El Gran Arquitecto del Universo

Pocas veces una idea masónica ha suscitado tanta controversia como la idea del Gran Arquitecto del Universo. Su supuesta implicación religiosa provoca una reacción negativa entre los hermanos masones, sobre todo porque los que diseñaron el concepto de un Dios o Ser Supremo  hace cientos de años no hicieron nada para aclarar  bien las cosas.

Lo sorprendente es que el concepto de “El Gran Arquitecto del Universo” , aunque se utiliza con demasiada frecuencia en la masonería, es un concepto que no es de origen masónico. Se relaciona con la filosofía de las religiones y la teología e incidentalmente fue incorporado a la Masonería.

Dios, gran arquitecto,

La idea de un Ser Supremo cuya inteligencia ordenaría el universo, como podría hacerlo un “gran arquitecto” o un “gran relojero”, es constitutiva de lo que llamamos religión natural.

Ya lo encontramos en Cicerón  :

“¿Qué podría ser más manifiesto y más claro, cuando miramos hacia el cielo y contemplamos los cuerpos celestes que la existencia de una divinidad de inteligencia absolutamente superior que regula sus movimientos? [...] no sólo la residencia celestial y divina tiene un habitante, sino que este Ser Supremo es  quien la habita ejerce una acción rectora sobre el mismo universo , es en cierto modo el artífice de tan gran obra y vela por su mantenimiento y ordenamiento.

Lo encontramos también en Juan Calvino quien, en su tratado “  Institución de la religión cristiana  ”, llama repetidamente a Dios “Gran Arquitecto” o “Arquitecto del Universo”.  Juan Calvino 10 de julio de 1509, 27 de mayo de 1564.

Pero la metáfora según la cual Dios podría ser concebido como el “Gran Arquitecto del Universo” se refiere sobre todo a una de las ideas clave de la filosofía de la Ilustración . Está particularmente vinculado a Leibniz (1646-1716) que, después de la filosofía cartesiana , el empirismo de Locke y la ciencia newtoniana afirman por ejemplo:

“De la suprema perfección de Dios se desprende que, al producir el universo, eligió el mejor plan posible [...]”

Después de él, su discípulo Wolff (1679-1754) expone también la idea según la cual Dios sería ante todo un ser de razón, un sabio organizador del mundo.

El Gran Arquitecto del Universo en la Masonería

Aunque el concepto de Gran Arquitecto del Universo no es de origen masónico, ha adquirido particular importancia en el contexto de la masonería , en particular en el contexto de la Disputa del Gran Arquitecto del Universo .

En el  siglo XVII y principios del XVIII , los primeros masones eran  todos católicos o protestantes . Sin embargo, los manuscritos masónicos más antiguos conocidos, incluso en logias de inspiración calvinista, nunca utilizan la expresión "Gran Arquitecto del Universo", aunque el manuscrito de Dumfries nº  4 de 1710 menciona la cercana expresión “honrar y adorar sinceramente al Gran Arquitecto del cielo y de la tierra.

Luego encontramos esta expresión exactamente en 1723 en las Constituciones de Anderson :

“  ADÁN, nuestro primer Padre, creado a Imagen de Dios, el gran Arquitecto del Universo, debió tener escritas en su Corazón las Ciencias Liberales, particularmente la Geometría”

En la segunda mitad del  siglo XVIII y en la primera mitad del  XIX , la masonería se abrió a otras religiones y otras concepciones, en particular los deístas . La expresión El "Gran Arquitecto del Universo" se utilizó cada vez más a menudo, reemplazando a menudo la palabra "Dios", porque al ser más genérico , convenía tanto a deístas como a teístas de diferentes religiones.

En la segunda mitad del  siglo XIX , se planteó la cuestión de la admisión de los ateos en la masonería, particularmente en México,  Francia y Bélgica, mientras la masonería angloamericana, fiel a las Constituciones de Anderson y a algunos de sus textos fundacionales siguientes, continuó prohibiendo a los ateos la entrada a sus logias. Esto siguió, en algunas logias liberales, al abandono de la expresión “Gran Arquitecto del Universo” en los rituales, así como a una disputa que aún hoy separa las diferentes obediencias masónicas.

Otras interpretaciones del Gran Arquitecto del Universo

En el Esoterismo , el Gran Arquitecto también puede ser una metáfora alusiva al potencial divino presente en cada individuo. "(Dios). Este poder invisible que todos sabemos que existe, pero entendido con muchos nombres diferentes, como Dios, Espíritu, Ser Supremo, Inteligencia, Mente, Energía, Naturaleza, Chispa Divina , Nous, Alma etc..

En el gnosticismo , el demiurgo es el Gran Arquitecto del Universo, el Dios del Antiguo Testamento, en oposición a Cristo y Sofía, mensajeros de la Gnosis del Dios Verdadero

Si bien en la Masonería Irregular no exige la creencia en "Dios y su voluntad revelada", sí se refiere, sin embargo, a un principio creativo/organizador del universo, que el lenguaje del siglo XVIII llamaba " Gran Arquitecto del Universo". ', y que se ha conservado en esta forma para respetar los textos fundacionales de la masonería.

El Gran Arquitecto del Universo: un principio y un símbolo.

Es comparable a lo que los científicos hoy describen como “el principio de unidad del mundo físico, y que hace que este universo se mantenga unido y se sostenga a sí mismo, a pesar de las fuerzas opuestas que lo atraviesan”.

El Gran Arquitecto del Universo no es para los masones una definición antropomorfa, teológica o religiosa, sino un principio cuya referencia demuestra su interés en un proceso de construcción de significado, al margen de la afirmación de valores intelectuales o éticos. ​solo, abriendo así el camino a una investigación y construcción espiritual libre, no religiosa, no dogmática y no autoritaria.

Para algunos masones “El Gran Arquitecto del Universo” es un simple símbolo, una alegoría, una referencia, mientras que para otros masones  “El Gran Arquitecto del Universo” es el mismo Dios que se menciona en la Biblia o Libro de la Santa Ley .

Pero en la preocupación permanente por el respeto de la libertad de conciencia, la Masonería en su totalidad deja a cada masón la posibilidad de sublimar e interpretar libremente  este principio en un símbolo de su elección y de su sensibilidad: puede convertirse entonces en trascendente o trascendente. símbolo inmanente de la propia religión - y esto sin excepción - absteniéndose, sin embargo, de querer obligar a la conciencia de los demás miembros de la Logia  a la propia elección de concebir este concepto.

Se preserva la libertad de conciencia.

Este enfoque afirma así una vez más el respeto a la libertad de conciencia de la que se beneficia cada miembro de la Masonería Regular o Irregular y el deseo de incluirla en un proyecto de contribución a la emancipación progresiva y pacífica de los seres humanos más allá de las formas religiosas o ideológicas particulares.

 El gran arquitecto del universo,  bajo un percepción de unidad en la Masonería Regular.

Cómo   conciliar la aparente contradicción de las constituciones de Anderson (1723) que declaran (artículo 1) sobre Dios y la religión "un masón está obligado por su compromiso a obedecer la ley moral y si comprende bien el arte nunca será un ateo estúpido ni un libertino irreligioso "para añadir unas líneas más adelante "se consideró más conveniente limitarlos sólo a aquella religión en la que todos los hombres están de acuerdo, dejando a cada uno sus propias opiniones, es decir, ser bueno y leal. hombres u hombres de honor y probidad cualesquiera que sean las creencias religiosas que ayuden a distinguirlos.

En la declaración de principios del convento de Lausana (1875), un texto leído a todos los   nuevos iniciados afirma que la masonería está, por tanto, abierta a las personas de todas las nacionalidades, todas las razas y todas las creencias. Acoge a todos los laicos, cualesquiera que sean sus opiniones políticas o religiosas, de quienes no debe preocuparse, siempre que sean libres y de buenas costumbres".

Qué es este gran arquitecto del universo, principio superior o creador que tiene casi todas las características del Dios de la Biblia y a quien invocamos durante nuestras Tenidas, sin ser jamás una religión, ni imponer la más mínima creencia.

En el mundo operativo se trataba de pensar el trabajo, en el mundo especulativo, a partir de la reflexión sobre el universo; Copérnico, Galileo, Kepler, Bruno y Huygens, Descartes lo hicieron.

En el centro está el sol,   el mundo gira, los planetas se mueven según una ley precisa.

Una infinidad de mundo en un espacio ilimitado; un principio y es posible encontrar un espíritu maligno que busque engañarme, proclamarán el desafío de un dios invadiendo el campo de la experiencia.

Las guerras de religión y la declaración de derechos universales del Ser Humano marcan la declaración de derechos frente al idealismo religioso, estos científicos se centran en la observación de la naturaleza. Las teorías surgen de la experiencia gracias a Newton, y estas ideas filosóficas penetran en las logias de todo el mundo , dando lugar a las constituciones de Anderson, escritas sin duda por el Reverendo religioso Desaguliers, con obligaciones y normas.

Dios es incorpóreo, pierde su realismo, cada uno es libre de pensar frente a “El Gran Arquitecto del Universo”, las virtudes humanas han superado la ignorancia aunque las constituciones antiguas y las escocesas reconocen una Deidad Dios con los nacimientos de los antiguos.

Una aproximación histórica al principio creativo.

Platón en el Timeo decreta el paso del desorden al orden en armonía, Aristóteles nos habla del primer motor, ser y principio necesario. Principio, añade, sobre el que están suspendidos el cielo y la naturaleza. De hecho, me parece que estamos en compañía de un arquitecto divino.

Las masones trabajan en la gran obra en el secreto de sus ritos, pero cuando se encuentran alusiones al gran relojero, al gran constructor, el supremo geómetra,  al gran agrimensor, en última instancia, la influencia de las culturas y religiones  conducen a la valorización del principio creativo.

A partir de la Revolución Francesa 5 may 1789 – 9 nov 1799, la efervescencia libertaria después de 1820 aumentará, es la revolución industrial, crece la interdependencia, la libertad filosófica y la felicidad colectiva dependen de la diversidad de los hombres y de sus intercambios a pesar de la negación de Hegel que considera que esta libertad sólo ha traído competencia y conflicto. Luego aparece Darwin, y dice: que   el hombre no desciende de dios sino del mono.

Claude Bernard afirma que el hombre está condenado a no poder saber nada, la ciencia va más allá de la metafísica, la iglesia ya no es la guía de la humanidad, la iglesia reenfoca con el Papa  Pío IX (dogma de la inmaculada concepción, infalibilidad pontificia, e impone la fe a partir de la Santa Inquisición).

Finalmente, la masonería irregular en 1875 mantiene el lema Deus Meunque Jus y la evocación del GADU define más allá de cualquier aceptación religiosa, como principio creativo, es una respuesta visionaria y estratégica respetuosa de la libertad de conciencia y del derecho de cada persona a ejercerla. Pero en 1877 la Masonería Regular en los concilios supremos anglosajones reafirmaron la existencia de Dios y su mensaje revelado. Al mismo tiempo la Masonería Irregular reafirma la libertad absoluta y la solidaridad humana, y elimina la noción de Dios.

La teoría cuántica, la teoría de  relatividad sacuden las religiones y al dios racional después de la Primera Guerra Mundial, la búsqueda de la felicidad individual tiene prioridad pero los más grandes científicos están divididos (Einstein...) y hoy en el siglo XXI, las pandemias se combaten con ciencia medica y vacunas, y los rezos no sirven absolutamente de nada, esto es: si Dios existe , pero no interviene en el desarrollo de la humanidad, pero es posible que Dios haya creado situaciones como las pandemias , para regular a la población mundial y reactivar las defensas inmunológicas  y hacer evolucionar la adaptación de los organismos humanos, al medio ambiente .

Para algunos, el universo es inteligible, el azar está organizado y desde el big bang hasta la teoría de cuerdas todo indica que un poder desconocido, una realidad última, puede dar una respuesta a la pregunta sobre el significado del universo, por más opuestas que sean. a la convergencia de fe y sacralidad, y que hay descubrimientos por hacer en varios ámbitos y un déficit neuronal en el ser humano, incapaz de comprenderlo todo.

El gran arquitecto del universo es el principio primero, indestructible e inalienable de la REAA adoptado por los consejos supremos.

Principio creativo o superior.

El hombre primitivo comienza a establecer vínculos con su entorno, toma conciencia de su existencia, de la fragilidad ante las relaciones con la naturaleza; Es un Homo religiosus que podría preceder al homo sapiens en sus relaciones con lo sagrado; El hombre se convierte en lugar de encuentro entre un universo inmaterial y él mismo, santuario y luego depositario de la conciencia de su esencia, el iniciado asegura el relevo entre cada generación.

La idea histórica

El antiquísimo concepto de “arquitecto del universo” se remonta a los primeros mitos cosmogónicos. Platón lo cita en Timeo; arquitecto, del griego arkhe tekton, designa un rango superior, el mando por un lado y el constructor por el otro.

El concepto y el símbolo.

Lo sagrado es un elemento de la conciencia del Homo sapiens. Hay que levantar los velos de la ilusión para revelar el lado oculto de un gesto ritual, de un objeto. Es así como cuando veo un fenómeno natural extraordinario, además del aspecto científico, detrás de este fenómeno natural tengo la revelación de lo sagrado.

Comprender a los demás significa primero descubrirse a uno mismo y sublimar el tiempo y el espacio.

“No hagamos los masones de “El Gran Arquitecto del Universo” un objeto de creencia o fe ciega, o de vacíos argumentos científicos ,  sino que lo veamos como el símbolo más importante de la masonería para poder comprender y construir para cada uno el santuario de nuestras consideraciones personales”. Entonces este principio creativo, la sabiduría, el conocimiento y el amor, nos guiará hacia estados superiores de consciencia objetiva .

“El Gran Arquitecto del Universo” el Gran símbolo universal

El Rito Escoces Antiguo y Aceptado afirma su deísmo, por sobre la teología , nos anuncia a lo largo de nuestra vida masónica reflexionar sobre el carácter del espacio considerado como el tejido del que proviene toda energía.

El masón y la masona  se acerca al logos sin caer en el antropomorfismo de un dios matemático. Es una visión del nuevo orden mundial entre la armonía del universo y el ideal de nuestra política conducta humana. No hay reloj sin relojero, decía Voltaire.

El Rito Escoces  se ha adaptado a la mecánica operativa, evitando el rechazo banal y la trampa de la confusión teísta o cientificista .