Nuestro Deseo
Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza, a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas. Hebreos 6:11-12 (Reina-Valera 1960).
Una de las características que como creyentes tenemos es nuestro buen deseo para los demás hermanos. La Palabra de Dios nos da varios ejemplos de hombres tales como el Apóstol Pablo que también se regocijaba cuando sus hermanos en Cristo estaban en bien. En este pasaje lo encontramos aconsejando a los hebreos a mostrar esta solicitud de bienestar hacia todos los demás.
Más importante aun es el hecho de que debemos de tener una combinación de Fe y Paciencia para esperar la venida de nuestro Salvador. Es interesante notar que mientras nosotros “practicamos” nuestros buenos deseos con nuestros hermanos nos mantendremos ocupados y no perezosos. Sabemos que la pereza es una de las condiciones que nos debilita en el área espiritual y abre las puertas para todo tipo de tentación y ataque del enemigo.
Mantengámonos pues ocupados en el Señor no dando lugar a la pereza y practicando la Fe y la paciencia para con nuestros hermanos.
Bendiciones,
Rev. Alberto Ortiz