Digno de Adoración
Lectura: Salmo 99
Exaltad al SEÑOR nuestro Dios, y postraos ante el estrado de
sus pies; Él es santo. Salmo 99:5
Mientras Moisés estaba cuidando las ovejas de su suegro en el desierto, una extraña
vista captó su atención. Se estaba quemando un arbusto, pero no se estaba
consumiendo. Cuando Moisés se volvió para mirar más de cerca, Dios le dijo:
"Quita las sandalias de tus pies, porque el lugar donde estás parado es tierra santa"
Éxodo 3.5
Josue tuvo una experiencia similar cuando se acercó al capitan del ejército del
Señor. Cuando Josué se acercó recibió el siguiente mandato:
"Quita las sandalias de tus pies, porque el lugar donde estás es santo"
(Josué 5:15)
Las experiencias de Moisés y de Josué nos enseñan que un Dios santo
exige nuestra referencia y respeto. Es verdad que se nos exhorta a que
nos acerquemos "con confianza al trono de la gracia" (He 4:16). Podemos
entrar en la presencia de Dios con confianza porque Jesús ha abierto
el camino para nosotros por medio de su muerte en la cruz.
Pero no hemos de acercarnos nunca a Dios irrespetuosamente.
Nunca hemos de profanar su nombre.
Nuestro Padre Celestial no es "el de allá arriba". Es Dios, Aquel que
es alto y exaltado. Y debido a su majestad y santidad, hemos de
exaltarlo y adorarlo. como único Dios verdadero es digno de nuestra
adoración. Demósle nuestra mayor alabanza.
Richar W. De Haan