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« Pabellon Asgard: El castillo de Valhalla
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De: Polaris (Mensaje original) |
Enviado: 10/11/2009 08:35 |
**Los vientos huracanados azotan nuevamente la roca pulida del castillo de Valhala donde los jovenes aspirantes a dioses guerreros caminan desorientados por el frio de la mañana. Más aun asi, no muestran el menor cambio ante el mismo, impidiendoles ceder el orgullo de un entrenamiento basado en largos dias y noches solos en la nieve, como unica fuente de calor su propio cuerpo. Los hombres de Asgard eran fuertes, exigiendoseles sudor y sangre a aquellos que se ofrecian para proteger a la heraldo de Odin y representar el nombre del dios que les prometia una vida llena de gracias y complaciencias a quien por él muriese. En Asgard el frio es comun pero, los ultimos días se habia vuelto extremo a costa de que el invierno se abria paso como dama vestida de blanco caminando hacia el altar, opacando todo rastro de cualquier otro ser en el camino, cubriendolo con un velo helado de nieve y escarcha. Con la ventana de la torre abierta, la heraldo de Odin se encuentra con los brazos desnudos posados en el marco, tan helado que habia dejado de sentirlo a los segundos de tocarlo. Una luz blanca brota de su ser mientras hileras de cabello celeste vuela a su alrededor, cayendo sobre la pesada capa oscura que cubre su silueta femenina y delicada, blanca como la nieve que cubre Asgard. Ambas manos entrelazan sus dedos mientras sus ojos helados se encuentran cerrados, más su mirada se dirige en forma diagonal a lo alto. Sus tiernos labios rosaceos apenas se mueven, pero solo el sonido del silencio emiten, sin embargo la mente de la heraldo medita pacificamente, recitando una oracion que se vuelve vana al ver como el pueblo de Asgard sufre el azote de la naturaleza. Aquel brillo que emite el cuerpo de la gran sacerdotiza de Odin lleva el pedido de su señor en los cielos, dando calidez a quien estuviese cerca, y evitando el los vientos tajantes del norte lastimasen el cuerpo de la fémina. -Odin, señor de Asgard, soy tu sierva devota. Tu pueblo vive en el extremo norte del mundo...nunca hemos visto la luz del sol. No hemos acariciado jamas la tierna hierba de los prados, ni probado las delicias de los arboles frutales. Tal és nuestro destino y el de tu pueblo, señor Odin... que de nosotros depende la paz del mundo y Asgard ha soportado el sufrimiento por tiempos inmemoriables para que otros gocen de un clima mas cálido...- Valhalla, cuyo nombre ha bautizado tambien el castillo que se alza sobre las colinas de roca, siente como la paz recubre su ser pero, el fulgor de la gema que brilla en su dedo anular izquierdo logra que el brillo emitido por el cuerpo de la fria joven se enturbiese, mientras ambas manos posan sus palmas en el marco del ventanal por el cual observa - Pero ¿por qué, mi señor Odin? ¿Por qué tu pueblo debe sufrir tales padecimientos? ¿quien en el mundo voltea su mirada hacia nosotros, los exiliados en el norte? ¿Quien se preocupa por tus hijos que gritan pidiendo aplacar las tormentas?-las delicadas palmas de Valhalla emiten el calor de un cosmos cautivo, volviendo agua el hielo que se ha vuelto roca por el paso de los siglos en que el viento azota las paredes del castillo**
Valhalla de Polaris, Representante de Odin Señor de Asgard
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....Perdonen mi ignorancia... pero que hay que hacer aqui??... ¿Rolleamos haciendo que?
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De: Polaris |
Enviado: 15/11/2009 05:36 |
Esa es la idea, Dios guerrero de Epsilon. Rolear. El inicio de una cronica depende de alguien que relata una historia y los demas jugadores le siguen para crear algo interesante. En este caso Valhala se encuentra sola en el castillo, y cualquier persona que desee sumarse o ir a hablar con ella puede hacerlo.
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Me abría paso entre aquel viento huracanado, que azotaba con furia todo el castillo del Valhala. Los alrededores se encontraban completamente rodeado de una gruesa capa de hielo, a lo lejos se divisaba el imponente castillo de Asgard (el Valhala), encima de una colina rodeado de una inmensa cantidad de nubes, que teñidas de un color negro daban un tono tétrico al lugar.
La fuerte tormenta no le dejaba visualizar el camino correctamente, todas las escalinatas que llevaban directamente hacia el castillo estaban cubiertas, en aquellos cubos blanquecinos. A mi derecha e izquierda ya no podía notar las grandes paredes que cubrían el camino de las mismas escalinatas, estas estaban cubierta del mismo intruso (nieve), ¿que estaba pasando?, ¿porque tanta furia de parte de nuestro Dios? Se preguntaba Hagen mientras seguía subiendo las mismas Escalones.
Su energía cósmica podría ser de una potencia inigualable, al igual que sus otros compañeros, pero ni siquiera los mismos Habitante de asgard podríamos resistir aquel frio que en hiela los huesos.
Hagen había subido escalones hasta ya no poder visualizarlos, estos ya habían sido cubiertos por la misma nieve. ¿Quizá Eso formaba parte del obstáculo que su mismo Dios le había puesto para medir su Habilidad?, sin más que esperar. Hagen cerró sus ojos al tiempo que juntaba la palma de sus manos y dejaba escapar aquel cosmo que tanto tiempo este había entrenado en la única cueva donde la lava y el calor abundaban, este había errado entre la vida y la muerte, y tras su arduo entrenamiento para controlar dicho poder, hasta llego a perder la locura tan solo minutos, pero su determinación le dejo abrir los ojos a su últimos cosmos, lo que otros le llamarían 7 sentido.
Su cosmo se intensifico dejando escapar odio y violencia, mientras más iba en aumento el poder de su cosmo, mas vibraciones maléficas parecía emitir su aura. Su alrededor teñia de un rojo magma y se expandía lentamente hasta poder ocupar diez metros a la redonda, toda nieve que tocaba aquella energía era evaporada, solo dejaría paso a los escalones para poder llegar a su destino.
Habia llegado hasta el castillo, haciéndose paso con su mismo cosmo, el cual este seguía emanando sin un control. Veía el gran castillo a su frente para solo recordar su infancia. En aquel reino de asgard perdido en el último confín de la Europa del norte, la vida es terrible, desde el nacimiento nos vemos obligado a soportar las peores privaciones. El clima es de tal crueldad que solo los mas fuertes sobreviven, y de las noches de los tiempos hemos aceptado humildemente aquella suerte.
Había ignorado completamente todo a su alrededor, al igual que aquella voz, que hacia plegarias a nuestro Dios. ---ummmm, Señorita, ¿porque tantas plegarias?, esto solo es una estúpida prueba, si alguien muere no serviría de nada llorarle, ya que no fue lo suficientemente fuerte para soportar tales pruebas--- Decia Hagen entre dientes mientras miraba hacia el balcón donde estaba la sacerdotisa.
Volvio de nuevo su caminar hasta quedar de frente al balcón, en donde este levanto el rostro y grito fuertemente ---No gaste saliva en escorias que quizá ni puedan soportar una estúpida prueba, miladi. Esto es una estúpida prueba que nuestro dios nos ha puesto para saber nuestra fe en el, cosa que por mi parte me da lo mismo— callo de un repente a otro sin dejar de quitar su mirada en la mujer,era como si estuviera esperando que ella respondiera*
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De: Polaris |
Enviado: 15/11/2009 16:53 |
**Los vientos tempestuosos parecen arrojar la furia de los dioses nordicos contra la fria tierra Asfariana. El bello y sutil rostro de la heraldo mantiene una paz imperturbable mientras sus palmas sienten el hielo ardiente recorriendo su piel, entumeciendo hasta quitar toda sensacion de su tacto pero, ni siquiera tal agresividad y dolor palpitante hizo que el semblante memorable y pacifico emitiera un movimiento en aquellas facciones de hielo. La sacerdotiza Valhalla lentamente apaga su cosmos que brillaba blanco como la misma nieve para sentir en su cuerpo el choque helado de las tormentas del extremo norte. Cierra sus ojos mientras su cabellera se mueve llevaba por el viento impiadoso, el cual golpea el cuerpo delicado de la fémina como si de una infiel se tratase -¿Esto es lo que le ofreces a tu pueblo? ¿Es esto lo que ellos sienten? - La pregunta se vuelve reproche pero, en ese instante nuevamente el anillo que porta en su dedo anular de su mano izquierda brilla intensamente, causando calor en el cuerpo de piel blanca y suave de Valhalla. Y siguiendo la calidez del anillo polar, el cosmos de la sacerdotiza se eleva nuevamente, derritiendo el hielo que habia penetrado en la helada habitacion. Entonces una voz masculina se filtra por el grito de la tormenta, llegando más potente que la voz de los vientos polares. Valhalla desciende su mirada, aquellos ojos de hielo alcanzan a divisar el rostro de un hombre. En el encuentro de miradas fue como si el viento nevado se abriese para poder identificar a la perfeccion quien es aquel que se dirige a la representante de Odin en la tierra de Asgard. Aquella mirada penetrante, sus cabellos rubios y su particular cosmos, no podia ser otro que el Dios guerrero de Merak. -Hagen, aquellos que viven en esta tierra helada se han ganado el premio de acceder al calor, pero, aun asi siguen siendo victimas de incontables atropellos de la naturaleza- La respuesta parece meditada, como si los ojos de la heraldo emitiesen un gran dolor proviniente de su interior pero, sus rostro aun asi permanece impacible y distante. -Por qué ofreces tu cuerpo al hielo devastador, el cual es temible puesto que la ira de Odin en estos momentos es grande. Entra al castillo, querido Hagen, y hablemos aqui - La sacerdotiza casi no conoce a aquel dios guerrero. En realidad , su relacion con los jovenes portadores de la armadura fue casi nula puesto que sus largos periodos de meditacion y entrenamiento obligaban a la mujer a la soledad casi continua. Pero eso habia cesado desde la entrega de las armaduras de los dioses guerreros a los jovenes más poderosos y fuertes de la tierra Asgariana. Aquellos que tenian en sus cosmos las estrellas protectoras y que resguardaban las preciadas gemas de Odin. Unos guardias se encuentran en la puerta del palacio, y espectantes a las palabras de la heraldo abren la puerta del mismo, el cual emite un ruido pesado al tener que despegar de la pesada puerta de hierro el hielo adherido**
Valhalla de Polaris, Representante de Odin Señor de Asgard
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Andar recibiendo las pruebas de nuestro Dios no era mi idea de un buen rato.
Los vientos huracanados eran los más severos y tempestuosos que había pasado por la fría tierra Asgarianas.... Hagen permanecía con mirada seria... su semblante parecía cambiar poco a poco... su mirada tornaba fría... y aquel cosmo que emanaba, daba paso al odio y la destrucción.... Era notable.... aquel joven de piel tostada y cabellos dorados.... hacía mucho tiempo había perdido la fe en su Dios....
¿Porque adorar a alguien que solo trae destrucción?.... ¿acaso somos masoquistas?.... si ustedes son masoquistas.... pues yo no lo seré….no estaré adorando a un Dios que por los siglos de los siglos ha maltratado a nuestro pueblo con increíbles tormentas..... ¿Acaso ven justo que nosotros fieles guerreros tengamos que pasar por tantos problemas?.... no lo veo nada justo.... aunque podamos ser fieles y poderosos que pasara con las vidas de las personas que día tras día deben caminar por aquellas tormentas.... Si nuestro Dios es justo y quiere el bien para nuestro pueblo.... entonces.... el detendrá mis acciones...
*Le grito el joven a la sacerdotisa con fuerza.... dejando escapar aquella furia guardada en su interior....
*Hagen de Merak.... gran guerrero Asgariano que ya se había cansado de tantas falsedades.... había vuelto diferente después de tanto tiempo de entrenamiento.... en donde paso por pruebas y casi perdió el rumbo de sus metas.... El ser un gran caballero para proteger a su pueblo de los desastre.... era su única meta.... pero todo se había vuelto distinto ahora que este veía a su Dios como el único mal en este mundo....
*Lo siento miladi.... pero esto lo hago para encontrar mi camino*
Musito Hagen volviendo la mirada al castillo.... en donde comenzó a expulsar aquel cosmo siniestro.... Un odio que permanecía encerrado…. hacía mucho tiempo.... El reprimir tanto tiempo aquello... ya le había hecho un mal.... y este lo sacaría a relucir..... Su cosmos se elevaba brutalmente..... Se intensificaba dejando escapar odio y violencia.... mientras más iba en aumento el poder de su cosmo.... mas vibraciones maléficas parecía emitir su aura.... Abrió sus manos.... notándose como un gran destello rojizo cubría su cuerpo ---¡Gran Presion Ardiente!—Se escucho fuertemente aquella palabras ante de llevar sus manos a su frente y dejar escapar un gigantesco rayo que parecía ser completamente de fuego.... Una sonrisa se dibujo en el rostro de Hagen tras su ataque hacia el castillo....
*Espero que nuestro Dios si sea capaz de detenerme!!* grito Hagen sin dejar de sonreír....
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De: Polaris |
Enviado: 16/11/2009 01:29 |
**El odio proferido por el joven Dios guerrero de Merak se hace notar, mientras los pasos de la guardia personal de Valhalla se mueve a gran velocidad por las escalinatas, llevando el mensaje de que aquel llamado Hagen no traia buenas intenciones para con los fieles a Odin, sino agresividad y venganza. Valhalla observa desde lo alto, mientras las palabras del guerrero, las cuales expresan desdén y furia son más tajantes que el viento del norte. -Hagen...- Musita mientras aquel cosmos negativo se vuelve envolvente y la mirada de hielo de la hermosa heraldo expresa un ligero pesar, al arquear sus cejas y cerrar sus ojos,aspirando el aire helado, que ahora lentamente se vuelve caliente presintiendo el ataque latente del Dios Guerrero. Sus labios se apretan ligeramente mientras abre sus ojos de hielo. Estira su mano derecha hacia el costado para tomar con sus delicadas falanges el tridente de hierro decorado en gemas, el cual al acercarse a la figura de la fémina valkiria deja un hilo de energia blanca en el aire. Los soldados que observan desde la entrada comienzan a arremolinarse en torno al castillo, preparando sus armas para atacar, mientras la guardia real de Valhalla tratan de convencerla de alejarse de la ventana desde la cual mantiene la conversacion con el aguerrido guerrero pero, con el tridente afirmado en su mano voltea el rostro para verlos por encima del hombro con una expresion calma para que entendiesen que su vida no peligra. Solemne vuelve la mirada al joven Hagen para observar el ataque de fuego que él lanza hacia el castillo, el cual desde tiempos inmemoriables ha aguantado la ira de los dioses nordicos y resguardado a los fieles al dios de Asgard. -Odin, te pido no levantes tu mano contra este hombre puesto que solo siente la injusticia con la cual castigas a tu pueblo - Habla mientras el resplandor blanco como la nieve es emitido por su cuerpo. Pero lejos de permitir que el ataque de Hagen tocase siquiera una roca del castillo, con su mano izquierda, delicada y femenina, Valhalla extiende hacia el frente la parte frontal del puño mientras el cosmos que le rodea viaja de manera veloz desde su alrededor pasando por su brazo hasta llegar al anillo que lleva en el dedo anular. Emitiendo un sonido de quiebre de hielo, volviendose el cosmos benevolo de la valkiria, tan o más vengativo y temible como el cosmos de Hagen, un potente rayo de energia helada, que combina el toque maligno de Odin con el cual castigó la infidelidad de Valhalla y por medio del cual le controla actualmente, con el poder intrinseco de la valkiria. Este rayo emite una onda expansiva que choca directamente contra la Presion Ardiente de Hagen, provocando un resplandor tenebroso similar al choque de dos cometas. -¡Detente Guerrero de Merak! ¡No muestras de esta forma tu odio hacia Odin, sino hacia Asgard misma!- Exclama la potente voz de Valhalla, haciendose oir por encima del sonido de los vientos**
Valhalla de Polaris, Representante de Odin Señor de Asgard
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|[x.Aspros D Géminis.x]|
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Desde más allá de la realidad como la conoce el hombre, desde más allá del mundo de los muertos y la oscuridad, un terrible poder asechaba con malevolencia, y a su paso, proyectaba una estela cósmica tan única como infausta, que su solo presencia quebraba los meridianos de las dimensiones infinitesimales, creando un vortex de masiva violencia, que como agujero negro, podría conectar los rincones extremos del mismo universo. Aquello era conocido simplemente, como “La Otra Dimensión”, desde donde, un galán de la oscuridad emergía del dantesco paisaje que estremecía la realidad como se le conoce.
Aquel ser, que sella sin duda alguna un molde lleno de sabiduría y perfecto en hermosura. Ante el cual, los vientos dantescos de la terrible Asgard parecen abrirse cual mansa brisa de otoño, pues ni la furia de Odín, profanaría tan excelso cosmos de un ser de las tinieblas, cuyos caprichos le habían arrojado imprudentemente al mítico palacio Valhalla. En medio de sus grandes muros, cubiertos por la albina belleza característica del nordeste de Europa. Y sean grandes los caprichos del destino, pues ante sus ojos, acontecía la dieciochesca entropía de dos poderes bélicos en conflicto. Sus labios, especialmente carnosos y sensuales, no soportaron la idea de sonreír con hermosa mezquindad.
Admirando, como un coleccionista de arte, tan hermoso encuentro que hacia despertar los caprichos más tenebrosos del galán de la oscuridad. Con parsimoniosa serenidad, y un caminar elegante que reversaba mítica heredad, se acerco con particular altanería. Aplaudiendo, como el espectador de Atenas haría en el trágico anfiteatro. Aplausos, cuya cacofonía sobrenatural se proyectaba con impaciencia por los siempre silbantes vientos Asgardianos. Y en su rostro marfilado, de una belleza superior a la de los ángeles celestiales, se enmarcaba un gesto de burlesca sensualidad.- Oh…Odín, tus hijos ya no cantan tu gloria, y levantan sus puños entre ellos para ofrecerte un espectáculo de sangre.- Profiere con melódica sinfonía.
Y aunque pacifico en apariencia, su cuerpo se adornaba con la elegante calidez de un cosmos dorado como el mismo sol; heredad de su linaje Atheniense. Cuya estela se propagaba tan radiante como las llamas del astro rey…un manto de verdadero poder, y una esencia tan surrealista, que a su rededor, la imagen de caóticas galaxias comenzaba a aparecer. Galaxias, dominadas por planetas en decadencia, donde no hay más aroma que el vaho de la muerte.- En nombre del Dios del inframundo, exijo parlar con la soberana del linaje de Odín.- Presente se hizo su voz nuevamente, con una severidad que imponía miedo en el corazón de cualquier mortal, pues es un hombre que se levanto de la muerte quien se presenta ante ellos. Un espectro del abismo, cuya fuerza aplasta galaxias bajo sus puños.
Sé culto en tu pasión, y magnífico en tu maldad. Cualquier imbécil puede añorar el mundo; para convertirse en un Dios hace falta auténtica sabiduría.
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De: Polaris |
Enviado: 16/11/2009 14:25 |
**En medio de aquel choque enérgico el rostro pacifico de la hermosa valkiria no parece encontrar siquiera ira para quien ha levantado contra Odin su mano. Los hilos de su cabello se mueven como combatiendo ellos mismos contra el frio aire que llega pero en el fondo de su ser, Valhalla comprende a la perfeccion la furia de Hagen, más no entiende tal necedad de alzar su mano contra los muros del palacio. Eso no refrenará la ira de Odin, en realidad en esos momentos caoticos, es la misma Valhalla quien en el fondo de su ser aun ora para que el dios iracundo no golpease como solo él sabe hacerlo a aquel cuyo manto ella misma ha entregado. -Hagen de Merak, el manto que portas es hecha por las manos de Odin y se mantiene por su voluntad. ¡Piensa de nuevo antes que dicha armadura renuncie a ti por tu osadia! - Esas palabras dejan ver la autoridad de la heraldo, cuyo brazo no muestra signos del menor cansancio, por el contrario, se alza majestuoso y firme, atacando sin recelo a aquien se enfrenta desde el hielo de las nieves con un rayo de fuego consumidor. Los soldados del palacio observan sin dar credito a sus ojos puesto que quien porta esas armaduras en toda la historia de Asgard han mostrado deslealdad para con el dios del norte pero, con armas en mano, esperan la llegada de los demas dioses guerreros puesto que no es agradable para ellos, en su ineficacia en esos momentos, ver a la guerrera Valhalla pelear sola, debido al puesto de sacerdotiza que representa. Ademas temen que la ira del dios nordico azote contra ellos por el acto de Hagen. Es en medio de esos sonidos, del cambio de palabras, cuando el cosmos de Valhalla se eleva blanco y puro a su alrededor, llenando el recinto desde donde emprende su ataque, aquel cuarto de una de las torres del palacio, cuando una tensión adicional se hace ver sin verguenza alguna en el lugar. Un tercer cosmos el cual no proviene de Hagen ni de guerrero alguno de la tierra del hielo eterno. En ese instante la desconfianza aflora en las bellas facciones que parecen talladas en hielo, presionandose ligeramente los labios perlados de un rostro hermoso e inemotivo, pero en cuyos ojos un infimo rastro de nostalgia se esconde detras de esa firmeza. Las palabras soberbias de un heraldo como ella que se abre de manera sobrehumana por el tiempo y el espacio manifestando al cosmos de la valkiria el cual late como su corazon activo, desviando su mirada hacia su derecha como si escuchase con ese oido el mensaje del enviado de Hades. -Yo soy la soberana del linaje de Odin, Valhalla de Polaris, la heraldo que habla en su nombre. ¿Que es lo que Hades quiere en las tierras olvidadas de Asgard?- Ella no mueve sus labios al hablar, sino es un mensaje enviado a traves de su cosmos, puesto que el cuerpo de la mujer se enfrenta aun con el guerrero de Merak**
Valhalla de Polaris, Representante de Odin Señor de Asgard
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Su odio era notable….. su semblante mostraba el gozo que este recibía por tales acciones…… mientras que los pasos de los guardias personales del Valhala se movían a gran velocidad por las escaleras…..Llevando en sus manos las inútiles armas y aquella estúpida fe en quien estos últimos días ha castigado todo nuestro ser…..
Hagen Habían lanzado una de sus más poderosas habilidades hacia el castillo…..Sus intenciones no eran buenas…..este quería causar un fuerte destrozo….. cosa que la misma sacerdotisa había notado....y con desilusión y asombro aquella hermosa mujer musito Su nombre (Hagen)….¿Como podía esperar que uno de sus caballeros osase levantar sus manos hacia el castillo que le vio nacer?…
Era un pecado imperdonable….aquel caballero…. que siempre se había notado distante de todos….. y nunca había osado levantar su voz siquiera para reprochar…..Aquel joven de mirada pacifica he inteligente….¿Quien podría imaginar que desafiaría al mismo Dios Odín?…..quien le había otorgado la potestad de dicho manto.
Su cabello Dorado oscilaba de lado a lado por las fuertes ráfagas de viento heladas….mientras su cuerpo permanecía expulsando aquella energía el cual este dejaba escapar por sus manos…..
Un cosmos se dio a notar tras mi ataque al castillo….mientras hilos de energía blancas eran esparcidas por todo el terreno….. Hagen rápidamente volvió su mirada totalmente fría y dirigió hacia la mujer----Miladi---- se dijo en su cabeza mientras le quedaba mirando fijamente…con un semblante seco Los soldado que observaban desde la misma entrada comenzaron a remolinarse en torno al castillo….estos preparaban su estúpidas armas para contra atacar…..mientras que la misma guardia real parecían hablar con la Señorita de polaris….
Lasonrisa se borro de su rostro y fue dejando desaparecer lentamente suhabilidad….cuando un resplandor blanco como la misma nieve fueemitido por el cuerpo de la sacerdotisa…..pero antes que mi ataquetocase el castillo….de su mano izquierda salio un potente rayo deenergía helada…..que combinaba con un toque maligno daba paso al castigo....Aquel rayo emitía una onda expansiva que inmediatamentechoco con mi propia habilidad….formándose entre los dos choque unaespecie de energía esférica……..que a su alrededor estaba siendocubierto por nuestro mismo poder….rojo y blanco…..
Aquello formaría una gran explosión…ya que por medio de la misma fuerzaque se hacía entre ambos…. mas la presión ser tan intensa ….daría pasoa una expulsión de la misma energía….el cual se reflejaría a nuestroentorno…..
Inmediatamente Hagen dejo de reflejar su propia técnica para que aquel rayo fuese directamente hacia su cuerpo y le impactara…..pero no seríatan fácil….aquel joven había puesto sus palmas en posición de escudo….para con este…. poder detener aquel ken con sus fuerzas…..
En tan solo segundo sus manos se cubrieron en un aura blanquecina el cual este uso para aparar dicho poder…..
habia utilizado el mismo Cero absoluto para crear una contra variante al mismo poder lanzado por lamujer ….Esa era prácticamente la temperatura más baja posible….por loque las partículas…. carecerían de movimiento….
Habia detenido con su propio cuerpo aquello…..y mientras trataba demantenerle una entidad maligna hizo acto de presencia…..Hagen ignorandotodo lo que este decía…. Y desviando la mirada …..lanzo el poder yacente en sus manos hacia Aspros D Géminis……
Cayo ahincado en la nieve con la respiración algo agitada .....mientras volvía a levantarse para quedar frente al sujeto ---Espero sepas que antes de hablar…. tendrás que pasar por micadáver…. cosa que lo veo imposible--- dejo dicho aquel joven un poco agotado por a ver recibido aquel ataque
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|[x.Aspros D Géminis.x]|
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Humph!.-Desdichado sea aquel que ose levantar su mano contra el tenebroso espectro, cuyo gesto se mantuvo inamovible en belleza y serenidad. Y mientras en la profundidad de su cristalina mirada se reflejaba una fulminante ráfaga incandilante, este solo hizo retroceder con soberbia altanería su diestra mano convertida en puño. Un puño lleno de poder, donde se concentraba un flujo de doradan cosmo energía…un cosmos diferente al de los Dioses Guerreros, un cosmos que no crea ventiscas heladas, sino más bien un cosmos que consume y destruye, haciendo implotar átomos para crear maravillosas supernovas. Y tan rápido como hizo retroceder su brazo, lo lanzo nuevamente de frente…estirándolo en su máxima extensión desde el hombro mismo, donde incluso su cintura se contorsiono para darle más alcance al revez de su puño.
Lanzando desde lo más profundo de sus nudillos, poderosas ráfagas cósmicas que indómitas surcaron los cielos. Ráfagas tan abundantes como el ojo mismo alcanzaba a observar, trazando una serie de intríncadas líneas; que como estrellas fugaces, se precipitaban desde un cielo estremecido, y remecían sobre la tierra. Hermosas estrellas fugaces que creaban una red infranquiable…y avanzaban hacia aquella ráfaga de hielo a una velocidad no menor a la de la luz.-¡Kon Cho Ken!- Profirió un grito de guerra desde lo más profundo de su voz, que reverso en un profundo eco de tenebrosa cacofonía.
Y como era de esperar, el solo choque cósmico de aquellas ráfagas levantaría como tal un poderoso vortex. Un pilar de luz que nacia, levantándose poderoso desde el centro mismo de las fuerzas en discordia. Las tocas baldosas que circundan al castillo se partieron, y sobre el suelo, que se estremecía con dantesca violencia, un profundo cráter comenzaba a propagarse, abriéndose con grietas tan abismales que parecían conducir al mismísimo infierno. Los escombros se levantaban. Grandes rocas atraídas por el poder de atracción de la implosión cósmica, mismas que eran convertidas segundos después en arena, pulverizadas por la inmensa presión.
Y él, galan de la oscuridad, solo sonreía. El esfuerzo era titánico, pues no había duda que los Dioses Guerreros eran iguales en poder a un Caballero Dorado, y justamente era ese desafío el que hacia regocijar las estrellas que habitan dentro de su ser.- ¿Es este el recibimiento de Asgard, hacia quien viene en nombre de un Dios?- Reprocho, no al guerrero que se atreve a levantar su mano, sino a la mujer que hereda el trono y liderasgo de los Dioses Guerreros. A Valhalla de Polaris.
Sé culto en tu pasión, y magnífico en tu maldad. Cualquier imbécil puede añorar el mundo; para convertirse en un Dios hace falta auténtica sabiduría.
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De: Polaris |
Enviado: 17/11/2009 03:14 |
**Aquel choque de energias entre la heraldo y el dios guerrero termina en una esfera que es canalizada por las manos de Hagen, las virtuosas capaces de manipular las fuerzas del calor envolvente y del frio absoluto, sosteniendo la energia enviada en brutal embestida que vuelve destellos el Plasma de Merak. Los ojos de hielo de la hermosa valkiria cuya piel blanca llena de envidia la nieve que cubre las tierras del norte, se abren perdiendo la compostura al ver la accion que arremete el rayo helado de Hagen hacia aquel, cuyo cosmos es más oscuro que el abismo. Sus delicados labios rosaceos se entreabren levemente en un grito ahogado que su garganta no emite. Presionando en su diestra el tridente de hierro, cuyas gemas brillan con soberbia contenida, señala a Hagen de Merak desde lo alto, con firmeza en su mirada y soberbia en sus ojos, mientras el anillo de su dedo anular emite un brillo tan negro como el cosmos del geminiano invasor.
-¡Hagen de Merak, deten tu ataque! ¡No puedes atacar y proteger a Odin, por lo que exijo elijas un bando o te retires! -
El tridente señala el cuerpo del dios guerrero, no por amenaza, sino por defensa puesto que las acciones del joven guerrero llenan de incertidumbre la mente de Valhalla y en esos momentos, con la llegada de un heraldo de Hades, una accion equivocada podia desatar una guerra para la cual Asgard aun no esta preparado. No es capaz de responder antes de que una respuesta proveniente del enviado del dios del inframundo azotase en señal de repudio hacia el ataque del guerrero de Merak. Valhalla cierra sus ojos mientras la lluvia de rafagas energeticas azota el hielo y la roca tallada del palacio, pero en una elevacion de cosmos blanquecino, mientras su mirada se levanta hacia lo alto, una energia potente forma una cúpula sobre el palacio, mientras palabras inaudibles se dibujan en los delicados labios de la heraldo.
-No es Asgard quien te ha recibido, mensajero de Hades, sino Valhalla de Polaris-
Su voz manifiesta el respeto hacia quien aun no ha dicho su nombre pero, a la vez la responsabilidad que recae sobre ella por el conflicto que se ha dado por la accion tempestuosa del guerrero de Merak.
-No has venido a dar batalla con el Dios Guerrero de Merak, sino a hablar conmigo. Presentate y hablemos, heraldo de Hades, de mi mano no recibiras agresion alguna a menos que tu levantes la tuya primero-
Aun el cosmos de Valhalla se mantiene protector como escudo incandecente de la mitica construccion cuando sus ojos de hielo se dirigen hacia Hagen y el semblante de su rostro marmolaceo manifiesta una peticion.
-Por favor, Hagen. No es por Odin sino por Asgard, no sigas este conflicto-
Los demas dioses guerreros estan ausentes, en las lejanias sin dar señales de vida por lo que, un conflicto con el inframundo en esos momentos era una firma directa de muerte segura para el reino de hielo**
Valhalla de Polaris, Representante de Odin Señor de Asgard
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**Diferentes
explosiones de cosmos inundaban el aire gelido de las tierrasde Odín
para Una silueta alzaban y danzaban por todo Asgard. Una silueta joven
y adonica se paseaba por los bosques congelados de Asgard, paseandose
por la vida como un caminante disfrutando de los paisajes mientras
disfrutaba uno de sus libros favoritos, sumido en sus pensamientos.
Pronto, la explosion calida de una fuerza conocida para el, la de uno
de sus hermanos, que sin embargo alzaba su puño encontra de los dioses
del norte rompio la concentracion en la que se encontraba aquel joven,
quien de inmediato se encamino al castillo de Valhala avanzando primero
con paso normal, incrementando su velocidad a cada segundo, mientras
que, desde el cielo, unos cometas envueltos en una poderosa luz azulada
avanzaban hacia el. Cuando la luz porfin baño al joven, su silueta fue
descrita alejandolo de las penumbras. De tez tan blanca como la nieve y
gestos hermosos. De ojos verdes como esmeraldas y tan profundos como el
mar, mientras que sus cabellos, de un rojo encendido, bailaban al
compas del rapido movimiento del adonico y bello cuerpo del joven.
Pronto, aquellos cometas azulados se impactaron en el cuerpo del joven,
no causandole ningun daño, sino envoilviendolo en una armadura (que era
la que avanzaba tan velozmente) azul marino, tan hermosa que parecia
ser tallada por las manos de los dioses, y hechas para servir a los
mismos y proteger a su pueblo. Pronto, otro cosmos hizo temblar las
tierras heladas, un cosmos no conocido en aquellas tierras, y sin
embargo tan oscuro que parecia regresar de la muerte. La velocidad del
joven aumentaba a cada segundo, rozando la de la luz, avanzando como
una satea encendida hacia el castillo. Pronto, el joven de cabellos de
fuego se encontraba en aquel cuarto del castillo de donde provenian
aquellos fuerzas tan terribles. La batalla ya habia comenzado. Entro
como una ventisca sin invitacion, ignorando a su hermano de armas y al
que se envolvia en una armadura tan negra como la noche, interponiendo
su cuerpo entre la hermosa dama de asgard y los otros caballeros. Su
deber era proteger a la señorita Valhala y a su pueblo de Asgard.
Quedose el joven dios guerrero con sus esmeraldas puestas sobre el
extranjero unos segundos, para despues colocarlos sobre el que
erroneamente llevaba sobre si una armadura del mismo origen que la
propia, denotando un fuerte reproche en su mirada, pero sin decir ni
una palabra... sus labios solo se movieron mientras que una gentil voz
varonil emanaba de si, para casi susurrarle a su dama..-Alberich de
Megrez Delta... a su servicio princesa de hielo...- mientras que, sobre
su hombro dirigia esta vez una mirada calida y amistosa a la heraldo de
Odin, mientras una sonrisa parecia dibujarse en el rostro del de
cabellos de fuego, quien se acababa de presentar, quien daria su vida
por aquella dama y su pueblo, pues para eso estaba y este dia su deber
estaba apunto de ser probado**
[[Limitless undying love wich shines around me like a million suns]] |
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