Un prisionero francmasón en el
Vaticano, parte 5.
Como les comentaba en post anteriores , había ido al Vaticano expresamente a
entrevistarme con Paolo Gabriele, el Ex – Mayordomo del Papa Benedicto XVI,
cuyos vínculos con la Masonería, habían propiciado éste sustrajera documentos eclesiásticos
comprometedores y los había divulgado, pero que apenas y fueron divulgados,
estos fueron rápidamente confiscados; pero esto obligo al Papa Benedicto XVI a renunciar al Papado.
Luego, de esto había tenido una muy
corta conversación con el Papa Francisco,
pero la historia apenas y comenzaba a tomar un cause más interesante, mucho más
emocionante.
Luego de entrevistarme con el Papa,
el pequeño hombre del Vaticano, (ese agente de inteligencia del Vaticano) amablemente me había designado una pequeña
habitación en el mismo Vaticano, para que durmiera y descansara, pues me decía,
al siguiente día tendríamos otras más interesantes actividades.
Justo a las 7:15 AM, me llama por teléfono decidiéndome
me preparara que en 15 minutos pasaría por mí; y así pasó, justo a las 7:30 de
la mañana estaba tocando a mi puerta, al abrir la puerta me encontré con ese
pequeño agente secreto del Vaticano, pero me a ahora sorprendió su sonrisa, eso me hizo sentir admitido en el Club, y ademas me da una palmada en la parte superior del
hombro derecho y luego, con su misma mano jala mi hombro diciéndome mientras
reía : Orlando Galindo, mi buen Alcoseri
, mi sorprendente Kadyr , haremos un
recorrido especial por el Vaticano, pero esto es sólo el preámbulo, de lo que
más tarde te mostraré, y así mientras caminábamos
por esos pasillos, pero ahora sin la presencia de esos centinelas guardias
suizos a mi lado, y así me iba contando el pequeño hombre del Vaticano, y fue cuando comenzó a contarme: Mira francmasón Alcoseri, la verdadera historia del Vaticano no es cómo
la conoce el mundo, todo esto, la Verdad hacia
dentro del Vaticano es una trama de indagar, de buscar respuestas- y agregó hay
una parte del Vaticano, que indaga por telescopios, y que se interesa en lo que
sucede al interior del átomo, y que investiga del comportamiento y la
estructura fisiológica del ser humano, este es digamos un Vaticano Científico, y seguro sabes y de todo esto.
-Yo le conteste que sí, que recordaba
la Nota periodística referente al Francmasón Vanderlei Salvador
Bagnato, y que el Papa lo nombró miembro de la
Academia Pontificia para las Ciencias.
El pequeño hombre del Vaticano, me mencionó algo: Hay un Vaticano que va más
profundo , más allá de los límites de la Ciencia .-
Este declaración y las demás anteriores
declaraciones del Pequeño hombre del
Vaticano, no me sorprendió, es más, lo sabía y de que buscaran más allá de la
ciencia lo intuía.
Fue cuando le pregunté al pequeño
hombre del Vaticano sobre “ La
Biblioteca del Vaticano y su Archivos Secretos “. A mi pregunta el pequeño
hombre del Vaticano sonriendo me contestó: hay una parte restringida, muy
restringidamente secreta en esa Biblioteca pero yo tengo acceso a ella; es sólo para el
acceso de un pequeño puñado de personas.
-A lo dicho por el pequeño
hombre del Vaticano, me di perfecta cuenta
del importante papel de éste en los asuntos del Vaticano. Incluso
pasó por mi mente que siendo tan pequeño, no sería pensé, un extraterrestre presente
en el Vaticano; era muy blanco, penetrantes ojos azules, y un cabello negro
intenso, y todo el tiempo parecía leer mi mente. Y lo comprobaba, como cuando pensé, del porqué su interés
por mí; y fue así que él como contestando a mi pregunta mental contestó de
alguna manera: de cuando en cuando,
aparecen personas en el mundo, donde quiera que sea, sin importar la raza, gentes con marcadas predisposiciones místicas.
Luego el pequeño hombre del Vaticano
me invitó a sentarme en lo que parecía una pequeña biblioteca; nos sentamos frente a frente, me pareció que
sentarnos así implicaba algo necesario, para que lo que me comentaría, y lo que intercambiaríamos de información luego.
El pequeño hombre del Vaticano, al
cual no le había preguntado su nombre, pero ahí sentados me dijo que su nombre era Dimitri, y que
su papel en el Vaticano ya llevaba
bastante tiempo; eso me sorprendió , puesto que a mi juicio no pasaba de los 30
años; pero omití preguntar más. Incluso no le pregunté que si era o no masón,
pero lo que me narró lo guardé en mi memoria
y me fue lo siguiente:
Alcoseri, aunque te parezca extraño,
en el Vaticano existimos quienes intentamos resguardar al verdadero
cristianismo e indagar sobre la verdadera y original enseñanza de Jesús, y mantener todo tal cuál fue concebido por el Maestro Jesús el Cristo;
y aunque es verdad la Iglesia se ha alejado del mensaje original, un buen
número de nosotros estamos en la encomienda de resolvernos custodios de esta idea cristiana en el sentido original; y te preguntarás, y la Masonería qué papel
juega en esto; y es que los maestros
albañiles (masones operativos) , plasmaron en la piedra la idea en clave del
mensaje judeocristiano y lo reprodujeron
en las catedrales góticas, y este saber oculto pasó a la Masonería
Especulativa.
Dicho esto Dimitri el pequeño hombre
del Vaticano, quedó en silencio , como esperando yo dijese algo al respecto.
Y fue cuando yo le dije sobre las
catedrales góticas: Dimitri nos dimos cuenta los
albañiles de catedrales que no era construir fríos edificios de piedra, sino lo
correcto era construir seres humanos, mujeres, y hombres más inteligentes y
libres, crear sociedades, naciones con un funcionamiento correcto.
Y agregué: Jesús dijo: “Jesús dijo:
el reino de Dios está dentro de ti
no en grandes mansiones de madera y piedra, parte
un madero y allí estoy yo; levanta una piedra y me encontrarás allí” Esto
pertenece al evangelio de Tomás, el cual no está incluido en la Biblia porque
no se considera por la Iglesia católica inspirado por Dios .
Jesucristo no vino a crear una
iglesia ni una religión. La existencia de templos físicos en el cristianismo se
debe a que siguen los dictámenes de los evangelios canónicos, pero no de los
apócrifos, como es el Evangelio de Tomas.
Entiendo que Dimitri, el pequeño
hombre del Vaticano habría ya leído y sabido sobre esto y más lo debe haber
meditado, pero cuando se le dije de mi
boca en su mirada detecté como un
chispazo de esclarecimiento en él.
Luego , me dijo, que pasadas unas horas visitaríamos
una Logia Masónica enclavada en los subterráneos del mismo Vaticano. Pero esta
será otra historia, historia que contaré más adelante. Alcoseri.