevó a cabo el plan del Padre por medio de su muerte y resurrección. Ahora el rescate está disponible para todo el que ponga su confianza en Él. Uno murió para salvar a muchos.
Es nuestra oración que a través de los mensajes que estaremos presentando, usted se fortalezca, se sienta alentada, desafiada y transformada. A medida que vaya por los acontecimientos que Él soportó por amor, adórele con un corazón agradecido. Que su rescate cobre un significado fresco y nuevo cuando usted pondere Su misericordia y Su gracia.
Palabra fiel y digna de ser aceptada por todos: Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores,
entre los cuales yo soy el primero ( 1 Timoteo 1:15