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De: Akatsuki Rei (Mensaje original) |
Enviado: 07/07/2017 04:39 |
"Los humanos serán eliminados, nadie debe alterar el flujo del tiempo..."
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*Los vocablos contrarios y el acto repentino de su agresor solo hacen que ella separe sus pies, flexiones sus rodillas eleve su cosmos energía y entre cruce sus brazos donde acomula la misma para el momento del impacto. La velocidad contraria es tal que le cuesta seguirle con la mirada, pero se mantiene firme con el rostro sin expresión por la masca. "Después de todo para crear una extategia fiable es conocer al rival" Manifiesta en sus adentros pues sabe con certeza que no hay mejor manera que sentir el golpe ajeno para tener idea sobre su fuerza. El simple deslizar de sus pies que aferran al suelo para no seder terreno y el punzar de su antebrazo donde recibe el impacto que soporta, pero sabe que debe aprochar, es así como la caballero femenino retrae su pierna diestra y la eleva tomando cómo soporte la contraria finaliza al girar su torzo con la finalidad de darle impulsó a su exterminar y aprochar la cercanía intenta golpear por medio de una patada giratoria que parece partir el mismo viento en dirección al costado de él. -¡aaaah!- El grito de guerra se escucha en conjunto de su ataque.*
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*Todo parece indicar que su ataque frontal ha sido un éxito “insolente” mentaliza
al tiempo que el rostro del rubio se muestra carente de cualquier emoción,
mientras que su candente cosmo energía continua emergiendo de su ser –acaso crees que tu defensa ha servido de
algo…- expresa tras colocar su diestra como única protección ante el
intento de golpe que propina la fémina, mismo que, por la posición e inercia de
sus movimientos se podría suponer que este carecer de la potencia necesaria
para quebrantar la nueva postura del escarlata, quien se mantiene firme emanando
aquel ardiente cosmos que cubre toda su humanidad -…los de tu rango deberían de entender su lugar- profiere con
arrogancia al instante en que aquel golpe impacta en su extremidad la cual absorbe
completamente el ataque, tras aquella acción, finos cabellos se extienden alrededor
de la Atheniense, quienes intentan atrapar a la antes mencionada guerrera, misma
que debido a la cercanía pareciera quedar aprisionada en la mortal trampa del
escarlata pues aquellos hilos se abalanzan implacables pretendiendo cerrarle
cualquier espacio…*
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*En el calor de la batalla, la habilidad de su adversario es impresionante no solo al atacar, sino también al defenderse cuando contrataca, lo que provoca que Marín baje a gran velocidad su pierna derecha, flexione sus rodillas y ejecute un salto entre aquellos hilos. Así, con su manos y brazos se abre paso entre ellos para salir ilesa de las garras adversas. En el momento de tocar el suelo, da un salto más, quedando a una distancia considerable de Belenyer, suficiente como para ver los movimientos alternos y así idear su estrategia siguiente... "Por poco" ... manifiesta en sus adentros, mientras enciende de nueva cuenta la flama interna de su universo interno sobre su ser... - Muy apresurado -... sostiene infalible la Santo del Águila, mientras continua su diálogo - En mi opinión, aquel que tiene la posibilidad de ayudar y la niega solo por creerse superior, ellos son los idignos.- El viento se desplaza al tiempo que el polvo y piedrillas se desploman de la cima, ante el aumento constante de su cosmos, pero pese a ello, la ateniense se mantiene atenta a su rival esperando el momento oportuno para el ataque.*
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*Inmediatamente los hilos desplegados por el caballero se contraen como
si este los pudiera manejar a voluntad, al tiempo que observa por encima del
hombro y con cierta admiración a la fémina que parece evadir su anterior
movimiento, mismo que ni siquiera los caballeros de Athena con más alto rango habían
logrado hacer, sin demostrar emoción alguna vuelve a moverse a la velocidad acostumbrada
por los de su rango e instantáneamente su cuerpo simula desaparecer a la vista
de la presente, re apareciendo a escasa distancia de la pelirroja –nadie ha
pedido tu opinión…- finalmente se escucha aquella gruesa voz que tiene origen a la espalda de la
Atheniense, sonido que se impone con firmeza, seguido de la impresionante cosmo
energía que ahora fluye por cada átomo de su ser, como si el mismísimo resplandor
del sol emergiera de su interior –además, te he dicho que eso…- agrega al
tiempo que su energía se concentra sobre su extremidad derecha -…eso es irrelevante
para los Dioses…- dictamina con firmeza mientras que libera aquel poder reunido
en su diestra, el cual sale disparado a velocidad luz siendo este un ataque
directo y a tan corta distancia con el cual intenta tomar desprevenida a su
ahora rival…*
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*La tensión invade el campo de batalla y la expresión de la ateniense cambia en el momento que pierde de vista a su oponente. "¿Donde está?" Pensamiento que recorre su subconsciente, hasta que escucha la voz enemiga tras suyo. Marín gira a gran velocidad y entre cruza sus brazos. A duras penas puede ver el ataque dirigido a su persona, lamentablemente su velocidad no es suficiente para lograr salir ilesa del ataque contrario y simplemente el golpe alcanza su costado. -aaahh- Es potente el golpe que la lanza y causa el levantamiento de polvo que la cubre. Un breve silencio se apodera del lugar mientras se disipa la nube de polvo.*
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*La mirada inexpresiva de aquel guerrero escarlata se postra sobre la caída de aquella cortina de polvo que pareciera mantener en suspenso el desenlace del anterior movimiento del rubio, quien se muestra confiado –todo aquel que quebrante las leyes de los Dioses tendrá el mismo destino- expresa de forma calma mientras que aquel cosmos continúa fluyendo por cada parte de su ser, resplandeciente y magistral, el cual genera un tremendo calor a su alrededor –¡resígnate y muere!- dictamina tajante al tiempo que sus extremidades inferiores se vuelven a mover avanzando lentamente hacia donde habría sido arrastrado el cuerpo de la fémina…*
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*Marín adolorida se levanta pausadamente justo cuando aquella nube de polvo se desvanece con el arrastre del viento. La joven ateniense se muestra agitada y tocando con su mano izquierda en antebrazo de su brazo contrario. Es notable que el ataque ha sido bastante fuerte y trajo secuelas, pero pese a eso Marín no se rinde. -Si resignarme es abandonar toda esperanza, jamás lo haré luchare hasta mi último suspiró, no soy la única y alguno de nosotros alcanzará su objetivo, por ello no me rendire- Mensiona seguidamente al instante nuevamente incrementa su cosmos lograndose ver como la rodea y simplemente de nuevo separa sus piernas y levanta sus brazos a la altura de su pecho soportando el dolor y lista para el siguiente movimiento. "Seya, hermano no perderé deseo una vez más verlos de nuevo."*
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*Con cada paso que da,
va acortando la distancia entre ambos –hmmm…-
realiza un particular sonido gutural mientras que continúa emanando aquel
imponente cosmos “humanos” piensa para sí mismo para luego ignora las vacías
palabras emitidas por la pelirroja a quien mantiene bajo su penetrante mirada,
luego de avanzar unos metros se detiene –vamos
Marín, muéstrame esa esperanza que tanto presumes- dictamina con tono de
superioridad al tiempo que su universo interno pareciera estallar generando una
reacción en cadena misma que se va reflejando a su alrededor, pues su humanidad
es rodeado por lo que parecieran ser lenguas de fuego , quedándose ahí a la
espera del siguiente movimiento de aquella mujer…*
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*Agitada y con la mirada enfrente la femina ateniense acumula su energía en sus extremidades, pese que su oponente muestra lo suyo, Marín suspira de modo que se concentra en su siguiente ataque olvidando el dolor, pues es tal su concentración que sus sentidos y su mente se unifican y armonizan al grado que cuando cree que es suficiente que está lista para la recta final, se lanza a toda velocidad en dirección de su enemigo. En la travesía acomula su cosmos lo suficiente en sus puños. -cualquiera de nosotros es la esperanza y si caigo te irás conmigo-
Se desata aún más el deseo de terminar el encuentro pues si más se avalanza hacia su adversario y cuando acorta distancia lanza su proeza.
-Ryusei Ken- A una velocidad superior que la del sonido Marín emite una infinidad de puñetazos en dirección al torzo de su adversario, puños que parecen partir el mismo viento y en diferentes dirección solo buscan el impactar.*
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*Los vocablos emitidos por Marín llegan hasta los oídos de aquel escarlata, quien al igual que ella se abalanza en dirección a la guerrera de Athena -caer contigo…- expresa sin emoción alguna mientras que sus rubios cabellos comienzan a crecer de forma casi imperceptible a su espalda, de igual forma su imponente cosmos va tomando mayor protagonismo “parecen interesantes los humanos, pero…” mentaliza al tiempo que coloca una postura totalmente defensiva, y derivado de que él se mueve a una velocidad superior, pareciera como si pudiera leer los movimientos de aquella mujer -¡No eres rival para mí!- exclama tras ir anteponiendo sus brazos frente a cada golpe, esquivando la gran mayoría y absorbiendo el resto en su cuerpo que al igual que él se mueven a la velocidad acostumbrada por los de su rango –insignificante…- dictamina de forma arrogante luego de caer delante de la fémina, y es en ese preciso instante en el que ella pasa de largo que su crecida melena se despliega intentando atrapar a la pelirroja quien debido a la trayectoria de su ataque debería quedar cubierta por aquellos hilos…*
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*Cada golpe no es lo esperado por la ateniense, su rostro inespresivo no muestra la desesperación que por dentro siente y por el deseo ferviente de concluir la batalla. Al término de su ofensiva no solo recibe decepción también la sorpresa pues es rodeada por infinidad de hilos. "Cai en su trampa." Solo forcejea buscando aflojar su prisión y salir libre, pero en esos instantes aquella energía lejana conocida puede sentir por breves instantes en movimiento alejándose "Seya.." Aquella sensación y conclusión propia de sentir como su alumno a logrado avanzar y ella estancada en ese lugar, la inquieta pero le da fuerza suficiente para que su interior arda y se acomule en su ser. "no me daré por vencida"*
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*La
seriedad de aquel rubio se plasma en cada segundo que pasa, al igual que la tensión
en la escena se incrementa tras el ataque de aquella joven quien sin percatarse
a caído en las redes del escarlata –Estos
son los cabellos dorados de la muerte…- expresa con soberbia al instante en
el que delicados destellos dorados se reflejan entre los fuertes cabellos que
se abalanzan contra el cuerpo de la mujer, quien pareciera es aprisionada y con
cada movimiento que esta realiza intentando aflojar su prisión y liberarse, los
hilos pretenden penetrar despiadadamente en la piel de la chica y destrozar
todo a su paso incluyendo su armadura y huesos -…desde el momento en el que el cabello toca tu cuerpo, todos tus
movimientos se vuelven inútiles…- dictamina con seriedad colocando su
diestra al frente con la cual sostiene los finos hilos que parecieran seguir
castigando la humanidad de la pelirroja -...mientras
más te resistas, estos mas penetraran en tu cuerpo y mayor será tu sufrimiento…-
exclama con frialdad observando la reacción de la fémina -…ustedes los caballeros de Athena han desobedecido los mandatos de los
Dioses y aun cuando pidan su perdón, su sentencia ha sido dictaminada- indica
al tiempo que su ardiente cosmo energía es empujada con fuerza a través de las
hebras esperando impactar de lleno contra el maltratado cuerpo del adversario…*
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*La fuerza no es suficiente para salir, el cuerpo se estremece, su respiración entre cortada y cada vez más difícil el poder lograr calmarse, además que esos hilos logran lo increíble pues traspasa su coraza platinada y varias partes de ser, dejándose ver como su vital líquido derrama. El dolor que siente es descomunal y pese a que trata con todas sus fuerzas no consigue el liberarse quedando a merced de su adversario. “¿Acaso es aquí donde termina todo? Lamento no cumplir con mi promesa… “ La pérdida sangre poco a poco le afecta y causa la ilusión de ver aquien tanto añora -hermano-*
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*Los segundos pasan y
los efectos de las acciones del rubio finalmente surten efecto en la
escurridiza mujer quien al parecer es presa de los hilos dorados desplegados
con antelación, hebras que debido a los movimientos de la joven se apegan a su
piel, donde aquel líquido vital emerge sin restricción alguna, especialmente
aquel que proviene del cuello de la joven, pues la tensión se había concentrado
en aquel punto en específico, como si quisiera degollarla “es inútil…” medita con indiferencia luego de contemplar cómo
debido a los acontecimientos desarrollados hace unos segundos, la joven pareciera
recibir de lleno la energía liberada por el caballero, misma que pretende dar
el golpe final a la existencia del Águila, dando paso a un penetrante silencio,
el cual se vuelve el nuevo foco de atención…*
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